HDH 341

Hombres del Harén 341

Después de unos días de paz

"Estoy muy decepcionado de ti"

No había ni altibajos en la voz de Ranamoon, pero Cardan sentía como si lo abofetearan con cada palabra.

"Perdón, Maestro"

Cardan juntó las manos e inclinó la cabeza profundamente.

"Perdón de verdad"

"Si dices perdón de verdad, no deberías haberlo hecho"

"...... Perdón"

"Supongo que no estabas pensando en perdón cuando lo hiciste"

"Perdón, Maestro"

Los ojos de Cardan se sonrojaron. El recorte de sueldo de Latil era un castigo punzante, pero con alojamiento y comida y todas sus necesidades cubiertas, no le importaba la dificultad inmediata.

Pero la fría mirada de Ranamoon era difícil de soportar. 

Conocía a Ranamoon desde la infancia y aún sentía que era la persona en la que más confiaba en su vida, le partía el corazón pensar que Ranamoon estaba decepcionado con él.

"Te he causado problemas"

Ranamoon se apretó las sienes y puso los ojos en blanco mirando a Cardan. Estaba decepcionado, no sólo de palabra.

No era que estuviera decepcionado porque no hubiera hermandad entre los Consortes. Es un lugar difícil para sobrevivir sin un brujo.

Pero los métodos de Cardan eran demasiado burdos. Si vas a usar trucos sucios, al menos deberías intentar que no te pillen, aquí está de nuevo.

"No importa si sus caras están en las revistas de cotilleos. Los favoritos de Su Majestad no tienen nada que ver con la popularidad de una revista de cotilleos"

"Le pido disculpas, Maestro......."

A Cardan se le cayó la cara de vergüenza. Temía ser odiado por Ranamoon y destituido de su puesto en el séquito.

Había pasado toda su vida -de hecho, toda su infancia- alineado con Ranamoon, no sabía qué haría si le separaban de él.

Pero lo bueno es que a Ranamoon le pasaba lo mismo.

"Todos cometemos errores y hacemos las cosas mal, así que no es imperdonable"

Dijo Ranamoon, sonando menos enojado que antes, Cardan lo miró expectante.

"¿Maestro......?"

"En lugar de eso, ve a Girgol y discúlpate en persona"

"!"

* * *

Apera estaba a punto de protestar, pero se detuvo al ver a un extraño joven, vestido con ropas finas pero sencillas, hablando en morisco con Girgol.

'¿Quién es?'

Apera escuchó, curiosa. Si iba a seducir a Girgol, necesitaría saber todo lo posible sobre él.

"Sir Ranamoon me ha pedido que venga a disculparme ante el propio Girgol por publicar su rostro en la revista de una forma tan grosera. Lo siento mucho. Hice algo patético por mi propia estrechez de miras"

'¿Revista? ¿Grosera?'

Mientras el joven se inclinaba ante Girgol, Apera pensó en el incidente del 'Retrato de mala calidad' de unos días antes.

'Era él'

La voz de Girgol era demasiado baja para ser oída. Pero a juzgar por la expresión sombría de su rostro y la palidez de la cara del joven mientras escuchaba, no parecía que tuviera una respuesta muy buena.

Por dentro, Apera estaba impresionada.

'Eres audaz y honesto, Ranamoon'

Que uno de sus subordinados admita y se disculpe en cuanto sabe que ha hecho algo mal. Una vez más, la mente de Apera recordó al apuesto hombre que había visto junto al lago aquel día.

Pero su felicidad al pensar en Ranamoon duró poco.

"He oído que aún no te dejan entrar en el invernadero"

Príncipe Willang la había llamado.

"Cuando tienes una comisión por valor de siete mil quinientos millones de quaffens, ¿no esperas que se hagan las cosas?"

Era cierto, Apera se enfadó. Pero no había nada que pudiera hacer al respecto.

"Girgol no me deja, ni a mí ni a ninguno de sus sirvientes, entrar en el invernadero, Príncipe. He intentado provocarlo deliberadamente dejando revistas de cotilleos frente al invernadero, pero es testarudo"

"¿Y si intentas colarte?"

"Otro de los criados se coló sin permiso por negocios, pero se enteró y fue reprendido de inmediato. El sirviente de Girgol"

"¡Qué desperdicio de comisión de siete mil quinientos millones de quaffens!"

replicó Apera con impotencia.

"Estamos trabajando en ello. Pero sólo el tiempo lo dirá, Príncipe"

* * *

Tras un breve alboroto de cotilleos, la paz volvió por unos días.

Latil, que había oído a Cardan disculparse ante el propio Girgol, no volvió a sacar el tema, el propio Girgol parecía haber relajado su ira.

"Fue Cardan, el criado de Ranamoon, quien vino a pedirme disculpas, me dejó un extraño dibujo de mi cara, que regaló a una revista"

Meradim se enteró del incidente más tarde, pero no pareció molestarle lo más mínimo.

"Dije que no me importaba. A los humanos sí les importan las cosas raras"

"¿Ahora lo sabes? Oí que hubo un gran alboroto en las revistas"

"No puedes leer revistas en el agua, se rompen cuando se mojan"

"Aún así. ¿No pareces molesto porque tu cara haya salido tan rara?"

"Es un papel, no mi cara"

La bravuconada de Meradim tuvo el efecto relativo de empequeñecer a Girgol, Latil se encontró riendo sin parar.

"Más que eso, Lord. He estado pensando en nuestros votos, ¿y por qué no lo hacemos por la noche?"

Sus siguientes palabras volvieron a dejarla perpleja.

"¿Por qué no hacemos un pequeño recordatorio?"

"¿Recordar qué?"

"Nuestra conversación de ahora"

"Lo importante lo tengo apuntado en la cabeza con tiempo, claro"

"¿Como qué?"

"Cuando nos conocimos, Lord se refirió a sí misma como una elfa"

"Borra eso"

Aparte de eso, Tasir estaba haciendo sorprendentemente bien con el funcionamiento interno del harén.

Le trajo a Latil unos cuantos informes compilados más, no pudo evitar exclamar al mirarlos.

"¡Vaya! Eres realmente bueno en tu trabajo, Tasir"

"Trabajé un poco más de lo normal porque era el último informe de Su Majestad"

"¿No sueles trabajar tanto?"

"Suelo hacerlo mucho. Sólo escribo un poco más libremente"

"Jaja. Es una pena que te haya dejado primero, porque hagan lo que hagan después, me pedirán una comparación contigo"

"No voy a hacer una mierda de trabajo sólo para ver qué pasa después"

Latil rió a carcajadas ante la petulancia de Tasir.

"Quiero llevarte, ponerte en mi oficina y trabajar contigo, con dos escritorios"

"Me encantaría"

"A mí también me gustaría ...... pero los otros Consortes se levantarían en armas"

Tasir levantó la comisura de los labios sin hablar. Latil rodeó con los brazos el respaldo del sofá y se quedó mirando la cara de Tasir, pensativa.

Era un poco vergonzoso confiarle un trabajo tan importante cuando no sabía si llegaría a ser Esposo Oficial, luego que lo fuera otro.

Tasir no sería capaz de entregarle las riendas a esa persona. Además, como dice Tasir, quien sea el siguiente en la línea de sucesión para el puesto será desigual.

'No, no veo por qué Tasir, que es el mejor en su trabajo, elija a otra persona para ser Esposo Oficial. Quiero decir, no es que el puesto se base únicamente en la capacidad de trabajo...... pero la capacidad de trabajo es importante'

Latil parecía sumida en sus pensamientos, Tasir le sonrió, fingiendo estar archivando sus papeles.

Fue una risa espontánea, porque veía lo que pensaba Latil. Pero, al mismo tiempo, pensó para sí.

'¿Será que Su Majestad realmente sólo me ve como una persona trabajadora?'

* * *

Tras despedir a Tasir, Latil regresó a su despacho.

Cuando se sentó en su silla, el chambelán se le acercó y le habló. Sus modales eran un poco más apresurados que de costumbre.

"Majestad. Se espera la llegada de unos enviados de Milo en unos dos días"

"¿Milo?"

"Sí"

Dijo Latil sombríamente mientras destapaba el tintero.

"Los Enviados de Milo han viajado algunas veces antes"

Entonces, ¿por qué actúa como si tuviera noticias urgentes?

El chambelán respondió enseguida a la pregunta.

"He oído que esta vez Milo va a hablar de matrimonio"

"¿Hablar? ¿Con quién?"

"Eso no lo sé"

Latil pensó en sus hermanastros y hermanastras solteros y asintió.

"Lo averiguaremos cuando vengan"

Cuando un príncipe o una princesa no emparentados con el trono no pueden casarse con la gran nobleza del país, las miradas se vuelven naturalmente hacia el exterior.

Latil aún no había casado a un hermano por iniciativa propia, pero eso no era inusual, así que no había pensado mucho en ello.

Pero las palabras de los Enviados de Milo, que llegó dos días después, fueron más de lo que Latil había esperado.

"Majestad, si no le importa, nos gustaría celebrar una reunión entre Princesa Zarifolcy de Milo y Príncipe Lean"

¿Lean? Latil se quedó momentáneamente desconcertada, estuvo a punto de soltar: '¿Lean?'

Por suerte, no lo hizo, pero su expresión se endureció.

Mientras fruncía el ceño, los enviados intercambiaron entre sí miradas innecesariamente preocupadas.

El Enviado de Milo se encontró con la mirada incómoda de Latil y empezó a decir algo que Latil no había pedido.

"Majestad, los nobles suelen comprometerse antes que los plebeyos, la realeza antes que los nobles, pero Princesa Zarifolcy no se comprometió hasta muy tarde, ya que ingresó en el templo y se hizo activa en los Paladines a una edad temprana. Por eso no pudo elegir prometido, no porque hubiera algo malo en ella que le impidiera hablar con los demás. Además, con todo el tiempo que pasó en el templo, tiene un espíritu fuerte y resistente. Tanto, de hecho, que sigue siendo Jefa de Paladines"

Latil miró a los Enviados y luego le mostró el gran retrato que había traído consigo.

Mostraba a una mujer de aspecto inteligente, vestida de templaria y con un aspecto sorprendentemente enérgico.

Sin embargo, Latil no tuvo una respuesta inmediata y los despidió de vuelta al palacio de invitados, diciendo que lo pensaría.

En cuanto los Enviados se marcharon, preguntó al chambelán.

"¿Qué crees que están tramando?"

"¿Un plan?"

"Si Lean es sólo un príncipe, no sé por qué lo preguntas. ¿No está implicado ahora mismo en el caso del Falso Emperador? se rumorea que está bajo arresto domiciliario por ello"

"¿No perdonó la Emperatriz a la Ex Emperatriz y la invitó a palacio? Al menos públicamente, así que tal vez se supone que también perdonarás a Príncipe Lean"

"¿Tú crees?"

"Tal vez piensan que si no lo perdonan, no estará tan enojado como ya lo está"

El problema no era sólo que piensen de él.

El verdadero problema comenzó cuando la gente del lado de Príncipe Lean quería secretamente que se casara con la Princesa.

"En lugar de dejar que Príncipe Lean se case con la princesa, ¿qué tal si le impedimos entrar en la capital?"

Querían que Lean tuviera un poco más de libertad, aunque eso signifique no volver aquí.

Pero lo que más molestaba a Latil no era que simplemente quisieran liberarlo.

Era el asunto de Príncipe Lean y Princesa de Milo, lo que Latil había enterrado bajo el escudo de sus Consortes empezaba a burbujear de nuevo en la superficie.

"Lo más importante para un Emperador es ver un heredero, tú tienes tantos Consortes, sin embargo ni siquiera tienes un heredero"

"Los anteriores emperadores tuvieron hijos desde que eran herederos, incluso en su primer año en el trono ya tenían hijos. Si no, todos tenían nietos imperiales antes del segundo año"

"Pero nuestra Emperatriz, con todos sus Consortes, ni siquiera ha tenido un hijo en un año"

"Por supuesto, ha habido Emperadores que eran estériles y nunca vieron un hijo, pero en esos casos, ¿no adoptan a los hijos de sus hermanos y hermanas? Pero no sólo su Majestad, sino también Príncipe Lean es soltero......."

"Incluso a Príncipe Lean se le debería permitir ver a una segunda esposa, para que si no funciona, Su Majestad pueda tomar a su hijo como hijo o hija adoptiva"

Esto había estado sucediendo desde que los Enviados habían llegado de Milo, Latil finalmente se dirigió a la Médico Imperial para discutir el asunto.

"Médico Imperial ¿Qué te parece si finjo un embarazo y lo anuncio?"

"¡¿Qué?! ¿Y qué harías después?"

"Bueno, tú eres médico, lo anunciarás como te he dicho, más tarde, quizá un mes o así, dirás que he tenido un aborto espontáneo"

"¿Eso...... estaría bien?"

"Si anuncias que estoy embarazada aunque sea una vez, los diputados esperarán tranquilamente unos años de todos modos"

'Para entonces no seré un vampiro y tendré un hijo de verdad'

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