Hombres del Harén 550
Nuestro plan
'¡Mi Jenga-Girgol, a la que había tratado con sumo cuidado, se desplomó por algo tan absurdo!'
Latil gritó para sus adentros.
'Anya Domis, ¡¿qué has hecho?! Si hubieras observado durante los últimos 500 años, ¡deberías saber lo torcida que está la cabeza de ese tipo! Por no hablar de que entonces eran aliados'
El impulso de golpear la cabeza de Anya Domis surgió dentro de Latil.
Hacía unos instantes, estaban enzarzados en un duelo de espadas, pero ahora, un odio profundamente arraigado hacía que Latil contemplara la posibilidad de apuñalarle la cabeza.
Sin embargo, el acto ya estaba hecho, Girgol se había transformado en su humor más villano. Latil miró a Anya Domis, preguntándose si era su plan hacer a Girgol así.
'Parece que no'
Viendo que Anya Domis también escudriñaba a Girgol en shock, se hizo se hizo evidente que esto estaba más allá de su alcance previsto.
Con incertidumbre sobre cómo se desarrollaría la situación con Jenga-Girgol, Latil alternó entre observar a Anya Domis y a Girgol.
La tensión flotaba en el aire. Girgol desprendía un aura amenazadora, pero aún no había entrado en acción. Anya Domis permaneció alerta, vigilando de cerca a Girgol.
[¿Por qué está tan agitado?]
Latil percibió claramente a través de sus pensamientos internos que Anya Domis no había esperado esta reacción de Girgol.
[¿Fui engañada por el Gran Maestro?]
'¿El Gran Maestro?'
Latil frunció el ceño ante la repentina aparición del Gran Maestro en los pensamientos de Anya Domis.
'¿Por qué esta repentina mención de ese hombre?'
Los pensamientos internos de Anya Domis aclararon rápidamente el misterio.
[Aunque no era tan poderosa como la Gran Espada del Adversario, se suponía que era una espada casi comparable. Se decía que incluso un Lord podía ser desafiado con ella. No hubo mención de provocar a Girgol]
¿El Gran Maestro proporcionó esa espada? No, más importante aún, ¿Por qué Girgol reacciona así ante la espada que contiene el alma del primer Adversario?'
Siendo el primer Caballero, Girgol debe estar familiarizado con el primer Adversario. ¿Podría haber una conexión entre que se convirtiera en el mentor de los Adversarios a pesar de ser un Caballero?
El aire frío de la superficie hacía más audibles las perturbaciones en el aire.
Mientras se entremezclaban sonidos de aleteos, gritos de pájaros, maldiciones de Klein y gemidos del grifo, Latil miró hacia arriba.
El grifo esquivó hábilmente a los Retchers Oscuros que lo rodeaban, realizando acrobacias en el aire que hicieron que Klein se aferrara precariamente, agarrándose con fuerza las plumas. Parecía que se le escapaban maldiciones durante este proceso.
Sonnaught hizo todo lo que pudo para defenderse de los Retchers Oscuros que pululaban por el grifo como un enjambre de hormigas negras, pero con el grifo balanceando su cuerpo y el abrumador número de enemigos, parecía todo un reto.
Mientras observaba el enfrentamiento entre Girgol y Anya Domis, Latil vislumbró al brujo Cro escondido a cierta distancia.
Cro alternaba la mirada entre abajo y arriba, cuando sus ojos se encontraron con los de Latil, se distanció rápidamente.
Antes de que Cro pudiera alejarse demasiado, Latil agarró la daga que llevaba en la cadera y la lanzó. Mientras Cro tropezaba para esquivar la hoja, los Retchers Oscuros de arriba perdieron momentáneamente su caótica coordinación.
Mientras tanto, el grifo se adentró en un estrecho valle. Parecía intentar reducir a los enemigos que se acercaban aprovechando el terreno.
'Bien hecho. Esto podría darnos una oportunidad de luchar'
Sin embargo, justo cuando Latil empezaba a sentirse aliviada por la situación de arriba, un ruido sordo resonó cerca. Miró hacia abajo.
No se dio cuenta de que la lucha se había reanudado; Anya Domis y Girgol estaban intercambiando golpes a una velocidad increíble, por lo que era casi imposible de seguir, incluso con la percepción visual mejorada de Latil. Además, la Anya Domis actual parecía moverse casi instintivamente, haciendo que sus pensamientos no fueran audibles en absoluto.
'Si Anya Domis controla completamente el cuerpo de Domis, se sentiría algo así'
Observando el intenso enfrentamiento sin espacio para interferencias debido a su velocidad, Latil sacó otra daga de su cadera.
Latil no podía quedarse mirando el rápido intercambio de ataques. Después de todo, Girgol no podía matar a Anya Domis, así que si la situación continuaba, Anya Domis acabaría ganando.
A pesar del dolor en el hombro, Latil aguantó y mantuvo la mirada fija en la escena hasta que le palpitaron los globos oculares. Durante lo que le pareció una eternidad, observó sin pestañear. Cuando apareció una breve abertura, Latil lanzó la daga con todas sus fuerzas en la dirección que Anya Domis intentaba evitar.
Anya Domis, que estaba esquivando las uñas de Girgol, se percató tardíamente de la daga de Latil y giró su cuerpo hacia un lado, pero la hoja aún así hizo contacto. Aunque fue un mero roce, no un golpe directo, en ese momento, la mano de Girgol descendió con precisión sobre la garganta de Anya Domis.
Latil corrió hacia Anya Domis con la Gran Espada del Adversario en alto.
Incluso con la Gran Espada del Adversario, Latil no podía matar a ese cuerpo por sí misma, pero Ranamoon no había llegado todavía. No podía permitirse dejar escapar esta oportunidad y tenía que intervenir, tanto si funcionaba como si no.
Sin embargo, incluso con las uñas de Girgol golpeando el cuello de Anya Domis tan ferozmente que se clavaron, Anya Domis no murió y todavía podía retorcer su cuerpo. Su cuello ni siquiera parecía intacto.
El problema era el Girgol desbocado. Como si ni siquiera pudiera ver a Latil, continuó empujando a Anya Domis incluso mientras Latil se acercaba, haciendo que la espada de Latil fallara por completo a Anya Domis.
«¡Girgol! ¡Detente!»
Latil gritó con rabia, pero Girgol parecía ajeno, empujando implacablemente a Anya Domis hacia el borde del acantilado.
«¡Girgol! Esto no acabará bien!»
Latil corrió hacia ellos, gritando, pero fue inútil. Girgol no se detuvo.
Mientras tanto, Anya Domis, con todas sus fuerzas, levantó la espada y la clavó directamente en la muñeca de Girgol, que la tenía agarrada por el cuello.
Aun así, Girgol no le hizo caso y siguió empujándola hacia el borde.
Latil, cada vez más desesperada, intentó golpear a Anya Domis desde el costado, pero el continuo movimiento de Girgol dificultaba de nuevo el manejo de la espada.
«¡Girgol! Detente!»
En el momento en que Latil gritó con rabia, el Gran Maestro emergió desde abajo, decapitando rápidamente a Girgol.
Girgol consiguió apartar la espada con el pie, haciendo que la hoja del Gran Maestro se desviara, casi golpeando a Anya Domis. Sin embargo, el Gran Maestro ajustó la espada, asegurándose de que no la alcanzara.
Sin embargo, Girgol tuvo que soltar a Anya Domis en esta confrontación, marcando el comienzo de una pelea entre el Gran Maestro y Girgol.
¿Por qué ese bastardo apareció aquí de repente?
Latil maldijo para sus adentros. Además, alguien con el rostro cubierto seguía detrás del Gran Maestro. Afortunadamente, parecían abstenerse de interferir en la batalla del Gran Maestro.
Latil blandió la Gran Espada del Adversario y cargó hacia Anya Domis a pesar de sus preguntas.
En el breve instante en que recuperó las fuerzas, Anya Domis también blandió la espada que contenía el alma del primer Adversario y la blandió hacia Latil.
Simultáneamente, se desarrollaron batallas en tres direcciones distintas. Arriba, el grifo y Sonnaught se enfrentaban a los Retchers Oscuros; a un lado, se enfrentaban el Gran Maestro y Girgol, mientras que al otro, Latil luchaba contra Anya Domis.
Tanto Latil como Anya Domis estaban heridas, por lo que sus habilidades estaban más igualadas. Sin embargo, a pesar de las heridas, Anya Domis, con heridas repartidas uniformemente, tenía una ligera ventaja en el manejo de la espada sobre Latil, que no podía usar completamente un brazo.
A medida que pasaba el tiempo, incluso la mano ilesa de Latil empezó a doler. Forzar un lado para compensar la incapacidad de usar el otro le estaba pasando factura.
Inicialmente, Latil había pensado que podrían hacer frente a la situación si Girgol recuperaba sus sentidos. Sin embargo, por el momento, aunque Girgol recuperara la compostura, parecía inútil contra el Gran Maestro. La situación era calamitosa, su mano que sostenía la espada se sentía más débil.
De repente, Latil oyó un fuerte sonido de flauta desde arriba. Era la señal de Klein, lo que sólo significaba una cosa: Ranamoon había llegado.
¡Ya está aquí!
Al recibir la señal, Latil blandió la espada con todas sus fuerzas.
«El destino de eliminar a Anya Domis en esta batalla recae en Ranamoon»
Latil recordó las palabras de Tasir en la fase de planificación, pronunciadas mientras colocaba figuras en miniatura en un gran mapa.
«Ranamoon aún no es lo suficientemente fuerte como para luchar contra Anya Domis. ¿Está bien?»
«Por supuesto que no. Pero Girgol hizo hincapié en que ninguno de los Adversarios anteriores superó a los Lords en fuerza, sin embargo salieron siempre victoriosos»
«Aún así, la espada tiene que llegar hasta cierto punto»
«Así que nuestro plan depende de Ranamoon. Para ser precisos, nuestro plan es...»
Mientras Latil se esforzaba, Anya Domis parecía igualar su vigor. La velocidad y la fuerza detrás de sus golpes con la espada aumentaron. Latil se defendió de la espada de Anya Domis, retrocediendo poco a poco.
Una vez al borde del precipicio, Latil reunió fuerzas y blandió su espada hacia Anya Domis, pero sus espadas chocaron, haciendo que Latil perdiera el agarre de la espada de la Adversaria.
La espada del Adversario, que había fallado, se elevó hacia atrás formando un arco, impulsada por la fuerza del golpe de Anya Domis.
El joven que había estado observando la situación entrecerró los ojos.
Justo cuando Anya Domis se preparaba para aprovechar la oportunidad y clavar su espada en Latil, ésta torció el cuerpo hacia atrás, atrapando con ambas manos la hoja que se acercaba cerca de su corazón.
En respuesta, Anya Domis dobló el cuerpo hacia delante, pero, de repente, alguien blandió la espada del Adversario desde la posición anterior de Latil.
La espada del Adversario, tras abandonar la mano de Latil, descendió velozmente. Anya Domis, que seguía sujetando la espada que atacaba a Latil, no pudo reaccionar a tiempo.
En un instante, la espada del Adversario se clavó en su pecho.
Anya Domis se apartó de la espada que contenía el alma del primer Adversario, retrocediendo tambaleante. Sus ojos se abrieron de par en par ante la inesperada aparición de un hombre apuesto.
El hombre de pelo negro había aparecido en una revista de cotilleos como Consorte de la Emperador junto a Kallain. Era el individuo al que se asociaban frases halagadoras como 'Hijo mayor de un personaje influyente' y 'Adversario'. A pesar de ostentar el título de Adversario, nunca se le había visto en combate, lo que llevó a algunos a subestimarlo.
Anya Domis miró fijamente la Gran Espada del Adversario, que una vez fue suya, la agarró con fuerza. Intentó sacarla, pero sus manos carecían de fuerza.
«¡Lord!»
Cro gritó mientras se acercaba.
«¡Lord, Lord! ¡¿Qué debo hacer con esto?!»
Sin embargo, dudó en retirar la espada, temiendo que pudiera causar una hemorragia excesiva.
Latil observaba la escena mientras presionaba su hombro palpitante.
Ranamoon se acercó a Latil, proporcionándole apoyo para que se apoyara en él.
Latil sonrió. La voz de Tasir cuando hablaba de su plan mientras manipulaba la muñeca Ranamoon para que pareciera que volaba hacia la muñeca Anya Domis resonó vívidamente en sus oídos.
«Nuestro plan depende de lo bien que podamos mantener oculto a Ranamoon hasta el final»
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