Yo crie bien a la bestia cap. 65
Ruberos y Clea Dehill (4)
Traducción coreano al español : Asure
Esta situación era inesperada incluso en sueños.
Sólo conocÃa a una Princesa tÃmida e insignificante, pero nunca imaginó a una Princesa mordiendo con una espina.
Ruberos Dehill se sacudió las manos y empezó a pensar a toda prisa para calmar su actitud por atacar la dignidad de Lucy.
"¡No! ¡Por favor, hay un malentendido, princesa! Sólo estoy preocupado por su Majestad el PrÃncipe ..."
Antes de que sus excusas terminaran, Blondina habló frÃamente, inclinando la cabeza.
"Entonces, tratas de decir que soy una idiota que no ha entendido la conversación"
"¡No, eso no!"
Incluso las excusas urgentes fueron cortadas por la frÃa frase de Blondina.
"Si no es asÃ, significa que soy una princesa noble que está hablando tonterÃas contigo ahora"
Los dos hermanos renunciaron a seguir atacando.
Los dos hermanos, que se levantaron y se inclinaron hacia Blondina.
"¡Lo sentimos!"
Tuvo que lidiar con la situación de alguna manera, dado que Blondina era la hija del emperador, aunque fuera una Princesa sin poder.
De todos modos, era cierto que intentaron humillar a la criada de la Princesa.
"¡Es culpa mÃa incluso crear una situación que la Princesa malinterprete! Por favor, ¡perdóneme por la groserÃa!"
Un sudor frÃo fluyó detrás de su espalda. Conoció el nuevo lado de la princesa.
Esto se debió a que pensó que era una persona tÃmida que no podÃa decir una palabra correctamente incluso si su criada era ignorada. Pero, ¿Qué era esta situación?
Según los rumores, tiene una relación muy estrecha con los Shinsu, ¿hay alguna influencia?
Blondina se levantó tal cual, apartándose de los dos que estaban de pie con el rostro blanco y endurecido.
"Los hijos del Duque deben tener cuidado con sus palabras y acciones. La próxima vez no voy a terminar con una advertencia, asà que ténganlo en cuenta"
Cogió la mano de Lucy, que no sabÃa qué hacer y giró frÃamente sin despedirse.
Blondina se levantó de su asiento con orgullo y elegancia. Los dos restantes suspiraron, mirando los corazones abarrotados.
Después de un momento, vieron que Blondina regresaba y sus hombros se pusieron rÃgidos.
Blondina cogió el pájaro que habÃa sobre la mesa y salió sin saludar.
Los dos hermanos, volvieron a suspirar cuando Blondina se dio la vuelta por última vez.
Mientras tanto, Blondina sostuvo la mano de Lucy con una mano y el pequeño cuerpo de Mazetto en la otra, dando un paso adelante. Como si no estuviera enfadada, tenÃa una cara tranquila, como siempre.
Fingiendo estar enfadada, casi se olvidó de Mazetto que estaba echando una siesta.
Mazetto, que dormÃa bien a pesar de la agitación, abrió los ojos y se tocó el pico.
[¿Eh? ¿Qué...? ¿Qué? ¿Dónde están mis tartas...? ¿A dónde vas ahora...?]
Blondina sonrió y contestó suavemente a Mazetto.
"¿Te has despertado? Iré a mi habitación y te daré una tarta"
[SÃ... ... quiero volver a dormir]
Mazetto se quedó dormido de nuevo en la palma de Blondina.
Entonces Lucy dudó.
"Yo, Princesa... por mi culpa..."
Lucy tenÃa una cara que parecÃa llorar en cualquier momento.
La razón por la que Blondina se enfadó cuando hablaron de su "nobleza innata", era para cubrir a la propia Lucy. Lucy lo notó instintivamente.
No estaba enfadada porque hubiera malinterpretado sus palabras, pero estaba claro que habÃa venido por su cuenta porque no podÃa vigilar sus heridas.
Le dolÃa y lo sentÃa por la preciosa princesa que protegió mientras revelaba su parte privada. Al mismo tiempo, estaba molesta.
"Princesa ... yo.... yo ..."
Lucy no pudo conectar bien sus palabras. Pero Blondina lo entendió con el corazón: Lo siento, gracias. Debe ser asÃ.
En realidad, no hizo nada.
¿Acaso Lucy no mantuvo un lado siempre solitario de la misma manera?
Si no hubiera sido por Aymon y Lucy, la feroz y difÃcil vida imperial no habrÃa sido tan agradable.
Blondina apretó juguetonamente la mano de Lucy. Le susurró con una voz más ligera que antes.
"Estira los hombros, Lucy. No hay razón para que te obstines con ellos"
"..."
"Estoy detrás de ti. Yo, Blondina Ryun Athes, soy la hija de Su Majestad el Emperador con poder infinito"
"Princesa ..."
"Incluso está Aymon detrás de mÃ. Incluso es el Jefe Shinsu. Oh, Dios mÃo, ¿No confÃas en esta princesa?"
"..."
Para aligerar el ambiente, el tono de Blondina se volvió aún más juguetón.
"Y además, tienes un prÃncipe estúpido que muere por ti, ¿verdad?"
Lucy levantó la cabeza inclinada y miró fijamente a Blondina. El agua se acumulaba bajo los ojos, como si las lágrimas fueran a caer en breve.
Blondina se rió con los ojos, agarrando la mano de Lucy con ternura.
"Lucy Herib. No te preocupes por lo que digan los demás. Eres mi amiga, asà que escúchame. Porque eres encantadora, bonita y mi preciosa Lucy"
"SÃ..."
Lucy hizo un mohÃn con los labios llorosos.
QuerÃa dar las gracias, porque era reconfortante, pero cuando abrÃa la boca se veÃa obligada a tragársela porque creÃa que iba a explotar.
¿Quién se atreve a reÃrse del nacimiento de Blondina? Blondina Ryun Athes era más parecida a una princesa que a cualquier otra.
No estaba diciendo una mentira. No hay princesa en el imperio tan amable, generosa y cariñosa.
La princesa Blondina era su luz y la del imperio.
Ha sido la mayor suerte de su vida ser llevada como la criada de la princesa, a quien todos habÃan evitado, Lucy creÃa y no dudaba.
Mientras caminaba de la mano de Blondina, incluso el aire frÃo de la PenÃnsula Jerban que pasaba por su oÃdo, lo sentÃa cálido.
******
Adelai extendió un pequeño arco mientras estaba de pie en el campo cubierto de nieve. Un aire frÃo fluyó desde sus ojos abiertos.
"Asà que te advertió que tuvieras cuidado"
Adelai hizo un mohÃn como protesta. La flecha voló rápidamente sobre la nieve blanca y pura.
Dentro de los lÃmites establecidos para la caza. Una flecha se clavó en el cuerpo de un conejo negro que se movÃa entre los árboles desnudos. El conejo cayó en el suelo sin hacer ruido.
Los hermanos, el duque Ruberos Dehill y la princesa Clea Dehill aplaudieron en señal de alabanza.
"¡Eres maravillosa, princesa!"
La sangre roja del conejo comenzó a extenderse sobre la nieve helada.
Una montaña rocosa que se alzaba como espinas y un escarpado acantilado debajo de ella. Adelai le dio la espalda, dejando atrás los árboles que se esparcÃan entre el acantilado de piedra.
"Dijiste que no debÃan de molestar a Blondina ni a esa cosa humilde. Quiero decir, fingir ser inocente no es malo"
Adelai se quitó los guantes y se los lanzó al pecho a Ruberos. Mientras hacÃa señas hacia el carruaje que estaba lejos, éste comenzó a acercarse lentamente.
"No necesito escolta"
Abrió la puerta y entró en el carruaje, seguido por Adelai, luego por Ruberos y Clea Dehill.
Pronto la puerta del carruaje se cerró. Se creó una frontera entre el duro invierno y el acogedor carruaje.
El cálido aire del interior manchó las mejillas de Adelai.
Esta mañana, los dos hermanos habÃan confesado a la princesa Adelai todo lo que habÃa pasado con Blondina.
Intentó humillar a Lucy y fueron regañados por Blondina.
Está claro que la Adelai de siempre se indignaba y afilaba los dientes por el comportamiento de Blondina. Pero esta vez, mostró una reacción distinta.
Esto se debe a que tiene mucho espacio en su corazón porque tiene cierto apoyo.
Descendiente de Barahan. Lo tiene. Necesita un poco de tiempo para que la piedra espiritual plantada en su estómago funcione correctamente, por lo que esperarÃa tarde o temprano.
ParecÃa estúpido ver cómo abrÃa la boca porque estaba distraÃda con la piedra espiritual que tenÃa Era la persona perfecta para esto.
Después de recordar, Adelai preguntó, apoyando su espalda en la silla del carruaje.
"¿No estás roto, Ruberos?"
"Estaba muy confiada por tener al shinsu en su espalda. Por culpa de esa bestia, no puedo ni tocar a Blondina ni a la media Princesa"
Adelai, que roncó, puso el brazo en la ventanilla del coche e hizo un gesto a la princesa Dehill.
"¿Te sigue gustando ese estúpido Lart?"
"SÃ, Princesa"
La princesa Dehill asintió con una expresión sombrÃa.
Es su amigo de infancia. Desde que creció, estaba convencida de ser la Princesa del prÃncipe, no podÃa admitir a Lart que la negara.
Adelai pinchó y pateó su lengua desagradablemente.
"Si no tiene un shinsu, entonces Blondina no es nada. Es trivial e insignificante"
"Lo es"
Sin embargo, el problema era que los shinsu eran tan poderosos que no podÃan ser nada.
Debido a ese hecho, Adelai siempre arrugaba la cara. Pero ahora, mientras hablaba primero de Shinsu, palmeó la ventanilla del coche con una cara brillante.
"No te preocupes, Clea. Podrás casarte con el PrÃncipe Lart"
"¿SÃ? Pero parece que el prÃncipe quiere mucho a la criada"
Para deshacerse de la criada, la princesa y su ayuda son demasiado grandes. Clea Dehill no podÃa decirlo, asà que se mordió el labio.
Sabiendo lo que Clea Dehill querÃa decir, Adelai simplemente se rió.
Habitualmente se tocaba el cuello, pero ahora no habÃa ninguna llave. Ya no la necesitaba, asà que la soltó, pero se convirtió en un hábito y sus manos siguieron avanzando.
Todo lo que puede tocar es aire.
"Hmm"
Adelai tanteó en el lugar vacÃo e hizo sonar su garganta agradablemente.
Se rió profundamente al recordar a Joseph, el descendiente de Barahan que se disfrazó de su sirviente.
Pronto llegará el dÃa tan esperado. El dÃa en que me convertiré en una princesa después de despejar todo lo que me bloquea.
¿Qué debo hacer? Aunque te conviertas en la esposa de Lart, nunca serás emperatriz. Tomaré el lugar del emperador.
Con una risa en los ojos, miró fijamente a la princesa Clea y pronto giró la cabeza hacia la ventana. Con el sonido del casco de un caballo y una variedad de ángulos, pasaban por un campo blanco puro.
Adelai cogió una pequeña cosa de su bolsillo y se lo entregó a Ruberos.
"¿No es sencillo hacer un retrato en el rÃo de hielo? Mañana, cuando Blondina se suba a un trineo..."
Adelai se relamió los labios rojos al pronunciar palabras maliciosas.
Se dice que todo va como uno quiere, pero no puede seguir vigilando a la rubia despectiva y descarada.
EstarÃa bien darle un regalo.
TodavÃa no es posible controlar a los Shinsu para matarlos, pero puede hacerlo.
Adelai se rió de buen humor, imaginando lo que pasarÃa mañana.
Ruberos Dehill, al que Adelai le entregó algo, mostraba una cara de interés, metiendo esa cosa al bolsillo.
*******
"Princesa, por favor, levante un poco más la cabeza"
Ante las palabras del pintor que estaba lejos, Blondina apretó la cabeza.
Intento tragar un suspiro por dentro. Ya ha pasado una hora. Sentada en el rÃo helado mientras montaba un lujoso trineo de perros.
No era sólo Blondina. El prÃncipe Lart y la princesa Adelai estaban sentados en un trineo y daban una mirada provocativa hacia el frente.
Dibujar un retrato. Es un retrato, algo que solo se puede hacer en el Palacio Imperial. No entendÃa por qué ha venido por esto.
Un retrato se está haciendo con el fondo de un hermoso campo nevado para resaltar el espÃritu de la familia real ¿Qué diablos significa eso?
Miró a Lart. Lart también estaba molesto y decÃa que iba a morir, pero respondÃa adecuadamente con la espalda rÃgida.
Blondina agarró las riendas del trineo. VeÃa grandes perros de color blanco puro que se alzaban orgullosos.
'Me gustarÃa poder acariciar a ese perro y jugar. Espero poder entrar rápidamente'.
Aunque llevaba guantes, parecÃa que un viento frÃo soplaba entre sus dedos. El tiempo era cada vez más frÃo y el trabajo se terminó sin problemas.
Un incidente ocurrió al final.
Nota Asure: Disfruten ;)
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