LESVAC 270

LESVAC 270







La Emperatriz se volvió a casar 270

SS2: Pasado de Duque Elgy (2)



"Señorita Alessia."

Una voz cercana hizo que Alessia se sobresaltara y soltara al gato. El gatito blanco saltó al regazo de Elgy.

"¿Sí?" 

Se levantó de inmediato y parpadeó al ver al mayordomo en la puerta. 

'¿En qué momento llegó aquí?'

"Su Alteza desea verle en el salón."

'Finalmente.'

Alessia tragó saliva. Parecía que el príncipe por fin revelaría sus verdaderos colores. Probablemente le pediría que fuera su amante. ¿La echaría si se negaba?

Pero cuando llegó al salón, se quedó paralizada, desconcertada. 

'¿Qué es esto?'

El príncipe, vestido con un traje impecable, estaba parado frente a una ventana abierta, rígido como una espada. En el centro de la habitación había un caballete con una tela encima. El mayordomo estaba de pie a un lado, agarrando la tela.

Ante la indicación del príncipe, el mayordomo retiró la tela del cuadro. Los ojos de Alessia se abrieron en estado de shock. La mujer del cuadro era idéntica a ella.

"Este es un retrato de Su Alteza la Princesa."

"¿De la Princesa?"

'Así que sí existía la madre de Elgy.'

Sin embargo, Alessia no había visto ningún rastro de ella en la mansión. Miró más de cerca el cuadro. No eran idénticas, pero sí lo bastante parecidas como para confundirlas como primas o hermanas.

'¿Por eso el príncipe me miraba tan fijamente?'

Alessia lo miró. 

'¿Me rescató por nuestro parecido? ¿Quiere utilizarlo de alguna manera?'

El príncipe no había pronunciado ni una palabra. El mayordomo hablaba en su lugar,

"Su Alteza está dispuesto a concederle una nueva identidad y un nuevo hogar. Siempre y cuando haga lo que se le diga."

"¿Una nueva identidad?"

El pulso de Alessia se aceleró. Ya no tendría que ser Alessia de Krom ni Alessia la pirata cautiva. Con una nueva identidad, podría vivir libremente, bajo sus propios términos.

"¿Es-Es en serio?"

"Tome asiento."

Expresó el mayordomo,

"Es una larga historia, pero le explicaré todo."

***

"Su Alteza la Princesa perdió a sus padres muy joven. Ella se mudó al campo con unos parientes lejanos. Pero su cuerpo se debilitó. No toleraba los bailes ni los eventos largos, por lo que nunca debutó en la alta sociedad. El Príncipe se refugió en una ocasión de una tormenta en su pueblo, allí se conocieron. Se enamoraron y se casaron, tras lo cual Su Alteza la Princesa se mudó aquí."

"Ya veo."

"Sin embargo, después de mudarse a la mansión, su cuerpo se debilitó aún más. No le gusta ver a desconocidos, así que..."

Cuando el mayordomo terminó la explicación, Alessia volvió a su habitación, tratando de asimilarlo todo. El estado de salud de la introvertida princesa era delicado, por lo que vivía aislada aquí. Últimamente, su estado se había agravado tanto que no podía salir de su habitación, y mucho menos de la mansión.

El Rey de Bohean Azul, que deseaba mantener a raya a su joven y saludable hermano el príncipe, pareció agradecido al principio por su enfermedad. Pero recientemente se había peleado con su reina, y ella le había abandonado para volver a su tierra natal.

Bohean Azul necesitaba una mujer al frente de la alta sociedad. La princesa heredera era aún demasiado joven, ni siquiera había debutado en la alta sociedad.

La esposa de su hermano, vista como la princesa recluida, era la que debería ocupar esa posición, pero no estaba en condiciones de hacerlo.

La nobleza de Bohean Azul, que hasta entonces no le había prestado mucha atención, comenzó a quejarse de su reclusión egoísta y de su falta de antecedentes familiares nobles. Para empeorar las cosas, el Reino Occidental, con el que Bohean Azul llevaba años enzarzado en una silenciosa lucha por el poder, enviaría una delegación para tratar de acercar posturas.

Su Alteza el Principe quería que Alessia se hiciera pasar por la princesa enferma para recibir a los invitados distinguidos del Reino Occidental.

"No tendrás que entablar conversaciones ni bailar. Todo el mundo sabe que Su Alteza está enferma. Todo lo que tienes que hacer es mostrar tu cara."

El príncipe esperaba que la aparición de la princesa en esta ocasión sirviera para acallar las quejas de los nobles en los años venideros.

Alessia miraba ansiosa por la ventana, reflexionando sobre sus opciones. El príncipe había prometido ocuparse de todo, incluso de explicar la situación a las pocas personas que ya conocían a la princesa. Pero aún así... 

'¿Fingir ser otra persona?'

Justo entonces, el viento sopló con fuerza. Las hojas crujieron. Una rama se partió por la mitad, y el sonido la hizo estremecerse. Se imaginó el cuello del joven en la horca. Muriendo por los crímenes de otro.

'Tengo que hacerlo.'

Con un escalofrío, Alessia apretó los puños. 

'Lo que sea necesario para vivir.'

***

Unos días más tarde, llegaron los invitados distinguidos del Reino Occidental. El mayordomo detuvo a Alessia cuando ella estaba por subir al carruaje.

"La fiesta durará una semana. Todo lo que la Señorita Alessia necesita hacer es sentarse al lado de Su Alteza. No la obligará a quedarse mucho tiempo."

Ella asintió. Acto seguido, se dio cuenta de que Elgy estaba en la puerta. La miraba fijamente con el gato entre sus brazos. 

'¿Es porque voy vestida como la princesa?'

Alessia sonrió y lo saludó.

Elgy movió la pata del gato como si ambos le devolvieran el saludo.

Dentro del carruaje, ella calmó su respiración,

"Lo haré bien."

Prometió al Príncipe mientras el carruaje avanzaba traqueteando. Como de costumbre, Su Alteza no respondió.

Ella sonrió amargamente. 

'No sé por qué pensé que este hombre se había enamorado de mí. Ni siquiera me habla.'

Unas horas más tarde, llegaron a su destino. En cuanto entró en el vestíbulo, lleno de música suave y perfume caro, la nostalgia cautivó a Alessia. Todas sus dudas desaparecieron. Irradiaba su encantadora confianza en sí misma.

"El Príncipe y la Princesa Claude han llegado." 

Anunció un caballero.

Todo el mundo se volvió hacia ellos. Alessia esbozó una elegante sonrisa y se sumergió en el glamour.

***

Tardaron casi cinco horas en vestirla de princesa, pero sólo permaneció en el salón de banquetes diez minutos. Con el último acorde resonando aún en sus oídos, Alessia se apoyó en la ventanilla del carruaje. Recordó los viejos tiempos— los tiempos de paz, cuando tenía muchos amigos amables y sus padres eran estrictos pero bondadosos.

El príncipe se aclaró la garganta,

"¿Eras de la nobleza?"

Era la primera vez que él le hablaba desde que llegó a la mansión.

"Sí."

Al instante, se arrepintió de haberle dicho la verdad. Pero era demasiado tarde. 

'¿Y si me pregunta de dónde soy?'

"Sin embargo, no lo mencionaste antes, supongo que también estás huyendo de problemas."

Dicho esto, se volvió hacia la ventana.

Ella observó su rostro, rígido como una piedra, y se preguntó cómo sería la verdadera princesa. Elgy hablaba a menudo de su madre, pero era difícil hacerse una idea real. Claramente, Elgy la idealizaba.

'Si no me hubiera enredado con el Emperador Osis, podría haber vivido en paz aquí.'

El pensamiento le hizo recordar su pasado. Alessia miró por la ventana, tratando de calmar su corazón tras saborear de nuevo el dulce confort de la vida noble.

"¿Por qué no asistió a la fiesta, Señorito?"

Preguntó Alessia a Elgy. Se estaba preparando para la segunda fiesta del día siguiente.

Elgy se encogió de hombros,

"Estar en un sitio con demasiadas personas es perjudicial para mi salud."

Ella lo examinó detenidamente. Se veía un poco pálido, pero su cuerpo no parecía débil.

"Es una enfermedad hereditaria. Mi padre me dijo que no fuera a lugares concurridos."

"Ah."

Alessia asintió torpemente. 

'Tal vez sea la misma enfermedad que tiene la princesa.'

El mayordomo mencionó que los padres de la princesa murieron jóvenes, y que ella no tenía otros familiares directos. Debe ser una enfermedad peligrosa. 

'Qué desafortunado.'

Pero Elgy sonrió como si no se lo tomara demasiado en serio,

"Además, escuché que nadie de mi edad fue de todos modos."

"Es verdad, no vi a nadie."

Alessia hizo una pausa.

"Bueno. Excepto por uno."

"¿Quién?"

Preguntó, inmediatamente interesado.

"Uno de los invitados del Reino Occidental. Tenía más o menos tu edad. El segundo príncipe."

"¿Cómo era?"

Los ojos de Elgy se abrieron de par en par.

Alessia sacudió la cabeza.

"Apenas lo vi. No lo recuerdo bien."

En realidad, si lo recordaba. El chico tenía el cabello dorado claro y unos misteriosos ojos púrpuras. Los presentes se quedaron boquiabiertos ante su belleza, pero a pesar de que era joven, actuaba con arrogancia. Se notaba que estaba aburrido.

"Tú eres mucho mejor."

Ante esas palabras, Elgy ladeó la cabeza y sonrió angélicamente,

"Me gustaría conocerlo y juzgar por mí mismo."

***

"Es un alivio. Su Alteza parece estar mucho mejor de salud."

"¡Es una persona muy carismática! Me pregunto por qué rehuyó de la sociedad durante tanto tiempo."

Murmullos circulaban por la fiesta. A medida que la fiesta continuaba, todos querían saber más sobre la misteriosa princesa.

"Por favor, llámenos en el futuro."

"Pronto organizaremos un banquete. Si no desea asistir, estaremos encantados de ir a cenar a su mansión, sólo nuestra pequeña familia."

Alessia sonrió y agradeció a los simpatizantes. Imitar a la princesa enfermiza fue fácil. Tal como había dicho el mayordomo, la gente no sabía nada de ella. Aparte del rey, por supuesto, que hizo la vista gorda ante toda la farsa.

Esa noche, aparentemente satisfecho de haber actuado mejor de lo previsto, el príncipe habló durante el viaje en carruaje a casa,

"Bien hecho. Me preocupaba que algunos sospecharan, pero todos parecían encantados contigo."

"¡Oh! Gracias."

 Alessia se sonrojó.

"El Duque y la Duquesa Zemensia del Reino Occidental te elogiaron especialmente."

'El Duque y la Duquesa Zemensia.'

Alessia recordó a una pareja que parecían tigres. La duquesa le daba miedo, pero el duque era francamente aterrador. Incluso el príncipe de su propio país parecía estar resentido con ellos. Se preguntó qué le habrían hecho al pobre chico.

En cualquier caso, si le cayó bien a gente tan estirada, debió de hacer un buen trabajo. Mientras el carruaje se acercaba a la mansión, Alessia se armó de valor,

"Um... ¿Su Alteza?"

"¿Sí?"

En el pasado, él la habría ignorado. Esto era un progreso.

Ella se aclaró la garganta,

"¿Podría quedarme así? ¿Sustituyendo a la Princesa— sólo cuando sea absolutamente necesario— y ayudando con las tareas cotidianas?"

Ella esperaba un no inmediato, pero no estaba de más preguntar.

Para su sorpresa, el príncipe hizo una larga pausa,

"Lo pensaré."

"¿En serio?"

Las cejas de Alessia se alzaron.

El príncipe no respondió y bajó del carruaje sin decir una palabra. Ahora sola, apretó los puños y cerró los ojos con fuerza.

'Por favor, déjeme seguir viviendo como la doble de la princesa. Por favor, por favor.'

***

"¡No!"

Alessia miró estupefacta a Elgy. De todas las personas que podían protestar, no se lo esperaba de él.

El niño miró a su padre con el ceño fruncido y los ojos llenos de lágrimas,

"Me cae bien la Señorita Alessia, pero mi madre está viva. ¿Cómo puedes simplemente reemplazarla con la Señorita Alessia? No me gusta, padre."

"Alessia no la reemplazará."

El Príncipe dijo,

"Ella sólo mostrará su rostro un par de veces al año como mucho. Como ha hecho esta semana."

"¡No!"

Elgy dio un pisotón.

"No te opusiste a ello esta vez."

Señaló su padre.

"¡Tampoco estuve del todo de acuerdo! Todo el mundo murmura sobre mi madre a sus espaldas, por lo que pensé que si tolerábamos la farsa por una vez, dejarían de hablar."

"Si la Señorita Alessia sustituye a tu madre, nadie volverá a hablar mal de ella."

"¡Pero ella no puede reemplazar a mi madre!"

Alessia se quedó en un rincón, mirando ansiosamente entre Elgy y el Príncipe. Ella nunca había visto muestras abiertas de afecto entre ellos, pero tampoco los había visto pelearse así.

Finalmente, el príncipe sacudió la mano,

"No tengo que justificarme con un niño. Nunca debí intentarlo. Márchate."

Elgy abrazó a su gato, mirando entre su padre y Alessia. Una sombra familiar apareció en el brillo de los ojos de Elgy. De repente, le recordó a Sovieshu.

Alessia dio un paso adelante,

"Señorito—"

Sin embargo, Elgy dio media vuelta y se marchó furioso.

Ella lo observó marcharse, luego se volvió hacia el príncipe. Él estaba inmóvil, absorto en sus pensamientos, con una expresión grave en el rostro.

"Su Alteza, yo—"

"Ve a tu habitación."

Por un momento, Alessia vaciló. Luego obedeció y regresó a su habitación. El príncipe no le dirigió la palabra al día siguiente, ni al siguiente. Tampoco Elgy.

Mientras tanto, los sirvientes llevaron a Alessia a otra fiesta. Allí, el Duque y la Duquesa Zemensia se acercaron a ella. Alessia disimuló sus problemas y forzó una sonrisa. El tiempo que pasó en la fiesta pasó volando y, antes de que se diera cuenta, los sirvientes vinieron a acompañarla de vuelta a casa.

Tendría que volver a ser la lamentable Alessia, una ex cautiva de piratas, en vez de una princesa.

La Duquesa Zemensia le sonrió con simpatía,

"¿Hoy te volverás a ir temprano?"

Alessia echó un vistazo al mayordomo, luego al príncipe. Ambos estaban cerca.

Finalmente, se acercó más a la Duquesa,

"En realidad... hay una mujer que se está quedando en nuestra mansión que se parece a mí. Mi esposo la rescató de unos piratas, pero ahora se ha encariñado con ella. Al principio me daba lástima, pero ahora está acabando con mi paciencia."

Si te gusta mi trabajo, puedes apoyarme comprándome un café o una donación. Realmente me motiva. O puedes dejar una votación o un comentario 😃😁.

Publicar un comentario

0 Comentarios

Haz clic aquí