Miércoles, 19 de Mayo del 2021

Yo crie bien a la bestia cap. 60

Ceremonia de Coronación (1)

Traducción coreano al español : Asure

Todo lo que ha soñado desde que conoció a Blondina se está cumpliendo.

Quería convertirse en el jefe de los Shinsu y se convirtió en jefe. Consiguió el permiso del emperador y sólo le queda el único deseo que anhelaba y deseaba.

Shanti, tumbada perezosamente a su lado, murmuró.

「¿Te sientes bien? ¿Crees que tener poder también es algo bueno?」

Cuando Aymon abrió los ojos, lo miró fijamente y Shanti, que hablaba, cerró la boca, fingiendo no saber.

No me dejas decir nada ...

Se tragó sus palabras, quejándose, murmurando.

Mientras tanto, el discurso del emperador terminó.

"Declaro que el imperio pertenece a Aymon Akin"

Al mismo tiempo, una melodía musical alegre comenzó a llenar el espacio.

Era una señal que la fiesta estaba a punto de comenzar con el fin de la ceremonia de coronación.

Cuanto la gente comenzó a reir y charlar, Blondina salió y corrió hacia Aymon.

"¡Aymon!"

Inmediatamente se colgó de la nuca.

Aymon no podía ni imaginar su matrimonio con Blondina. Tocó sus ojos y pronto comenzó a frotar sus mejillas contra su nuca.

Mientras se frotaba las mejillas como si estuviera mimándolo y  abrazaba la cabeza de Aymon, Blondina dijo felizmente

"¡Felicidades, jefe!"

「... Huh」

Aymon emitió un débil sonido como respuesta.

Siempre confiado y elegante, incluso frente a Blondina, a veces se convertía en un gatito.

Chirp. chirp

Un gorrión, que había estado cantando en un árbol, saltó.

El gorrión bajó, batiendo sus alas y escarbó al azar entre Blondina y Aymon.

[¿Ha terminado el evento? ¿Eh? Ahora Aymon, ¿te has convertido en la verdadera cabeza?]

Gritó Mazetto, empujando su cabecita.

Blondina sonrió y rascó el cogote del gorrioncito con la punta de los dedos.

Este gorrioncito es el único que no será regañado por Aymon aunque se meta entre Aymon y yo.

La adorable y linda bestia voladora gritó, haciendo crujir su pico.

[¡Felicidades a Mazetto y a Aymon! ¡Por favor, protejan a Mazetto! ... no, ¡¡al imperio!!]

"¿Por qué eres un gorrión codicioso?"

Blondina sonrió tranquilamente y acarició al gorrión. Frotando el pico contra el dorso de la mano de Blondina, pió alegremente.

[¡Sí! ¡Entonces tráeme galletas ahora! ¡Con cerezas!]

Mientras tanto, los nobles gritaban con sonrisas. Fingiendo no mirar, estaban frente a Aymon. Un leopardo gigante abrazado por un humano diminuto.

"¿Es cierto el rumor de que la relación entre el jefe y la princesa es estrecha?"

"Sí. El otro día, la princesa asistió al ritual de Shinsu y parece que se hicieron amigos"

"¿Dijeron que un Shinsu fue a visitar a Su Majestad el Emperador hace algún tiempo?"

"Sí. Yo también he oído rumores. Así que todos tienen grandes expectativas, ¿verdad? Tal vez pueda ver a esos hermosos Shinsu a menudo en el Palacio Imperial"

Los nobles que hablaban giraron la cabeza y se quedaron mirando a los shinsu.

Los leopardos se veían con un aspecto majestuoso y elegante. Como si defendieran el imperio, los ojos de envidia se clavaron en ellos.

"Por cierto, son realmente hermosos. ¿Estaría bien poder verlos de cerca como la princesa...?"

"La verdad es que tengo miedo, así que no puedo ni acercarme. Estoy feliz de poder verlo desde tan lejos"

Cuando se dieron cuenta de que un clan noble y sagrado los protegían, sus corazones se llenaron de orgullo.

Sin embargo, había una persona que contemplaba con un rostro inexpresivo en un ambiente de alegría y regocijo.

Adelai sostuvo la copa y se mordió los labios. El calor llegó a su cara y su interior hirvió.

Pensó en sus acciones anteriores.

Se arrodilló ante la bestia y mostró reverencia. La gran familia real agachó la cabeza ante una gran bestia.

Además, se enfadó aún más, ya que parecía que era la única que se sentía enfadada por ese hecho.

Quería gritar en voz alta. Quería decir que esto es algo que nunca se puede permitir.

Agarró con fuerza su ropa de colores que la envolvía bien.

¡Lart, Su Majestad y todos deben haber sido poseídos por esa bestia asquerosa!

¿Acaso Su Majestad no me dio una declaración el otro día, pidiendo encontrar al Descendiente de Barahan? ¿Pero qué es lo que veo ahora?

No podía admitirlo, no quería admitirlo.

El príncipe Lart, que reía, se acercó mientras bebía alcohol presionando sus emociones.

"¿En qué estás pensando?"

Se rió de buen humor y corrió hacia la copa de Adelai con un apretón juguetón.

Adelai vació la copa.

Lart se rió a gusto, sin prestar atención al rechazo de Adelai.

"¿Es buena vista?"

"¿Qué cosa?"

"Shinsu y Blondina"

Lart señaló ligeramente a la bestia negra y a la mujer humana con la mano que sostenía la copa.

eh.

Puck. 

Adelai hizo un mohín con los labios, masticando la respuesta en su corazón.

Le resultó incómoda mantenerse en pie sólo viendo cómo alaban y admiran a Aymon. Lo mismo ocurría con su hermano menor, Lart.

No importa lo fuerte que sea la bestia, es sólo una bestia. No hay razón para que no pueda ser eliminada por el poder humano.

Incluso si el número de hombres fuera un poco menor, incluso si fueran un poco más débiles, los humanos habrían sido capaces de destruirlos con su propia fuerza.

Mientras fruncía el ceño sola y encerrada en sus pensamientos, Lart habló con una voz que ya no tenía nada risa.

"No seas tan engreída, Adelai"

"¿Qué?"

Adelai levantó la cabeza con nerviosismo.

Lart se inclinó hacia sus ojos con rostro serio.

"La relación entre la familia imperial y los Shinsu es diferente a la de antes. No importa lo que sientas hacia los Shinsu"

"..."

"Viviremos en paz con ellos. Eso es lo que voy a hacer como futuro emperador. Unir las manos con las grandes razas para la prosperidad y la estabilidad de la humanidad"

Adelai giró y escuchó a Lart.

El futuro emperador. El futuro emperador.

Mi estúpido hermano gemelo no sabe nada. ¿Qué espera Su Majestad de él y qué me ha dado Su Majestad?

Levantando inconscientemente la mano, Adelai agarró la llave de oro de su cuello.

Lart dijo.

"Así, incluso Adelai podrá relajarse un poco. Quiero decir que a partir de ahora los verás a menudo"

"¿Si no me gusta?"

Una respuesta sombría vino de Adelai. Sin embargo, Lart se encogió de hombros y siguió respondiendo con ligereza.

"Si no te gusta, no puedes evitarlo. Shinsu y los humanos pueden tener una relación muy estrecha en cualquier momento"

"¿Qué significa eso?"

Lart, con la parte superior del cuerpo hacia abajo, miró fijamente a los ojos de Adelai.

"Significa que al igual que tú intentas ganar poder teniendo conexiones con el Duque Rodson, nuestra familia real también tendrá conexiones con los Shinsu para traer la paz"

"..."

A menos que seas un estúpido idiota, no podrás entender lo que Lart quiso decir. Adelai abrió los ojos y giró la cabeza hacia Aymon y Blondina de nuevo.

Blondina, sentada sobre el cuerpo de Aymon, se vio jugando con un pequeño gorrión.

¿Qué? ¿La familia real y las bestias? Por muy baja que sea Blondina, la familia real sigue siendo la familia real. ¡¿Pero con una bestia?!

En la historia, los humanos y las bestias nunca han tenido conexiones. Nunca debería ocurrir.

Tragándose un grito imperioso, Adelai miró a Lart con ojos sorprendidos.

Lart se rió.

"Es algo que Su Majestad ha hecho. Y, Adelai... No estoy seguro cuál es la llave que tienes..."

Lart se mostró tranquilo mientras miraba la llave que colgaba en el cuello de Adela.

"Yo... no soy tan estúpido como crees. Sé que has estado haciendo algo últimamente"

"..."

"No voy a profundizar. Pero te advierto... que si intentas arruinar el futuro que sueño, no me quedaré quieto"

Los ojos de Adelai temblaron.

La amenaza en los ojos de su hermano gemelo se dirigió hacia ella

¿Es este Lart, el que siempre para con una cara sonriente?

En la mente de Adelai, Lart siempre fue tímido. Era un idiota que no llevaría nada bien con el asiento del Emperador.

Un nerd que no sabe nada de seriedad, interrumpiendo sin avisar. Ese era su hermano, Lart.

Por eso siempre ha pensado que era ella quien realmente debe dirigir bien el imperio.

¿Cuándo cambió así? 

¿Es que no pudo notarlo o se vio obligado a apartarse de la verdad?

El hermano menor que tenía delante no era el estúpido Lart que conocía. Una especie de arma de fuego se cernía sobre sus ojos. Increíblemente, había incluso una sensación de coacción.

Adelai tragó.

Lart volvió a abrir la boca.

"De todas formas ya lo he dicho ... ¿Adelai? ¿Eh?"

Y como antes, lanzó palabras con ligereza y se rió. Sólo por su actitud actual, el príncipe seguía siendo tan ligero como una pluma.

Sin embargo, sus afilados ojos, que pudo ver en un momento, penetraron profundamente en el corazón de Adelai.

Adelai volvió a apretar la llave dorada de su cuello.

La única esperanza que me quedaba para derribar la realidad era ésta.

****

El ruidoso límite del bosque Shinsu fue barrido en silencio.

Cuando todos los humanos abandonaron el lugar y todos los shinsu volvieron al bosque, sólo quedó un silencio total.

Bajo la ventana del Palacio de las Estrellas, se hundía la tranquila luz de la luna. Después de lavarse con agua caliente, Blondina estiró su cuerpo y se apoyó en su pelo negro.

Aymon se agachó bajo la ventana, luego bajó más su cuerpo para facilitar que Blondina se recostara, y luego le frotó el tobillo con la cola.

Blondina se rió al sentir las cosquillas en su piel.

"Hoy fue un día genial"

「¿Qué?」

"Simplemente. La aparición de los caballeros saliendo a la vez..."

Blondina comenzó a rememorar las ceremonias de duelo. La cola negra se enredó en sus pantorrillas.

Subía, tocando la parte posterior de sus rodillas y luego se hundía más en el vestido.

"Haces cosquillas. De todos modos, la forma en que aplastaste la espada con tu pata delantera como si fuera una ramita..."

Aymon renunció a seguir entrando cuando agarró la cola.

Aymon movió su cuerpo y lo retiró lentamente. El cuerpo de Blondina, que seguía murmurando, también se movió con naturalidad.

Cuando Blondina volvió en sí, estaba envuelta en los brazos de la bestia.

Mirando al techo, Blondina acicaló el pelaje de Aymon.

"Fue genial que tus amigos Halla y Shanti rugieran. ¿Por qué no lo haces tú?"

Aymon, con su cara en la nuca de Blondina, olió profundamente su aroma.

「Todas estas cosas las hacen los subordinados」

"Bueno... haces cosquillas, Aymon"

El aliento caliente de la bestia y su pelaje tocaron su piel. Tenía una sensación ligeramente diferente al picor, pero Blondina no pudo averiguar qué era y empujó la cabeza de Aymon.

Pero la bestia con aspecto de piedra ni siquiera se movió.

Más bien, tiró de Blondina con sus enormes patas y la enterró más cerca de él..

「¿No fue genial? ¿Eh?」

Preguntó Aymon, con una voz que se hundía como si arañara el abismo.

Nota Asure: Teóricamente estamos en la mitad de la novela (incluida las SS), así que sigan disfrutando y espero les guste

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