Lunes, 14 de Junio del 2021

Jin Xiu Wei Yang  27

Odio demasiado profundo

San furen vivía en Ya Zhu Yuan.

Li Wei Yang acababa de aparecer en la entrada del patio cuando una sombra se acercó apresuradamente a ella.

Un par de manos ligeramente frías, como si tuvieran miedo, se aferraron a las manos de Wei Yang y expresaron su urgencia: 

"¡San jiejie!"

Li Wei Yang bajó la cabeza, mirando a un par de ojos extrañamente hermosos. Era como si pudiera ver su propio reflejo en esos ojos.

Se sorprendió un poco, pero enseguida se rió. 

"Min De"

Li Min De estaba un poco preocupada de que Wei Yang le quitara las manos de encima, pero en lugar de eso, le permitió seguir abrazándola. La dulzura llenó su interior mientras una sonrisa aparecía en su rostro. La miró con seriedad. "San jiejie, ¿has venido a visitarme?" Había un matiz de felicidad en su voz.

Al ver lo adorable que era, Li Wei Yang no pudo evitar acercarse y pellizcar sus mejillas mientras se reía y decía: 

"Así es. He venido a visitar a Min De"

Li Min De se alegró al instante. Mientras Min De la cogía de las manos, siguieron caminando hacia delante. 

"San jiejie, te dije que quería ir a buscarte pero mamá dijo que sería una molestia para ti"

El hecho de que había salvado a Li Min De era realmente un secreto que debían guardar.

Li Wei Yang sonrió, sin importarle las manos de Min De sobre las suyas, mientras se dirigían a la sala de estar de San furen.

San furen saludó alegremente a Li Wei Yang con una sonrisa antes de tomar asiento. Un sirviente que estaba de pie sirvió el té.

Li Wei Yang levantó la taza de té, que tenía una tapa con muchos diseños florales de colores, la abrió y dejó que el fragante olor del té saliera lentamente en forma de vapor.

Bajando la cabeza, dio un pequeño sorbo al té.  "He venido a dar las gracias a San furen".

A San furen, la Li Wei Yang que había salvado a Li Min De, era alguien a quien obviamente tenía que pagar la deuda de salvarle la vida. La alegría apareció lentamente en sus ojos mientras su tono de voz permanecía nivelado: 

"Fue meramente conveniente. Veámoslo como una oportunidad para que San xiaojie libere su frustración"

No intentaba atribuirse el mérito de nada, sino que hablaba con normalidad.

Li Wei Yang sabia que tratar de conspirar dentro del territorio de Lao furen era una tarea muy difícil. Si no fuera por la ayuda silenciosa de San furen, ella sola no podría tener éxito en este plan.

San furen miró a Li Wei Yang y habló suavemente: 

"Ahora que Hua Mei se ha ido, será más fácil actuar"

Tomó un sorbo de té y dejó la taza a un lado. 

"Sin embargo, la gran pérdida de hoy es algo que Da furen no puede pasar por alto"

Li Wei Yang no respondió, sino que simplemente sonrió. Era evidente que no estaba nada nerviosa por este hecho.

San furen se mostró suspicaz. Una joven de sólo 13 años, ¿de dónde sacaba tanto valor para enfrentarse a Da furen? Recordó con delicadeza: 

"Wei Yang, ella y yo nos enfrentamos constantemente, así que no importa si nuestras peleas son una vez más o una vez menos. Pero debes recordar que ella sigue siendo la matrona de la familia. En el futuro, su matrimonio. . ."

En la vida anterior, ella siempre había obedecido las palabras de Da furen, pero al final, ella seguía siendo sólo un peón. Su vida terminó en tragedia y ya que había sido así, ¿qué hay de nervioso en luchar contra ella esta vez? Sin embargo Li Wei Yang no iba a decirle a San furen estas cosas. Podían ser aliados, pero eso era todo lo que iban a ser.

Mientras se dirigía al exterior, Li Wei Yang volvió a ver a Li Min De. Estaba de pie en medio del patio esperándola.

Sonriendo, avanzó hacia él y le dijo: 

"Min De, tengo que irme ahora"

¿Se va tan pronto? Instintivamente, la respiración de Li Min De se detuvo.

Justo cuando le costaba respirar, la oyó decir: 

"Tienes que ser bueno y escuchar a tu madre"

Tras el recordatorio, Li Wei Yang pasó por delante de él.

Li Min De se adelantó rápidamente. Sus ojos ardían intensamente, un fuego tan brillante que posiblemente podría quemar a la otra persona. "San jiejie. .", llamó y enseguida le agarró la mano.

"Esto es. . ." 

La mano que había estado escondida detrás de su espalda se levantó de repente al frente. Li Wei Yang estaba ligeramente desconcertado.

"¡Un amuleto de jadeíta!"

Li Min De respondió y luego cerró rápidamente los labios, mirando nerviosamente a Li Wei Yang.

Su interior se estremeció ligeramente cuando sus ojos se posaron en el objeto que tenía en la mano.

Era un jade con forma de media luna. Al mirarlo de cerca, Li Wei Yang se sorprendió aún más por el brillante color verde puro y la elegante calidad del jade. Con el jade en sus manos, lo acarició suavemente. Se sintió como si tocara la piel blanca y delicada de una belleza. El jade parecía tener su propia vida y esencia. Llegó a la conclusión de que esta pieza de jadeíta tenía un valor incalculable.

Sus ojos volvieron a fijarse en el pequeño rostro y las delicadas facciones de Li Min De. Li Wei Yang no pudo entender y se preguntó: 

"¿No llevabas esto puesto la última vez? ¿Por qué te lo quitaste?"

Li Min De la miró y respondió con ansiedad: 

"Esta jadeíta me acompañó desde que era pequeña"

Tragó saliva mientras sus orejas se ponían rojas. 

"Fue San jiejie quien me había salvado la vida, así que pensé que debía dársela a jie . ."

"¿Dármelo a mí? Este es tu objeto más preciado. ¿Realmente puedes desprenderte de él?"

Ella lo miró fijamente con una sonrisa. Sentía que este pequeño era extremadamente adorable. Incapaz de resistir el impulso, extendió la mano y le acarició la cabeza. El tacto de su pelo contra su piel era más suave de lo imaginado.

La primera vez que Li Min De vio a Li Wei Yang, ya había notado que había algo diferente en ella. La mirada de sus ojos era distinta a la de otras personas, como el agua quieta bajo la elegante luz de la luna, fría pero profunda.

No sabía cómo decirle que era realmente sincero al darle esta pieza de jadeíta. Tropezó nerviosamente: 

"Yo... Yo . . ."

Al ver al tenaz joven tratando de explicarse, Li Wei Yang sonrió y le devolvió la jadeíta. 

"No deberías regalar esta jadeíta a otra persona por descuido"

No tuvo la oportunidad de terminar sus palabras cuando su mano fue apretada con fuerza por Li Min De. Había sinceridad y determinación en sus ojos mientras hablaba con voz suave: 

"¡Esta jadeíta puede proteger a su dueño! ¡Es cierto! Madre dijo que me había salvado la vida varias veces"

La sinceridad de su voz, junto con el sonido de los latidos de su corazón, parecía que podía penetrar a través de la jadeíta en la otra persona.

Li Wei Yang quedó sorprendida por su férrea determinación. Dijo: 

"Yo también tengo una. ¿Ves?" 

Sacó la jadeíta que le había dado Qi yiniang. 

"Esto es suficiente para protegerme. En cuanto a este jade, deberías guardarlo cuidadosamente contigo"

La verdad es que ella sentía que había algo más en el jade de Min De, así que ¿cómo podría aceptarlo? 

"Ven a visitarme a menudo"

Li Wei Yang le acarició la cabeza.

Había un matiz de tristeza en los ojos del joven, pero fue rápidamente reemplazado por la alegría al aparecer una sonrisa. . .

En otro dormitorio, la sirvienta Tan Xiang trajo una taza de té al ver que Da xiaojie, Li Zhang Le, estaba sentada frente a un espejo con flores de peonía y fénix grabados con una expresión grave.

El corazón de Tan Xiang latía rápidamente mientras hablaba con voz suave: 

"Xiaojie, Lao furen ha enviado gente a recoger los cuatro brocados de seda"

"¡Cógelo! ¡Tómenlo todo! Un cuervo sigue siendo sólo un cuervo aunque cambie sus plumas!"

No había nadie más en la habitación, así que Li Zhang Le no dudó en expresar su resentimiento.

"Hay... también está la mumu encargada de supervisar las escrituras budistas de xiaojie" 

Tan Xiang se interrumpió al notar la fea mirada de Zhang Le. Se tragó el resto de la frase.

De repente, Li Zhang Le agarró la taza de té y la rompió en pedazos. Tan Xiang se horrorizó al notar que los delgados dedos de la otra buscaban el kit de costura en el tocador. Zhang Le sacó una aguja del kit, agarró los dedos de Tan Xiang y, haciendo fuerza, le clavó la aguja en los dedos varias veces.

Mientras observaba cómo la sangre rezumaba de los dedos de Tan Xiang, Zhang Le mojó sus propios dedos en el charco de sangre del otro y luego miró fijamente la cara de Tan Xiang. "¿Sabes qué decir?"

El dolor de las yemas de los dedos heridos se disparó hasta su corazón. Tan Xiang estaba tan dolida que su rostro se había vuelto blanco, pero aun así dijo: 

"Sí, Da xiaojie se ha herido accidentalmente los dedos, teme que la sangre ensucie las escrituras, ¡pedirá a la mumu que vuelva otro día!"

Li Zhang Le instruyó con frialdad: 

"Ve"

Una vez que Tan Xiang se fue, Li Zhang Le cambió su mirada a su propio reflejo en el espejo.

"¡Li Wei Yang, bien por ti! Muy bien por ti!"

Tan Xiang estaba a unos pasos de la puerta y al oír la fría risa que provenía de Da xiaojie, no pudo evitar un escalofrío.

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