Mo Yan en un Libro 105-106

Lunes, 22 de Marzo del 2021

Mo Yan en un Libro 105

Gatita traviesa

“Xu-ge, ¿eh? Tan íntimo. Estoy muy decepcionado, Gatita. Dime, ¿Cómo debo castigarte?” Preguntó con una sonrisa cruel.

Era aterrador para Mo Yan.

Agarró su pecho y apretó con fuerza, burlándose de ella. Pero el calor de su cuerpo se negó a moverse.

“No...” 

Ella apretó los dientes, pero no pudo evitar el gemido entrecortado, su parte sensible fue tocada libremente. Aunque estaba avergonzada, le hizo sentir un placer indescriptible. Mo Yan movía su cintura y su camino de flores se encogió, ella apretó sus piernas alrededor de él.

“Tu boca dice que no, pero en realidad eres muy puta”  siseó contra el lóbulo de su oreja.

“No, ah~ no lo soy~”

"Mentirosa, ¿Qué estás diciendo, gatita traviesa?"

Salió de ella y se puso a horcajadas sobre su cuerpo, acercó su polla a sus labios de cereza. Frotó el glande cubierto de néctar sobre sus labios rojos.

Mo Yan estaba a punto de respirar y aprovechó la oportunidad para enviar su polla al interior. La estrecha y caliente boca de ella le hizo cerrar los ojos con comodidad. Su rostro se distorsionó por el deseo.

“Tu boca está tan caliente y húmeda, gatita, traga un poco más. Abre la garganta”

La sensación de asfixia hizo que las lágrimas cayeran de sus ojos. Su respiración acelerada demostraba que no se había adaptado a su sexo violento.

Él le acarició la carita y le limpió las lágrimas con el pulgar

"Sé una gatita obediente y no te acerques a ese hombre. Esto es sólo un pequeño castigo. Recuerda no respirar demasiado rápido. Eso es todo..."

La levantó y la hizo arrodillarse entre sus piernas, mientras le chupaba la polla. Le presionó suavemente el cuello mientras ella se la tragaba. Mirando su cara enrojecida, le metió el resto de la polla en la boca, haciéndole sentir muy satisfecho.

“Sírveme pacientemente con tu boca superior y yo alimentaré tu golosa boca inferior”

Dijo apartando su pelo de la cara para revelar su pornográfica belleza, sus ojos ardían de resentimiento, sus mejillas estaban rojas y sus labios se ensanchaban por su palo de carne. Podía oír su respiración nasal.

Él sonrió y le agarró la cabeza, movió su cintura lentamente, luego comenzó a acelerar. Con su dura embestida, ella empezó a temblar, pero seguía agarrada por la corbata.

“Ah, tu boca superior no pierde con la inferior. Está tan apretada, puede chupar tan bien”.

Él estaba sudando, sus ojos lujuriosos miraban la expresión desconcertada de ella. Su cálida y húmeda boca le volvía loco.

Mo Yan en un Libro 106

Gatita es tan buena

“Gatita es tan lasciva. Su tarro de miel está babeando y mojando mis sábanas. Pero la boquita de arriba está sujetando mi palo de carne, ¿cómo puede romperse la boca de abajo?”  Dijo lánguidamente.

Al ver los ojos asustados de ella, se rió alegremente.

“No te preocupes, luego usaré mi polla para taparla”

Antes de arremeter como un tigre a las puertas. La bolsa escrotal de él golpeaba la barbilla de ella con cada frenético empujón en su boca. Su blanca piel enrojeció.

Pudo sentir cómo su miembro comenzaba a hincharse y sus ojos se oscurecieron. Estaba a punto de alcanzar el clímax. La necesidad de disparar se intensificó. Rápidamente se introdujo en su delicada boca mientras Mo Yan temblaba entre sus piernas. De repente, el néctar salió disparado sobre la sábana mientras él gruñía y rociaba su semilla caliente en la garganta de ella.

"Bien, gatita, trágatelo todo..."

Le dijo presionando su cabeza contra él para que no se apartara, mientras su otra mano le acariciaba la mejilla mientras una oleada tras otra de semen almizclado se introducía en su boca. Preocupado de que se ahogara, le apretó el cuello y la acarició suavemente, induciéndola a tragar. Ye Hanyu sonrió.

Se retiró y la levantó para poder juguetear con su coño que acababa de tener un pequeño orgasmo. Mo Yan forcejeó tratando de zafarse de sus garras. Pero él la sostuvo y la apoyó contra él. Le separó los muslos y le introdujo su fuerte masculinidad en su cálido y húmedo punto de miel.

"No, basta... ha~ Estoy tan cansada~"

Gritó ella, pero sus embestidas hicieron que saliera de ella un chorro constante de jugo de amor. Un placer insoportable atormentaba a Mo Yan, y sus gemidos se volvieron más roncos y excitantes.

"No, tengo que castigarte, gatita golosa"

Dijo mientras su empuje se volvía más desenfrenado. Cada vez, la penetraba hasta la raíz de su polla, sin piedad, una y otra vez.

"¡Ah, no más! No más~ oh~”

Un placer abrumador inundó su mente; no pudo evitar gemir. Su cuerpo parecía agitarse en un profundo mar tormentoso.

“No tienes permiso para encontrarte con ese hombre en el futuro. ¿Oíste?", le ordenó él, intensificando sus embestidas.

"No...” 

Ella negó con la cabeza, rechazando su orden. Pero no pudo resistirse a mover sus caderas al ritmo de él.

Al ver sus lágrimas, él se enfadó: "Qué gatita tan desobediente"

Sus ojos se volvieron más fieros y comenzó a golpear su punto G. Sus fuertes muslos mantenían las piernas de ella abiertas. Se aferró a uno de sus pechos lechosos, mientras con el otro pellizcaba su sensible perla roja. Cada empuje producía un sonido ambiguo de fluido agitado.

“Ha~ ha~ no puedo~” 

Mo Yan no podía soportarlo. Los dedos de sus pies se curvaron con fuerza y sus dedos se aferraron a la corbata con fuerza.

Mo Yan sufrió un espasmo y una corriente cálida brotó de su cuerpo, mientras su agujero de la flor chupaba su glande. La visión de Mo Yan se volvió negra.

Hanyu continuó machacando su roja e hinchada vagina. Su acalorada voz llenaba la habitación por encima de las súplicas de ella. Pero la mayor parte eran gemidos sensuales y los gemidos de Hanyu en respuesta.

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