LAEMRE 89

LAEMRE 89

Martes, 18 de Agosto del 2021



La Emperatriz Regresa 89

Princesa Guinev (1)



Eligió un día en el que Lustian no estuviera con ella. Podía adivinar dónde podría estar atrapado Guinev, así que sólo tenía que encontrar una manera de llegar allí de alguna manera.


"Pero aquí no hay pasajes secretos, así que ¿cómo vas a salir? Ya ni siquiera puedes esconderte con maquillaje"

"Tengo que pensar en una manera"


Por orden de la emperatriz, ya no se maquilló. También dejó que el tinte se desvaneciera de su cabello, por lo que su color de pelo se estaba convirtiendo gradualmente en un marrón claro. Como ya no tenía que llevar el espeso maquillaje, se sentía menos congestionada. También se sentía más cómoda ahora que ya no tenía que llevar ropa que no le quedaba bien.


"Tampoco puedes vestirte de criada... y si te vas sin permiso, Paul será castigado de nuevo"


Rosha también se había quedado muy sorprendida al ver cómo castigaban a Paul ante sus propios ojos.


"Tengo a alguien que puede ayudarme"

"¿Quién?"

"El Gran Duque Iván"

"¿¡Qué!? ¿Gran Duque Iván?"


Viola tenía los ojos puestos en Iván desde hacía tiempo. Él había estado ayudándola en secreto. Incluso le había avisado antes de que la emperatriz se abalanzara sobre ella aquella vez. Estaba segura de que Iván tenía sus razones para ayudarla. Se había dado cuenta de ello por el extraño ambiente entre él y la emperatriz. La expresión de la emperatriz cuando miraba a Iván, la forma en que hablaba con brusquedad y el modo en que el gran duque la trataba: más que el afecto que cabría esperar entre una madre y su hijo, había una sensación más fuerte de relación militar-subordinada.

Pero, ¿por qué?

Necesitaba saber por qué la ayudaba.

Como una apuesta, Viola le pidió a Iván que se acercara a ella. Mientras lo esperaba, había estado pensando en cómo tratar con él. Necesitaba entrar en el campamento enemigo por su cuenta para averiguar los pensamientos del enemigo. Para ello, necesitaba tragarse momentáneamente sus sentimientos de odio hacia la familia imperial.

Bien... veamos qué tienes para mí.

Viola se tocó los labios con los dedos.












Unos momentos después, Iván llegó al salón.


"¡Qué sorpresa! No pensé que llegaría el día en que me harías llamar así"

"Sabías que te iba a llamar, ¿verdad?"


Sus ojos estaban llenos de curiosidad. Al mismo tiempo, una sonrisa juguetona se colgaba de sus labios. Ella pudo detectar que había algún tipo de significado diferente detrás de ese jugueteo...

Sólo por el hecho de que había engañado a la emperatriz y filtrado la información a Viola con antelación, ella podía saber que no estaba en buenos términos con la emperatriz.


"¿Me estás pidiendo que te ayude a encontrar a Guinev? ¿Pero qué puedo hacer? Ahora mismo estoy muy confundido. Si debo ayudarte o no"

"Seré sincera. ¿Por qué me ayudas? Necesito saber la razón por la que hiciste un movimiento ante la emperatriz para ayudarme a superar ese momento de peligro"

"Sí. ¿Por qué lo hice? Yo también me lo he preguntado"


Iván apoyó la barbilla en el reposabrazos del sofá y miró fijamente a Viola.

Ella esperaba que su rostro sin maquillaje atrajera la atención de los hombres. Como si no fuera diferente, Iván se quedó mirando explícitamente los labios de Viola. Odiaba la sensación de los ojos de los demás sobre ella. Era desagradable.


"Esa expresión me incomoda. Soy la esposa de tu hermano"

"Eres su esposa que también se divorciará de él pronto"

"Ja... ¿y cómo te has enterado?"

"Mi hermano ni siquiera se da cuenta porque está muy obsesionado contigo, pero cuando estoy a su lado, soy capaz de averiguar esas cosas de forma natural"

"Entonces esta conversación será un poco más fácil. No tengo intención de vivir toda mi vida en este imperio"

"¿No quedan más de 3 meses? Si ya estás pensando en irte, mi hermano sufrirá"

"Cuando desaparezca de su vista, también acabaré desapareciendo de su mente. Todo el mundo lo sabe"

"Oh, pero si nunca has amado a nadie antes, ¿Cómo lo sabes?"

"No tengo que probarlo para saberlo. En primer lugar, el concepto de amor es más bien un sueño, y por mucho que ames a alguien se te pasará rápidamente"


Al igual que su madre, que había sido tan amada por el rey de Koronis, fue abandonada en un día, ella sabía que el amor era como un viento pasajero. Habiéndose dado cuenta de esto a una edad temprana, Viola no creía en el amor.

Iván resopló de risa. Luego sonrió como si se divirtiera. 


"Entonces, ¿has encontrado tu respuesta? El lugar donde podría estar escondido Guinev. Si me dices dónde te guiaré hasta él"

"El castillo abandonado. Está allí"


La expresión de Iván cambió drásticamente. Su rostro sonriente se transformó rápidamente en uno sombrío.

Como ella había esperado, estaba en lo cierto. Viola levantó la cabeza con altivez y miró a Iván. 


"Ahora, sácame de este lugar. Y guíame hasta allí"











Con la ayuda de Iván, Viola pudo salir del Palacio de las Concubinas. A caballo, llegaron cerca del Bosque de los Dioses.

Viendo a Iván atar las riendas de su caballo a un árbol, Rosha le susurró a Viola: "¿Cómo le has persuadido?".


"También está involucrado en este juego. Aunque fuera sin querer, lo cierto es que me ha estado ayudando sin hacérselo saber a la emperatriz y al príncipe heredero"


Como era cierto que había ayudado a Viola, parecía reacio a que sus acciones llegaran a oídos de la emperatriz o del príncipe heredero. Ella se dio cuenta de que él la ayudaba así de nuevo. Y es que sólo los que estaban autorizados por los dioses podían entrar en el Bosque de los Dioses.

Le dijo a Rosha que se quedara atrás con los caballos, y sólo ellos dos se dirigieron al bosque. Incluso a plena luz del día, el bosque estaba oscuro. Allí donde la luz del sol lograba abrirse paso, las flores florecían alegremente, pero las zonas de sombra parecían muy oscuras. El aire frío se extendió por todo su cuerpo. Le preocupaba que pudieran perderse, pero para su sorpresa, este camino le resultaba muy familiar por alguna razón.

Al poco tiempo, vieron la punta del viejo castillo frente a ellos. Envuelta por el bosque, no podía ver lo que había allí, pero Iván no avanzó más.


"Hasta aquí puedo llegar"

"¿Por qué...?"

"Porque sólo pueden entrar las personas autorizadas. Como has entrado a través del muro mágico, podrías estar autorizado....."

"¿Lo sabías?" 


Viola se sorprendió.


"Sí. Ese muro fue construido con el aliento de los dioses. Tú fuiste la primera en pasarlo después de Guinev"

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