EGDLV 71

Jueves, 09 de Septiembre del 2021

El Guía de la Villana 71

Tú en la lámpara (4)

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"Ese tipo en serio..."

"Señora, ¿cuándo ha llegado a casa? Aarghh... Tengo tanto sueño"

Konny parecía realmente cansada. Sus ojos estaban rojos y no paraba de bostezar cada vez que hablaba. Después de que Demian saliera de la habitación, Lara intentó persuadir a Konny para que se durmiera.

"Konny, vete a la cama temprano. ¿No te sientes bien?"

"No es así"

"Ven aquí"

Lara midió el calor con la palma de la mano en la redonda frente de Konny. Estaba caliente porque acababa de despertarse, pero no parecía estar enferma.

"Milady, ¿no es esa la palma que besó el maestro Demian?"

"¿Eh?"

"Voy a lavarme la cara"

Fue muy minuciosa. Haciendo caso omiso del desconcierto de Lara, Konny corrió con firmeza al baño y se lavó la cara.

"Uf, ya me estoy controlando. Anoche no pude dormir nada, así que supongo que he estado durmiendo sin darme cuenta de que estoy durmiendo"

Lara se preguntó si Sebastián le había prestado un libro a Konny otra vez. Preguntó con una sonrisa.

"¿Por qué no podías dormir? ¿Estabas leyendo de nuevo el libro de cuentos de terror tradicional de Hautean?"

"No, he estado hablando con Valentine toda la noche..."

"¿Eh?"

"Es la primera vez que veo el amanecer mientras hablo con un hombre. Estaba acostado en mi cama, pero ya era de día antes de darme cuenta"

"¡Konny!"

gritó Lara en medio de la divagación de Konny, haciéndola levantar la cabeza sorprendida.

"¿Tienes ese tipo de relación con Valentine sin que yo lo sepa?"

"¿Perdón?"

"¿Están ustedes...?"

"¿Eh?"

Konny miró a Lara con los ojos redondos muy abiertos y pronto gritó más fuerte que ella.

"¡No es así!"

"Konny, está bien. Lo entiendo"

"¡No está bien! ¡Valentine estaba en su habitación y yo en la mía! ¡Todo lo que hicimos fue hablar toda la noche! ¿Por qué su mente es tan poco saludable, milady?"

Porque sus palabras fueron engañosas.

Mientras murmuraba, Lara levantó una ceja y le preguntó a Konny.

"Tu habitación está en el edificio principal y la de Valentine está en el edificio anexo... ¿Cómo podéis hablar toda la noche?"

"Oh, sobre eso. Valentine me hizo un receptor mágico"

"¿Eh?"

"Los hechiceros negros viven escondidos entre ellos. Así que crearon receptores que permiten a los usuarios hablar entre sí incluso desde lejos. Parece una lámpara. Pero en su interior..."

Lara abrió la boca y se quedó mirando a Konny. Su criada no parecía tener ni idea de la gran experiencia que acababa de vivir.

"¡Sé que es fascinante, pero también tendrías que haberle visto presumir! Qué arrogante es ese chico que solía agacharse todos los días"

Se merece ser arrogante.

Si Valentine pudiera hacer un receptor mágico de larga distancia, significaría que la gente podría hablar con alguien de lejos sin necesidad de usar una lámpara de reliquias y un hechicero. 

∘₊✧──────✧₊∘

Con una mirada asustada, Valentín había sido llamado al salón. Desde que el amo que lo maltrataba desde joven era una mujer, Valentine tenía la costumbre de agachar los hombros y andar poco a poco con pies de plomo cada vez que veía a una mujer.

Eso también se aplicaba a Lara. En cuanto Valentine vio a Lara sentada en aquel sofá del salón, tragó saliva visiblemente y en voz alta. Luego, como un erizo con sus espinas sobresalientes, entró en la habitación sin dejar de desconfiar de ella.

"Estás bien con Konny. ¿Por qué yo no?"

Cuando Lara murmuró su descontento, Konny dijo con una cara como si le preguntara por qué preguntaba algo tan obvio.

"Porque te ves asustada, milady"

"Konny"

"Aun así, es un alivio. Ya no se escapa"

Cuando Valentine fue traído por primera vez a la mansión, solía evitar a Lara e Isadora incluso de lejos. Por lo tanto, se podría decir que fue un gran desarrollo para él poder sentarse cara a cara con Lara.

Para que Valentine no se sintiera incómodo, Lara no alargó mucho la conversación. Enseguida sacó el tema.

"Haz uno para mí también"

"¿Hacer qué?"

"Un receptor mágico de larga distancia"

Valentine miró a Konny con resentimiento. Konny giró tranquilamente la cabeza y empujó suavemente el postre delante de él.

"No puedo"

"¿Por qué?"

"Cuesta mucho dinero"

Valentine empezó a tartamudear sobre los principios del receptor mágico de larga distancia  ─lámpara mágica─ que había hecho para Konny.

"Antiguamente, había muchos hechiceros elementales, así que ponían magia en las lámparas y les lanzaban hechizos... Pero ahora todos esos hechiceros han desaparecido. Entonces... la alquimia es, quiero decir, después de dibujar un plano mágico en una gema dura y procesarlo... usando la refracción de la luz"

"Espera un momento"

No entiendo nada de lo que estaba diciendo.

 Lara cortó a Valentine en medio de sus palabras y le preguntó directamente.

"¿Qué necesitas?"

"Un diamante"

"¿Sólo eso?"

"¿A qué distancia está la persona con la que vas a hablar?"

"Muy lejos"

"Entonces tiene que ser muy grande. Realmente muy grande"

"¿Tiene que ser un diamante?"

Valentine asintió. Dijo que el receptor que había hecho para Konny no estaba hecho de joyas duras como los diamantes, por lo que se rompería después de usarlo sólo una o dos veces. Valentine murmuró en voz baja después de eso, explicando por qué debía ser un diamante. Pero Lara no pudo entender ni la mitad de lo que dijo.

"Así que, en conclusión, debe ser un diamante. Y cuanto más grande sea, mejor".

"Sí"

"Bien. Te lo conseguiré. Por favor, haz uno para mí"

Lara estaba confiada. Su madre era la Isadora de los Mil Oros. Conseguir unas joyas así era pan comido para ella.

Cuando Lara se puso de pie para salir, Konny rápidamente golpeó el costado de Valentine.

"¡Valentine, Valentine!"

"¿Eh?"

Valentine se agachó con cara de desconcierto y puso sus orejas alrededor de la boca de Konny. Entonces, Konny le susurró alegremente.

"Pídele que te abra una tienda"

"¿Eh?"

"Dijiste que querías hacer negocios"

"Oh"

Valentine levantó la cabeza. Lara escuchó todo pero fingió no oírlo y le preguntó con naturalidad.

"Dime si hay algo que quieras. Si es algo que puedo hacer, te lo concederé"

"Bueno, entonces... una tienda"

"¿Eh?"

"Por favor, abre una tienda para mí. Una pequeña tienda es suficiente. Una pequeña tienda para vender afrodisíacos... quiero decir, bebidas vigorizantes y demás. Si es posible, me gustaría que el local estuviera en una calle frecuentada por los nobles, y que tuviera personal de confianza, y..."

Iba a ser una tienda de venta de cosas sencillas pero no tan sencillas.

Lara asintió con gusto. 

∘₊✧──────✧₊∘

Isadora ya ni siquiera se sorprendió. Después de todo, Lara siempre dice algo impactante cada vez que viene a visitarla.

"Vale... esto es mejor que cuando me dijiste que eras la santa"

"¿Perdón?"

"Diamantes. ¿Cuántos grandes tengo que conseguir?"

"Cuanto más grandes mejor, cuanto más mejor"

Si Valentine hacía varios receptores mágicos de larga distancia, le vendría bien para la visita de Lara al Imperio en breve. Isadora reflexionó por un momento. Se escuchó el sonido de su dedo golpeando el escritorio.  

Lara miró a su madre con una expresión ligeramente nerviosa. Pensó que, como esto era diferente a cuando pedía dinero de bolsillo, podría ser rechazada. Pero en cambio, Isadora dijo algo al azar.

"Necesito comprar una mina"

"¿Perdón?"

"Estaba preocupada por esto debido al alto precio de las piedras preciosas. Pero como esto resulta ser bueno, puedo comprar una mina de diamantes"

Lara sólo pidió diamantes, pero su madre compró una mina de diamantes.

"Sebastián"

Isadora llamó en voz alta a su secretario, Sebastián. Entonces, con su ayuda, mientras buscaba la mina perfecta para comprar, Isadora envió a alguien a la subasta de joyas para conseguir tantos diamantes como Lara necesitaba.

Lara dio las gracias a su madre por haber conseguido dos diamantes del tamaño del puño de un bebé e inmediatamente se los llevó a Valentín. Éste le dijo con la cara pálida que el diamante no tenía que ser tan grande e inmediatamente se encerró en su habitación.

Mientras Valentine hacía los receptores de larga distancia, Lara buscó registros de Dios con Demian. En la familia real, el Rey enfurecido dio sus órdenes. Cientos de soldados corrieron hacia el oeste para perseguir la desaparición del Príncipe Sidhar.

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