Jin Xiu Wei Yang 62

Jin Xiu Wei Yang 62

Lunes, 28 de Junio del 2021



Jin Xiu Wei Yang  62

Herida al viento



Después del incidente anterior, Da Furen había encerrado a Zi Yan para vender. Quién iba a saber que Zi Yan se escabulliría, aprovechando la oportunidad para molestar a Li Min Feng, amenazándole con que si la obligaba a marcharse lo revelaría todo al público, causando tal conmoción.

Da Furen frunció el ceño.


"Un buen banquete ha sido estropeado por una yatou infantil. Que alguien se la lleve".


Inmediatamente, alguien fue a levantar a Zi Yan, Bai Zhi estaba agarrando firmemente la manga de Zi Yan. Con los tirones de ambos lados, la ropa de Zi Yan se rasgó por la mitad. Da Furen tronó.


"¡Llévensela rápidamente!"


Bai Zhi estalló de repente.


"¡Mira!"


Las miradas de todos siguieron sus palabras, para ver que la hermosa clavícula y los brazos de Zi Yan, estaban cubiertos de moretones de color púrpura azulado. Con una sola mirada, pudieron darse cuenta de que había rastros de abuso.

Li Chang Le echó rápidamente un vistazo, y de repente se dio la vuelta, haciendo temblar el conjunto de rubíes de los pendientes de oro de sus orejas, mientras decía fríamente: 


"¡Debe haber hecho algo desvergonzado, realmente un libertinaje!"


Un par de chicas respetables, de apariencia tan pura como el jade.

El Quinto Príncipe dijo inmediatamente.


"¡Da Xiaojie no debería mirar estas cosas sucias, para evitar ensuciar sus ojos!"


San Furen dijo lentamente.


"Como este yatou ya fue entregado a Da Shaoye, entonces naturalmente debería ser tratado por ti. Sin embargo, esto es demasiado..."


Su significado era claro, aunque Zi Yan era una criada, no debería haber tal abuso. Por no hablar de estos innumerables moratones. el hijo de una familia conocida debería ser educado con los demás, para haber hecho tales cosas....

Li Wei Yang lanzó un largo suspiro como si no pudiera soportarlo.


"Dage, no te estoy culpando, pero Zi Yan vino conmigo desde Ping Cheng, bien educada, obediente y sensata. Pero con usted llevándola a la muerte, ¿qué puedo decir?"

Da Furen entrecerró los ojos, las cejas se enroscaron como las esquinas afiladas de una media luna, declaró: 


"Feng'er suele estar ocupado con el trabajo, ¿cómo puede prestar atención a una criada? Las sirvientas de la familia Li deben controlarse para poder servir a sus amos con facilidad. Zi Yan fornicó con un criado e incitó a los problemas. Por miedo a que la culpemos, murió así"


Li Wei Yang sonrió.


"¿Ah, sí?"


Li Min Feng era, por supuesto, la persona que más sabía de esta situación. Zi Yan no dejaba de insistirle para que la criara como concubina. Pero él aún no se había casado, ¿cómo iba a acoger a una yatou así? Por lo tanto, endureció su corazón, ordenó a la gente que atara a la fuerza a esta yatou, y que la matara o la vendiera. Inevitablemente, esas personas tomaron algunas medidas y se ocuparon tranquilamente de Zi Yan. La cuestión principal era que el cuerpo debería haber sido enviado fuera de la casa, ¡¿cómo apareció en el salón principal delante de todos?! Obviamente, ¡alguien estaba jugando deliberadamente! Pensando en esto, se puso rojo, rizó los dedos y se burló.


"En cuanto a la muerte de Zi Yan, realmente no sé nada"

Da Furen gritó: "¡Rápido, llévensela!"


Los sirvientes comenzaron a mover el cuerpo. Sin embargo, cuando estaban a punto de llevarse el cuerpo, se oyó un ruido de golpes, algo cayó de los brazos de Zi Yan.

Li Wei Yang sonrió y dijo: "Dage, esta es la bolsa que llevas contigo, ahora ha sido ensuciada por este yatou, o?"

Una sirvienta se suicidó misteriosamente, su cuerpo estaba lleno de rastros de abuso, de sus brazos, la bolsa de Da Shaoye se cayó ...... al conectar todo esto, la cara de todos cambió.

¡Este Da Shaoye de la familia Li, su moral estaba realmente corrompida! ¡Sin comentarios sobre la lesión al viento, que incluso tenía tal afición! Tal persona, ¿quién se atrevería a casar a su hija con él? ¿Cómo sería capaz de pasar a la siguiente fase? ¡Unirse a la corte como funcionario, simplemente haría que el Primer Ministro Li perdiera la cara por completo!

El rostro de Li Xiao Ran estaba lívido. Contuvo la mayor parte de su ira. Su mirada estaba rígidamente fijada en Li Min Feng, como si pronto fuera a estallar.

Los sirvientes se llevaron a Zi Yan. La expresión de todos volvió a ser tranquila, pero con un trasfondo que surgía en su corazón. Sus miradas dirigidas a Li Min Feng parecían muy extrañas y tenían un poco de miedo en ellas.

En este momento, Liu Furen exclamó de repente: 


"¡Su'er!"


Todos miraron para ver a una sirvienta que traía a una Shaoye de ocho años. Liu Furen se apresuró a acercarse, abrazando al niño en sus brazos, y continuó llamando a mi amor.


"¿Qué ha pasado?"


Preguntó Li Xiao Ran con el ceño fruncido.

La sirvienta hizo una reverencia.


"Nubi vio a Liu Shaoye en la parte de atrás, estaba buscando el baño por todas partes, por lo que se perdió....."


Todos se rieron. Pero justo después de experimentar este asunto, la risa era insincera. En este punto del banquete, ¿cómo podría continuar? Todos propusieron torpemente un brindis y se fueron.

La familia Li se quedó en la puerta despidiendo a los invitados. Da Furen y los demás forzaban una sonrisa, sólo Li Wei Yang sonreía como siempre. Tuoba Yu fue a su lado, sonrió y dijo suavemente: 


"Bien hecho"


El rostro de Li Wei Yang estaba tranquilo, como si no le hubiera oído, saludó solemnemente: 


"Despidiendo al Séptimo Príncipe"

La cara de Li Wei Yang estaba tranquila como si no le hubiera oído, saludó solemnemente: 


"Despidiendo al Séptimo Príncipe"


Ella sabía, que hoy, independientemente de Tuoba Zhen o Tuoba Yu, nadie creería que Li Min Feng era ese tipo de persona confundida. Pero no importaba aunque no lo creyeran. Los rumores eran más temidos que los tigres. Mañana todo el mundo en la ciudad sabría, cómo las palabras y acciones del hijo principal de la familia Li estaban corrompidas con una moral periclitada.

A partir de hoy, la carrera de Li Min Feng o su matrimonio se habían arruinado por completo.

Este era el regalo de vuelta para él por haber intentado previamente inculparla.

Cuando ya no quedaban extraños, Li Xiao Ran abofeteó repentinamente la cara de Li Min Feng. La fuerza fue tan grande que todo su cuerpo cayó al suelo, incluso se le cayó un diente, con la boca llena de sangre.

Da Furen se apresuró a levantarlo.


"Lao Ye, ¿no ves que este incidente de hoy ha sido preparado deliberadamente por alguien?"


A Li Xiao Ran no le importaba si era un montaje o no, sólo sabía que no tenía ninguna cara ante la gente. La centenaria buena reputación de la familia Li había sido arruinada en manos de Li Min Feng; no pudo evitar gritar de rabia.


"¡Trampa! ¿Quién le ha tendido una trampa? ¿Qué es él? Si realmente era inocente y estaba limpio, y aun así fue a seducir a la criada de su hermana, ¡es un desvergonzado!"


Da Furen no pudo contener las lágrimas y lloriqueó.


"Lao Ye, es nuestro hijo mayor, cómo no puedes creerle..."

"¿Creerle? Lo he visto con mis propios ojos. De todos los momentos para ser una vergüenza, tuvo que hacer tal cosa cuando todos estaban presentes. Es simplemente una herida al viento!" 


Li Xiao Ran una vez más pateó con fuerza a Li Min Feng.

Li Min Feng de repente giró la cabeza, mirando a Li Wei Yang con ojos rojos como la sangre: 


"¡Puta! Fuiste tú quien incitó a ese yatou....."


Li Wei Yang miró a Li Xiao Ran y dijo con pena: 


"Padre, Dage me culpa de todo"


Li Xiao Ran estaba en el pico de su ira, señaló a Li Min Feng.


"¡Que alguien encierre al joven maestro en la sala ancestral para que se arrepienta durante cien días!"


La cara de Da Furen se puso repentinamente blanca. De repente miró hacia atrás, mirando fijamente a Li Wei Yang, con ojos viciosos como si se la fuera a comer, pero Li Wei Yang sonrió y miró a Li Chang Le, que se había quedado en el mismo sitio, sin palabras: 


"Dajie, estoy cansado. Voy a volver a mi habitación primero, por favor, hazme sitio"


Li Chang Le miró a los ojos de Li Wei Yang como si hubiera visto al diablo arrastrándose desde el infierno y entonces retrocedió involuntariamente.

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