Jin Xiu Wei Yang 28

Jin Xiu Wei Yang 28

Lunes, 14 de Junio del 2021



Jin Xiu Wei Yang  28

El Playboy



**biao ge/biao mei - forma de dirigirse a los primos

 
A Li Wei Yang le gustaba mucho Li Min De porque, en sus ojos, podía percibir un tipo de anhelo que no quería separarse. Aunque San furen era su madre adoptiva y lo trataba como a su verdadero hijo, su personalidad era indiferente y reservada, por lo que la mayor parte del tiempo dejaba a Min De sintiéndose extremadamente solo.

En la casa de verano del jardín, Li Wei Yang le contó en voz baja las historias de su vida en el pueblo. Le habló de la época en que se subía los pantalones y vadeaba el agua para recoger huevos de pato silvestre. Después encendía un fuego en la orilla del lago y cocinaba los huevos cubriéndolos de arena caliente. Luego devoraba todos y cada uno de ellos hasta que no quedaba nada.

Li Min De escuchaba atentamente con ojos llenos de anhelo.

Viviendo en la finca del Primer Ministro, nunca había experimentado algo así. No sólo sintió que era un nuevo tipo de vida, sino que también pudo saborear la libertad en la descripción de Wei Yang.

Parpadeó y dijo: 


"San jiejie, uno de estos días quiero visitar el lugar donde has vivido antes"


Li Wei Yang miró fijamente esos ojos que revelaban las ganas de batir las alas y salir volando, se rió y dijo: 


"Niño tonto, no es un lugar donde se pueda jugar"


Li Min De levantó la cabeza y miró fijamente a Li Wei Yang. Bajo el sol, su rostro revelaba juventud, como un cielo claro de primavera, pero en aquellos ojos negros y oscuros era difícil decir si estaba feliz o triste. Eran unos ojos demasiado complicados de leer. Esta San jie, realmente era diferente a todas las demás, pensó Li Min De.

Al otro lado del jardín, Li Zhang Le acababa de pasar por las rocallas cuando, de repente, se vio sorprendida por una figura que salía de la nada.


"¡Biao mei!" 


Al pronunciar estas palabras, un joven vestido con una larga túnica de seda salió de detrás de las rocallas y le bloqueó el paso.

Li Zhang Le reconoció quién era esta persona y sonrió.

La tía biológica de Li Zhang Le se había casado con el general Zhong Yong. Más tarde, Zhong Yong heredó la posición noble de marqués de Bo Chang. Su hijo mayor, Gao Yuan, entró en palacio para convertirse en el compañero de lectura del príncipe heredero. Durante un intento de asesinato del Príncipe Heredero, bloqueó la flecha para el Príncipe Heredero y murió a una edad temprana. El Príncipe Heredero estaba extremadamente triste por la muerte de Gao Yuan y suplicó al Emperador que recompensara a la madre de Gao Yuan con el glorioso título de Wei Guo furen.

Como el hijo mayor había fallecido, Wei Guo furen comenzó a adorar al otro hijo, Gao Jin. Gao Jin era guapo y, aunque parecía una persona recta, había crecido hasta convertirse en un playboy. Su comportamiento había llamado la atención del marqués de Bo Chang y, en varias ocasiones, el marqués se había enfadado tanto que quería dar una lección a Gao Jin, pero cada vez, Wei Guo furen intervenía para proteger a Gao Jin. Esto se debía a que en aquella época, Gao Jin había sido el alumno favorito del Primer Ministro Li. El marqués visitaba regularmente la finca del primer ministro con Gao Jin por dos razones. En primer lugar, el marqués esperaba que los estudios de Gao Jin dieran buenos resultados para satisfacer parte de su codicia y, en segundo lugar, quería subirse a la cola de la reputación del Primer Ministro.

Aunque Gao Yuan y Gao Jin eran realmente hermanos de sangre, no parecían haber nacido de la misma madre. Gao Yuan había sido joven, talentoso y educado. Por el contrario, Gao Jin no era más que un vividor. El Primer Ministro Li había intentado enseñar a Gao Jin varias veces, pero al ver que no se tomaba en serio sus estudios, tuvo que desistir.

Además, Da furen había mimado a este sobrino suyo, principalmente porque era el único hijo que le quedaba a su hermana. En consecuencia, Gao Jin podía entrar y salir de la finca del Primer Ministro a su antojo.


"¡Biao Mei debe acordarse y echarme de menos, por eso me busca!"


Gao Jin se rió mientras caminaba hacia Li Zhang Le. 


"Normalmente es muy difícil sólo ver tu cara. Meimei se ha vuelto realmente más bonita a medida que creces, como un hada. . ."


Li Zhang Le solía estar en buenos términos con Gao Jin, pero hoy había una enorme sonrisa en su rostro. 


"Por supuesto que hay una razón por la que Meimei había invitado a Biao Ge"


Al ver la sonrisa de Li Zhang Le, el corazón de Gao Jin comenzó a latir rápidamente. 


"Cualquier cosa que meimei necesite, su biao ge lo hará, incluso si significa arrojarme a las llamas y al agua hirviendo. Definitivamente lo haré por ti"


A Gao Jin no le gustaba especialmente visitar la finca del Primer Ministro, sobre todo porque no le gustaba la cara de seriedad del Primer Ministro y cómo siempre intentaba educar a otra persona. Sin embargo, Gao Jin descubrió más tarde lo mucho que Da furen le mimaba y, por no mencionar, que todos sus biao meis eran hermosos y elegantes. En particular, la biao mei de Da, Li Zhang Le, era la más bonita entre las demás, pero la personalidad de Li Zhang Le era orgullosa y siempre le trataba con frialdad. Pero hoy ella había tomado la iniciativa de invitarle, lo que le hacía estar muy emocionado y feliz.

Al ver la belleza incomparable de Li Zhang Le, se dio cuenta de que todas las demás mujeres con las que había estado no eran nada en comparación. Todo lo que quería era tomar sus manos y tener intimidad con ella. Sin embargo, también sabía que no podía actuar imprudentemente con Li Zhang Le. Wei Guo furen le había dicho antes que esta Da biao mei suya acabaría convirtiéndose en alguien grande, alguien con quien no podría jugar fácilmente.

Li Zhang Le señaló de repente a una persona sentada en la casa de verano. 


"Biao ge, no has conocido a San meimei, ¿verdad?"


Siguiendo el delgado dedo de Li Zhang Le, Gao Jin se fijó en un joven que estaba de espaldas a él. Sentada frente al joven había una chica joven. Llevaba un vestido rosa que complementaba sus delicados rasgos: mentón delgado, labios rosados, dientes blancos y largas pestañas oscuras que acompañaban a un par de profundos y fríos ojos negros.

Durante un largo momento, Gao Jin se quedó quieto.

Al notar su reacción, Li Zhang Le agitó las manos frente a la cara de Gao Jin. Sonriendo, dijo: 


"¿Qué pasa?"


Gao Jin salió de su aturdimiento con una gran sonrisa en la cara. 


"¿Es la hija de esa misteriosa concubina? Es realmente..."


Diferente.

A diferencia de la etérea belleza de Li Zhang Le, de la seductora elegancia de Li Chang Ru, de la belleza de Li Chang Xiao y Li Chang Xi, Li Wei Yang tenía un par de ojos claros y fríos, como el agua de un pozo sin fondo, llenos de una misteriosa profundidad. Con la experiencia de Gao Jin, había visto todo tipo de belleza, pero Li Wei Yang era algo diferente.

Li Zhang Le preguntó: 


"Biao ge, ¿no es bonita San mei?"

"¡Bonita! Muy bonita"


En el momento en que Gao Jin dijo estas palabras, pareció recordar algo y se puso serio. 


"Por supuesto, su belleza aún no puede compararse con la de Biao Mei"


Como si fuera necesario pronunciar estas palabras en voz alta, Li Zhang Le pensó y sonrió. 


"Biao ge, ¿no quieres probar la belleza de San mei?".


Cao Jin se asustó al oír a Zhang Le. 


"¡Biao mei no juegues conmigo! La ira del Primer Ministro es algo que no puedo tocar"


Había burla en los ojos de Li Zhang Le. 


"Si se tratara de Er Meimei y los otros, entonces por supuesto que Biao Ge no puede tocarlos. ¿Pero a ella? Si te gusta, entonces sigue adelante y hazla tuya. ¿Qué pueden hacer ellos si tú tienes el poder de perseguirla?"


Desde que tenía quince años, Gao Jin había adquirido experiencia en lo que respecta a las mujeres. Sin embargo, las mujeres que había tocado eran, en su mayoría, obedientes y tímidas, bonitas sirvientas de su hacienda o lindas cositas de origen plebeyo. Mientras le gustaran, podía tenerlas. Si su madre le regañaba, sólo tenía que fingir que le escuchaba. Sin embargo, Li Wei Yang seguía siendo sangre y carne del Primer Ministro. Si ocurriera algo malo, no tendría excusas que dar al Primer Ministro, y por eso seguía dudando.

Li Zhang Le se burló fríamente. 


"¡Biao ge! Biao ge debería pensarlo bien. Si pierde esta oportunidad, no habrá una próxima vez. Aunque pase algo, ¡madre sigue siendo tu tía consanguínea!"


Al oír esas palabras, Gao Jin se quedó un poco aturdido antes de caer en la cuenta. Como si hubiera añadido rubor a su rostro, toda su cara se puso roja.

Mirando a Li Wei Yang desde lejos, se decidió con maldad. 


"¡Entonces escucharé las palabras de Biao Mei!"


La sonrisa en la cara de Li Zhang Le se profundizó. Con el estatus de Li Wei Yang, aunque quisiera convertirse en la nuera de Wei Guo furen, la tía no lo permitirá. En ese caso, sólo podrá convertirse en concubina. . .

Además, la tía no era una persona agradable para empezar. Todas las concubinas de la finca Bo Chang de las que Gao Jin se había aburrido, ¡ahora vivían una vida peor que la muerte!

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