Miércoles, 24 de Marzo del 2021

Solo en tu Corazón 92

Lukrov - Unos meses después (1)

Aquella noche llovía.

Si no recordaba mal, empezó a llover a primera hora de la tarde, y fue un fuerte aguacero que no cesó hasta el final del día.

Tras alojarse en una tranquila posada, Lukrov bajó lentamente a Chizuru al suelo, frente a la chimenea y empezó a quitarle con cuidado la capa húmeda que la envolvía.

La capa gris estaba empapada por la lluvia, y su esbelta y temblorosa figura quedó al descubierto una vez que se la quitó. Sus ropas y su pelo estaban mojados como si hubieran estado empapados de agua de lluvia, y brillaba delicadamente frente a la chimenea. 

"No tiembles"

Lukrov susurró suavemente al oído de Chizuru. 

El cuerpo de Chizuru se estremeció como si la hubieran acariciado.

"Hace frío..."

Sonaba nerviosa, como una niña a la que hubieran pillado haciendo algo malo y estuviera buscando una excusa.

Normalmente, habría dicho algo más reconfortante y tranquilizador. Pero a Lukrov le parecía tan bonita la timidez de Chizuru que le apetecía burlarse un poco más de ella.

"Eso no está bien, aquí hace bastante calor..."

Lukrov recorrió el pecho de Chizuru con sus labios.

Cuando sus labios, impulsados por la lujuria, llegaron a su alegre pezón, sacó la lengua para estimularlo a través de la tela.

"¡Ah! ¡Ahn... L-Lukrov...!"

Chizuru se derritió bajo su caricia inmediatamente.

Pero no había dejado de lado su último sentimiento de vergüenza, y se resistió al placer, aferrándose con fuerza a los brazos de Lukrov. Él le mordió la parte superior del pecho y le acarició el otro con los dedos. 

"¡Aah! ah...ah"

Su cabeza se inclinó hacia atrás y empezó a temblar. Lukrov continuó atacando a su amada chica aún más.

"Aquí también"  Lukrov añadió roncamente.

"¡Ah!"

Cuando soltó el agarre de sus pechos, deslizó su mano entre las piernas de Chizuru. Lukrov exploró cuidadosamente su región privada.

Los ojos de Chizuru se abrieron de par en par, sorprendida. La anticipación y la ansiedad de un acto desconocido parecían desbordarse dentro de ella. 

Un secreto y dulce aroma llenó el aire.

Mientras la sangre corría del cerebro de Lukrov a su virilidad, empezó a perder la racionalidad y sólo podía pensar en enterrarse profundamente dentro de ella y hacerse uno con ella. Se sentía como si pudiera explotar en cualquier momento.

"¡Ahhhhhhhhh!"

Cuando atacó sus pétalos con los dedos, la zona sensible y virgen se desbordó lentamente de néctar. Chizuru tembló ligeramente y finalmente dejó salir su vergüenza y gimió en voz más alta.

Lukrov tuvo que apretar los dientes para aguantar su creciente bulto.

El sudor de un hombre y de una mujer se mezcló y se convirtió en uno solo. 

Aunque uno de ellos fuera de otro mundo, sus sentimientos por el otro eran más fuertes que los de cualquiera de los que estaban en una situación normal.

Ahora, Lukrov se llevó a Chizuru y Chizuru aceptó a Lukrov por completo.

Una débil lágrima apareció en los ojos de Chizuru. Chizuru comenzó a llorar.

"¿Estás bien... conmigo...?"

Chizuru susurró con una voz triste y apagada.

Lukrov levantó ligeramente la vista, con el sudor formándose en su frente mientras respiraba repetidamente de forma acalorada y entrecortada.

¿De qué estaba hablando esta chica? Tardó algún tiempo en preguntarse eso.

Toda su sangre estaba ya concentrada en su mitad inferior, y la pregunta de Chizuru le parecía ridícula.

No era que Chizuru estuviera "bien" ....

Tenía que ser Chizuru.

Si ella lo pedía, Lukrov estaría dispuesto a suplicar con la cabeza contra el suelo.

"Te elijo a ti"

Lukrov dijo con un aliento caliente.

Siempre había creído que las palabras eran vagas, incapaces de expresar con precisión las emociones reales.

Pero ahora, ninguna palabra podía estar más cerca de la verdad.

Lukrov eligió a Chizuru.

Todo su ser pertenecía a Chizuru, la amaba y necesitaba su presencia.

La paciencia de Lukrov llegó finalmente a su límite cuando Chizuru dejó escapar un pequeño y lloroso asentimiento.

En un instante, le arrancó la ropa y le quitó la cota de malla y la ropa que llevaba puesta, dejándolos a ambos desnudos.

Las llamas de la chimenea danzaban, iluminando los cuerpos de ambos de un rojo resplandeciente.

El suelo emitió un sonido seco y chirriante mientras Lukrov se cernía sobre Chizuru. Levantó la parte superior de su cuerpo tanto como le fue posible y colocó un paño debajo para no lastimar su espalda.

Los dos se tumbaron juntos y se miraron durante un rato.

"¿Te estoy... asustando?"

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