LH 41

LH 41

Lunes, 19 de Julio del 2021



Llora Hermosamente 41



Traducción Coreano - Español: Asure

Por fin llegó el día del enfrentamiento.

Damia se recogió el voluminoso cabello en una media coleta y se colocó joyas adornadas con flores de color melocotón y diamantes. Vestida con un corpiño rosa pálido sobre fondo crema, sus labios estaban cubiertos de colorete tan rojo como su pelo.


"¡Está usted muy guapa, señorita!"


Las criadas que la acicalaban exclamaron una sincera admiración. Damia se levantó y se miró en el espejo. Él también se veía muy bien.


"Gracias"


Damia, que saludó amablemente a las criadas, se levantó. Cuando bajó a la puerta principal por la escalera central, vio que un carruaje ya estaba esperando. El conductor, que había descansado bien y tenía mejor complexión que hace unos días, la recibió.


"Venga, señorita. La acompañaré"


Con su ayuda, Damia subió al carruaje. Y el destino estaba claramente indicado.


"Al Marqués de Evergreen"


Hoy era el día en que Cecil finalmente tomaba el té con Louise. Solía ser tímida cuando se trataba de Louise, pero como noble, tiene un deber.

Era muy importante renovar el contrato de negocios relacionados entre las familias. Debido a esto, Cecil tuvo que enfrentarse a Louise. Incluso si toma la droga en la taza de té.

Damia estaba preocupado por su amiga y no podía soportarlo. Aunque descubrió la identidad de la 'cosa' de Louise que iba a tratar de suministrar, no fue el final.

'Supongo que debería estar a tu lado'

Por supuesto, no pretendía estar en el campo para renovar el contrato. El negocio entre las familias era muy secreto, había muchas disposiciones delicadas, por lo que ningún tercero podía estar involucrado.

Así que Damia iba a esperar en la habitación de al lado, donde Cecil renueva el contrato. Con el permiso de Cecil, se hizo un pequeño agujero. Estaría observando desde allí e intervendría si Cecil se encontrara en una situación peligrosa.


"¡Damia! ¡¡Has venido!!"


En cuanto llegaron al Marqués de Evergreen, Cecil salió corriendo del interior. Su cara, llena de adornos para un contrato público, estaba llena de ansiedad. Era evidente que tenía los ojos hinchados y que no había dormido la noche anterior.


"Claro que sí, idiota"


Damia se rió a carcajadas para aliviar su tensión. Tomó la delantera y buscó la habitación en la que debía esperar.

Normalmente, el té se habría sido puesto en la mesa para los invitados, pero hoy era un poco diferente. Frente a la pared, con un pequeño agujero, se había colocado una silla mullida, forrada con cojines. Y una simple bandeja estaba al lado.


"Oh, Dios mío"


Damia, ligeramente admirada, miró alrededor de la habitación. Luego, fingiendo no ser Cecil, volvió la cabeza en silencio. De alguna manera, mientras esperaba, Damia parecía estar preocupado por si tenía hambre o se aburría.


"Hmm. ¿No hay merengue?"


Damia buscó juguetonamente su bocadillo favorito. Entonces, Cecil puso los ojos en blanco y se reunió con ella directamente.


"¡Ey! ¿Te gustaría comer una galleta haciendo ruido en una situación de espionaje?"

"Sólo tengo que derretirla con la saliva y comerla"


Damia recorrió la bandeja con la mirada. Galletas húmedas con chispas de chocolate, magdalenas de limón y tarta de queso. Todos ellos eran bocadillos sin sonido.

'Después de todo, tú también eres seria'

Por su bien, tenía que observar con atención. Damia, decidida en su corazón, tomó asiento frente a la pared. Y volvió a enfatizar hacia la habitación.


"Si hay algún peligro, levanta la mano en cualquier momento. Entonces correré de inmediato"

"Huh. Por si no lo sabías, tomé el antídoto de antemano"


No sabía si funcionará porque es una droga muy nueva. Cecil frunció los labios con preocupación y murmuró. Damia sonrió en silencio ante las palabras que mostraban una preparación muy completa.


"Me alegro mucho, Cecil"

"...... ¿qué? de la nada"

"Porque eres una chica que cuida mucho su cuerpo"


Era un cumplido, pero los ojos de Cecil se entrecerraron ante las palabras extrañamente malditas. Damia vio esto y rápidamente la empujó hacia atrás.


"Ve ya. El tiempo se acaba"


Después de ser empujada un par de pasos hacia adelante, Cecil miró hacia atrás. Y dijo una última petición a Damia.


"Tienes que vigilar para ver si estoy bien. ¿Entiendes? Sólo creo en ti"

"Claro. Miraré sin siquiera pestañear"

"...... No, eso es un poco"


Tengo el síndrome del ojo seco.

Cecil asintió y se dio la vuelta. Su expresión al salir al encuentro de Louise no era muy brillante. Pero definitivamente estaba más animada que antes.

'Espero que no le pase nada a Cecil'

Rezó Damia seriamente para sí misma. Luego, con el cuerpo pegado a la pared, puso los ojos en el agujero.

¿Cuántos minutos habían pasado?

A lo lejos, oía el chirrido de los zapatos y la risa aguda característica de Louise. Luego, la puerta se abrió con un chirrido y finalmente Cecil y Louise se sentaron en la misma mesa.


"¡Es tan agradable verla así, Lady Cecil! ¿Cuánto tiempo hace que no tenemos una conversación íntima?"


Con los dos codos sobre la mesa, Louise se inclinó hacia delante y sonrió. Entonces miró la tetera y la taza de té que tenía delante.

'¿Por fin ha empezado?'

Damia estaba muy nerviosa y observaba cada movimiento de Louise. Era para ver si ella montaba algo en el té.


"...... Oh. Antes de hablar de negocios"


Como era de esperar, las pálidas y secas manos de Louise se dirigieron hacia la tetera. Viendo esto, Damia reflexivamente levantó su cuerpo a medias. Pero al momento siguiente, las acciones de Louise fueron completamente inesperadas.


[Chupar]


Con los brazos extendidos, Louise sin dudarlo empujó la tetera y la taza de té. Y sobre la mesa vacía, colocó un montón de contratos y materiales que había traído.


"...... ¿Srta. Louise?"

"Por supuesto, estaría bien tomar una taza de té y hablar despacio"


Louise se detuvo un momento y levantó una de las comisuras de su boca. Como si le hiciera gracia ver a Cecil tan nerviosa.


"Hoy estoy un poco ocupada. Me gustaría poder centrarme más en mi trabajo que en mi té. ¿Estás bien?"


Louise le instó repetidamente a que lo terminara rápidamente. Cecil, que se sobresaltó por ello, se dejó llevar por el impulso y aceptó los materiales que Louise le había ofrecido


"Ahora, empecemos con el precio de entrega de los minerales de este año. Mirando estos datos, el precio reciente del mineral en la capital......."


Louise, con cara de pocos amigos, se puso manos a la obra. Cecil, que sabía que sólo podía dar drogas, se quedó perpleja. Sin embargo, mientras Louise seguía hablando de su trabajo, empezó a concentrarse en algún momento.


"¡Espera! Por mucho que haya subido el precio del capital, ¡subir el precio de entrega un 15% es un disparate!"


Cecil también se tomaba en serio el negocio familiar. Rápidamente se enfureció por el precio unitario ofrecido por Louise y entró en negociaciones.

Fue una jugada inteligente la de Louise al retirar la tetera de la mesa por completo. Cuando el medio que había temido desapareció, Cecil dejó de tener miedo.

No puedo hacer esto.

Mientras tanto, Damia, observando la situación desde detrás de la pared, se quedó perpleja. Pensó, mirando la cara de Louise a través del pequeño agujero.

Pero hasta el final, la tensión no pudo ser frenada. Era porque Louise no sólo podía usar las drogas en el té, sino también usar otro atajo.

Damia ni siquiera parpadeó y siguió mirando a Louise hasta que sus párpados secos se agitaron. Pero Louise siguió hablando de negocios. Como si no tuviera otro propósito.


"...... bien. Este año, hagámoslo así"


Después de dos horas de sangrientas negociaciones con Cecil, finalmente aceptó un precio fijo. Y cerró de golpe el contrato.


"Fue un buen trato, lo disfruté"


Louise, que compartía el contrato, se levantó orgullosa. Gracias a esto, se oyó un ruido de la mesa y la tetera empujada en la esquina se agitó.

Al ver esto, la cara de Cecil dijo tardíamente: "¡Ay! Recordé que estaba tan absorta en la conversación de negocios que me olvidé de tener cuidado con Louise por un momento. De hecho, Louise ni siquiera mostró nada sospechoso.

Al igual que ahora.


"Entonces estoy ocupada, así que iré a verte. Por favor, cuide también mi contrato este año, Lady Cecil"


Sin decir nada, Louise se fue. Ni siquiera hubo vacilación en la mirada de su espalda que había visto todo.

Cecil se quedó rígida de vergüenza. La Louise que ella conocía era una mujer que siempre la sorbía y ponía enferma a la gente. Sin embargo, no tenía ni idea de que hoy, que esperaba hacer, se fuera a ir con tanta frialdad.

...... ¿Qué, de verdad?

Murmuró Cecil mientras miraba la tetera fría. Entonces, Damia, que frotaba sus ojos cansados sobre la pared, asintió ligeramente.


"Así es"


¿Podría ser que Cesare le diera una pista a Louise por adelantado? Si ese era el caso, podía entender la situación bastante bien.

Cesare se escondía ahora como si no hubiera regresado de la Gran Guerra. Sin embargo, si era Louise la que estaba en el mismo bando, había una alta probabilidad de que hubiera contactado secretamente con él.

'De acuerdo. Tal vez sea eso'

Cesare no era un tonto. No había manera de que pudiera llevar a cabo el plan tal y como estaba, hasta que supiera que Damia había cogido la mano que había preparado.


"Sighh"


En ese momento, Damia bajó los hombros llena de fuerza y dio su profundo alivio. Fue en vano, pero no se arrepintió. Gracias a esto, confirmó con sus propios ojos que Cecil estaba a salvo.

'Me alegro de que no haya pasado nada'

Sin embargo, Damia en ese momento aún no lo sabía. el hecho de que había un regalo "real" que Cesare había preparado para ella.

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