La Princesa Monstruosa 28
La razón por la que el villano está obligado a ser el villano (1)
"Es universalmente aceptado que los hombres se dejen crecer el pelo si son miembros de la familia real, más aún para las princesas. Su pelo no destaca..."
"Tanto si tiene el pelo largo como corto, ¿no destaca Bella?"
Sin embargo, al contrario de lo que esperaba Lloyd, Chloe no estaba de acuerdo con él. Más bien, le dirigió a Lloyd una mirada afilada, como si se sintiera insultada.
"Me gusta su pelo corto, es fresco. Le queda bien a Bella. Yo también he pensado en cortármelo asÃ"
"Ah... ¿En serio?"
Era un hecho conocido por todos los miembros de la familia real que Cloe sentÃa un extraño cariño por la Primera Princesa Arbella.
Sin embargo, Cloe también habÃa sido regañada en la cara por Arbella por Judith en el primer dÃa del festival de caza.
"Especialmente en este vÃdeo de la piedra de maná, ¿no es realmente maravilloso? Los pájaros están volando, y en medio de ellos, ¡la hermana es perfecta! Ojos brillantes"
Pensaron que eso habrÃa provocado cierta frustración, pero resultó que la admiración de Chloe por Arbella parecÃa más sólida de lo que pensaban. Además, empezó a emocionarse al hablar de Arbella a solas.
Lloyd, que se habÃa quedado sin cosas que decir por culpa de Chloe asÃ, se tragó las palabras torpemente.
"¿Qué? Pero Chloe. ¿Cogiste el anillo que me enseñaste antes?"
"¿Si? No... ¿qué? No está!"
En ese momento, la tercera princesa de la mesa, Liliana, planteó de repente una pregunta.
Cloe se miró la mano y se sorprendió. Su anillo de zafiro rojo habÃa desaparecido.
"¿Qué, se me ha caÃdo cuando he entrado antes en el bosque?"
El bosque al que se referÃa Cloe no era un lugar de presa, sino un pequeño bosque con un paseo marÃtimo.
"Entonces démonos prisa y hagamos que los sirvientes lo encuentren"
Por un momento, los ojos de Chloe adoptaron una mirada diferente.
"Tienes razón. Tenemos que encontrarlo"
Pero entonces Cloe no miró a los sirvientes que esperaban detrás de ella, sino a la chica sentada en la esquina más alejada de la mesa.
"Judith, ¿qué es lo que te hace perder el tiempo?"
"..."
"Realmente no es ingenioso. ¿No has oÃdo lo que acabamos de decir?"
Naturalmente, fue Judith, la princesa nacida de una esclava, quien hizo que Cloe decidiera hacerle pasar otro mal rato.
"Sabes cómo es mi anillo, ¿verdad? Ahora, ¡ve y encuéntralo rápido!"
"SÃ, Segunda Princesa"
Judith no cuestionó ni discutió, sino que respondió dócilmente.
Sin decir una palabra, se levantó y se adentró en el bosque, con una carcajada detrás de ella.
Judith sujetó con fuerza el dobladillo de su falda con ambas manos como si no lo hubiera oÃdo. En su mente, pensó en la única persona que habÃa sido amable con ella.
Arbella, que le habÃa regalado dulces el dÃa de la fiesta del té de Chloe.
Arbella, que habÃa acudido al lado de Judith cuando estaba en peligro en el jardÃn mágico.
La Arbella que aceptó el pañuelo de Judith justo antes del concurso de caza.
Y...
Tal vez Arbella no la recordara, pero también fue la que salvó a Judith cuando la perseguÃan los perros del Segundo PrÃncipe Lloyd hace algún tiempo.
Ahora, habÃa más imágenes de Arbella en la mente de Judith que nunca.
La fuerza se agotó gradualmente de su mano que agarraba con fuerza el dobladillo de su vestido. Judith corrió hacia el bosque con un rostro más claro y luminoso que antes.
***
Al mismo tiempo, Ramiel, el primer prÃncipe, estaba tumbado en un cojÃn en una habitación fresca, comiendo tranquilamente uvas.
"Como era de esperar, odio los cotos de caza que huelen a bestia y hacen calor"
Hoy era el segundo dÃa desde que habÃa dejado de ir a los cotos de caza.
A Ramiel sólo le gustaban las cosas bonitas y no le gustaba la caza y otras cosas que le hacÃan sentir mal. Y esto era lo único que le hacÃa entender el gusto de Arbella.
CompartÃa las sombras y los ojos que le habÃa dejado a Judith de forma improvisada. Pero también hoy, la vida cotidiana de la odiada princesa era extremadamente aburrida.
"Me pregunto por qué Arbella está interesada en esta chica"
Ramiel se quejó de haber hecho algo innecesario.
No tenÃa ni idea de por qué Arbella habÃa empezado a mirarla.
La serpiente blanca de Ramiel hizo un sonido de swooshing mientras se retorcÃa alrededor de su brazo, como si estuviera de acuerdo con él.
"¿Eh?"
Y al cabo de un rato, los ojos de Ramiel se abrieron de par en par, como si hubiera descubierto algo.
La chica que fue al bosque a buscar el anillo de Cloe.
Un chico que perseguÃa a una ardilla en la zona.
Y luego, apareciendo en el bosque por detrás...
"Qué demonios. Las cosas están a punto de ponerse un poco interesantes..."
El bello rostro de Ramiel se pintó con una desagradable sonrisa.
"Entonces, ¿hago que la situación sea digna de ver?"
Poco después, una serpiente negra y sombrÃa cayó de Judith y se abalanzó rápidamente sobre la criatura mágica que acababa de saltar del bosque, enseñándole sus afilados dientes.
***
"Oh"
Un pensamiento cruzó mi mente y dejé escapar un pequeño suspiro.
En cuanto agarré las riendas, el caballo frenó lentamente. Las sombras y la luz del bosque recuperaron su forma original, que se habÃa mezclado en mi visión.
Asà es. He recordado cuando tuvo lugar el episodio del festival de caza'.
La fiesta de la caza de este año fue un acontecimiento que apareció con bastante importancia en "El brillante mundo de la princesa Judith".
'Durante la fiesta de la caza, un tonto engañó a una criatura mágica e incluso causó un disturbio en el terreno baldÃo donde la gente montaba las tiendas'
De todas las cosas, recordé que habÃa penetrado la única capa de defensas de la pared exterior más cercana al bosque, porque era la presa de los espÃritus de más alto orden. Y de acuerdo con la ley natural de las novelas románticas, la persona que estaba allà de entre todos era Judith.
En ese momento, antes de haber despertado sus poderes mágicos, Judith no podÃa evitar los ataques de la presa. Además, en un tÃpico cliché, fue el propio protagonista, Killian, quien ayudó a Judith en ese momento. Esta es la primera vez que los protagonistas masculinos y femeninos reconocen la existencia del otro, y es una escena importante por sà misma.
Sin embargo, una cosa que tiene lugar es...
Judith, la heroÃna dedicada al sacrificio, fue salvada por el protagonista masculino.
En ese momento, ella protegió a un pequeño prÃncipe que vagaba solo cerca del bosque de las criaturas mágicas y estaba en peligro.
"..."
Por alguna razón, esa parte del pequeño prÃncipe me molestaba extrañamente.
'Y parece que es hoy'
Girando la cabeza para mirar el bosque detrás de mÃ, me pregunté qué estaba pasando.
Ya estaba bien adentrado en las profundidades del bosque, y cuando escuchaba, lo único que oÃa eran los gritos de las presas y el vaivén de la hierba y los árboles.
Finalmente, chasqueé la lengua y di la vuelta al caballo. Por alguna razón, no me sentÃa muy bien, asà que pensé que tenÃa que ir a comprobarlo una vez.
Y pronto me di cuenta de que mi corazonada era correcta. Cuanto más me alejaba del bosque, más fuerte era el ruido.
"¿Qué está pasando?"
"¡Primera Princesa!"
Me acerqué a la gente que se habÃa reunido en un grupo a caballo.
Uno de ellos me explicó la situación.
"Una criatura mágica del bosque ha atravesado una capa de protección y ha entrado. Afortunadamente, nadie resultó herido, pero el Tercer PrÃncipe estaba cerca y se sorprendió mucho..."
"¡Hermanaaaaa!"
Miriam, que lloraba rodeada de una multitud, me encontró y chilló.
No me sorprendió, ya que era una situación previsible.
"¡Uwaaaaa! Me he asustado!"
Mientras me desmontaba, Miriam, que habÃa sido llevada por su niñera, saltó sobre mÃ.
"Ardillas... voy a ver una ardilla, y de repente hay un monstruo... ¡Uwaaaa!"
No tuve más remedio que abrazarlo y tranquilizarlo.
"Debe haber sido una sorpresa encontrar una criatura mágica por aquÃ. Tenemos suerte de que nadie haya resultado herido"
Al fin y al cabo, Miriam era el principito que Judith protegÃa de la presa justo antes de ser salvada por Killian.
'Más que eso, creo que la niñera no está haciendo su parte muy bien'
¿Por qué no impidió que el niño se acercara al bosque para ver la ardilla por sà mismo?
Además, la niñera deberÃa haber estado con Miriam, ¿qué estaba haciendo cuando la criatura mágica apareció?
Al fin y al cabo, parecÃa que una vez que volviera al Castillo Imperial, tendrÃa que informar al Palacio de la Emperatriz sobre la Condesa McMillan por separado.
Miré a mi alrededor una vez, pensando interiormente en eso.
Por cierto, me pregunto si Judith estarÃa descansando en otro lugar.
Ahora que lo pienso, tampoco pude ver a Killian.
"¿Dónde está la persona que manejó la criatura mágica? Tengo que elogiarlos"
"Los caballeros de la Guardia Imperial están allÃ"
Cuando escuché esa historia, me sobresalté inmediatamente.
"¿La Guardia Imperial?"
"SÃ"
"¿Dónde está Killian Bernhardt?"
"¿Perdón? Si es el Pequeño Duque Bernhardt, aún no ha regresado del bosque... Oh, está por allÃ"
Movà mi mirada en la dirección que señalaba el dedo frente a mÃ.
Realmente pude ver a Killian saliendo del bosque en su caballo. ParecÃa que alguien de la familia Bernhardt se habÃa apresurado a acercarse a él y le estaba informando de la situación.
Killian también parecÃa acabar de enterarse de la conmoción en el coto de caza y sus cejas se fruncieron.
Al ver esto, me di la vuelta.
"¿Dónde está Judith?"
"Ah... Hace tiempo que no la veo. Ahora que lo pienso, la Cuarta Princesa también estaba allà en el lugar donde llegó la criatura mágica..."
Ey, estoy de vuelta ----> Si te gusta mi trabajo, puedes apoyarme comprándome un café o una donación. Ya tu sabes, no te exijo, es de tu bobo aportar o no, no te exijo :p
0 Comentarios