Cómo domar a mi bestial esposo SS9

Cómo domar a mi bestial esposo SS9

Domingo, 13 de Junio del 2021



Cómo domar a mi bestial esposo  SS9

Una Hermosa Niña de Ojos Azules

Traducción coreano al español : Asure

"¿Señor?"


En ese entonces. Lisha, empapada de sudor, se quitó los guantes y se acercó a Rafael. Al principio, estaba desconcertada, sin saber por qué Rafael estaba ahí. Luego frunció el ceño al ver la perilla de la puerta media rota en su mano.


"Estaba a punto de llamarlo, pero por lo visto tiene prisa. Ahora, primero lávese las manos en la palangana. Y se pone esta bata. Los recién nacidos son muy vulnerables a la contaminación externa"


Rafael obedeció las instrucciones de Lisha como un niño asustado. Y sólo después que le empujaran la espalda, jadeando como si estuviera a punto de llorar, se acercó a la cabecera.

Finalmente, Annette, que había sido escondida por Allamand, llamó su atención. Afortunadamente, Rafael no vio el rostro pálido y con sangre que había visto en sus pesadilla. Su rostro estaba empapado de sudor, sus mejillas estaban hinchadas y la sangre goteaba entre sus labios hinchados.

Annette no parecía muerta, pero parecía muy enferma y agotada. Rafael vio que Annette se desplomaba con los ojos cerrados y la llamó con voz temblorosa.


"An.. ne.. tt... e"

"¿... Ra .. fa.. el?" 


Annette abrió los ojos, pronunciando su nombre con una voz poco quebrada. Sus hermosos ojos estaban rojos con las venas inyectadas en sangre y reventadas por los duros dolores del parto. Pero esos ojos tenían la vitalidad de un ser vivo.

En el momento en que la vio, Rafael sintió que algo se precipitaba en su corazón sin darse cuenta. 


"¡Annette...!" 


En ese momento, Rafael se arrodilló apresuradamente, se arrastró hasta el lado de Annette y le agarró la mano. Sus manos sudorosas estaban calientes, aunque delgadas. Esa temperatura corporal hizo que Rafael se sintiera absolutamente aliviado.

Se preguntó porque sus ojos estaban extrañamente calientes, entonces gruesas lágrimas cayeron por sus mejillas sin siquiera fluir. Incapaz de decir nada, como si algo grande se hubiera atascado en su garganta, Rafael se limitó a agarrar la mano de Annette y a llorar.

Annette abrió los ojos avergonzada ante el llanto de su esposo, al que estaba viendo por primera vez en su vida. Rafael era un hombre que prefería morderse la lengua antes que llorar delante de los demás. Entonces, cuando contorsionaba su rostro áspero como un niño cuando llora, era tan afectuoso y cariñoso que no podía evitar reir.


"¿Por qué lloras, Rafael? ¿Estabas muy preocupado?"


Cuando Annette preguntó con una leve sonrisa, el llanto de Rafael creció aún más. La ansiedad y el miedo que Annette se había tragado durante varios meses hasta dar a luz se convirtieron en lágrimas. El terraplén de emociones que estalló tras aguantar hasta el límite se desbordó literalmente.

Allamand, que de repente fue testigo de las lágrimas de Rafael, puso literalmente una enorme expresión en su rostro. Se quedó mirando a Rafael con una mirada que parecía que estaba mirando de manera extraña. Pero era extrañamente desgarrador ver a su hija agarrando su mano y viéndola sollozar de esa manera.

Si se hubiera divorciado, sería un desastre.

Allamand recordó un comentario que le había hecho a Annette para preparar el divorcio. Y también recordaba la cara de Annette, que tenía una expresión decidida en su rostro diciendo que tenía que proteger a Rafael.

Se dice que los niños crecen sólo cuando se les deja ir Pensando en ello ahora, su hija menor, que siempre fue como una niña, debe haber crecido hasta convertirse en una adulta desde entonces. Allamand, lamiéndose la lengua, dio la espalda a Rafael, que seguía llorando y a Annette, que le miraba con cariño.


"Oh, Dios mío"


Justo en ese momento, Lisha estaba de pie detrás de ella, sosteniendo a su bebé recién nacido. Arrugó la cara al encontrar a Rafael llorando a borbotones. Vio una cara que no veía en su amo, comparado a la expresión habitual de siempre. Al ver lo mismo, Allamand sintió una sensación de camaradería desconocida para él. Lisha estaba a punto de mostrar el bebé a la madre y a su marido, lo sostenía envuelto en una manta. De repente, Allamand se sintió emocionado por su primer nieto.


"Ejmm" 

"Ah, sí"


El carraspeo de Allamand pretendía literalmente que le muestre la cara del bebé. Nunca se le quiso dar a él. Allamand nunca abrazó ni siquiera a sus propios hijos Arjen y Annette cuando eran bebés. Para un gran aristócrata con decenas de niñeras y criadas, eso era natural.

Sin embargo, Lisha, que acababa de convertirse en médico, desconocía este hecho. Sin pensarlo dos veces, entregó el bebé a su abuelo materno, Allamand.


"Apoye su cabeza y abráselo para que tu cuello no se doble. Nunca toque la cara del bebé si no se a lavado las manos"


Allamand, que de repente tenía que sostener al bebé, se puso rígido. Confundido, endureció su rostro y miró la cara del niño.

Está rojo y arrugado. Es extraño.

Los sentimientos de Allamand al ver a su primer nieto eran extremadamente realistas. El recién nacido se apretaba de un lado a otro en el estrecho espacio y tenía una cara y una cabeza extrañas. Además, el líquido amniótico todavía lo cubría, por lo que no permitía mostrar bien los rasgos. Así que para la primera persona que viera a un recién nacido, era inevitable que tuviera un aspecto feo.

Allamand chasqueó la lengua con una sensación de incomodidad. El rostro del niño envuelto en la manta era muy pequeño. Aunque era una cara sin nada que ver, el peso de su pequeño cuerpo era tan ligero que lo sentía un poco extraño. A Allamand no le gustaba la sensación de estar inmerso en la emoción por nada, así que le preguntó a Lisha con un escalofrío.


"¿Es un chico?"

"No, es una nieta bonita"


Ante las palabras de Lisha, Allamand chasqueó la lengua una vez más. Entonces, la niña que había cerrado los ojos y se retorcía consiguió abrir los ojos y miró a Allamand a través de sus párpados hinchados.

Los ojos del bebé eran de un color azul celeste muy pálido. Aunque el color y la forma aún no estaban claros, era el ojo más puro que Allamand nunca había visto También era un color que recordaba al de los ojos de su esposa muerta.

Al ver esos ojos, no salió ningún mal sonido de su boca. Esto sí que era un acto impropio de Allamand. Sin darse cuenta, entrecerró los ojos y miró fijamente el rostro de su primera nieta. Viéndola así, pensaba que era muy linda.


"¿Bebé, mi bebé...?"


Justo entonces, oyó a Annette buscando a la bebé por detrás. Después de que logró calmar a Rafael del llanto, parece que pensó en el bebé muy tarde.

Allamand, que volvió en sí de repente, apartó rápidamente la vista de la cara del bebé. Y fingiendo no estar interesado, le entregó el bebé a Lisha. Entonces, Lisha la miró y sostuvo a la niña y luego se acercó a Rafael y Annette.


"Es una hija preciosa, señora, amo. Enhorabuena"


Annette, con el bebé en brazos, sonrió feliz. Estaba empapada de sudor y el pelo se le pegaba a la cara, estaba terriblemente demacrada. Pero al mirar al bebé, su rostro sonriente era literalmente deslumbrante.

Rafael miraba el rostro de su esposa como si estuviera poseída, con los ojos todavía llorando. De alguna manera, se le pasó por la cabeza que nunca olvidaría este momento.

En ese momento, Annette, que sintió su mirada, preguntó, mostrando la cara del bebé.


"¿Cómo está nuestra hija? Es bonita, ¿verdad?"


Fue entonces cuando Rafael conoció a su hija por primera vez. Sus ojos azules bien abiertos escudriñaron el rostro del bebé como si estuvieran grabados.

Annette y él se amaban y tuvieron su primera hija. La sensación de mirar a la niña era indescriptiblemente especial. Era como si el tiempo se hubiera detenido y su corazón se conmovió como si un milagro hubiera ocurrido de repente en su vida.

La cara de Rafael, que llevaba un rato mirando al bebé sin poder respirar, se distorsionó de nuevo. Sabía que era patético, pero no podía controlar sus emociones desbordadas.

La punta de su nariz estaba roja y sus afilados ojos estaban mojados por las lágrimas. Annette lo vio y se rió a carcajadas y abrazó a Rafael con el otro brazo.


"¿Por qué lloras otra vez como un tonto en un día tan bueno?"


Rafael enterró la cara en el pequeño hombro de su mujer. Y aunque le temblaba la voz, consiguió murmurar. Los ojos de Annette, que había estado escuchando la voz de su esposo, también se pusieron un poco rojos al mismo tiempo.


"Gracias, idiota*. Por eso te dije que todo iría bien. Tanto mi hija como yo estamos sanas. Todo es gracias al amuleto que has salvado"


Nota Asure: * No está mal, le llamó idiota a Rafael ... creo que es la primera y la única vez que le dice eso a Rafita
Annette, que se había enjugado las lágrimas, sonrió mientras señalaba con la barbilla el amuleto que colgaba junto a la cama. Mientras sufría el parto, el amuleto brillaba con un suave resplandor desde su cabecera. Y cada vez que lo hacía, sentía como si el dolor del parto fuera mucho menor.

Bueno, tal vez sea por el estado de ánimo.

En cualquier caso, se alegró de que todo haya salido bien. Finalmente aliviado, Rafael le sonrió con la cara húmeda. Tanto Annette como Rafael estaban llenos de lágrimas y de risas por culpa de esta linda criatura. 

Una sonrisa pasó por los labios de Allamand mientras observaba la escena desde atrás. La verdadera paternidad comienza ahora, pero estará bien. Porque la hija y el yerno tenían un afecto claramente visible.

Allamand consiguió apartar la mirada de su primer nieto. Y poco a poco volvió a girar.

Como el nacimiento se produjo antes de lo previsto, Arjen y Claire, que se encontraban en un imperio lejano, seguían de camino. Pero ellos también llegarán en unos días para ayudar en esta tumultuosa celebración. 

Entonces toda la familia se reunirá en un solo lugar. Como el viento de aquel día que Annette de su vida anterior había esperado y añorado tanto.

El tiempo de las lágrimas y el dolor había pasado y ahora sólo quedaban las cosas felices


Cómo domar a mi bestial esposo - Historia Secundaria (Completa) 

Nota Asure: Nueve de Nueve, 
Espero les haya gustado, como les prometí, hoy iba a terminar la novela, en lo personal muy entretenida la novela, creo que tiene para más y si es posible, me gustaría que la autora haga una historia de Railin porque se lo merece.
Bueno una novela más terminada y queda el siguiente proyecto como les dije en Telegram: La Duquesa y el diablo .... descansaré al menos una semana para empezar la nueva novela

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