Yo crie bien a la bestia cap. 94
El encuentro (1)
Traducción coreano al español : Asure
"Mira el mapa. ¡Tienes que ir a la izquierda en el cruce para ser correcto! ¿Estás ciego?"
"¡Yo también estoy mirando! ¡¿Qué debo hacer si mis ojos están borrosos porque estoy asustado! Hay una princesa aturdida detrás de esto!"
"¡Shh! ¡Silencio! ¡¿Y si alguien te escucha?!"
"¿Quién nos va a escuchar en este bosque? De todos modos, tengo miedo de morir. No importa que sea una orden, ¡no quiero seguirla!"
"¡Silencio! ¡Yo también tengo miedo! ¡Pero si no lo hacemos, matarán a todos! ¿Quieres ver morir a tu esposa? ¡No quiero!"
Pronto el camino se volvió accidentado y las voces de los dos hombres quedaron sepultadas en el ruido retumbante de las ruedas.
Blondina se quedó pensando en silencio. Los dos, sentados en la percha, parecÃan haberla secuestrado tras recibir la orden de alguien.
'Si fueran a matarme, ya lo habrÃan hecho. Debe haber una razón para tenerme viva'
De lo contrario, no estarÃa huyendo asà mientras la mantienen viva como una princesa. Debe haber sido más fácil para ellos tomar riesgos y enterrarla, matándola.
Blondina, pensando en algo por sà misma, apreciaba al gorrión, que habÃa encontrado la estabilidad.
"Mazetto. Sal de este lugar"
[¡No! ¡Me quedo con Blondina!]
"No. Es peligroso porque no podré vencerlos. Ve y busca a Aymon, Mazetto"
[¡Pero, pero, el carruaje estará lejos mientras voy y vengo! ¿Y si no encuentro a Blondina?]
Chirriaba Mazetto y lloraba.
Al igual que las palabras de Blondina, creÃa que deberÃa llamar a Aymon, pero si lo hacÃa, inevitablemente perderÃa al carruaje. PodrÃa perder a Blondina para siempre.
"Aymon vendrá a buscarme de alguna manera. Si seguimos asÃ, podrÃa morir de verdad. Te lo pido, Mazetto"
Blondina persuadió dulcemente al pajarito.
Los dos cocheros no parecÃan querer matarla de inmediato, pero nadie sabia cómo será la situación. Suponiendo lo peor, Blondina abrió la ventana.
Si Mazetto o Blondina lo consideraron razonable, voló hacia la ventana con una expresión decidida.
[¡Está bien! Iré pronto]
Las últimas palabras de Mazetto se dispersaron con el batir de las alas.
No hace mucho, Adelai ordenó a los dos carruajes imperiales.
'En cuanto salgan de la capital, maten a Blondina'
Los dos cocheros a los que se les ordenó temblaron. Por mucho que sean leales, fue en nombre de la princesa Adelai, pero el secuestro fue a la familia imperial. ¿Cómo harÃan esto?
'Si no sigues la orden, te mataré a ti y a tu familia. Incluso si hablas de ello, es lo mismo'
La princesa Adelai estaba amenazando la vida de su familia, era algo aterrador.
Mientras se preocupaban y dudaban, el Conde Otto fue a visitarlos en secreto. Y susurró con voz oscura.
'Convenceré bien a la princesa Adelai, asà que mantén viva a la princesa Blondina. Llévala a la villa que te digo y vigÃlala de cerca'
Después de eso, se entregó un mapa.
Entonces los cocheros corrieron sin dudarlo. A la villa de la que le habló Otto. Aunque secuestraron a la princesa, no la mataron, asà que se quitaron un poco el peso de encima.
Adelai intentó matar a Blondina con malicia, pero el Conde Otto lo impidió en secreto. Esto se debe a que, según él, Blondina era una buena persona que no debÃa ser asesinada.
La princesa Blondina es la única debilidad que puede sostener y agitar al leopardo negro Por lo tanto, estaba convencido que si se mantiene Blondina vivo, sin duda serÃa útil.
Trak trak trak
El carruaje volvió a temblar mucho.
El carruaje habÃa llegado a una bifurcación en una encrucijada. En ese momento, Blondina decidió arriesgar su vida para que el cochero no la matara.
Abrió la ventanilla bruscamente y luego gritó con voz suave
"Detengan la carreta ahora mismo"
Los dos hombres se sobresaltaron y miraron detrás de ellos. Escucharon la voz de la princesa que debió estar desmayada como si hubiera muerto antes de llegar a la villa. Sin embargo, no detuvo el carruaje según su orden.
Entonces Blondina agarró la perilla de la puerta y se deslizó por la ventana.
"Si no se detienen, saltaré asÃ. No importa si me caigo asà y muero"
Un hombre enfadado agarró la cola del caballo. Pero antes, el otro hombre lo detuvo. Gira la cabeza para mirar a Blondina, susurrando.
"¡No te detengas! ¡Podrá huir! ¿Va a saltar de verdad?"
"¡Pero, pero! ¡¿Si se hace daño?!"
"Sólo nos está asustando con palabras. ¡Cómo, no, no! ¡Un momento!"
El hombre que le habÃa persuadido para que no se detuviera se asombró, tiró de las riendas del caballo y se levantó. Esto se debe que Blondina asomó la parte superior de su cuerpo por la ventana.
Ahora mismo estaba a punto de caerse. Si se caÃa tal y como estaba, podrÃa romperse el cuello o se harÃa daño en cualquier parte.
"¡No saltes!"
"¡Voy a detenerme! ¡Voy a detenerme!"
Las voces urgentes de los dos hombres se mezclaron con el llanto de sus palabras gritando. El carruaje pronto se detuvo.
Blondina exhaló un soplo de alivio en su interior.
'Me alegro de tener razón'
Si no lo hacÃa, realmente caÃa del carruaje y morirÃa.
Cuando el caballo se detuvo por completo, los dos hombres bajaron apresuradamente de la percha.
"¿Qué estás haciendo?"
Y sobre el tema del secuestro de la princesa, le reprochó su comportamiento peligroso.
Blondina sonrió, con la parte superior de su cuerpo asomando por la ventana.
"Ustedes no pretenden matarme"
Pronto, sentada cómodamente en la silla del carruaje, hizo una seña, arrogante, hacia los cocheros. Era para que abrieran la puerta y le dieran la cara.
Los dos hombres abrieron la puerta del carruaje, se enfrentaron a ella y se pusieron delante del carruaje.
Al parecer, estaba secuestrada y ella también corrÃa peligro, pero su actitud de prepotencia deliberada la consternaba.
Blondina preguntó con la mayor calma posible.
"¿Necesitan dinero?"
"......"
"Para secuestrar a la familia imperial, tienen un gran hÃgado. SÃ, ¿Cuánto han elegido para que te paguen? Te daré cinco veces la cantidad que elijas recibir"
Por supuesto, ella sabÃa bien que este secuestro no era por dinero.
No puede hacer esta cosa peligrosa por una razón tan simple. ¿No era una noble o de la familia real?
Además, sus hombros arrugados hablaban de miedo. Era obvio que lo hacÃan sin convicción.
'Si es asÃ, ¿cómo? ¿Para qué si no es por dinero? Además, ¿por qué el Shinsu marrón atacó antes mi Palacio Separado?'
Estaba llena de incógnitas. Pero Blondina siguió haciendo lo que tenÃa que hacer. Presionándolos y haciendo algo de tiempo hasta que llegara Aymon.
Incluso diciendo palabras inútiles, tenÃa que dirigir la situación. DeberÃa estar lo más cerca posible del lugar donde rompió con Mazetto.
"¿Quién es tu jefe? ¿No es un comportamiento arbitrario para ustedes?"
Los dos hombres aún no tenÃan respuesta. Blondina se levantó lentamente. Cuando salió del carruaje con elegancia, se acercaron los dos hombres confundidos.
"¡No salga!"
Pero Blondina extendió una mano sin pretender escucharlos. Era para que la acompañe.
Los dos hombres avergonzados mostraron consideración por la familia real. Ya sea que se congelaron o no, Blondina dejó el carruaje en absoluto.
Los dos hombres la llevaban perfectamente. ¿Son todas las familias reales tan orgullosas? Ella no podÃa responder adecuadamente a su elegancia como si la estuvieran presionando.
Finalmente, el hombre de pelo castaño levantó su daga.
"¡Te he dicho que no te muevas!"
El extremo de la daga temblaba. La punta de la daga afilada llegó hasta el cuello de Blondina. Era una hoja chipriota que se atrevÃa a empujar hacia la familia real.
Blondina levantó la barbilla sin fisuras en su expresión.
"¿Quieres apuñalarme? Bien. Hazlo"
"......"
"Si tienes valor, ¿Vas a hacerlo?"
El hombre de pelo castaño terminó bajando la daga.
Entonces Blondina también tragó una respiración temblorosa.
'¡Qué bueno! Parece que no puedes matarme. Entonces, ¿Cómo gano más tiempo?'
Se tragó en secreto su impaciencia detrás del cuello. Empujó su cuello pretendiendo ser audaz, pero tenÃa miedo. Se preguntó si su vida está en manos de los dos hombres que tiene delante.
'Ahora ¿Qué hago?'
TenÃa que matar el tiempo sin estimularlos.
Blondina miró a su alrededor lentamente y habló a los dos hombres.
"No me siento bien por dentro. Tengo que tomar un descanso"
"......"
Los dos hombres pusieron los ojos en blanco y no supieron qué hacer. Blondina levantó los ojos y los miró fijamente.
"¿No es todo esto debido a las drogas que ustedes me dieron a la fuerza. Si les hubiera dicho que sigan, hubieran seguido. ¿Qué clase de droga barata me han dado?"
"¡Oh, no!"
"Me subiré al carruaje cuando tome aire y me recupere. No se preocupen, pueden seguirme"
Su voz era tan baja como un lago tranquilo. El tono tranquilo parecÃa una petición, pero era un tono cercano a las órdenes.
Los hombres intercambiaron sus miradas y asintieron, diciendo que finalmente lo harÃan.
Su oponente es una hermosa princesa con un cuerpo esbelto. Si intentaba hacer algo con ese cuerpo, no parece que harÃa nada peligroso.
"Qué nos sea mucho tiempo, princesa"
"De acuerdo"
Blondina pasó junto a ellos y se acercó al árbol. Los cocheros, tensos, agarraron las dagas y la siguieron de cerca.
'¿Debo correr?'
Blondina pensó por un momento, pero sacudió pronto la cabeza. Después de tomar la droga, aún tenÃa la cabeza en blanco y no estaba en buena forma.
Si huÃa en este estado, sólo estimulará sus emociones en lugar de desecharlas.
Después de tocar el árbol, capturó lentamente su aliento.
'Después de enviar a Mazetto, habrá una encrucijada......'
El encaje de la manga se rasgó y ató fuertemente a las ramas. El olor de los humanos, que sólo los animales pueden oler, se dispersó en el viento.
"¡¿Princesa?!"
"¡Qué está haciendo! Si haces mierdas, no podremos esperar más!"
Gritaron los tipos que sólo la miraban por detrás. Afortunadamente, no sabÃan el significado de lo que hizo.
Blondina se dio la vuelta despreocupadamente y se rió, golpeando su bonito lazo.
"¿Qué les parece? Es similar a la decoración de cinta de jarrón que viste en mi Palacio, ¿verdad? ¿No lo has visto?"
Era una actitud ligera, como una ignorancia espontánea del miedo.
Los hombres suspiraron y se acercaron a ella. Ahora parecÃa imposible alargar el tiempo como una obra de teatro.
Blondina se sacó dos joyas del pecho y se las lanzó ligeramente. Los hombres cogieron las joyas que recibieron desordenadamente y abrieron los ojos.
"Es incómodo porque los carruajes son baratos o están apretados. Si fuera un carruaje para servir a la familia real, deberÃan haber prestado más atención"
Dijo Blondina, levantando profundamente la barbilla.
"Esta vez, espero que conduzcas despacio, con cuidado y con educación. No debes olvidar nunca que a quien sirves es a la familia real del imperio"
No deben olvidar que soy de la familia imperial.
Esa fue una advertencia para alertarlos de su estatus.
No era la que ellos pueden matar fácilmente. Es la familia real del gran imperio.
'La familia imperial'
El peso de esa palabra, nunca deben pasarlo por alto.
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