LFEDAM 45

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Viernes, 09 de Julio del 2021


La Falsa Esposa del Archiduque Monstruoso 45



Poco después de que Vivian diera su consentimiento, el comportamiento de Knox cambió instantáneamente para que todo estuviera listo.

El mayordomo no tardó en llegar, lo que hizo que Knox le diera una orden sin dejar de sujetarla, con mucha más firmeza.

El mayordomo comprendió inmediatamente la conducta de Knox, ya que no se atrevió a poner los ojos ni siquiera una vez dentro del dormitorio. Se limitó a mirar al suelo mientras recibía las órdenes con seriedad.


"Ah, prepara esa cosa también"

"¿Perdón...?"

"La cosa que fue regalada por el médico jefe de antes"

"Ahh, entiendo"


Sólo cuando el mayordomo hubo comprendido todas las órdenes, Knox liberó por fin la fuerza de sus brazos. Vivian, que escuchaba en silencio el sonido de su pecho, acabó encontrándose con la mirada de Knox.


"¿Dónde se encuentra el baño?"

"Es esa puerta del lado norte"


La mirada de Vivian dio un giro ante sus palabras.

Puede que se debiera al hecho de que había echado un buen vistazo a la habitación cuando llegó por primera vez, ya que pudo encontrar fácilmente esa puerta en concreto. Después de pensarlo mucho, Vivian se levantó -aún desnuda- mientras tomaba su mano entre las suyas.


"Te guiaré hasta allí. Vamos"

"¿Con esa apariencia?"


Vivian enrojeció de inmediato al ver que la mirada de Knox se fijaba intensamente en ella, pero se esforzó por mantener la calma antes de responder.


"Sé que no puedes ver tan bien"

"Pero ya estoy familiarizada con este cuerpo, así que estoy segura de que lo conozco muy bien. Especialmente hacia este punto sensible tuyo"


Cuando su toque rozó el cuerpo de Vivian, ella se estremeció inmediatamente. Sin embargo, a diferencia de su cuerpo, su mohín enfurruñado acabó por encontrarse con Knox.


"¿No vas a bañarte?"

"De acuerdo. Dejaré de jugar, entonces"


Sonrió mientras levantaba la parte superior de su cuerpo.

La cara de Vivian comenzó a calentarse una vez más cuando su manta se agitó hacia abajo, revelando el cuerpo tenso de él que estaba sin una sola puntada.

Antes no pudo verlo bien porque estaba demasiado absorta en hacer el amor con él, pero ahora era absolutamente diferente. Su figura desnuda, completamente fuera de la cama, era suficiente para avergonzar a Vivian.

Vivian apenas podía ocultar el sudor de su palma mientras seguía guiándolo.

Cuando se acercaron al baño, Vivian exhaló inmediatamente un suspiro de alivio. El aire estaba demasiado cargado para respirar, pero, al mismo tiempo, era definitivamente suficiente para mantenerse recordada.

A diferencia de lo que había dicho el Archiduque sobre que su bañera era pequeña, en realidad era bastante grande. De hecho, era de una escala absolutamente incomparable con la palangana que utilizaba para lavar su propio cuerpo, lo que hizo que Vivian contuviera las ganas de aclamar con entusiasmo.


"Estoy bastante segura de que ya te he advertido que no me toques, ¿verdad?"


Knox se limitó a asentir en silencio a las palabras de Vivian.

Luego, los dos, tomaron cada uno un borde de la bañera antes de soltar, naturalmente, un suspiro. Parecía que la temperatura era adecuada para relajar sus músculos evidentemente tensos.

Al ver que Vivian había acomodado poco a poco su cuerpo aflojado en la bañera, Knox puso directamente el objeto preparado -que estaba justo al lado de él- en el centro de la bañera.


"¿Qué es esto?"

"Una bomba de baño-regalada por un amigo mío. Nunca la he usado antes porque no me gusta mucho. Pero creo que podrías quererla, así que la he sacado después de tanto tiempo"


En cuanto terminaron las palabras de Knox, las burbujas empezaron a burbujear en un tono rosado. A continuación, los pétalos de rosa que habían aparecido como por arte de magia hicieron que el cuarto de baño desprendiera al mismo tiempo un fragante aroma.

El rostro de Vivian se llenó inmediatamente de alegría tras aquella serie de sorpresas.


"Woah..."


No era consciente de lo cerca que había quedado su cara del agua mientras la agitaba suavemente. Todo era increíblemente impresionante para Vivian, que estaba experimentando todo esto por primera vez.

Ya se había olvidado de que todo esto era supuestamente familiar para la hija de un conde o incluso del hecho de que Knox la observaba atentamente mientras atrapaba los pétalos antes de sonreír alegremente.


"Es absolutamente precioso"


Una vez que escuchó la voz de Vivian, que era tan brillante como su sonrisa cuando la miraba, Knox comenzó a acercarse a ella, inconscientemente. Intentaba acercarla, ya que estaban comparativamente más lejos que cuando estaban en la cama, pero entonces, la mano testaruda de ella había frenado repentinamente la de Knox.

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