PDDC 110

Martes, 30 de Noviembre del 2021

Princesa de dos caras 110

"¿No me digas que va a someter al monstruo?"

"Es justo antes de que termine la competición... así que ¿quién es el ganador?"

La gente se miraba entre sí, murmurando. Como estaban dentro de la zona de seguridad, no sentían una gran sensación de crisis.

El emperador se inclinó hacia delante mientras fruncía las cejas. En sus ojos había una sensación de alivio porque su hijo, Paris, estaba fuera de peligro. Pero también había una sensación de disgusto porque la victoria de Paris no estaba clara.

En medio del alboroto, los ojos de Petra sólo se dirigían a Caelion, que corría por el coto de caza sin descanso. Apollonia observaba a Petra con atención.

¡Thud-!

¡Growl-!

Con una flecha clavada en medio de la frente de Jackalope, Caelion acabó quedándose sin flechas.

"¡Uwah! El monstruo dejó de moverse!"

"Las flechas aterrizaron en su cabeza, por supuesto, ¡caería!"

"Bueno, entonces el ganador es..."

Esperaron a que el monstruo se desplomara. Aunque las flechas no estuvieran profundamente incrustadas, ningún monstruo era capaz de soportar ser golpeado varias veces en su punto débil, por no mencionar que fue golpeado por flechas especiales con la sangre de los monstruos. Si fuera un monstruo normal, habría muerto hace tiempo.

¡Auuuuuuu-!

Pero el Jackalope era extraordinario, para empezar. Lejos de caer, aullaba aún más fuerte que antes. Por fin, el monstruo encontró a Caelion mirándolo con el carcaj vacío.

¡Growl-!

El monstruo se abalanzó hacia Caelion sin tropezar. Caelion, que ya había huido del coto de caza y se había colocado frente al podio, tampoco retrocedió.

"Qué raro. ¿Es normal que una criatura así sea capaz de resistir eso?", preguntó el emperador.

El asistente real murmuró. "No es un monstruo ordinario..."

"¿Qué quieres decir?"

"Las flechas especiales están recubiertas con la sangre de los monstruos. Es una forma de atacar a otro monstruo usando el poder del muerto. Pero Jackalope es un monstruo gigante que consume monstruos más pequeños..."

"Entonces, ¿qué va a pasar?"

"Esas flechas no serán diferentes de las flechas normales frente a Jackalope. No, en realidad está potenciando a Jackalope. La única manera de matarlo es usando una gran arma o magia. Pero la flecha no podría..."

Los ojos del Emperador brillaron. Hasta hace un rato, estaba visiblemente molesto porque la actuación de Paris se viera ensombrecida por esto.

Apollonia estaba familiarizada con esa expresión. Ponía esa cara cada vez que quería matar gente. Debía querer deshacerse de Caelion ahora sin ensuciarse las manos.

"Tenemos que enviar a los caballeros a ayudar al pequeño gran duque, Su Majestad. De lo contrario..."

"No podemos hacer eso hasta que la competencia haya terminado. ¿Crees que será justo para el pequeño gran duque si le quitamos la oportunidad de ganar?"

Las palabras del emperador hicieron temblar aún más a la Gran Duquesa. "Oh, no, Cael.."

Ahora la distancia entre el monstruo y Caelion era sólo de unos dos metros. Los espectadores sólo veían la espalda del Jackalope gigante y su cola agitándose, pero no eran capaces de ver el movimiento de Caelion.

¡Growl-!

Caelion sacó su espada cuando el monstruo cargó contra él.

¡Crece!

¡Haak!

Los dos corrieron hacia el otro al mismo tiempo.

¡Caelion-!

Su espada negra fue quebrada de inmediato por la enorme zarpa del monstruo.

"¡Argh!"

"¡Pequeño gran duque!"

Caelion cayó al suelo con su espada rota. Sólo con ver sus hombros temblorosos, estaba claro que no le quedaban fuerzas para volver a ponerse en pie. Los demás participantes, incluido Eckart, corrieron hacia la zona, pero nadie pudo ayudarle de inmediato.

Apollonia apretó los puños. Miró a su alrededor, pero Uriel no aparecía por ninguna parte. Como Caelion actuó tan bruscamente, era posible que Uriel no pudiera seguirle el ritmo.

"Si ese niño muere así...

Decenas de pensamientos pasaron por su mente.

¿Era Caelion su futuro competidor? ¿O se convertiría en su aliado? ¿Sería capaz de controlarlo incluso después de que ganara poder?

Pero en medio de sus muchos cálculos, la voz del chico atravesó su corazón.

"Por favor, sálvame, hermana".

Ojos desesperados y llorosos.

Volvió a la realidad. No perdió la llama de sus ojos ni siquiera ante la muerte. Se enfrentó a Jackalope con una mirada decidida, como si fuera a dejar su vida en manos del destino. No tenía un arma adecuada en la mano, y el monstruo se acercaba.

"¿Es este el final...?" El emperador murmuró en voz baja.

Sólo Apolonia pudo escuchar.

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