PSUF 14

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Domingo, 04 de Abril del 2021




¿Podemos ser una Familia? 14

Trampa (1)


Traducción Coreano-Español: Akane

Gracias a la mina de piedra de maná, todas las riquezas del duque Agnes eran de oro.

La araña dorada del techo estaba decorada con cristales de primera clase, que difundían la luz de forma más bella. La alfombra roja estaba tejida con lana cara. Sólo la combinación más moderna de muebles hechos de palo de rosa por los mejores artesanos de todo el mundo, cerámicas con pinturas de delicada tecnología y obras maestras creadas por pintores y escultores de la familia.

Nikan Agnes, que poseía una mansión comparable a la de la familia imperial, no tenía nada que temer en el mundo. No había ninguna dificultad para él. Sólo había cosas en el mundo que eran fáciles o que no se podían hacer. Lo que no podía hacer era convertirse en el propio Emperador. La tarea fácil era hacer el próximo gran Emperador.

Con el tiempo, podría hacerse cargo del Imperio.


"¡Suéltense! ¡Suelta, bicho!"


Pero por primera vez, pensó que todo era un desastre.

Nikan miró a su hijo pateando caballeros con sus fríos y malvados ojos verdes. Wood se parecía a la infancia de Nikan.

Su complexión superior, su talento natural para la magia y su fuerte impresión.

Era como su hijo. Sin embargo, ese idiota gritando en el suelo no era lo que él quería.


"¡Traigan a esa puta de mala muerte! ¡La mataré!"


Era impropio de un noble enfadarse tanto con una plebeya sin poder. La tensión de los disturbios de ayer no desapareció.

Pero hoy también...


"Ha..."


Justo cuando Nikan suspiró,


"¡Hermano!"

"¿Vivian?"


Al oír el agudo grito de su hija, miró hacia atrás para ver a Vivian con cara de dolor. Nikan se quedó brevemente sorprendido por la inesperada situación.

Vivian hizo un mohín con los labios y le espetó a Wood.


"¿He oído que tú y la hermana Navia han jugado con el agua? ¿Por qué no has llamado a Vivi?"

"¡Señorita...!"


Las sirvientas que siguieron para detener a Vivian miraron la cara de Wood y Nikan con preocupación. Era por el ambiente tenso que definitivamente no era la consecuencia del juego.

Nikan habló con suavidad porque no podía regañar a su joven y enferma hija.


"Vivi, tu hermano y Navia nunca han jugado en el agua, así que para..."


Sin embargo, fue más rápido el estallido de Wood que el hecho de que Nikan terminara su frase. Wood estaba tan enfadado que gritó amenazas con una expresión violenta.


"¿Quieres morir? Piérdete!"


Wood ya sentía una tremenda vergüenza y humillación por lo que estaba pasando. En esa situación, Vivian estaba echando aceite y avivando las llamas sin darse cuenta.


"¡Wood!"


Nikan se apresuró a callar a Wood, pero a Vivian ya le habían gritado. Vivian se endureció por la conmoción que le produjo el estruendo.

Entonces empezó a darse cuenta lentamente de lo que había dicho Wood. ¿Qué había dicho el hermano?

De ninguna manera, ahora mismo, a Vivian... ¿la amenazó con matarla?

Vivian tiene un límite de tiempo, por lo que recibió todo el afecto y la atención de todos en el ducado y sólo fue protegida.

La cálida y dulce constante se arruinó en un momento.

El rostro de Vivian se puso blanco.


"¿Cómo, cómo has podido decirle eso a Vivian...?"


Sus grandes ojos se llenaron de lágrimas en un instante. Vivian acabó rompiendo a llorar.


"¡Heuk, heu...uaaang! Eres tan malo!"


Nikan se cubrió la cara con los brazos y abrazó a la sollozante Vivian.

Su expresión estaba distorsionada como los demonios.


"¡Has ido demasiado lejos!"


Wood se levantó ante el rugido de Nikan.

"¡La malviviente se está burlando de mí!"

"¿Qué ha hecho Vivian? Tu hermanita sólo tiene seis años!"


A Wood se le rompió el corazón con Nikan, que no paraba de reñirle, sin poder alcanzarle.


"Padre, ¿por qué sólo me culpas a mí? La malviviente trató de matarme antes, ¡así que por qué no le cortaste el cuello!"


Nikan sintió una rabia vertiginosa por culpa de Wood, que no paraba de decir tonterías.

Aunque digan que su hijo no sigue sus deseos, ¿hay alguna vez tanto problema?

Finalmente lanzó un hechizo con maná mezclado.


"Hoy estás llevando mi prestigio a lo más bajo"


Wood quiso refutar pero se vio abrumado por la determinación y la exhalación de Nikan.


"Bien. Si sigues así, se te recortará toda la asignación"

"¡Padre!"

"La excursión de caza se cancelará y no podrás ir a ninguna fiesta social"


Wood intuyó que su padre no se retractaría.


"¿Por qué yo, el sucesor de Agnes, iba a sufrir esta humillación?"

Wood, cuyo mundo era tan fácil, se sintió impotente ante el enorme muro que apareció de repente. Wood bajó lentamente los ojos.


"...Lo siento. Me equivoqué"


Nikan finalmente había tomado impulso. Su fatiga mental se acumuló.

Habló en voz baja y tenue.


"Vuelve a tu habitación"


Wood tuvo que obedecer las órdenes de su padre.

Nikan miró a su alrededor y preguntó bruscamente: "¿Dónde está Philippa?"


"Ah, eso..."


Las criadas se quedaron sin palabras por un momento. Philippa estaría holgazaneando en algún lugar ahora mismo.

Nikan pateó la lengua como si lo supiera y luego pasó a Vivian, que seguía llorando.


"Llévate a Vivian"

"...sí"


Nikan salió del ala este del primer piso con una expresión fría. Fingió no hacerlo, pero se notaban ojos curiosos por todas partes.

Apretó el puño por su creciente ira y consiguió recuperar la compostura.


"¡Cualquiera que añada chismes inútiles a la disputa infantil de hoy será castigado!"


Cuando el Duque habló ferozmente, los sirvientes inmediatamente bajaron las rodillas al suelo.


"Sí, Maestro"


Nikan volvió a su despacho.

Sólo entonces recordó haber dejado a Edward sin decir nada.

El mayordomo, Lyndon, habló.


"Sir Spencer se fue primero, diciendo que no ha visto ni oído nada sobre el día de hoy"

"...sí"


Nikan se recostó en el sofá, respondiendo bruscamente como si no quisiera pensar más. Fue cuando se produjo un profundo silencio que sofocaba el despacho.


Toc toc.


Alguien llamó a la puerta del despacho.


"Maestro, Lady Navia ha enviado unos bocadillos"


Nikan frunció ligeramente el ceño.

Lyndon, el mayordomo, se pateó la lengua.


"El Maestro no es ni siquiera un niño, qué clase de bocadillos".

"Vuelve, el Maestro tiene que descansar".


Nikan le estrechó la mano.


"Déjala entrar"


Lyndon bajó rápidamente la cabeza y siguió las órdenes de Nikan. Cuando la puerta se abrió, Charlotte entró cautelosamente con una bandeja.


"¿La envió Navia?"

"Sí, Maestro"


Nikan miró con curiosidad.


"Tráelo"


Charlotte puso la bandeja sobre la mesa con gran cortesía. Lyndon se acercó y revisó la bandeja.

Los aperitivos eran sencillos. Té de hierbas frío y gachas de calabaza.

Lyndon resopló para sus adentros tras comprobar el contenido. No es un postre de alta calidad hecho por un chef conocido. ¿Qué es esta comida tan plebeya?

Lyndon habló apresuradamente, preocupado de que su ya deprimido amo pudiera enfadarse.


"Lady Navia es todavía joven, así que parece que le falta perspicacia. Traeré algo más..."

"No"


Nikan cogió la cuchara y probó las gachas de calabaza. La suave textura se extendió por su boca. Nikan, que nunca había comido las gachas amarillas, siguió comiendo con la cabeza ladeada. Extrañamente, se ajustaba perfectamente a sus gustos.

Siempre que comía los lujosos bocadillos que preparaban los cocineros, había pensado que los bocadillos eran infantiles.

Se enjuagó la boca con el té frío después de comer todas las gachas. Se sintió mucho mejor.


"¿Te ha dicho Navia directamente que prepares esto?"


Charlotte respondió con las manos juntas y la cabeza baja.


"Sí. Dijo que el Maestro podría tener hambre, así que pidió que se prepararan platos sencillos"


Lyndon tenía una expresión de picor por las palabras de Charlotte.

Wood estaba atrapado en una columna de agua. Era tan frenético que el tiempo para un plato rápido antes de la cena había pasado.


"Jaja..."


Nikan dejó la taza de té y dejó escapar una risa superficial. Era ridículo que Navia, que ni siquiera era su propia hija, actuara como la niña más ideal.


"Navia es madura para su edad"


A pesar de ser de una ascendencia superior, Navia parecía tener más cariño que sus hijos podridos.

Era el deseo de todos los padres que sus hijos fueran inteligentes y agradables. También era el deseo de los padres que sus hijos fueran encantadores.

Nikan también se sintió más cómodo porque pensó que su decisión de elegir a Navia no era errónea.


"Pensando en ello, Navia necesitará ropa de invierno y accesorios nuevos"


Cuando Lyndon se dio cuenta de que Nikan se sentía mejor, respondió con una sonrisa apresurada.


"Eso parece. Me avergüenza que el Maestro sea tan cuidadoso en el cuidado de la casa que no haya lugar para que este joven dé un paso adelante"

"Jaja, realmente eres bueno con tus palabras"


Nikan pareció perderse en sus pensamientos por un momento hasta que abrió la boca.


"Dile a la Boutique Ansier que envíe artículos que Navia pueda utilizar"


No sólo Lyndon, sino que Charlotte también pareció sorprendida.

La Boutique Ansier era una boutique muy cara de primera calidad que sólo trataba con altos nobles.

Al principio, la ropa que usaba Navia era de tiendas de ropa general, que ni siquiera podían llamarse boutiques y no tenían cartel.

Lyndon expresó su preocupación, lo cual era bastante poco convencional.


"Maestro, sin embargo, hay..."

"¿Estás tratando de revertir mi decisión ahora mismo?"

"...no. Me encargaré de ello"


Charlotte lo saludó con cortesía.


"La Señora estará muy contenta"

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