Jueves, 24 de Junio del 2021

Yo crie bien a la bestia cap. 83

Paseo con Aymon (1)

Traducción coreano al español : Asure

También había un vendedor ambulante de accesorios.

La niña que estaba junto a su madre jugueteaba con la piedra decorativa con su pequeña mano, y el gato tocaba la lámpara con la cola y huía asombrado ante el enfado del dueño.

Blondina se rió alegremente ante el calor de Aymon, sujetando mi mano con fuerza.

Pensaba que sería una visita general al mercado, pero fue muy agradable

Pensaba que salir al mercado era aburrido. Sin embargo, la variedad de antigüedades, las lámparas de colores y los dulces con sabores afrutados en la punta de la nariz era algo nuevo. Porque estaba con Aymon.

"Hace mucho tiempo que no disfrutaba. Tenemos que regresar mas a menudo"

Aymon asintió, caminando lentamente a su paso.

"Te veo bien aquí, cuando nos casemos, ¿viviremos en el Palacio Imperial?"

A Blondina se le subió la calentura a la cara, no respondió al escuchar la palabra 'casar'. Eso era matrimonio. Aunque ya lo sabía, su corazón palpitó a full. La realidad que se avecinaba sólo parecía un espejismo.

"Sabes, Aymon. Después... Bueno... Entonces haremos eso, matrimonio... Haremos eso ..."

"Huh"

Se avergonzaba decir la palabra 'matrimonio' de su boca, así que se desdibujó. Como si esa rubia fuera lo más lindo, Aymon inclinó la cabeza y se rió.

"Si nos casamos, ¿iremos al bosque? ¿Te gusta más el bosque? Además, tú también eres el jefe...."

"No"

"¿Eh? ¿No?"

"Huh. Tú eres la que me gusta. No me importa donde te guste. Aunque vivamos en la calle, ahí estaré"

"..."

Salió un comentario que era bastante abrumador de escuchar. Las palabras de Blondina se perdieron en un momento cuando sus dulces palabras se derramaron como una cascada. ¿Hay que ser juguetón o hay que reaccionar con seriedad?

No podía sostener la cabeza, así que se tocó las orejas brillando en rojo para nada.

'Tú también me gustas. Donde quiera que estemos, me seguirás gustando. Es como un sueño casarse contigo'

Quiso devolver esas palabras, pero cuando abrió la boca, se las tragó porque le temblaba la boca si pronunciaba una palabra.

'Estamos en una relación, así que ¿por qué mi corazón late así?'

Ahora que lo piensa, es así. Aymon no tenía idea que se estaba declarando, ni qué decir de la propia Blondina. Ante la confesión de Aymon, era Aymon el que siempre se adelantaba.

Incluso después del grabado, cuando estaba enferma, Aymon terminó acercándose más. Ahora, que estaban conectados el uno con el otro, era otra cosa.

Ahora tenía que expresar sus sentimientos, pero se quemó porque no supo ni cómo ni dónde sacar esas palabras..

"Oye, Aymon"

Abrió la boca en la calle, mientras oía un tintineo.

Blondina dejó de caminar. Aymon también se detuvo a su lado y bajó lentamente la mirada tras ella. Vio un quiosco con pequeñas cascabeles.

Si un cliente dejaba de caminar, el dueño del puesto hablaba para atraerla.

"Es un accesorio que va unido a un gato o a un perro. Cada vez que camina, hace un bonito tintineo"

Blondina se puso en cuclillas y tocó el cascabel de porcelana. 

'Si le pongo esto a Aymon, ¿no le gustará? Bueno, ni siquiera es un gato bebé porque ya ya creció demasiado...'

Pero por alguna razón, no podía dejar su lugar, así que el dueño puso un cascabel en su mano pidiendo que lo tocara.

Los fríos cascabeles de porcelana se calentaron rápidamente con el calor de las palmas.

"¿Tiene usted perros o gatos?"

"Bueno. Es un gato"

Contestó ella mientras miraba a Aymon. Los ojos de Aymon revolotearon como si fueran absurdos. Pero no hizo nada especial.

"Entonces este cascabel es perfecto, señorita. ¿De qué color es el gato?"

"Es negro. Siempre que recibe la luz, los pelos brillan y son muy bonitos. Es un poco ansioso, pero... Al principio, los gatos bonitos tienen una personalidad un poco especial ¿no?"

Aymon se rió de sus palabras. El dueño sonrió y asintió.

"¡Sí, sí! ¡Las rosas tienen espinas y los gatos tienen garras! ¡Son 3 de plata y 2 monedas, señorita! Es un poco caro porque está hecho de porcelana"

El dueño puso el precio en secreto. Blondina se preguntó qué hacer, pronto decidió comprar un cascabel. Si no podía ponerlo en el cuello de Aymón, puede decorarlo. Porque es bonito.

Cuando entregó 4 monedas de plata, diciendo que se quede con el cambio, el dueño saludó feliz con una sonrisa.

"¡Gracias! Adiós"

"A usted"

Volvió a tomar la mano de Aymon y caminaron entre la multitud. El refrescante sonido de los cascabeles le hizo sentir mejor por alguna razón. Mientras caminaba, puso el cascabel en el cuello de Aymon sin ninguna razón.

"Te sienta bien"

Aymon sólo movió los ojos y miró el cascabel. Entonces le quitó el cascabel de la mano y se lo metió en el bolsillo, riendo a gusto. Los tintineos, los sonidos lindos resonaban con cada paso.

"Bien. Me gustaría que le pusieras esto al gatito negro que mencionaste"

"¿Eh?"

'¿Gatito?'

Blondina lo miró. Aymon se limitó a mirar con expresión divertida.

"Para ello, tienes que dar a luz rápidamente"

"... uh?"

Aymon, inclinando la cabeza, besó los ojos de Blondina con una expresión estúpida. Un beso la tocó y cayó. Una joven que pasaba por el camino junto a ellos, se sonrojó al verlos.

Aymon inclinó aún más su cara, acercando sus labios a los suyos, levantando la boca y sonriendo.

"Tengo que trabajar más, de día y noche para que des a luz a los bebés. Para que usen esos cascabeles de los que hablabas. ¿Verdad, Birdy?"

Una voz sutil susurró lentamente. El aliento que fluía por sus labios era caliente.

Blondina, en silencio, sus dos mejillas se pusieron rojas.

Aunque era ingenua, no era tan estúpida para saber lo que significaba. Incluso había tenido la experiencia de estar tan afligida con él hace poco.

Ni bien Aymon murmuró esa frase, ¡Gato Pervertido! fue lo que gritó, poniendo una cara seria. Mientras se alejaba de Aymon, la voz de Aymon que acababa de escuchar la seguía como una imagen posterior.

Las palabras susurraban lentamente, frotando su vientre con la palma de la mano.

"No lo recuerdas... Quizá ya haya pasado. Hice eso muchas veces"

Aymon parecía muy feliz. Blondina también caminaba entre la multitud con un humor agradable, sacudiéndose la vergüenza.

Compraron fruta azucarada y miraron con extrañeza los plátanos maduros y marrones que ardían. Aymon la tomó de la mano y se mantuvo al margen.

Blondina, que miraba las pulseras trenzadas con hilo, levantó las manos temblando. Cogió de nuevo la mano de Aymon y entró en un estrecho callejón. Dos niños sonrientes pasaron corriendo.

"Aymon, una cosa ¿Aymon siempre estuvo solo?"

En un ambiente ruidoso, Blondina hizo ligeramente algunas preguntas serias.

Ya había mostrado todo a Aymon. Su pasado y sus traumas, todo eso.

Pero no sabía mucho de Aymon. Que siempre estaba solo. Excepto que vivía en la mansión del bosque Shinsu, como si estuviera viviendo en una isla solitaria.

Aymon contestó despreocupadamente.

"Nada especial. Mi padre murió sin motivo y mi madre murió cuando me dio a luz"

"Bueno..."

Más bien, era una palabra casual, por lo que estaba aún más engañado.

Por eso Aymon se frota las mejillas diciendo: "Sólo te necesito". Porque realmente sólo tenía a Blondina como familia.

"Pero no fueron solo ellos. Todo el mundo perdió la vida cuando nació un leopardo negro"

"..."

Aymon giró la cabeza y sonrió a Blondina.

"Así que todos se preocuparon por mí diciendo que era una semilla de la desgracia"

El ceño de Blondina se arrugó. La semilla de la desgracia. Aymon nació negro y por eso...

Creía que los shinsus eran nobles, pero eran demasiado estrechos de mente. Era algo de lo que se estaba dando cuenta, pero cuando lo escuchó directamente por boca de Aymón, empecé a enfadarse.

"¿Quiénes fueron? ¡¿Quién es una semilla de la desgracia?! ¿Lo eres? ¡Grandes bestias sin principios!"

"Huh. Al principio, era así. En vez de eso .... Mírame"

Aymon respondió con una voz muy suave y al mismo tiempo con una voz juguetona. Luego, con emoción, frotó suavemente el dorso de la mano de Blondina, sujetando su mano con fuerza, con su pulgar.

"Pero está bien. De todos modos, ahora ya no es así"

Felicidad, todo quedó en el pasado. La voz de Aymon se agitó en el viento. Los labios de Blondina hicieron un mohín porque sentía que iba a llorar.

"Entonces era eso. ¿Siempre me has buscado porque te sientes sola y triste?"

"No es eso. Sólo quería verte"

Aymon bromeó. Al escuchar una respuesta a medias, Blondina le apretó el dedo con fuerza.

Es ahora. Ahora era el momento de abrir su corazón. 

'Tú también me gustas. Me alegré cuando oí tu propuesta. Siempre estaré a tu lado en el futuro'

Mientras pensaba en qué decir, agarró la gran mano de Aymon con ambas manos y levanté la vista con seriedad. Una luz brillaba y revoloteaba a través de sus pupilas

"Aymon. Si te casas conmigo, siempre estaré ahí. Te haré feliz"

Sus palabras, que fluían como una proposición, estaban endurecidas por la sinceridad.

"..."

Aymon se quedó mirando a Blondina. El ruido de la gente se agolpaba en el exterior del callejón, pero en el interior del estrecho callejón, donde sólo estábamos los dos, reinaba el silencio suficiente para escuchar el sonido de su respiración.

Aymon cerró y abrió los ojos lentamente. El cabello rubio de Blondina brillaba, brillaba fascinantemente bajo el sol.

Aymon se quedó mirando a Blondina como si fuera un sueño. Luego, lentamente, extendió la mano y atrajo a Blondina hacia sus brazos y la abrazó.

Sobre las mejillas de Blondina, el corazón de Aymon latía con fuerza. De repente, su corazón se relajó. A pesar que era un cuerpo extremadamente duro y resistente, si la abrazaba así, su cuerpo se derretería como si estuviera inmerso en un profundo sueño.

Por encima de su cabeza, su voz grave fluía como una autoconversación.

"Si no te hubiera conocido cuando era un niño, habría sido diferente de ahora"

Probablemente, torcido y travieso, vagando solo por cualquier lugar. Tal y como está ahora, no habría sido posible sentir la plenitud de la felicidad mientras abrazaba a una humana encantadora.

El brazo de Aymon se tensó. La abrazó sin dejar aberturas y la encerró fuertemente en sus brazos.

"Birdy. Seré la cabeza de nuestra casa para ti No habrá bosque, no habrá jefe Shinsu, nada significa nada sin ti"

Aymon murmuró un susurro bajo, rozando sus labios en la oreja.

"Realmente te tengo a ti. Por eso estaré así de ansioso si desaparecieras"

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