Wendy 152

Wendy 152

Miércoles, 07 de Abril del 2021



La Floristería de Wendy 152

No vengas al Río Buttuwat en verano (10)


Cuando el hombre supo que Wendy le tenía miedo, se apresuró a aclarar su posición.

Entonces, se abrió una puerta desde el interior. Como había ruido fuera, su mujer se asomó, junto con una niña, que la miraba con curiosidad. La niña, que vio la cara de Wendy, se sorprendió y gritó señalándola con el dedo.


"¡Es la misma hermana! ¡La hermana que me dio la comida negra!"


Era la hija del hombre, Sophie. La chica se abalanzó sobre Wendy, que no pudo huir más y la acompañó. Aunque no se soltó el pelo, Wendy creyó que no intentaría hacerle daño delante de su hija.

Cuando Sophie presentó a Wendy, su madre la recibió en la casa con una mirada agradable. Como no se le veía la espalda herida, sólo pensaron que Wendy se había metido en problemas tras caer al río. La madre de la niña le dio ropa y zapatos. No le quedaban bien, pero podía moverse con ellos sin problemas.


"Voy a secar tu ropa. Está muy mojada"

"¡Oh, no!"


La madre de la niña, que recogió el vestido que Wendy se había quitado, encontró tardíamente manchas de sangre en la ropa y el largo desgarro vertical. Asustada, comprobó el estado de Wendy.


"¡Mira tus heridas! Tengo una medicina del Centro Médico Linus, así que déjame aplicártela ya que necesitas un tratamiento urgente"


Wendy se negó, pero la mujer no se echó atrás fácilmente.


"Es sólo un pequeño corte. Tiene ese aspecto por el agua manchada de sangre"

"...¿No crees que deberías ser tratada? He oído que has mostrado compasión por mi hija, Sophie. No puedo fingir que no me importa tu herida"  dijo, negando con la cabeza.


Wendy tuvo que mostrarle la espalda. La mujer que sacó la medicina con urgencia le examinó la espalda con atención.


"... Tienes suerte. Hay algunas marcas rojas, pero creo que se curarán rápidamente"


La mujer se sintió aliviada mientras aplicaba el ungüento en la espalda de Wendy. La fruta de Bahazman ya había hecho efecto.

No le preguntó a Wendy por qué tenía las heridas. Cuando terminó de tratarlas, la mujer tranquilizó a Wendy y se fue. Un poco más tarde, la mujer regresó y la condujo al comedor, donde estaban reunidos los miembros de su familia.


"Tu cuerpo se calentará pronto"  le dijo, ofreciéndole un plato de sopa caliente.


Era una sopa mezclada con patatas. Cuando Wendy vio la comida, de repente sintió hambre.


"Vamos, segura que estás agotada porque te has caído al agua"  dijo el anciano con tristeza, empujando un frasco de sal delante de ella.

"Hermana, creo que esto sabe mejor que la comida negra"


Susurró Sophie como si le estuviera contando un secreto. Sonriendo inconscientemente, Wendy cogió la cuchara.

Cuando levantó inadvertidamente la cabeza después de comer un bocado de sopa, sus ojos se encontraron con los del hombre de mediana edad, que estaba sentado enfrente. Dudó un poco y luego dijo: 


"Bueno, fui liberado de la prisión de Bagium gracias al indulto del emperador"


Parecía que estaba incluido en la lista de indultos que el nuevo emperador anunció con motivo de su toma de posesión. Se enteró por el emperador de que su indulto incluiría a quienes cometieran delitos por razones de subsistencia, así que su liberación era comprensible en ese sentido.


"Ahora toda mi familia se queda aquí, en casa de mi padre. Estoy pensando en pescar aquí y venderlo en el mercado"


Wendy no supo por qué le contó su historia, pero comió la sopa en silencio sin preguntar. Después de vaciar un cuenco, se levantó apresuradamente y dijo: 


"Gracias por tu ayuda. Ahora tengo que irme rápidamente. Te devolveré la ropa y los zapatos dentro de unos días."


El hombre se apresuró a seguir a Wendy cuando estaba a punto de marcharse.


Cuando salió de la casa, la llamó y le dijo: "No sé qué ha pasado, pero quiero ayudar"

Ella dejó de caminar y preguntó: "...¿Por qué? No creo que tengas ninguna razón para ayudarme"

"...Me enteré por Sophie de tu existencia. Después de ver tu cara y tu ropa, me pregunté si podrías ser tú. Sophie dijo que la mujer que la ayudó era una rubia con el pelo dorado ... Después de ver la reacción de mi hija hoy, sentí que usted es la mujer que la ayudó"

"Oh, sólo le di una comida. Eso es todo"


Wendy se apartó de él y se preparó para irse de nuevo.


"La comida cambió por completo a Sophie. Después de ese día, la niña se recuperó como un milagro. Habló muchas veces de la comida negra que le diste... Y también de esa pequeña fruta roja"


Se detuvo de nuevo ante sus palabras, mirándole con expresión vigilante.


"Sophie estuvo enferma durante muchos años. Los médicos decían que era difícil curar completamente la enfermedad de mi hija. Así que lo mejor era hacerla sentir cómoda. La razón por la que intenté robar el árbol de Bahazman no fue simplemente porque quería dinero para su tratamiento. Pensé que el árbol podría curarla"


El hombre suspiró "¡Uf!" profundamente.


"No sé qué era el pequeño fruto rojo del que hablaba mi hija. Es cierto que lo he imaginado por mi cuenta, pero es sólo mi imaginación... No tengo ninguna intención de preguntarle por él"

"..."

"Porque acabas de preparar una comida para Sophie"

"..."

"Me enteré por mi esposa de la herida en tu espalda. Si estás en problemas ahora, me gustaría ayudarte de cualquier manera. Si necesitas un lugar para escapar, déjame arreglar un lugar para que te quedes"


Este hombre se mostró amable con ella por un sentimiento de culpa. Se conformaba con ver a Sophie curada, pero era cierto que en ese momento necesitaba algo de ayuda. Pensando un momento, le miró alternativamente a él y a su patio y le dijo: 


"Necesito tu ayuda en una cosa" Decidió aceptar su oferta de ayuda.


Primero tuvo que dejar de lado su odio directo hacia el duque Engre. Si estuviera consumida por el odio, perseguiría al duque y presionaría con su dedo para causarle dolor, pero era difícil siendo realista. En su lugar, decidió arruinar uno de los planes del duque. Pensó que esa sería su venganza.

Entró de nuevo en la casa con el hombre y habló un rato. El hombre, que parecía desconcertado por su explicación incluso después de preguntarle varias veces, se convenció de mala gana.


"De acuerdo, pediré ayuda a la gente de mi entorno en la medida de lo posible. Si mi padre pide ayuda, creo que mucha gente vendrá a ayudarte" Ella asintió ante sus seguridades.

"¿Cuál es el camino más rápido para ir al Palacio Imperial o a Borams desde aquí?"


Quería informarles de su supervivencia y pedir ayuda a los caballeros.

Necesitaba su ayuda desesperadamente para llevar a cabo con éxito lo que había decidido.


"... Es una distancia muy larga desde aquí. Por lo tanto, sería difícil para ti moverte sin un caballo o un carruaje"  dijo, tocando su gruesa mandíbula.

"¿Puedo tomar prestado un caballo en algún lugar de aquí?"

"Si vas al mercado de Belvo, hay unos cuantos establos cerca. A veces prestan un caballo allí, pero no sé si todavía lo hacen hoy en día. Me preocupa si vas allí solo porque Belvo está muy lejos de aquí"

"..."

"Más bien, sería más rápido si vas a Dupern. ¿Tienes familia allí?"


El hombre le habló de uno de los centros de la ciudad donde se concentraban las mansiones nobles.

Sus oídos se agudizaron ante sus palabras. Pensó que sería mejor dirigirse a Dupern que al Palacio Imperial o a Borams.

Si las tropas del duque habían asaltado el Palacio Imperial, Sir Schroder en Borams también se habría dirigido al palacio. No era prudente que fuera allí y se involucrara en la sangrienta batalla. Sería como saltar a la muerte. Sería muy difícil incluso defenderse sola en esa sangrienta batalla. Incluso antes de presionar su dedo en el suelo, habría sido decapitada.

Recordó vívidamente la batalla entre los invasores y los caballeros imperiales antes del derrumbe del palacio. No había nada que ella pudiera hacer en el fragor de la batalla de entonces.

Sólo pudo usar su dedo índice cuando todos estaban indefensos tras la explosión. Sin embargo, si el duque dirigía el ejército directamente al Palacio Imperial, ella suponía que esta vez no habría tal explosión o incendio.

Sobre todo, ella tenía total confianza en Lard. Él los detendría. Tenía que confiar en él. Así que decidió que era mucho más sabio para ella hacer lo que podía hacer aquí.


"Si voy a Dupern..."

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