Hombres del Harén 18
¿Con quién pasar la primera noche?
Latil, vestida con un uniforme de gala blanco con borlas doradas, miró por la ventana para comprobar los terrenos del palacio y chasqueó la lengua. Los reporteros estaban reunidos frente a los muros del palacio y la puerta principal, casi como tropas militares.
"Vaya..."
Latil casi se aplaudió a sí misma, sin darse cuenta.
"Puede que tengan problemas para entrar"
El tiempo pasó rápidamente a pesar de la lentitud de las investigaciones que se estaban haciendo sobre el ladrón de cartas, las influencias extranjeras con las que se involucró el príncipe Tralla y el asesino del anterior emperador. Pronto llegó el día de la entrada oficial de los consortes en palacio.
Latil decidió no celebrar una fiesta para festejar la entrada de los consortes, teniendo en cuenta que la atención de todo el mundo ya estaba excesivamente centrada en el "primer harén masculino"
En su lugar, decidió celebrar una ceremonia de compromiso y un banquete sólo con los familiares de los consortes y ocultó intencionadamente el programa detallado.
Sin embargo, incluso el día de la entrada oficial de los consortes, todo tipo de reporteros y espectadores se agolparon frente al palacio.
Sonnaught respondió con apatía.
"Los invitados de los consortes también tendrán algunos problemas para salir cuando se vayan"
Latil ladeaba la cabeza, tratando de ver mejor por la ventana, antes de girar para mirar a Sonnaught. Era porque Sonnaught sonaba como si definitivamente quisiera que "tuvieran problemas".
"¿Qué pasa?"
"Hace un momento, tú..."
Pero justo cuando iba a preguntar, un grito de 'Woaaah' llegó de repente desde los terrenos del palacio. Latil dejó de preguntar y se volvió hacia la ventana.
Al instante, un lujoso carruaje de color dorado llamó su atención. El carruaje se acercaba a la puerta principal a gran velocidad.
Detrás del gran carruaje dorado, otros cinco carruajes blancos le seguían uno tras otro, y los periodistas que veían el espectáculo gritaban cosas ininteligibles. Léelo en Infinity-Asure Cuando escuchó con atención, las palabras sonaban algo así como Angjes y demás.
Sonnaught habló escuetamente como si también hubiera oído el ruido.
"Deben ser de los comerciantes de Angjes"
"Ah, Tasir"
Latil no pudo ver el carruaje después de que pasara por la puerta principal, desde la ventana donde se encontraba. Aunque iba a un ritmo bastante rápido, Latil silbó cuando el último carruaje fue finalmente atrapado por los reporteros y no pudo entrar.
"Vaya, esa gente tiene mucho valor. Pensar que intentarían aferrarse a esto"
Mientras tanto, algunos de los reporteros ya intentaban entrevistar a la persona del vagón mientras se agarraban a la ventanilla.
"¿Debemos poner más soldados?"
Preguntó Sonnaught mientras miraba la escena. Latil estaba a punto de dar su asentimiento, pero inmediatamente cambió de opinión y negó con la cabeza.
"Creo que estará bien"
El carruaje blanco que había sido retenido por los periodistas se soltó mientras un grupo de caballos negros como el carbón comenzaba a acercarse.
"La procesión del segundo consorte está aquí"
Latil miró al grupo de caballos que se acercaba y dejó escapar una exclamación.
"Woah. Están muy bien. Debe ser el Cuerpo de la Muerte Negra"
El cuerpo que hizo que los reporteros se retiraran voluntariamente por su cuenta, formaba un ambiente totalmente diferente al de los coloridos y brillantes carruajes de antes. Eran amenazantes y sombríos, contrastando igual que el "blanco y negro". Parecía que iban a la guerra, en lugar de venir en plan consorte.
Un hombre con una capa negra que se presume que es el Rey Mercenario iba montado en un gran caballo negro al frente, y le seguían sus subordinados que se cubrían la cara y vestían con ropas similares.
"Están tan sincronizados"
Incluso los reporteros que se habían colgado del carruaje blanco de antes no tuvieron el valor de atrapar al rey mercenario, que se movía al frente del grupo, y sólo observaron desde lejos.
El tercer carruaje que llegó a continuación fue fácil de reconocer porque era uno de los carruajes de la familia Atraxil.
El siguiente fue el carruaje de la familia del Canciller, pero los carruajes del Duque y del Canciller fueron menos impactantes que los otros ya que los mercenarios dejaron una intensa impresión en todos.
Latil, tras ver pasar a los cuatro grupos por la puerta principal, se apartó de la ventana. Ya era hora de que ella también se dirigiera al Gran Salón de Banquetes.
* * *
"Su Majestad, debe entrar el último"
Siguiendo la petición del Asistente Principal, Latil esperó en una pequeña habitación cerca del Salón del Gran Banquete durante casi treinta minutos antes de entrar en la sala.
Cuando Latil apareció por la pequeña puerta que conducía directamente al asiento principal de la Sala del Gran Banquete, la ruidosa sala quedó en un silencio sepulcral.
Los invitados se pusieron de pie por separado, divididos en cinco grupos distintos.
"¿Ya se han dividido?"
Latil subió varios peldaños de la escalera y se situó en la parte superior de la plataforma, después de mirar rápidamente alrededor de los grupos individuales que se encontraban muy separados unos de otros.
Al mirar hacia abajo, los cinco hombres que esperaban en las estrellas bajo la plataforma se volvieron para mirar a Latil al mismo tiempo.
'Wow. Esto es realmente embarazoso'
Esos cinco eran los primeros consortes masculinos que a partir de hoy se convertirían oficialmente en hombres de Latil. Los invitados que trajeron también fijaron sus miradas en Latil mientras se les iluminaban los ojos.
Al recibir la mirada de los que se convertirían en sus hombres y sus familias, Latil se sintió bastante incómoda. El día de su coronación, se sintió emocionada de que todos la miraran, pero hoy fue un poco...... embarazoso.
Sin embargo, este tipo de cosas sólo se vuelven más embarazosas si se le escapa que está avergonzada. Latil engrosó su rostro y miró a cada uno de los cinco hombres por turno con una leve sonrisa.
"Sólo hay que ver cómo se han dividido"
No sabía si la división era intencional o no, pero el príncipe Clein estaba en el centro; los nobles Ranamoon y Gesta a su derecha, Tasir y Kallain que eran plebeyos a su izquierda.
'Supongo que así serán por ahora...'
Espero que esto no se convierta en una rivalidad entre los consortes que son de la nobleza contra los que son plebeyos. Va a ser difícil de manejar una vez que se extienda en una pelea entre nobles y plebeyos en lugar de uno entre consortes.
'Vamos a vigilar de cerca este asunto'
Mientras los observaba, Latil era quien más miraba a Kallain. Había visto a los otros hombres al menos una vez, pero esta era la primera vez que veía a Kallain, así que naturalmente se sintió más atraída por él.
Ese Rey Mercenario. Pensé que no comía, bebía o iba al baño durante varios días, la última vez que intenté conocerlo. Pero por suerte, no parecía estar al borde del colapso incluso después de todo eso. Sin embargo, a diferencia de alguien que saldría a la calle con frecuencia, parecía inesperadamente débil con su piel pálida.
'Así que él es el Rey Mercenario, ¿pero se retiró justo después de ganar su título o algo así?'
"Su Majestad"
Mientras Latil seguía mirando a Kallain, el Asistente Principal que se acercó para ayudar en la ceremonia de promesas llamó a Latil en voz baja.
'Oops. Sólo he estado mirando al Rey Mercenario'
Tal vez se equivocó; los invitados también parecían estar mirando al Rey Mercenario. Latil asintió al jefe de asistentes, indicándole que procediera.
El Asistente Principal puso entonces los documentos que había preparado de antemano en el podio y llamó a Clein.
"Su Alteza el Príncipe Imperial Clein, de Karisen"
Cuando Clein se acercó, justo detrás del podio, el Asistente Principal levantó cortésmente una pluma con ambas manos y le explicó.
"Por favor, firme abajo, después de leer el documento"
Cuando Clein terminó de firmar, el Asistente Jefe dijo el nombre de Ranamoon, que esta vez se acercó y firmó el documento.
Una vez firmadas las cinco firmas, Latil deslizó un anillo preparado de antemano en los dedos de cada uno de los cinco hombres.
Los hombres se besaron ligeramente en el anillo que Latil les puso en el dedo, y luego se apartaron después de jurarse lealtad y amor eternos.
"..."
Latil miró a los cinco hombres, cada uno por su lado, que se convirtieron oficialmente en sus concubinos, con la boca firmemente cerrada. Ahora, esos hombres 𝘳𝘦𝘢𝘭𝘭𝘺 han entrado en su harén. La esperarán en el harén y le susurrarán su amor.
Tal como lo hizo Hyacinth.
'Pero estoy segura de que ninguno de ellos me ama realmente'
Está bien. De todos modos, han venido con fines políticos. Latil también, no los acogió porque los amaba. Lo que Latil quería era que lucharan entre ellos.
Latil quería que compitieran dentro del harén y que atrajeran la atención de la nobleza y de su pueblo. Quería que sus antecedentes ayudaran a fortalecer y estabilizar su trono.
Ni siquiera había necesidad de sentir pena. Estoy segura de que estos hombres están aquí tras calcular su propio beneficio; ya sea dinero, honor, su futuro y lo que sea.
Latil dejó escapar una sonrisa cínica. Está bien. De todos modos, ¿qué importancia tiene el amor de corazón? Esa cosa llamada amor fue la primera en traicionarme y marcharse.
'Mientras siga en el trono, estoy segura de que esta gente no me traicionará al menos'
* * *
Después de eso, se organizó un banquete ordinario donde sus miembros eran sólo un poco únicos.
Pero el ambiente era muy extraño; en primer lugar, los que vinieron de los comerciantes de Angjes trataron de hacer negocios también aquí.
Los nobles que venían como invitados de Ranamoon y Gesta parecían tener una profunda aversión a sentarse junto a los mercaderes, pero también eran los que aguzaban el oído y se dejaban absorber primero por las palabras de los mercaderes.
En poco tiempo, algunos ya estaban pasando cheques mientras comían, como si ya hubieran pedido algunas cosas por adelantado.
Los invitados de los mercaderes de Angjes, son realmente ¡buenos en los negocios!'
En realidad eran los mercenarios del Cuerpo de la Muerte Negra los que tenían un ambiente más opuesto al de los Mercaderes de Angjes. Léelo en Infinity-Asure Se quitaron las máscaras que habían llevado durante su entrada, pero siguieron comiendo sin mediar palabra, como en la taberna de antes.
Los nobles de Karisen abrieron la boca para hablar, pero se limitaron a conversar entre ellos como si fueran conscientes del incómodo ambiente.
Latil se volvió para mirar al duque Atraxil y al canciller Rolurd. Una batalla de nervios propia ya había comenzado entre ambos.
Por otro lado, el hijo del Canciller Rolurd, Gesta, estaba totalmente desanimado y no podía ni siquiera levantar la cabeza de la mesa. Ranamoon y el príncipe Clein se miraban entre sí, más que Ranamoon con Gesta.
A Tasir casi le apuñalan el globo ocular con un tenedor cuando le dijo a Kallain que su complexión parecía la de un cadáver.
Después del banquete.
"¿Cómo estuvieron, Su Majestad? ¿Hay alguien que le guste en particular, después de ver a los consortes de cerca?"
La gobernanta pidió la opinión de Latil cuando volvió a su habitación, y ésta dio la misma respuesta que la de hace unos días.
"Como era de esperar, estoy preocupada por Gesta"
La institutriz estalló en carcajadas.
"Ese joven maestro ha sido tranquilo desde la infancia"
"Mhm. Creo que tendré que vigilarlo de vez en cuando, o no durará después de recibir golpes de todos"
"Por favor, cuida bien de él, teniendo en cuenta sus vínculos con la infancia"
"Sí, debería"
Aunque no estamos muy unidos para algo así como un 'lazo de la infancia'". Latil suspiró, luego fue a su baño y se lavó como siempre.
Pero cuando salió del baño, una dama de compañía le dijo que el Ayudante Principal estaba esperando en el Salón.
¿Por qué está aquí la jefa?
Normalmente, las mujeres de las familias imperiales tenían damas de compañía, y los hombres de las familias imperiales tenían ayuda de cámara. En el caso de Latil, ella tenía ambos porque conservaba la mayoría de los asistentes de su padre, tal como eran.
Sin embargo, como no podía dejar su cuidado diario a los valets, la mayoría de sus rutinas privadas eran asistidas por la gobernanta y sus damas de compañía después de que ella terminara con sus deberes oficiales del día.
Pero, ¿el Asistente Principal estaba aquí a esta hora? Esto no ocurría con frecuencia, ni era común.
"¿Ha pasado algo?"
preguntó Latil mientras se dirigía a la sala de estar, envolviendo su pelo aún húmedo en una toalla. La Jefa de la Asistencia preguntó con una expresión de sorpresa.
"¿Qué quieres decir? Es su primer día, Majestad"
"¿Sí?"
¿Primer día? Cuando Latil volvió a preguntar confundido, el Ayudante Principal le explicó con una mirada de "¿Cómo has podido olvidar esto?".
"Es el primer día que los consortes entran en palacio. Deberían elegir a alguien, por lo menos. Estoy seguro de que todos están esperando la gracia de Su Majestad"
"Mi Majestad - Oh"
Mientras Latil ponía cara de vergüenza como si lo entendiera, el Asistente Principal preguntó con cuidado.
"¿A quién vas a ir?"
Esta es una pregunta muy embarazosa. Latil se frotó la nuca tímidamente. Sin embargo, la Jefa de los Asistentes y todos los que la rodeaban tenían expresiones muy serias y graves.
Latil siguió su ejemplo y empezó a pensar también con detenimiento. ¿Con quién debería pasar la primera noche...?
Hubo tres que le vinieron a la mente de inmediato.
En primer lugar, el segundo hijo del Canciller, Gesta. No se sentía atraída por él como hombre, sino más bien preocupada por su personalidad mansa. Cuanto más cerca está un consorte del emperador, más autoridad gana; ¿no sería mejor ir a visitarlo el primer día?
Otro consorte que tenía en mente era Kallain, aunque por una razón totalmente opuesta a la de Gesta. Curiosidad e interés personal. Probablemente porque era el único hombre con el que no había hablado en persona, todavía.
Y la tercera persona que le vino a la mente fue el hijo mayor del duque Atraxil, Ranamoon.
Bueno, no exactamente Ranamoon, sino el descontento duque Atraxil que estaba detrás de Ranamoon. En cualquier caso, fue el criado que contribuyó en gran medida a la victoria de Latil. Incluso hoy mismo, había dejado caer innumerables pistas a Latil durante el banquete.
"Um..."
Latil se paseó por la habitación con los brazos cruzados, y finalmente llegó a una decisión después de un buen rato.
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