Mo Yan en un Libro 61-62

Lunes, 15 de Marzo del 2021

Mo Yan en un Libro 61

¿Se siente bien? 

Acariciando sus mejillas sonrojadas, Mo Yan comenzó a cocinar de nuevo. Una vez que terminó, sacó los dos tazones humeantes y colocó uno frente a Xiao Muchen,

"Come"

Él miró fijamente los dos tazones que tenían delante

"¿Eso es todo?"

“Come si quieres o no comas”

Dijo ella mientras se sentaba a comer su propia comida. Él la miraba como si fuera la cocina de cinco estrellas. Finalmente, levantó los palillos y probó el caldo. El sabor le hizo querer bebérselo todo de golpe, pero le llenó de una sensación de calor.

Observando su espalda mientras estaba ocupada en la cocina, Muchen se había llenado de una sensación de calidez que le llegaba al fondo del corazón.

Mo Yan terminó rápidamente su comida y fue a limpiar la cocina. Una vez que terminó, se sintió sudorosa y pegajosa. Antes de que él pudiera reaccionar, entró en su habitación, cerrando la puerta tras de sí y se fue a bañar.

Llenó la bañera y se sumergió en ella. En el vaporoso baño, Mo Yan colgó los brazos en el borde de la bañera mientras su delicado cuerpo se sumergía. Tenía los ojos cerrados, y su cara era como una semilla de melón apoyada en su brazo.

Su pelo negro estaba mojado y pegado a su espalda blanca como la nieve en el agua. Era como un súcubo encantador que obligaba a un hombre a tenerla. Cuando Muchen abrió la puerta, se encontró con una imagen tan seductora.

Entró sin prisas, como un animal que espía a su presa sin darse cuenta.

Deslizó el dedo por su piel blanca y húmeda, lo que la hizo estremecerse.

Los ojos de ella se abrieron de golpe para ver cómo se quitaba la ropa y dejaba al descubierto su cuerpo musculoso. Al ver su cara de sorpresa, se inclinó sobre ella y sonrió: 

"Cerrar la puerta no tiene sentido. Eres un encanto"

"¡No! Espera"

Ella trató de levantarse y escapar de él, pero él la levantó al entrar en la bañera y la colocó entre sus largas piernas. La estrechó entre sus brazos y besó su hermosa espalda mientras sus manos serpenteaban hacia su frente para agarrar sus pechos. A medida que sus caricias se hacían más provocativas, Mo Yan no pudo evitar gemir.

"Encantadora"

Muchen la sedujo pacientemente; la apretó contra su cuerpo, la besó, su cuello, sus rosados pezones, mientras acariciaba su tierna espalda hasta llegar a sus llenas y rosadas nalgas. Introdujo un dedo en su apretado coño y lo sacó y lo metió lentamente; de vez en cuando le pellizcaba el clítoris, haciendo que su cuerpo enviara interminables señales de placer.

Mo Yan luchó contra su seducción. Su delicado cuerpo se rozaba con el fino y apuesto cuerpo de él. Las fuertes piernas de él la sujetaban, y su dureza se frotaba contra su cintura y su vientre haciéndola sentir como si estuviera en llamas.

“Ah~” gritó

“Tan caliente...déjate llevar~” 

Sus gemidos reprimidos eran encantadores y excitantes. Era suficiente para destruir el autocontrol de un hombre normal. Él realmente quería enviar su eje de hierro caliente en su dulce cueva seductora.

Se hundió para que su polla caliente estuviera contra su estrecho agujero de la flor. Agarró su esbelta cintura y empezó a empujar lentamente.

Sus ojos estaban empañados por las lágrimas mientras le rogaba que no la penetrara. Pero se sentía demasiado bien al estar rodeada de su calor. Su coño estaba apretado, caliente y húmedo, y lo succionaba.

"Pronto dejará de doler"

Le dijo mientras alzaba la mano y agarraba un pecho, frotando la masa continuamente, haciendo que la piel enjabonada se escurriera entre sus dedos. Bajó la cabeza y chupó la delicada piel del cuello de la mujer, provocando un cosquilleo en su cuerpo y haciendo que su conchita empezara a atraer su polla con alegría, mientras un chorro de néctar fluía hacia el agua caliente que le rodeaba.

Mo Yan en un Libro 62

La hora feliz

“Ha~ ha~ para esto~”

Ella gritó. Cada vez que Muchen empujaba, ella era lanzada hacia adelante. Sólo podía agarrarse al borde de la bañera. No había piedad del palo de carne caliente en su cuerpo, ella no podía dejar de pensar en el calor.

“Ah, tan apretado. No lo aprietes”

Gimió mientras apretaba el redondo culo frente al suyo. La suavidad se sentía agradable bajo su mano, y la piel de ella se puso roja bajo su manipulación. Muchen apenas podía controlar el desenfreno de su cuerpo mientras enviaba el resto de su polla al interior de su pequeña bodega. Sus tiernas paredes de carne se encogieron alrededor de él al instante. La levantó por los brazos y la apoyó contra la pared para que se hundiera más en él, permitiéndole clavarla en su carne apretada y disfrutar de las sinceras reacciones de su pequeña boca.

El sonido de su polla agitando su jugo de amor, su piel golpeando contra la de ella y el agua agitando sus movimientos crearon una atmósfera tan obscena, que Muchen no pudo evitar jadear. Cuando se retiró, su polla estaba cubierta de su néctar. Al empujarla, la penetró hasta alcanzar su suave abertura uterina. La agitó haciéndola gritar. Entonces se retiró repentina y violentamente, se mantuvo en la abertura durante un tiempo antes de volver a empujarla hacia arriba.

“Hnn~ ah~ no~ tan llena”

Mo Yan sacudió la cabeza, y ya no pudo controlar sus gemidos. Con la hábil manipulación, se perdió en el placer. Su cintura subconscientemente bailaba y se agitaba con su vara de carne.

"Te encanta esto, ¿verdad?"

Le susurró acaloradamente al oído. Su aliento caliente le acariciaba los sensibles lóbulos de las orejas. Acarició, pellizcó y apretó sus pechos y pezones y la boca de abajo siguió chupando y apretando felizmente.

“No~ no digas eso~...” ella gimió

“Ya... casi está aquí~ ah~ no~” 

Sus desagradables palabras hicieron que su pequeño acupo se descontrolara más, apretándose alrededor de él con fuerza. El placer casi ahogó su mente. El agua de la bañera chapoteaba en el suelo por sus intensos movimientos.

“Hmm, uhn~ tu boca inferior es realmente apretada ugh...buena para chupar” Le dijo, antes de chupar la parte baja de su espalda.

“Di mi nombre” dijo mientras su golpeaba dentro de ella, su s bolsas de jade golpeando su trasero de nieve.

"No~ ah~"

"Dilo"

Podía sentirla ondulando a su alrededor rápidamente, así que se retiró y en su lugar se burló de ella frotando su glande en la entrada de su agujero. La introducía profundamente y luego se retiraba rápidamente.

"No... dame..." 

Justo cuando ella estaba a punto de llegar al orgasmo, él la detuvo cruelmente. Mo Yan no pudo evitar llorar por la necesidad que sentía en su interior. Incluso giró sus caderas para atrapar su polla, pero Muchen se inclinó sobre ella, manteniendo su pelvis a raya para evitar que obtuviera placer.

“Di mi nombre”, le susurró al oído.

“Uh hn~ Muchen~ Chen~ dame~ deja que me corra~” 

Gritó incapaz de aguantar más el dolor. Lágrimas de necesidad cayeron de sus ojos, ella se veía tan hermosa y seductora haciéndolo rugir enloquecidamente,

“Tan buena. Tan bien portada. Me gusta que me llames por mi nombre", dijo antes de empujar dentro de ella en un largo movimiento directo a su palacio de flores.

"Ah, me vas a romper"

Gritó ella. Su delicada cara estaba roja, estaba sudada por el vapor. Por el hermoso arco de su espalda, su tarro de miel se convulsionaba rápidamente alrededor de él rociando dulce néctar sobre su polla.

Él entraba y salía de ella de golpe, ignorando sus frenéticas súplicas. Con un último empujón, entró en lo más profundo de su cuerpo

"Cómetelo todo"

Dijo antes de rociar oleada tras oleada de su hirviente y blanco jugo de polla en el útero de la mujer, que se retorcía, y su caliente tarro de miel lo chupó y lo dejó seco.

Si te gusta mi trabajo, puedes apoyarme comprándome un café o una donación. Realmente me motiva. O puedes dejar una votación o un comentario 😁😄

Anterior      Siguiente