LAEMRE 83

Jueves, 05 de Agosto del 2021

La Emperatriz Regresa 83

Lo que del amor (1)

La única manera de mantener a esta mujer, que quería ser rey, era hacerla su Príncipe Consorte para que pudiera convertirse en Emperatriz. Antes de que terminara el periodo de cinco meses, tendría que convertirla en su princesa heredera. Ya había tomado la decisión de elevarla formalmente como su Princesa Heredera y mantenerla para siempre, hasta que la muerte nos separe.

Su risa falsa tenía un límite, ocultando sus pensamientos internos. Una sonrisa alegre colgaba ahora de los labios de Lustian. La idea de coronarla como su princesa en lugar de divorciarse de ella, como esperaba, hizo que su corazón se hinchara de alegría.

Pero nunca se puede saber...

Actualmente, entre los nobles del Imperio de Arpen, Viola era el tema más interesante de los chismes.

La princesa fea que recibía la atención directa del príncipe heredero, que la buscaba a diario como un loco... Un escándalo sin precedentes en la historia de todo el imperio- era lo que la gente llamaba.

Además, había otro rumor difundido en secreto: que el príncipe heredero pronto convertiría a Viola en su princesa heredera. Este rumor era la mecanización deliberada de la gente de Lustian. Hasta que el hecho de que Viola acabaría convirtiéndose en princesa heredera fuera conocido por toda la familia real y todos los nobles, él sólo la amaría a ella.

No sólo en cuerpo, sino también en su corazón.

...Oh Dioses... Has ganado...

Por primera vez, Lustian admitió su derrota ante los dioses. A diferencia de cómo había sido al principio, ya no le importaba si Viola era una prueba enviada por los Dioses o no. No quería perderla a manos de nadie.

Nunca la perderé por nadie. Nadie puede quitármela.

Poco a poco, los ojos negros de Lustian comenzaron a enrojecer. No pudo controlar su excitación y, poco a poco, comenzó a quitarle la ropa. El rostro de Viola también se había enrojecido inequívocamente. Pequeños gemidos se escaparon de entre sus labios.

"Aah... mm...."

"Viola... ámame"

"Nngh... ahh..."

Sintió que si alguna vez la escuchaba decir que lo amaba, nada podría hacerlo más feliz. Si ella dijera esas palabras con sus hermosos labios, sus sentimientos por ella se profundizarían lo suficiente como para querer darle la corona del emperador, y no sólo la de la princesa heredera.

Pero ella no lo dijo.

Porque él era el jefe del Ejército de Sangre... Porque él era el responsable de la muerte de su hermano...

Él ya sabía que aunque su cuerpo no lo rechazara ahora, su corazón seguiría sin conmoverse. Su corazón le dolía como si lo estuvieran estrujando. Como si alguien estuviera clavando una espada en su corazón aplastado... Era otro tipo de dolor, diferente al de las convulsiones.

Aun así... Está bien... Aunque tu corazón no sea mío si te quedas a mi lado... Aunque sólo quede tu cáscara vacía, te seguiría amando.

Una sonrisa amarga se dibujó en los labios de Lustian. Pero esa sonrisa solitaria se convirtió inmediatamente en una más brillante.

Puede que no sea ahora, pero algún día... algún día me amarás. Porque voy a mostrarte todo de mí... Incluso el poder militar de este Imperio de Arpen, todas mis tareas grandes y pequeñas, te las mostraré íntimamente... Podrás ver y escuchar lo que quieras saber. Confiaré en tu promesa de no abandonarme....

Aunque no pudiera ganarse su corazón de inmediato, esperaba el día, algún día, en que ella lo amara. Lustian introdujo su erección en su húmeda caverna. Vio cómo su nuca temblaba. Cuando la mordió ligeramente con los dientes, ella volvió a temblar ligeramente.

"Aahh"

"Hahh... hngh"

Una vez que la penetró, no se detuvo. La tumbó sobre la mesa de su despacho y la embistió sin piedad. El cuerpo de ella tembló violentamente.

"Mmm... Viola..."

Viola contuvo su placer mordiéndose el labio con fuerza. Él odiaba verla contenerse. Quería oírla gemir, así que la empujó con más fuerza. Al oír esto, su cabeza se inclinó hacia atrás y sus ojos perdieron la concentración. Un pequeño gemido salió de sus labios y una extraña sonrisa se dibujó en su rostro. Sintió que una sensación de lujuria le invadía. Apretó su vara hinchada más cerca de su núcleo.

El sonido húmedo de la carne chocando contra la carne llenó la habitación. Cada vez que la penetraba, ella se agarraba a sus hombros para sostenerse. Chupó con más fuerza su nuca mientras sus paredes internas se estrechaban en torno a él. También le mordisqueó las orejas. El calor se extendió por todo su cuerpo. Él manoseó sus picos gemelos, su feminidad rezumando néctar, estaba húmeda y pegajosa.

"Augh, aahh.. hnngh... nngh, ahh...."

Dos grandes manos le agarraron las nalgas mientras él penetraba en ella. Cada vez que lo hacía, ella enterraba la cara en su hombro y gemía. Movía su cuerpo al ritmo de sus embestidas.

♛♛♛

De repente, él parecía estar sufriendo y luego, igual de repente, parecía estar bien de nuevo. La había besado y había empezado a quitarle la ropa antes de que ella se recuperara de su sorpresa. Se había metido dentro de ella antes de que pudiera preguntarle por qué. Y ahora, Viola apenas podía pensar en otra cosa que no fuera el placer que le estaba dando.

"¿Por qué?"

"No es nada"

Una voz grave atravesó el aire caliente entre ellos y se extendió hasta sus oídos. Su voz pronto la llevó al clímax. Al ver que él seguía insatisfecho a pesar de haberse corrido ya dos veces seguidas, ella sintió que él era como una bestia. Estaba pegajosa ahí abajo, el líquido blanco que la rodeaba era cortesía del hombre.

¡Trak, trak!

El escritorio debajo de ella se agitó al ritmo de su cuerpo tembloroso.

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