Seré la madre del guerrero 109
Traducción Coreano al Español: Asure
"¡......!"
Los ojos de Kaywhin se abrieron al instante.
"Esposa, ¿Cómo estás aquÃ.....?"
"Habla conmigo"
Yelena le agarró del brazo sin escuchar la respuesta de Kaywhin.
Kaywhin fue llevado suavemente por su débil fuerza.
Pronto, Yelena, que arrastró a su marido a la habitación donde se habÃa escondido, cerró la puerta.
¡krow!
En cuanto la puerta se cerró estrepitosamente, Yelena empujó a Kaywhin contra la pared.
Miró a la otra persona, mordiéndose ligeramente los labios.
Los ojos de Kaywhin temblaban mientras miraba fijamente a Yelena.
"...... esposa"
"¿Por qué me evitas?"
"Eso......"
"Nunca me has evitado, no pienses que es un malentendido mÃo"
Yelena apretó el puño.
Necesitaba valor.
Valor para escuchar por qué su marido la evitaba y por qué.
Su corazón latÃa, de repente se asustó y surgió el deseo de evitar esta situación.
Sin embargo, no podÃa escapar en este momento.
'Lo siento, señora. El Duque está ocupado, asà que ahora......'
El asistente del despacho miró a los ojos de Yelena y le habló.
Era la primera vez.
Su marido se negaba que lo visite.
Su marido nunca habÃa impedido que Yelena fuera al despacho, ni siquiera en los momentos en que eran como extraños.
Se excusaba diciendo que estaba ocupado con el trabajo, pero podÃa ver que no era cierto con sólo mirar la expresión vergonzosa del asistente.
'...... ¿Y si espero dentro hasta que termines tu ocupado trabajo?'
''Oh, eso...... Hoy, tal vez......''
'...... Ya veo'
Incluso en este momento, era difÃcil para Yelena expresar sus sentimientos mientras se daba la vuelta frente a su oficina.
En el pasado, cuando se enteró que su marido estaba enfermo, fue a su habitación, pero fue porque le prohibieron.
No, era una sensación de traición y conmoción mayor que aquella vez rodeó su corazón.
Estaba triste y enfadada.
Era algo vergonzoso, pero por otro lado, estaba cuestionando.
Eran tantas las emociones que no podÃa definir.
Sin embargo, incluso en medio de eso, una cosa se podÃa saber con exactitud.
'Tengo que hacer algo'
Si se queda quieta, nada se resolverá.
Lo mismo ocurrÃa en el pasado.
Yelena se subió a un árbol por la noche y cruzó el balcón del segundo piso.
Gracias a esto, pudo ver la razón por la que su marido bloqueó el acceso a su dormitorio.
'Esta vez vuelve a ser lo mismo'
Si fuera normal, habrÃa bastado con irse a dormir antes.
Yelena abrió los ojos somnolientos y se escondió en la habitación contigua a la de su marido.
Estaba preocupada por lo que podÃa hacer si lo echaba de menos mientras dormÃa, pero, afortunadamente, su oÃdo respondió con prontitud al sonido de los pasos de su marido.
Yelena respiró profundamente.
El hecho de que llevara unos dÃas evitando a su marido por un tiempo, habÃa desaparecido de la mente de Yelena.
Hasta que no escuche la razón, miró a Kaywhin con los ojos que nunca podrÃa comprometer o retirar.
"Dime. Por qué me estás evitando"
"......"
"Por la razón que sea...... quiero escuchar"
"No es culpa de mi esposa"
Kaywhin negó con la cabeza mientras miraba a Yelena de espaldas a la pared.
"Es mi problema. Asà que, mi esposa ......"
"Quiero saber cuál es el problema"
Yelena recordó de repente que ya habÃa tenido una conversación similar con su marido.
Cuando Yelena preguntó por qué no se acostaban como pareja.
Su marido se limitó a decir "es mi problema" y evitó responder durante un rato.
Al final, ¿Cuánto tiempo tardó en escuchar la respuesta?
'No'
De nuevo, no podÃa tomarse el tiempo asÃ.
Si lo hacÃa, será muy sofocante y su corazón estallará.
De alguna manera, hoy tenÃa que escuchar la respuesta.
Yelena se acercó a la puerta con una mirada de determinación.
Cerró la única entrada con su cuerpo y abrió la boca.
"No puedo salir de aquà hasta que me digas el porqué"
"Yelena"
"No desapareceré. ¿Sabes? Lo hago porque quiero"
"......"
"Ya que hablo en serio, si quieres quedarte aquà conmigo asÃ, no sigas respondiendo asÃ"
Yelena miró fijamente a Kaywhin con sus ojos encendidos.
Kaywhin abrió la boca, mirando a Yelena con cara de confusión.
"Si te quedas, tu cuerpo será abrumado"
"...... ¿Te preocupas por mà en medio de esto? Te estoy amenazando ahora mismo"
Yelena, leyendo sus preocupaciones en la voz de Kaywhin, se avergonzó por un momento.
"Si estás preocupado, dime el porqué"
"......"
"Por favor"
La palabra "Por favor" provocó la mayor agitación jamás vista en el rostro de Kaywhin.
Las miradas de ambos chocaron en el aire durante mucho tiempo.
Finalmente, los labios de Kaywhin se ablandaron.
Una voz tan pequeña que apenas se podÃa escuchar salió sólo cuando lo escuchó.
"...... No es gran cosa. Sólo porque he descubierto que soy un ser humano más patético de lo que pensaba......"
"...... ¿Patético?"
"Fue difÃcil ver la cara de mi esposa por un tiempo. Eso es todo"
"¿Qué quieres decir? ¿Por qué eres un humano patético?"
Yelena sabÃa bastante sobre humanos patéticos y podrÃa haber hecho una larga lista de ellos por sus nombres, pero por supuesto su marido no estaba incluido.
Más bien, era su marido quien no tenÃa nada que ver con esa lista.
Ese era el caso para que Yelena juzgara.
"......"
Kaywhin se detuvo un momento y abrió la boca.
Habló con fuerza, como si fuera un confesionario.
"Ni siquiera puede adivinar lo que estaba pensando"
"¿Eh?"
"Monopolizar...... pensaba que querÃa hacerlo con mi esposa"
Kaywhin recordó un tiempo en que Andy se quedó en el Castillo del Duque por un tiempo.
Incluso entonces, la existencia de Andy era molesta, sentimientos de causa desconocida brotaron dentro de su corazón.
Pero era capaz de soportarlo.
Lo reprimÃa lo suficiente sin expresarlo.
Kaywhin sólo se dio cuenta del porqué podÃa hacerlo.
En ese momento, tenÃa tiempo de sobra.
Estaba preocupado por el amigo de la infancia Andy, pero Yelena le dio prioridad a Kaywhin.
Asà que pudo ignorar y soportar las molestias que se originaban por la existencia de Andy.
Pero esta vez fue diferente.
Durante dÃas su esposa lo evitó.
Incluso después que le negara a tocar la punta de los dedos, no sabÃa, pero Kaywhin estaba en un estado muy inestable y nervioso.
y entonces...... llegó a verlo.
Su mujer hablando con un hombre que no conocÃa.
'No es nada. Vino un invitado, tú eres mi invitado, asà que no importa'
Estaba en su mente dibujar una lÃnea diciéndome que no le importe.
Sabiendo que no era lo correcto, Kaywhin siguió en secreto a su mujer y fue testigo de una conversación entre el Marqués de Morco e Yelena.
No tenÃa tan pocas sospechas que Yelena tuviera un romance secreto con un hombre ajeno a él.
No es que se diera cuenta con sólo ver el ambiente entre él y su esposa.
Sin embargo, sabiendo que no era una situación tan inmoral, Kaywhin no podÃa hacer nada contra el monopolio que llenaba su corazón en ese momento.
Monopolio.
Kaywhin no podÃa nombrar los sentimientos que sentÃa en ese momento más apropiados.
"...... Monopolio, ¿cómo? Por favor, cuéntame con más detalle"
Yelena, que de repente se alejó de la puerta y estrechó la distancia con Kaywhin, lo levantó.
Kaywhin no pudo ver sus ojos y abrió la boca con la mirada baja en un ángulo.
A raÃz de eso, no pudo averiguar qué tipo de expresión estaba haciendo Yelena.
"Ojalá sólo pudieras verme, hablar sólo conmigo y sonreÃrme sólo a mÃ...... eso pensé"
"¿Y? ¿Hay más?"
"...... También pensé que querÃa deshacerme de todos los que me molestaban"
Kaywhin se rió suavemente.
Cuando Yelena se rió del Marqués de Morco en la entrada de la puerta, Kaywhin abrazó inmediatamente un sentimiento de debilidad hacia una persona que no tenÃa rostro.
Luego, se asustó por el hecho e inmediatamente evacuó su lugar.
Kaywhin no sabÃa que habÃa una tendencia tan destructiva en él, ni que era una persona tan codiciosa.
En un momento dado, pensó que serÃa bueno que su esposa estuviera a salvo.
Pensó que no tenÃa nada más que desear si ella estaba a su lado.
En ese sentido, ahora esperaba que el afecto y el interés de su esposa fuera enteramente para él, imaginando ser su dueño.
No querÃa descubrir que era un ser humano tan codicioso.
Asà que evitó a Yelena.
Aunque terminó hablando asà cuando vino ahora.
"...... Aha"
"......"
"Pero por qué pensar de repente en eso...... Oh, me viste hablando con el Marqués. No fue una ilusión lo que me pareció verte en ese momento"
El cuerpo de Kaywhin se estremeció.
Pisó las espaldas de su esposa
No era en absoluto orgulloso.
Kaywhin permaneció en silencio con el ánimo de un pecador que espera una sentencia frente a su esposa, que era capaz de ejercer un poder omnipotente sobre él.
Entonces Yelena abrió la boca.
Nota Asure: disfruten ...
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