Solo en tu Corazón 70
Hombre astuto (1)
Como si se avergonzara de sí mismo, enterró silenciosamente su cara aún más en su cuello. Antes de que ella se diera cuenta, rodeó su espalda con las manos y la abrazó con fuerza.
Algo le pasaba.
Pero se comportaba tan bien...
Lukrov, un caballero con armadura, que literalmente brilló en cien batallas, ahora quería ser mimado por Chizuru. Era como un niño pequeño de apenas un año.
Cualquier mujer estaría obligada a consentirle. No importaba la situación.
"... ¿Qué pasa?"
Sólo después de preguntar eso, Chizuru se dio cuenta de que se estaba riendo.
"Lo siento. No me estoy riendo"
Parecía confundido al escucharla reír.
"No quiero escuchar una disculpa. Explícate. ¡Dios, esta mujer! No estará satisfecha hasta que me vuelva loco, ¿verdad?"
El tono de Lukrov cambió al habitual tono tranquilo, que tenía una mezcla de masculinidad, humor agudo y profunda amabilidad.
Era como si volvieran a los viejos tiempos. Evidentemente, el muro de 14 años que los separaba se había derrumbado sin hacer ruido.
Chizuru no dudó en sonreír esta vez. Se explicó con sinceridad.
"¡Pero, Lukrov eres tan guapo!"
Lukrov frunció el ceño y levantó la cara con una expresión seria, como si se enfrentara a un complicado problema militar.
No, según su experiencia, podría ser al revés. Lukrov tendía a mostrar un rostro frío e inexpresivo cuando se enfrentaba a tales desafíos. En cualquier caso, era una expresión realmente extraña.
No pudo hacer otra cosa que reírse a carcajadas.
No era el movimiento más inteligente por su parte, ya que seguían en la cama y ella estaba atrapada entre los brazos de él. Pero no pudo contener la risa por más tiempo.
"Esta niña..."
Fue y la empujó hacia la cama en un santiamén y siguió susurrando todo tipo de palabras soeces.
"Una zorra traviesa, además, no se porta nada bien. Creo que hay que castigarla".
"¡Ah!"
"Chica traviesa... traviesa..."
Le agarró el pecho por encima de la ropa y empezó a acariciarlo con los dedos. El placer recorrió su espina dorsal como si la hubiera golpeado una corriente eléctrica. El dulce placer se extendió por todo su cuerpo, desde la cima de la cabeza hasta la punta de los pies.
Las caricias de Lukrov eran tan rápidas que casi sintió que se acercaba el clímax a pesar de que él estaba siendo tan suave.
Sus palabras también...
Aunque pudiera parecer que susurraba palabras soeces, estaban llenas de amabilidad y consuelo, como si le dijera las palabras más románticas que jamás hubiera oído. Susurrar tales palabras la ayudó a aliviar su tensión.
Elevó a Chizuru a grandes alturas en poco tiempo, pero también fue muy gentil.
"¿Qué pasa, mi hechicera?" Preguntó con un tono ronco. (Nota Asure: deduzco que saben porque la llama hechicera, no?, no creo que sean tan zanahorias para no entender :v)
Chizuru ya estaba sofocada por la ola de intenso placer que él le estaba dando. Le estaba mordiendo dulcemente el lóbulo de la oreja mientras le susurraba suavemente todo tipo de palabras burlonas con su varonil voz baja.
Después de que su pecho fuera amado y recibiera toda su atención, se volvió completamente sensible. Hasta el más mínimo movimiento de las yemas de sus dedos la volvía loca y se estremecía de placer.
"¡Ah... mmm!"
Finalmente, dando una voz de rendición, Chizuru alcanzó el clímax y dejó salir todo el éxtasis que había acumulado.
Lukrov sonrió con satisfacción y tiró de ella, que respiraba con dificultad, para darle un beso dominante y apasionado.
"¿Quieres ser una buena chica y comportarte?"
Ella sabía que si no respondía, él continuaría con sus ataques contra ella. Probablemente no la dejaría ir con la excusa de tener la regla. Así que en lugar de responder, se las arregló para asentir con la cabeza a modo de afirmación.
"Buena chica".
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