HDH 73

Lunes, 12 de Septiembre del 2021

Hombres del Harén 73

Quítatelo

Se sentía como si se estuviera mirando en un espejo. Pensar que alguien que era exactamente igual a ella vendría a mirarla un día. Qué cosa más extraña se puede experimentar en la vida.

A menudo se dice que "lo único que alguien nunca puede ver con sus propios ojos" es su propio rostro. No el rostro que uno ve a través de un espejo, sino el rostro que otra persona ve cuando se enfrenta a ella. Latil estaba pasando por esta misma experiencia.

"Hola"

Pero Latil no podía seguir mirando su cara porque era una experiencia interesante.

Latil sonrió tímidamente y saludó deliberadamente primero al falso emperador, luego al funcionario y al asistente.

La falsa emperatriz apoyó entonces la barbilla en su mano y preguntó como si fuera extraño.

"¿Por qué me has saludado primero? ¿Sabes quién soy?"

Era una pregunta que parecía ponerla a prueba. No, probablemente hizo esa pregunta a propósito para ponerla a prueba.

Pero cuando Latil escuchó la pregunta, se dio cuenta de que la falsa aún no sabía que el que estaba sentado frente a ella era el verdadero emperador.

Si esa falsa hacía una pregunta tan provocadora a propósito, significaba que tenía algo que quería averiguar.

'¿Debo responder que lo sé o que no lo sé? La mayoría de la gente común no conoce mi cara, pero...'

Latil pensó por un momento, decidiendo rápidamente, y luego respondió.

"¿No es usted Su Majestad el Emperador?"

Ante la respuesta de Latil, la farsante apartó una comisura de sus labios.

"¿Cómo sabes cómo soy?"

Latil contestó con compostura también esta vez.

"El entrevistador se ha movido del asiento principal por ti, y su ayudante no se ha sentado. He pensado que esto no suele ocurrir si en su lugar ha venido un funcionario o una noble normal"

El farsante se quedó mirando la cara de Latil. Por otro lado, Latil bajó deliberadamente la cabeza y dirigió sus ojos a los zapatos de la falsa para que pareciera que se sentía intimidada por esa mirada.

Por suerte, la falsa no dijo nada después de eso, como si no encontrara nada extraño en Latil, y el funcionario a cargo sólo hizo algunas preguntas ordinarias.

"Los resultados saldrán en un día, así que ven a la oficina administrativa mañana a las dos de la tarde para confirmarlos"

Tras la entrevista, Latil se inclinó ante los tres y salió con cuidado de la habitación. Pero cuando cerró la puerta, su tensión se disipó por completo y sintió como si su corazón se congelara en un bloque de hielo.

"¿Qué está pasando en esa habitación?"

Las expresiones de los otros aspirantes se parecían entre sí al ver la reacción de Latil. Pero nadie conocía a Latil, así que ninguno podía acercarse a preguntarle cómo había ido la entrevista.

No había necesidad de que Latil hablara también con ellos, así que salió inmediatamente del edificio. De lo contrario, podría empezar a escupir blasfemias y furia por la boca.

'Esa falsa bastarda. ¡Actuando tan descaradamente como si fuera le verdadero...!'

* * *

Era un hecho, pero Latil pasó la entrevista.

En primer lugar, el verdadero reto de ser contratada como criada era la selección de personal. La entrevista sólo servía para ver si las aspirantes no estaban demasiado nerviosas como para cometer errores o algún desliz delante de la alta nobleza, así que era imposible que hubiera fracasado.

Incluso cuando el falso emperador hubiera aparecido, los resultados no habrían cambiado. El falso emperador probablemente había venido a buscar a Latil, así que no habría tenido mucho impacto en el proceso de la entrevista.

'Necesito conocer a Reyan. Si llevo el uniforme de sirvienta, probablemente pueda moverme por la mayoría de los lugares. Incluso si me alejo de mi zona designada, puedo decir que soy una novata y que me he perdido'

Preparándose para su primer día de trabajo, Latil se ajustó el uniforme y se le ocurrieron decenas de maneras de conocer a Reyan.

'No asignarían a los nuevos reclutas a lugares importantes desde el primer día. Las otras criadas experimentadas probablemente me llevarían de un lado a otro y me darían varias tareas para hacer al principio'

Pero cuando se puso a trabajar, ocurrió algo inesperado.

"¿Voy a trabajar en la habitación de Su Majestad?"

El funcionario encargado de dirigir a los cortesanos le dijo a Latil que el lugar que le habían asignado era la habitación del Emperador.

A Latil, que fue la primera en preguntar, actualmente desconcertada, la funcionaria le respondió con cara de susto.

"Es un honor trabajar en la habitación de Su Majestad, ¿a qué viene esa cara? No te atrevas a mostrar esa mirada delante de Su Majestad"

No fruncí el ceño ni nada, ¿Cuál es tu problema? Latil chasqueó la lengua internamente, pero fingió tener miedo y se explicó.

"No he aprendido nada sobre cómo trabajar en el palacio, así que tengo miedo de cometer un error delante de Su Majestad. No es bueno que me coloquen de repente en un puesto tan importante"

El funcionario estuvo de acuerdo con Latil pero no cambió sus palabras.

"Pero no puedo hacer nada porque son órdenes de Su Majestad. No tienes más remedio que tomar ejemplo de los demás y hacerlo lo mejor posible"

'Pensé que no me habían pillado. ¿Se dio cuenta de que era yo? ¿Me llamó a su lado a propósito para burlarse de mí?'

Por supuesto, si Latil se acercaba a la falsa Latil, tendría más oportunidades de matar a la falsa. Pero debía tener mucho cuidado al hacerlo.

El hermano de Latil, Reyan, ya había tomado la iniciativa y engañado a los ayudantes de Latil de que la falsa Latil era real.

Sin embargo, si Latil y la falsa Latil se turnaban para hablar con los ayudantes, éstos podrían diferenciar a ambos, pero Reyan nunca le daría a Latil la oportunidad de hacerlo. Para luchar contra Reyan, Latil necesitaba personas que pudieran confirmar en última instancia que ella era la verdadera.

Si cortaba la cabeza de la falsa sin esos preparativos, Reyan la inculparía como una asesina que había matado al verdadero emperador sin poder demostrar su legitimidad. Tenía que tener cuidado.

* * *

Pero aunque estaba asignada a la habitación del emperador, casi nunca veía a la falsa.

Latil se dio cuenta por primera vez de cómo se organizaba, gestionaba y ordenaba su habitación cuando ella no estaba presente en ella.

"Tenemos que mantener la habitación limpia y ventilar el espacio cada hora hasta que llegue Su Majestad. Tenemos que mantener el agua hirviendo y asegurarnos de que no se enfríe, y las damas de compañía la llevarán a la habitación de Su Majestad más tarde"

"Entendido"

"Tenemos que llevar bocadillos y bebidas a los centinelas cada dos horas, y cuando las damas de compañía usen cosas en la sala de estar, tenemos que entrar y ponerlas en su sitio una vez que terminen de usarlas"

"De acuerdo"

"Por ahora, todo lo que tienes que hacer es seguir a las otras criadas experimentadas. Oh. Y una cosa más importante"

"¿Qué es?"

"Hace unos días, un mago oscuro intentó entrar haciéndose pasar por Su Majestad, así que debes tener cuidado"

"Oh, Dios mío. Entiendo"

Latil contestó hábilmente a la jefa de las criadas, y mientras la jefa de las criadas miraba con ojos escépticos a la nueva recluta que de repente venía a trabajar bajo su mando, no dijo nada más.

Más tarde, Latil siguió a las otras criadas y miró cuidadosamente si había algún objeto en la habitación que hubiera sido cambiado desde que la echaron del palacio, o si había algo que la falsa hubiera dejado atrás.

Pero no había nada de eso. La falsa sólo había utilizado los objetos que había dentro de la habitación, y nada más.

Latil tambien esperaba encontrarse con Reyan, pero eso tampoco ocurrio.

Al escuchar a los demás, parecía que Reyan y la falsa se iban a encontrar en algún lugar, pero Reyan no se molestó en venir hasta su habitación.

Por otro lado, Latil, que pensaba que podía ir a cualquier lugar que quisiera como criada, fue asignada a su propia habitación de entre todos los lugares, por lo que tuvo que permanecer cerca de las otras criadas todo el tiempo, sin poder moverse libremente.

* * *

Fue dos días después de su asignación a la habitación del emperador cuando Latil consiguió echar un vistazo a la falsa.

Las cosas no iban como se esperaba, pero por fin llegó una oportunidad cuando se mantuvo paciente. La falsa se había quedado en su habitación sin atender los asuntos nacionales, diciendo que le dolía la cabeza.

Las damas de compañía se encargaron de atender al emperador desde su lado y las criadas tuvieron que seguir preparando agua caliente y toallas suaves para que las damas de compañía las usaran. Sin embargo, Latil sólo era una novata y tenía que ayudar a las demás haciendo tareas menos importantes, pero a las seis de la tarde, por fin pudo estar en la misma habitación que la falsa.

Fue cuando todas las damas de compañía estaban fuera en el salón y la falsa estaba tumbada en la cama con los ojos cerrados.

Latil echaba un vistazo a la falsa cada vez que iba y venía entre las ventanas y el baño con ojos de pez plano. Quería asegurarse de que la falsa no llevaba una máscara como la suya.

¿No obtendré la respuesta si me acerco y le levanto la cara? Mientras pueda alejar mi apariencia de esa falsa, entonces podré dar vuelta la situación sin importar lo que Reyan esté planeando.

'Vamos a intentar levantar su cara'

Entonces, cuando la falsa parecía haberse dormido por completo, Latil acalló sus pasos y se acercó sigilosamente a la falsa.

"..."

Incluso cuando estaba justo al lado de la cama, Latil no se movió inmediatamente y buscó cualquier indicio de que aún estuviera despierta. Cuando Latil estuvo segura de que la falsa estaba dormida, se acercó con cuidado, muy lentamente, a la cara de la falsa.

Justo cuando su mano estaba a punto de llegar a la cara de la falsa.

𝘋𝘪𝘯𝘨 𝘥𝘪𝘯𝘨 𝘥𝘪𝘯𝘨 𝘥𝘪𝘯𝘨

Sonó la campana que estaba pegada a la cama. Al mismo tiempo que la emperatriz abría los ojos, Latil se apresuró a recuperar las manos, las sumergió en la palangana que tenía al lado y fingió exprimir el agua de la toalla empapada.

"¿Qué ocurre?"

"El maestro Kallain ha venido a veros, Majestad"

Latil siguió escurriendo la toalla y luego la levantó contra su mano y la sacudió como si quisiera sacudirse el calor.

La falsa miró a Latil, pero ésta no se atrevió a devolverle la mirada.

Mientras tanto, la puerta se abrió por fin y Kallain entró en la habitación.

Ahora que lo pienso, me pregunto qué estarán haciendo mis consortes en este momento.

¿Se sorprendieron cuando escucharon que había aparecido una falsa? Creo que Clein se habría quedado boquiabierto.

'¿Esa falsa también tocó a mis consortes?'

Si Reyan tiene cerebro, creo que habría detenido a ese farsante... No por Latil, sino porque la falsa podría descubrir que no era el verdadero si se encontraba con las consortes de Latil.

Mientras tanto.

Tras entrar en la habitación, Kallain se acercó a la cabecera. El farsante no tardó en sentarse y hablar con voz débil.

"¿Qué te trae por aquí, Kallain?"

Latil estaba ahora seguro después de escuchar esas palabras. Reyan no había planeado todo esto por su cuenta.

La forma en que el farsante le hablaba a Kallain era bastante similar a la forma en que la propia Latil hablaba con sus consortes. Si alguien no se lo había dicho al farsante, era imposible que pudiera imitar el estilo de hablar de Latil.

Latil siguió retorciendo la toalla y miró a Kallain. No vas a caer en la trampa de 𝘵𝘩𝘢𝘵, ¿verdad, Kallain?

Pero pensándolo racionalmente, pensó que Kallain sí caería en la trampa. Latil no visitaba deliberadamente a las consortes con frecuencia para inducir la competencia entre ellas. Además, sólo mantenían algunas conversaciones juntas.

No estaba muy segura de Tasir, con el que acudió a una subasta ilegal, huyó y casi murió junto a él, pero le parecía natural que Kallain -con el que sólo habló un puñado de veces- se dejara engañar por el farsante.

Su convicción se hizo más fuerte cuando Kallain ni siquiera lanzó una sola mirada en su dirección. Latil se abatió mientras seguía apretando la toalla.

"He oído que Su Majestad no se encontraba bien. ¿Está usted bien?"

"No lo estoy. Mis dolores de cabeza no desaparecen"

"¿Es por culpa de ese mago oscuro que apareció hace varios días?"

"Puede ser. No tengo ni idea de cómo debo resolver estos incidentes. No queda ni un solo registro de entonces... Pero me alegro de tener al menos al Gran Sacerdote a mi lado. ¿Verdad?"

"Sí. La previsión de Su Majestad parece brillar en momentos como éste"

Kallain consoló a la farsante con una voz baja pero suave, luego se acercó a la cabecera de la cama e incluso subió las mantas para cubrir las rodillas de Falsa Latil.

"Puede apoyarse en mí siempre que las cosas se pongan difíciles, Su Majestad. Siempre estoy de su lado"

La falsa asintió y sonrió como si le gustara la preocupación de Kallain.

Latil apenas pudo contenerse para no romper la toalla en pedazos. Tenía tantas ganas de volver a empapar la toalla con agua y abofetear la espalda de Kallain con ella. 

Cuando Kallain se ocupó de la falsa con tanta delicadeza como si quisiera rociarla con miel y se marchó sin mirar a Latil ni siquiera hasta el final, Latil se alteró aún más. Salió del dormitorio con la palangana llena de toallas mojadas.

De todos modos, no estaba muy unida a Kallain, pero tal vez porque era su consorte, se sintió extrañamente triste al verle cuidar tan bien de otra persona.

Latil tiró el agua restante en el jardín situado cerca del palacio principal mientras gritaba que Kallain era un idiota con todo su corazón. No puedo creer que te hayas comportado de forma tan coqueta con ese farsante. ¡Qué estúpida!

En realidad, Kallain sólo había hablado con una voz grave y pesada, pero nada de eso quedó en la cabeza de Latil.

'Espera un segundo. ¿Su Majestad? 

Entonces Latil notó algo extraño y se levantó sorprendida.

¿Su Majestad?

Kallain llama a Latil 'Señora'. Incluso cuando ella le dice lo contrario, él sigue llamándola decididamente Señora.

Pero hoy, ha llamado a la falsa Latil 'Su Majestad'. Además, no ha ido directamente al cuello de la falsa como hace normalmente con el de Latil, sin obsesionarse.

'¿Se ha dado cuenta?'

En el momento en que Latil giró la cabeza asombrada, pudo ver a Kallain de pie entre los arbustos. Sus ojos se dirigían directamente a ella.

'No sólo se dio cuenta que era la falsa... ¿se dio cuenta de quién soy yo también?' 

¿Qué es él? ¿Un perro? Estaba prácticamente obsesionado con mi cuello. ¿Tiene el sentido de eso como un lobo o algo así?

Latil quiso acercarse a él y preguntarle, pero recordó que la zona en la que se encontraban podía verse desde la ventana de su habitación, y se apartó forzosamente de Kallain.

Luego terminó de verter el resto del agua y se dirigió a su dormitorio como si nada hubiera pasado.

Pero mientras colgaba la toalla mojada en el tendedero, la jefa de la limpieza se acercó a ella y le dijo con un matiz: 

"¿Qué has hecho?"

"Vanessa. Rápido, ve con Su Majestad. Te está buscando"

'¿Por qué a mí? ¿Nos vieron a mí y a Kallain mirándonos fijamente?'

El corazón de Latil latía con fuerza, pero no podía negarse, así que entró en el dormitorio de mala gana.

Sorprendentemente, no sólo estaba la falsa, sino que Reyan también estaba en la habitación.

Oh, mira, los dos que quiero golpear en la cara están juntos delante de mí. ¿Es un mensaje de Dios para que les golpee la cabeza al mismo tiempo?

Latil refunfuñó en su mente, pero se acercó tranquilamente al falso emperador y le preguntó.

"He oído que me has llamado. ¿En qué puedo ayudarte?"

Pero le costó mantener la compostura ante la respuesta que le llegó.

"Quítatelo"

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