LFEDAM 44

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Martes, 06 de Julio del 2021


La Falsa Esposa del Archiduque Monstruoso 44



Vivian decidió finalmente ignorar la mano de él, que seguía acariciando su espalda. No le disgustaba en absoluto el calor que desprendía su tacto.


"No odio estar contigo"


Vivian no respondió intencionadamente a sus palabras con los labios. En su lugar, se limitó a asentir levemente con la cabeza mientras seguía sintiendo su tacto antes de cerrar los ojos lentamente.

¿Comprendió él el significado de su respuesta? La mano que tocaba a Vivian se volvió mucho más cautelosa.


"¿Vas a volver a casa hoy?"

"Por supuesto que sí"

"Entonces, ¿te gustaría darte un baño antes de irte? Antes estabas sudando mucho"

"¿Estaría bien?"


Vivian abrió mucho los ojos antes de responder a las palabras de Knox.


"Por supuesto. No hay absolutamente nada que no puedas hacer aquí"


Para empezar, ella era la primera persona que había permanecido en la habitación de Knox durante mucho tiempo, a excepción del médico jefe. Por lo menos, no había nadie en la mansión que no la respetara.

Knox observaba en secreto a Vivian, que no podía contener su sorpresa, con una mirada tan cálida.


"Entonces, haré que alguien prepare el agua"

"¡Ah, espera! La ropa..."

"¿Por qué necesitas cubrir tu cuerpo?"


El cuerpo de Vivian se estremeció inmediatamente ante las descaradas palabras de Knox.

¿Por qué, dices? ¿Cómo es posible que no lleves nada de ropa cuando va a venir otra persona? El rostro de Vivian comenzó a sentirse enardecido. ¿Todos los nobles se comportan así, originalmente? Intentó comprenderlo en su cabeza, pero seguía sintiéndose demasiado avergonzada.


"¿Por qué? Está la posición de Su Alteza y yo..."

"¿Realmente crees que hay otros que todavía no son conscientes del hecho de que tú y yo hemos intimado el uno con el otro?"

"¿Qué? ¿De verdad?"


La sorpresa había hecho que los labios de Vivian se redondearan de inmediato. Su rostro se calentaba a cada segundo, pero Knox seguía actuando con bastante despreocupación.


"Por eso, no tienes que sentirte avergonzada en absoluto"


Knox, que murmuraba con bastante sigilo, deslizó inmediatamente su mano hacia la parte inferior de su cuerpo.


"Y además, prefiero que no lleves nada"


Su mano que había estado tocando continuamente su trasero estaba absolutamente llena de su propio interés. Cuando la mano de él se puso seria al deslizarse hacia el profundo valle que había entre esas apetitosas nalgas, Vivian se aferró apresuradamente a su hombro.


"Pero, me gustaría pedirte un favor"

"¿Qué cosa?"

"Por favor, no me toques mientras estemos en la bañera"


A Vivian ya no le quedaban fuerzas para enfrentarse a él. Ella necesitaba un descanso absoluto más que disfrutar del placer como por ahora.


"Parece que te has imaginado que mi bañera es lo suficientemente amplia para eso. Desgraciadamente, el tamaño es el mismo que el de las otras, así que nos tocaremos, pase lo que pase"

"Aun así, no pasa nada si nuestros cuerpos se chocan. Es sólo que, por favor, no me toques con tus propias manos"

"¿Por qué?"

"Eso es..."


Ella dudó un momento. Aunque él era el que siempre había estado tocando su cuerpo explícitamente, todavía era bastante difícil para ella decirle exactamente a través de sus propios labios.

Especialmente estas palabras que dirían, "ya que podrías pedir sexo una vez más". Además, podría parecer que ella misma deseaba en secreto que él lo hiciera una vez más. Por lo tanto, Vivian no podía atreverse a decirle esa razón exacta y particular en absoluto.


"Si no puedo escuchar ninguna razón específica entonces, asumiré que está absolutamente bien que te toque"

"...ju, sólo porque sí"

"¿No es la razón-demasiado arbitraria?"

"Entonces, no me gustaría bañarme contigo"


Cuando Vivian levantó la parte superior de su cuerpo a su debido tiempo, él le inmovilizó el hombro con firmeza. En cuanto la parte posterior de su cabeza tocó la mullida almohada, Knox envolvió inmediatamente sus mejillas antes de empujar la cara de Vivian hacia abajo con su frente.


"Lo tengo, señora testaruda. Lo tengo, así que, ¿no quieres bañarte conmigo?"

"...de acuerdo"


Una vez que Vivian dio su consentimiento, la abrazó por los hombros antes de tirar de ella hacia él. Luego, la abrazó con el resto de sus brazos -envolviendo su cuerpo con el suyo- y le plantó un beso a ella, que ya estaba metida en su almohada, con una sonrisa tan satisfactoria en su rostro.

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