Aflicción de Amor 60
Cuando un hombre dice cosas subidas de tono, en realidad es muy seductor.
Su voz era muy agradable, despreocupada, con un toque de picardía y maldad. Esas dos palabras resonaron suavemente desde su garganta, realmente malvadas.
Tenía los ojos bajos, con el aire relajado y varonil propio de quien ha bebido, con un toque de libertinaje.
Shi Nian Nian abrió la boca, sin saber qué hacer ni qué decir, dudando si retirar la mano, pero temiendo caer en la piscina.
Jiang Wang levantó un mechón de su cabello ya empapado con el dedo índice, lo enrolló entre sus dedos, abrazó a Shi Nian Nian y la acercó para que su espalda pudiera apoyarse en la pared de la piscina, preguntando con voz ronca:
—¿Está bien así?
Shi Nian Nian movió los dedos con torpeza, con la garganta seca como la pólvora. Sus dedos aún estaban entrelazados con el índice de él en su nuca. Sus yemas acariciaron suavemente su cabello, creando una sensación indescriptible, luego apoyó la frente en él y preguntó en voz baja:
—¿Qué está bien?
Jiang Wang sonrió ligeramente y repitió las dos palabras de antes.
Sus orejas se calentaron. Ya llevaban un tiempo casados, Shi Nian Nian no quería parecer que no quería nada.
Su corazón latió más rápido y dijo con voz apenas audible:
—Mmm.
Al día siguiente, cuando despertó, ya era mediodía. Shi Nian Nian no recordaba a qué hora se había dormido la noche anterior, incluso parecía que no recordaba claramente haberse acostado.
El hombre satisfecho la abrazó por la cintura desde atrás. Después de terminar la noche anterior, solo se había lavado rápidamente antes de dormir. Shi Nian Nian llevaba un camisón, y Jiang Wang estaba con el torso desnudo, su pecho pegado a su espalda, abrazándola con fuerza.
Al despertar, los recuerdos de la noche anterior volvieron poco a poco a su mente. Shi Nian Nian se sonrojó al instante y, aunque originalmente planeaba levantarse, volvió a acostarse en silencio, fingiendo dormir.
Probablemente se había agotado mucho la noche anterior. Shi Nian Nian, que rara vez dormía hasta tarde, se quedó dormida de nuevo rápidamente. Cuando volvió a despertar, Jiang Wang ya no estaba.
Hizo una pausa, se sentó en la cama y se metió la mano debajo de la manta, masajeándose las doloridas ingles una y otra vez.
Se quedó apoyada en la cabecera de la cama masajeándose durante un rato, y luego Jiang Wang entró empujando la puerta con el desayuno, que en realidad, según la hora, ya podría considerarse el almuerzo.
Todo él era perezoso, con los tres primeros botones de su camisa desabrochados, revelando un círculo de marcas de dientes en su clavícula, que aún estaban rojas, de cuando Shi Nian Nian lo había mordido la noche anterior.
—Despertaste.
—Mmm.
Jiang Wang llevó el desayuno a la cama. Originalmente quería darle de comer, pero Shi Nian Nian lo detuvo diciendo que lo haría ella misma. Él le dio el tazón y metió la mano debajo de la manta.
Apenas sus dedos tocaron su pierna, ella se encogió bruscamente hacia atrás, casi derramando el desayuno, con una mirada de alerta, muy parecida a cuando Jiang Wang recién comenzaba a cortejarla.
La noche anterior había asustado bastante a Shi Nian Nian.
Él rió, tomó el tobillo de la joven y puso su pierna en su regazo, masajeándola:
—¿No te duele? Ayer no podías ni mantenerte de pie.
—......
La mano que sostenía la cuchara se detuvo. Ella levantó la vista:
—No digas nada.
Él siguió riendo, con una expresión muy alegre, masajeándole la pierna una y otra vez.
Se sentía bastante bien, así que Shi Nian Nian dejó de resistirse, bajó la cabeza y desayunó. Después de que terminó un tazón, Jiang Wang lo tomó y lo puso junto a la cama:
—¿Todavía tienes hambre?
Ella negó con la cabeza, sin decir nada, también perezosa, volvió a recostarse.
Originalmente planeaban salir a pasear hoy, pero al ver que Shi Nian Nian realmente no tenía ánimos, los dos se quedaron en el hotel todo el día sin salir, incluso la comida se la trajeron.
Poco después volvieron a almorzar. Ella no había comido mucho en el desayuno, dejó los palillos y volvió perezosamente a la cama, con muchas marcas de la noche anterior que el pijama no podía ocultar.
Suspiró internamente, sintiendo que Jiang Wang era demasiado indulgente, que eso no era bueno para su salud.
Había dormido lo suficiente y no tenía sueño. Shi Nian Nian se acostó boca abajo en la cama y jugó con su teléfono. Por lo general estaba ocupada y no era adicta al teléfono. Rara vez lo miraba y casi nunca publicaba nada. A Jiang Wang tampoco le gustaba publicar.
Abrió su círculo de amigos. Mucha gente había salido a divertirse durante las vacaciones de octubre. Su círculo de amigos estaba lleno de fotos de turistas de cada uno, algunas personas incluso habían tomado fotos de la autopista atascada y las habían publicado.
De repente, su mano se detuvo. Jiang Ling había publicado una foto, una foto de ambos, y a su lado había un hombre con anteojos, que se veía bastante intelectual, solo que esos ojos de flor de durazno tenían un no sé qué de Don Juan.
Xu Zhilin.
¡Cielos!
Ella amplió la foto para verla mejor, confirmando que realmente era el profesor Xu. Jiang Ling no había escrito nada, sino que había enviado varias líneas seguidas de emojis de una cara sonriente mostrando los dientes, que a simple vista denotaban mucha presunción.
Esta publicación en Moments (el equivalente chino a Facebook) se había hecho hace media hora, y ya había una serie de comentarios debajo.
Chen Shushu: ¡¿Hermana???????????? ¿¡Qué onda contigo!????????????
Huang Yao: ¿Por qué siento que se parece tanto al profesor Xu?
Xu Fei: ¡¡¡¡¡¡No mames!!!!!! ¡¡¡¡¡¡Qué chingón, compañera Jiang!!!!!! ¿¡¿¡Qué onda con ustedes dos!?!?!?
Chen Hao: ¡Por un momento no logro distinguir si es una hermosa amistad entre maestro y alumna o una terrible relación amorosa!
Zhu Qicong: ¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿¿????????? ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡!!!!!!!!!!
Shi Niannian primero dio un —me gusta—, pensando en qué responder.
Jiang Wang entró, un lado de la cama se hundió un poco. La postura en la que estaba acostada Shi Niannian permitía ver claramente la marca roja en su cuello y lo que había más adentro.
Su mirada se oscureció levemente, extendió la mano y tocó la marca roja:
—¿Qué estás mirando?
Al mismo tiempo, la pantalla del teléfono saltó, mostrando la respuesta de Jiang Ling:
-¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡Jajajajajajajajajajajaja, mis amigos le dicen —esposa del maestro—!!!!!!!!!!!
Shi Niannian entreabrió los labios, giró la cabeza para mirar a Jiang Wang y dijo:
—Jiang Ling y Profesor Xu están juntos.
Él arqueó una ceja, sin mostrar sorpresa alguna:
—¿Xu Zhilin?
—Mmm.
Shi Niannian volvió a mirar la foto, calculando las fechas:
—Qué rápido, apenas se conocieron hace un mes.
—¿Acaso tú no fuiste más rápida? Te casaste al tercer día de volver al país.
Jiang Wang la abrazó y la giró, jugando con sus dedos entrelazados con los de él.
—¿Hasta cuándo piensas mantener el matrimonio en secreto?
Ella también había pensado en esta pregunta durante mucho tiempo. Al principio no sabía cómo decirlo, y ahora parecía aún más difícil abrir la boca.
¿En realidad, Jiang Wang y yo nos casamos hace un mes?
Qué raro.
Ella guardó silencio por un momento, sonó su teléfono, era su madre llamando. Ella se detuvo, le hizo una señal de —shh— a Jiang Wang con un dedo y se giró para contestar.
Xu Shu no tenía nada importante que decir, charlaron un rato. Madre e hija no eran de muchas palabras, al final le encargó que le llevara un ramo de flores a su padre, luego colgó.
Jiang Wang la abrazó de nuevo, palma con palma, y entrelazó sus dedos. Parecía gustarle mucho esto, anoche también lo había hecho todo el tiempo.
Shi Niannian miró las manos de ambos, pensando sin rumbo fijo por un momento, hasta que lo escuchó preguntar de repente:
—¿Tu madre es buena contigo ahora?
Ella se sorprendió.
Su relación con Xu Shu en realidad nunca había sido particularmente mala. Con su carácter, rara vez tenía malas relaciones con la gente, pero antes la diferencia de trato de Xu Shu hacia sus dos hijos era bastante obvia. Más tarde, durante el tiempo que pasó en el extranjero, no sabía si se sentía culpable por Shi Niannian, pero después mejoró mucho.
—Sí, bastante bien. Después de que la enfermedad de mi hermano mejoró mucho, ella también ha sido muy buena conmigo.
Jiang Wang se sentó a un lado mirándola. La chica tenía la cabeza gacha, sus oscuras pestañas extendidas hacia abajo, en su rostro había una sonrisa tranquila y suave, sin emociones demasiado evidentes.
De repente sintió un vuelco en el corazón, la volvió a recostar y se inclinó para besarla en los labios, dejando un beso muy suave.
Se profundizó el beso delicadamente, rozando sus labios, una mano acunó su nuca, masajeándola suavemente como para consolarla.
El masaje de Jiang Wang era muy cómodo, Shi Niannian entrecerró los ojos, sus dos delgados brazos rodearon vagamente su cintura, su cabeza se hundió en la almohada suave y pronto comenzó a sentir un poco de sueño.
Hasta que la mano del hombre volvió a deslizarse hacia sus muslos, entonces se despertó de nuevo, luchando y gimiendo suavemente, mientras se encogía hacia arriba:
—Ya no, ya no.
—......
Jiang Wang suspiró, tratando de calmarla.
—No te haré nada, solo te daré otro masaje.
Solo entonces Shi Niannian soltó su muñeca, y recordando algo más, dijo con seriedad:
—En el futuro no puedes ser tan... desenfrenado.
—¿Desenfrenado?
él besó la punta de su oreja con gracia.
—¿Cómo que desenfrenado?
—Pues desenfrenado.
ella no quería entrar en detalles, solo dijo:
—No es bueno para la salud.
Jiang Wang se acostó sobre ella y se rió, su pecho vibraba:
—Ayer fueron solo dos veces, ¿cómo que desenfrenado?
Él se había reprimido mucho porque veía que la pequeña realmente no podía más, al día siguiente ella venía a sermonearlo diciéndole que era demasiado desenfrenado.
Él rozó su oreja con la de ella, muy cariñoso:
—¿Sabes que aguantarse demasiado tiempo es aún peor?
Shi Niannian no quiso hacerle caso. Jiang Wang la vio cansada y no la molestó más, se acostó a su lado y le masajeó suavemente la raíz del muslo. Cuando casi se había dormido, Shi Niannian se movió un poco, se giró de lado, levantó la barbilla y rozó la comisura de sus labios.
Ella dijo vagamente:
—Jiang Wang.
—¿Mmm?
—¿Podrías sacar tiempo para ir a ver a mi mamá conmigo y contarle lo de nuestra boda?
Jiang Wang se detuvo, la abrazó, rozó su cuello y respiró hondo:
—Está bien.
Los dos descansaron directamente en el hotel durante dos días. Para Jiang Wang, con su posición actual, tener siete días de descanso era un lujo. A la mañana siguiente, cuando Shi Niannian se levantó, lo vio en la sala de estar, con una computadora frente a él.
Ella no prestó atención, se puso las pantuflas, abrió el refrigerador, sacó el gran cartón de leche que había comprado anoche en el 7-Eleven, bebió media taza y también le sirvió una a Jiang Wang.
Todavía le dolían un poco las piernas, dejó la leche frente a Jiang Wang y luego se apoyó en el costado para sentarse junto a él.
Apenas se sentó, levantó la vista y vio a varias personas en la pantalla de la computadora, moviéndose, todas vestidas con traje, parecían bastante mayores.
...Una videoconferencia.
Solo entonces Shi Niannian se dio cuenta de que Jiang Wang, raramente, también tenía los botones de la camisa abrochados de una manera más formal, no tan descuidada como cuando estaban solos.
Ella se quedó mirando la pantalla aturdida por un momento, las personas en la pantalla también la miraban fijamente, mientras que Jiang Wang se sentó a su lado con calma, susurrando suavemente:
—Cariño, terminaré enseguida y saldremos a pasear.
Shi Niannian se levantó de golpe, sonrojándose y volviendo corriendo al dormitorio, la puerta se cerró con un golpe.
Jiang Wang sonrió brevemente, retiró la mirada y continuó la reunión, mientras que las personas en la pantalla también se recuperaron rápidamente de su sorpresa inicial.
Todos ya habían oído que Jiang Wang tenía novia, hoy la habían conocido.
La reunión terminó poco después. Jiang Wang entró al dormitorio a buscarla. Shi Niannian estaba un poco avergonzada, se mordió el labio y levantó la vista:
—¿Todas esas personas eran de tu empresa?
—Sí, los directores de la empresa.
No era de extrañar que parecieran mayores. Shi Niannian frunció el ceño:
—Entonces yo...
—No pasa nada.
Jiang Wang sonrió y le acarició la cabeza.
—¿Acaso la esposa del presidente no puede dejarse ver?
Shi Niannian suspiró, decidiendo no pensar más en eso:
—¿Los directores de tu empresa eran los que estaban contigo... con Jiang Chen antes?
—Solo queda la mitad de los originales. Después de que Jiang Chen falleció, hubo gente que se opuso a mí, y luego hubo una renovación.
explicó concisamente.
Jiang Wang no dio muchos detalles, pero Shi Niannian podía imaginarse la gran presión que debió haber sentido entonces.
Ella se sentó al borde de la cama y extendió los brazos. Jiang Wang se inclinó para que ella lo abrazara.
Él sonrió:
—¿Qué pasa?
Shi Niannian dijo con seriedad:
—En estos años, has pasado por mucho.
Él dejó de sonreír, de repente recordó la primera vez que vio a Shi Niannian y preguntó en voz baja:
—¿Recuerdas cuántos años llevamos de conocernos?
—Seis años.
respondió ella rápidamente.
—Seis años.
repitió Jiang Wang, su corazón latió un poco más rápido. Se arrodilló frente a ella, tomó su mano y besó su dedo anular.
—Todavía quiero amarte por mucho tiempo.
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