HDH 529

Hombres del Harén 529

Carmesí cremoso

Latil iba delante de ellos hace un segundo, pero ha desaparecido en un abrir y cerrar de ojos.

Todos los demás miraron a su alrededor confundidos. No había rastro de Latil.

"¿Era una trampa?"

Intentó seguir el camino de Latil, pero no desapareció como ella.

"No pasa nada"

Ranamoon miró hacia delante. Girgol intentó pasar junto a él, pero Ranamoon le agarró del abrigo y lo retuvo.

"¿Qué estás haciendo?"

preguntó Ranamoon, aferrándose al abrigo de Girgol.

Girgol frunció el ceño.

"Podría preguntarte lo mismo, Número Uno. ¿Qué te hace pensar que puedes agarrar mi abrigo?"

¿Hablaba en serio? Ranamoon miró a Girgol y miró a Gesta y al panda rojo, que estaban a punto de irse en distintas direcciones.

Los tres iban a dispersarse en cuanto Latil se hubiera ido. Ninguno iba en la misma dirección.

Ranamoon no podía creer que Girgol estuviera más molesto por su abrigo.

"Tenemos que permanecer juntos. Podría pasar cualquier cosa. Alguien más podría desaparecer mientras buscamos a la Emperador"

Estaba seguro de que era obvio, pero amablemente le explicó a Girgol por qué agarró su abrigo.

"Preocúpate por ti, Número Uno. Eres el único humano aquí"

respondió Girgol secamente.

Ranamoon frunció el ceño. Tenían cosas más importantes en las que centrarse. Gesta también frunció el ceño.

"Yo también soy humano...".

"Sí, estoy seguro de que un alma muerta también fue humana alguna vez"

respondió Girgol con voz dulce.

"¿Estás diciendo eso de ti mismo...?".

"Hacerte el tonto no te hará humano, Sombrío Gesta"

"Soy un humano normal. No me afectan los poderes divinos... Obviamente estás celoso de mí, Sir Girgol..."

"¿Hay algo de ti de lo que deba estar celoso?"

Gesta y Girgol seguían discutiendo, Ranamoon sabía que no iban a parar pronto. Tuvo que intervenir y detenerlos.

"Es suficiente. Necesitamos encontrar a la Emperador primero"

Pero Ranamoon sabía que Girgol no iba a escucharlo, así que le hizo una pregunta para distraerlo.

"Pensé que estabas vivo cuando este calabozo fue construido. ¿Alguna suposición sobre este lugar?"

"No estaríamos en esta situación si tuviera alguna suposición, Número Uno"

Ranamoon no estaba decepcionado por la respuesta de Girgol. De todos modos no había esperado nada del vampiro. Su objetivo era detener la discusión de Gesta y Girgol, lo logró. Eso era todo.

Una vez que la atención de todos estaba en él, Ranamoon señaló el camino por delante de ellos con la barbilla.

"Permaneceremos juntos. Seguiremos caminando de frente"

Afortunadamente, los demás siguieron la indicación de Ranamoon sin rechistar. Siguieron adelante sin perder a nadie hasta que llegaron a una puerta de piedra con escritura antigua grabada en ella.

"¿Está bloqueado el camino?"

murmuró el panda rojo.

La puerta les bloqueaba el camino y no podían pasar de ella. El panda rojo caminó hacia la puerta y la inspeccionó. Retrocedió unos minutos y chasqueó la lengua.

"Esta cueva podría derrumbarse si la rompemos para pasar"

"¿Deberíamos tomar otro camino...?"

Ranamoon negó con la cabeza.

"Podría llevar más tiempo. Y también podría haber puertas de piedra en otros caminos. Esto es una puerta, así que debe significar que hay una forma de atravesarla"

El panda rojo escrutó la puerta más de cerca. Luego, golpeó frenéticamente la pantorrilla de Gesta con su ala de gárgola.

"Gesta. Gesta, mira"

Gesta miró hacia abajo y el panda rojo señaló la inscripción de la puerta.

"Gesta, ¿no es un lenguaje antiguo? ¿Qué dice?"

Ranamoon miró a Gesta. Recordó que Gesta era capaz de leer lenguas antiguas. Gesta escaneó la escritura de la puerta.

"Dice la sangre del Adversario"

"¿La sangre del Adversario?"

"Sí..."

Ranamoon frunció las cejas.

"¿Qué significa eso? ¿Significa que tengo que untar la puerta con mi sangre? ¿Cuánta?"

"Cuanta más mejor, supongo..."

El panda rojo parecía aturdido. No estaba seguro de lo que significaba el mensaje.

Todos guardaron silencio durante unos minutos. Pero entonces, Girgol se adelantó y releyó lo escrito.

"No dice nada sobre la sangre del Adversario, Número Uno. Sólo dice 'confía'"

"¿Estás seguro?"

Ranamoon lo miró, Girgol se encogió de hombros como si no le importara lo que pensara Ranamoon.

Ranamoon frunció el ceño y se giró hacia Gesta. Pero Gesta se tapó la boca con la mano y pareció avergonzado.

"Lo siento... Debo de haberlo interpretado mal..."

La tímida expresión de Gesta bastaba para engañar a cualquiera diciéndole que sólo se trataba de un error honesto, pero Ranamoon no podía fiarse de él. Ranamoon no estaba familiarizado con el lenguaje antiguo, pero "sangre del Adversario" definitivamente tenía más letras que "confía"

Pero Gesta ni pestañeó. Sólo parecía avergonzado.

La inocente pretensión de Gesta era exasperante, pero Ranamoon sabía que no podía malgastar su energía en eso ahora. Tenía que resolver el problema que tenía entre manos.

"¿Qué crees que significa? ¿Confía? Debe ser algún tipo de código. ¿A Domis le gustaba hablar en acertijos?"

Murmuró Ranamoon.

"Más bien tenía una relación de amor-odio con la confianza. Tenía falsas esperanzas, pero no creía en ella"

"¿Significa que debemos mostrar nuestra confianza? ¿Pero cómo?"

"¿Y si montamos una obra de teatro?"

"¿Una obra?"

"Una obra que muestre confianza"

Todos parecían inseguros sobre la idea de Girgol.

"Al menos haz que tu idea tenga sentido. Ni siquiera puedo fingir que estoy de acuerdo con ella"

despreció fríamente el panda rojo.

"De acuerdo. ¿Alguna otra idea?"

preguntó Girgol, abriendo los brazos de par en par como si aceptara sugerencias.

Pero nadie tenía una respuesta diferente. Tras una breve pausa, Gesta tomó la palabra.

"No creo que necesitemos montar una obra sobre la confianza... Si eso es lo que tenemos que hacer, aquí debe haber algún tipo de mecanismo que detecte nuestro movimiento, pero aquí no hay nada..."

Era la forma que tenía Gesta de rechazar la disparatada idea de Girgol, pero a Ranamoon le dio una idea diferente.

"Podría haber un mecanismo en algún lugar para poner a prueba nuestra confianza"

"¿Poner a prueba nuestra confianza?"

"¿Y si hay un mecanismo que sólo nos deja pasar si cooperamos?"

Girgol miró a su alrededor y rápidamente encontró una roca encajada junto a la puerta de piedra. No se parecía a las otras rocas.

"¿Es esta?"

Presionó la roca sin esperar respuesta. La puerta se abrió. Con un silbido, la puerta de piedra se deslizó a un lado para revelar el camino detrás de ella.

"Guau"

Girgol pareció impresionado y retiró la mano. Pero en cuanto lo hizo, la puerta volvió a cerrarse con un ruido sordo. Girgol repitió la presión sobre la roca varias veces y sonrió.

"Creo que alguien tiene que seguir presionando sobre esto mientras otra persona pasa"

"Una puerta que sólo nos deja pasar si confiamos nuestras vidas a otra persona... No podremos pasarla a menos que confiemos de verdad en nuestros compañeros"

murmuró el panda rojo.

Quedar atrapados en la puerta de piedra significaría ser aplastados como una mosca bajo un libro.

"Esto es complicado"

suspiró Ranamoon con el ceño fruncido.

"¿Estás diciendo que no puedes confiar en nosotros, Adversario?"

"Sí. Pero lo más importante es que la última persona no podrá pasar"

Girgol levantó las cejas. No había pensado tan lejos.

"¿Eso significa que tenemos que dejar a una persona atrás?"

murmuró, ladeando la cabeza.

"Yo voy a pasar. He venido aquí a entrenar"

dijo Ranamoon con determinación.

Gesta volvió a levantar el panda rojo para ocultar su boca.

"Lo que también significa que usted es el menos útil, señor Ranamoon ..."

Ranamoon fulminó a Gesta con la mirada. Había estado sacando de quicio a Ranamoon desde el momento en que malinterpretó el lenguaje antiguo mientras fingía ser tímido.

Ranamoon quería decirle a Gesta que él era el inútil y que debía quedarse atrás. Pero era innegable que Gesta tenía la habilidad más útil de todos los presentes.

Se desató una guerra silenciosa entre Gesta y Ranamoon, pero el panda rojo interrumpió con un suspiro exasperado.

"Deja de mirarse así. Gesta puede pasar primero y luego volver aquí para pulsar el botón. Todos pueden pasar por la puerta así. Y Gesta puede pasar por la puerta él solo, así que todo sale bien. O podría llevarnos a todos más allá de la puerta a través de su guarida de zorro"

Girgol se echó a reír.

"Los dos Consortes de mi Aprendiz son más tontos que un mapache"

La idea del panda rojo era la mejor que tenían. Así pues, Ranamoon pulsó el botón mientras Gesta atravesaba primero la puerta y memorizaba el camino al otro lado de la misma.

Luego, regresó al grupo a través de su cueva de zorro a modo de prueba. Funcionó. Gesta asintió.

"Memoricé el camino... Pero no podré llevar a todos a través... El camino se estrecha rápidamente más adentro, sólo es lo suficientemente ancho para una persona..."

Gesta se acercó al botón y puso la mano sobre él.

"Vamos... Mantendré mi mano en el botón..."

Pero nadie se movió. Ni siquiera el panda rojo al que se le había ocurrido la idea. Gesta levantó las cejas.

"¿Por qué nadie pasa...? ¿No confías en mí...?"

***

Mientras los tres Consortes y el panda rojo estaban atascados en la puerta de la confianza porque no podían confiar en Gesta, Latil se abría paso por la mazmorra.

Refunfuñaba para sí misma, sin saber que era la única que se había apartado del grupo.

"En serio. Todos fingen ser listos, pero siempre se les escapa algo"

Las preocupaciones llenaron la cabeza de Latil. ¿Y si los demás habían caído en una trampa? ¿Y si el enemigo había tendido una trampa para deshacerse del grupo de Latil uno a uno?

Latil caminó más rápido. No podía perder a Ranamoon y al panda rojo aquí. Ella estaba aquí para salvar a Klein.

'No necesito preocuparme por Gesta. Escapará por la guarida del zorro. Girgol encontrará una salida también. ¿Pero por qué Domis creó este espacio por sí misma?'

Después de caminar unos minutos por el interminable sendero, Latil se detuvo. El camino frente a ella estaba bloqueado por una puerta de piedra.

Había palabras escritas en la piedra, pero Latil no podía leerlas. Decidió romperla para pasar y levantó la pierna para empezar a patearla.

Pero la segunda vez que pateó la piedra, una pequeña criatura saltó de la puerta y siseó a Latil. Era un panda rojo de pelaje rojo brillante.

"¡Humana tonta! ¿No sabes leer? ¡Aquí dice 'sabiduría'! ¡Se supone que tienes que pasar con sabiduría! No abrirte paso a patadas"

gritó la criatura.

Latil bajó la pata y se quedó mirando al panda rojo.

"¿Mapache...?"

Sabía que no era un mapache. Pero se parecía a la gárgola que había traído con ella, aunque el pelaje de este panda rojo era de un tono más brillante.

A menudo llamaba a su panda rojo Mapache en lugar de gárgola, aunque sabía que no le gustaba. Así que llamó a este panda rojo Mapache a modo de prueba. El panda rojo parecía enfurecido.

"¡Quien no pueda resolver este acertijo no podrá pasar! ¡Ordenes del Lord! ¡No pasarás, intrusa! Y no soy un mapache. Soy Carmesí Cremoso"

Latil se dio cuenta de que no era el panda rojo que había traído con ella.

De repente, el panda rojo saltó por los aires y se transformó en un hacha. Se abalanzó sobre Latil como si fuera a cortarle la cabeza.

Latil esquivó el ataque y agarró el hacha que antes era un panda rojo. Entonces, reconoció el nombre del panda rojo y se quedó paralizada.

'¿Carmesí Cremoso?'

Latil frunció el ceño. Cuando tenía una relación con Hyacinth, él le había prometido un caballo alazán. Pero regresó a Carissen antes de hacerle el regalo.

Por aquel entonces, Latil le dijo a Hyacinth que llamaría al caballo Carmesí Cremoso. Aún recordaba su conversación.

"¿No es un nombre elegante?"

"¿No te parece demasiado largo?"

Latil levantó el panda rojo y estudió a la criatura.

Su pelaje era muy rojo.

Recordó a Hyacinth preocupándose por su horrible elección de nombre. Y ahora, este panda rojo que tenía delante tenía el mismo nombre.

Podría ser... una coincidencia. Pero es extraño. Y es extraño que Domis actuara por su cuenta cuando creó esta mazmorra.

"¡Déjame ir, humana!"

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