Martes, 29 de Junio del 2021

Yo crie bien a la bestia cap. 86

Barahan y Rafiyen (2)

Traducción coreano al español : Asure

Fue una pregunta que se hizo después de 10 años al estar con ella.

"No lo sé. Sólo es donde nací. Donde descansaré"

「¿Cuándo naciste?」

"Bueno...... Tampoco lo sé"

Ahora que pensó en cuándo nació ...... Apretó los labios y pensó en ello, pero no se le ocurrió nada.

Cuando abrió los ojos, sólo vio oscuridad. Como destino, expulsó la oscuridad de la tierra y protegió a los humanos y a los animales.

Hacía tiempo que no tenía confianza. Sólo existía como poder para purificar la tierra.

Los humanos y los animales la veneraban como 'el dios del principio', pero no lo sabían. Tal vez el verdadero dios del principio la hizo a ella.

No había nada que pudiera ser conocido como dios. Todo lo que tenía que hacer era hacer su trabajo y lanzarse por la paz, como si el orden estuviera grabada en ella.

Después de expulsar las sombras, se sintió llena de energía cuando llegó a este manantial, aunque se retorció. En el caso de Barahan, al ver que no era así, parecía que reaccionaba sólo a su propia fuerza.

Ahora que había llegado la paz, no había disminuido la energía, pero al extenderse el poder por la tierra, faltaba por otras razones.

Los humanos que empezaron a ocupar el continente eran todavía inexpertos y era difícil sostener el mundo sólo con su fuerza. Sería cómodo si dejara de lado su fuerza en absoluto.

Cuando se imaginó que había perdido el poder, surgieron al mismo tiempo sentimientos de debilidad y arrepentimiento. 

'No tengo poder, ¿tengo razón? Sin poder, ¿Cuál sería la razón de mi existencia?'

El leopardo negro se levantó y frotó suavemente su mejilla contra ella.

「¿No puedes prescindir de ese poder?」

"Bueno......"

Rafiyen sonrió con amargura, tocó la mejilla del leopardo. 

'Pero este es mi trabajo'

Murmuró en su corazón y lo consoló. Sentía su pelo suave y a la vez rígido.

「Tener una espada. Es tan difícil porque usas tu fuerza y te entrometes aquí y allá」

"Bueno......"

Rafiyen difuminó el final de sus palabras. Lamento mucho escuchar sólo las vagas respuestas de antes, pero no tenía nada que decir al respecto.

Conoce la ansiedad y el nerviosismo de este lindo gato. Tal vez porque se valora a sí mismo. Porque le importa más que nadie. Por el amor.

Rafiyen, dándose la vuelta y abrazando fuertemente al leopardo, enterró su cara en la nuca de la bestia. El aroma del árbol era exuberante. Era un aroma que le hacía sentir cómoda cada vez que lo olía. El leopardo negro también frotó sus mejillas contra su cuerpo y sonó en su garganta como si estuviera de buen humor.

"Oye. ¿Me dejarás si pierdo mi poder?"

「¿Qué?」

El cuerpo del leopardo se endureció. El leopardo la miró mientras dejaba caer su cuerpo, tambaleando sus bigotes como si fuera absurdo.

「¿Por qué a mí?」

Era una expresión ante la que ni siquiera valía la pena reaccionar.

「¿De verdad estás bien?」

"Bien. Si lo quiero perder, prefiero perderlo completamente. No te preocupes...... No te pongas en medio como ahora"

「¿No te importa si no soy Dios?」

"¿Por qué me importaría eso?"

Rafiyen se rió de la insatisfacción del leopardo, mientras fruncía el ceño, haciéndolo estallar.

Lo único que contenían los ojos morados de la bestia era la sinceridad. Era como la nieve, clara, profunda, erguida, honesta y transparente.

Diez años con la bestia eran muy cortos comparados con el tiempo que ella había vivido. ¿Pero cómo puede ser esto porque la bestia de enfrente es más fiable que Barahan, que lleva mucho tiempo con él juntos?

Un día le preguntó a Barahan lo mismo.

"¿Estás segura que quieres darme todos los poderes divinos?"

¿Cuál fue la reacción de Barahan en ese momento? Decía palabras como si no le importara, pero pudo leer fácilmente la codicia que había en sus ojos.

Así que no podía darle poder. Porque había una extraña ansiedad que no podía conocer. No podía darle, porque era bonito y lindo, su hermano menor, pero no podía darle completamente.

"¡Oh, pica!"

Pensando en esto y en lo otro, una áspera cosa lamió sus suaves mejillas. Rafiyen se rió a carcajadas, empujando la cara del leopardo.

"Vete. Tienes la lengua áspera"

「Es porque sigues pensando cosas raras」

Parecía haber leído su agonía desconocida. Acabó de darse cuenta que alguien no era una bestia.

"Vete"

Empujó al leopardo con fuerza, pero el leopardo más bien le mordió la oreja.

En ese momento, Rafiyen se dejó caer. 

'¿Está a mi lado?'

El leopardo, que se ha hecho más fuerte sin saberlo, se ha hecho tan fuerte que no puede ser empujado sin usar poderes divinos. La abrazó fuertemente.

Rafiyen rió por lo alto con una cara mezclada de felicidad y apatía, porque siempre abrazaba a otros seres, pero nunca la abrazaban así.

'Mi gato.... fue bueno recogerte del bosque'

Estaba absolutamente llena.

****

La forma en que salía del manantial era hermosa. Una niebla de agua se elevó suavemente. La luz blanca del sol se desvaneció. Solo se veía las hojas verdes de los árboles.

Rafiyen olió el aroma de la hierba y estiró la mano como si fuera natural. Tocó el pelaje negro del leopardo estaba pegado a su lado. Sin embargo, a diferencia de antes, los músculos del leopardo estaban tensos.

"¿Por qué estás tan enfadado?"

Preguntó casualmente, pero ya lo sabía. Está claro que ha cogido su aroma de lejos. Su hermano menor, Barahan, a quien odia especialmente.

El débil olor de Barahan se mezclaba con el viento, por lo que parecía haber llegado al bosque. Tarde o temprano, aparecerá frente a él.

El leopardo respondió a la pregunta de Rafiyen con una voz mezclada con risas que fingía no saber, distorsionando su nariz.

「Porque viene...」

Aunque lo sabía, no estaba segura de cómo calmarlo al escucharlo.

Barahan es su hermano menor y no lo puede echar. Es un niño codicioso pero lindo. Pero no sabía qué hacer porque lo odia. Tú eres más importante para mí.

Al igual que ella protegía a los humanos, a los animales y a la tierra, Barahan también era un ser precioso al que tenía que proteger. Era una sensación muy diferente a la de querer al leopardo negro que tenía delante, pero ¿lo sabe este leopardo?

No podía revelar su corazón, así que sólo sonrió con amargura.

"¿Odias tanto a ese niño?"

「No me gusta. Él es...... 」

Puso una mirada horrible. Tenía un humor indescriptible.

Swishhh

El suave viento agitó las briznas de hierba y pasó de largo. El sonido del viento enterró la suave voz de la bestia.

Rafiyen tocó el cuello del leopardo. Se preguntó si la expresión de la dura bestia se había liberado, pero pronto se derritió.

El leopardo pronto cerró los ojos y frotó su cara con la palma de la mano. Su sonrisa también se suavizó.

"No te enfades, ven aquí, lindo gato"

「...... Dije que no era un gato 」

El leopardo negro respondió con brusquedad, pero no rechazó sus palabras.

Inmediatamente la tumbó y la estrelló contra el piso. Un rugido sonó en el cuello de la leopardo, que enterró su cara en la nuca.

Sabiendo que no era una amenaza para él, Rafiyen limpió suavemente el pelaje de la bestia que la tumbó.

Tocó el pelaje de un leopardo con una mano y pronto lo apartó, gruñendo. Su cuerpo ni siquiera se movió.

Luchó con el peso del leopardo que tenía, pero pronto se rindió y se echó hacia atrás.

"¿Lo sabes? Eres muy pesado"

「Lo sé」

"Si lo sabes, retírate un poco"

Era un problema porque no trata a Dios como un dios. El leopardo sólo agitó la cola mientras hablaba juguetonamente con voz severa.

Poco después, se convirtió en una figura humana y la cubrió.

Rafiyen se quedó con la mirada perdida en la brillante luz. El que la tumbó con el sol por detrás estaba oscuro debido a la luz de fondo, pero sólo sus ojos brillaron. Era tan hermoso como si sólo recogiera la luz pura.

Le pareció ver la cosa más bella de este mundo.

Con la mano extendida, dio unos golpecitos en la mejilla del leopardo de aspecto humano.

"Como eres pesado, te conviertes en un humano menos pesado......"

Su voz, con una risa juguetona se desvaneció en el calor de su mejilla. Un aliento sopló, haciéndole cosquillas. Su cara, perdida en la risa, se hundió.

"Rafiyen"

"Huh"

La mano en el lado de su cara subió y tocó su mejilla.

"Si es difícil, bótalo"

"......"

"Bótalo todo"

"No. Tengo que conservarlo"

"¿Qué?"

"El hombre, la bestia y tú"

La respuesta de Rafiyen fue como si reflexionara sobre ella misma, no sobre él. Había una pena en sus ojos.

"Yo me cuido. Si quieres protegerme, quédate a mi lado"

"......"

"Le diste la espada, así que dejaste toda tu fuerza. Darle todos los humanos a los humanos y bestias para que los protejas. ¿Eh?"

Su mano afectuosa buscó alrededor de sus ojos y le frotó con el pulgar. Rafiyen dijo 'eh' y parpadeó. Cada vez que las yemas de sus dedos tocaban el rabillo de sus ojos, brotaba agua caliente.

Un calor abrumador le subió a la cara. Todo lo que escuchó fue un simple consuelo.

'¿Por qué estoy llorando?'

No había nada claro, pero le parecía vagamente.

'Ahora estoy cansada. Quiero esconderme en tus brazos, lindo gato'

No podía decir eso, así que luchó y aguantó. Se escondió en lo más profundo y sólo caminó por el bosque fingiendo estar tranquila.

¡Qué va a saber de un tema que sólo conoce desde hace 10 años! Sin embargo, por mucho que apretara, su voz no salía, así que sólo volvió a parpadear.

El ambiente frente a sus ojos brumosos se volvió claro y luego se desvaneció de nuevo. Y volvió a parpadear. Cuando la visión brumosa se volvió clara de nuevo, hubo una cara justo delante de sus ojos.

Un cálido calor tocó sus labios. Los labios que la tocaron cayeron juguetonamente y luego se juntaron de nuevo. Esta vez, fue directo y la lamió suavemente.

Rozó su carne húmeda, le arrebató la lengua y la frotó suavemente. Cada vez que una respiración baja iba y venía, sonaba un sonido húmedo. Los dos rodaron lentamente y se enredaron.

"Hmm......"

Rafiyen lo abrazó con todo su cuerpo y le rodeó el cuello con sus brazos. Su cuerpo caliente se unió. Dejando de lado el tema de las bestias. ¿Dónde aprendió esto sobre los humanos?

Fue desde el principio. Desde la primera vez que se encontraron. Desde el momento en que la gran bestia herida y lastimada la miró fijamente a los ojos. Desde entonces, no pudo apartar su mirada. Como si estuviera poseído.

Al igual que su destino era proteger la tierra, parecía que su destino era encontrarse con este leopardo. Su existencia era natural.

Sin embargo, un temblor que se aproximó al enfrentarse a los labios del otro no fue familiar. Con una sensación desconocida, su corazón sonó y se agarro a él con fuerza.

Sus labios cayeron poco después de respirar, como si su respiración fuera abrumadora. Colocó lentamente sus labios en su mejilla, luego besó sus ojos y lamió las marcas de las lágrimas.

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