Lunes, 14 de Junio del 2021 |
Jin Xiu Wei Yang 23
Gato de la fortuna
En cuanto Wei Yang regresó a su recinto, Mo Zhu se acercó con una sonrisa.
"San xiaojie, lao furen te ha invitado a su casa"
Li Wei Yang sonrió. Sus ojos se desviaron ligeramente y enseguida notó una sombra que acechaba detrás del sicomoro del patio. Bai Zhi frunció las cejas pero no habló. Esa muchacha, Hua Mei, siempre estaba espiando a Xiaojie como un espíritu obstinado. Fue otorgada por Da furen, así que si se deshacían de ella, los demás podrían empezar a decir que xiaojie estaba disgustada con Da furen. Sin embargo, si la dejaban en paz, al final iba a traer la calamidad.
Li Wei Yang fingió no ver y se volvió hacia Zi Yan.
"Bai Zhi y Mo Zhu vendrán conmigo. Tú te quedarás aquí"
Mo Zhu fue otorgada por lao furen, así que obviamente tenía que ir, pero Bai Zhi y la propia Zi Yan vinieron con xiaojie desde Ping Cheng. Sin embargo, últimamente, xiaojie estaba cerca de Bai Zhi. Zi Yan frunció sutilmente las cejas, lo cual era difícil de descifrar. Cuando se dio cuenta de que Li Wei Yang la miraba tranquilamente, se dio cuenta de repente.
"Xiaojie, por favor, vete. Yo vigilaré el recinto con cuidado"
Con sus dos sirvientes, Li Wei Yang se dirigió hacia He Xiang Yuan.
Acababa de llegar y se había dado cuenta de que las puertas estaban abiertas de par en par. Se oían las risas de las mujeres nobles. Li Wei Yang parpadeó y entró rápidamente. En la sala, estaban presentes Lao furen, así como todas las demás furens y xiaojie. Todos parecían extremadamente alegres.
Li Wei Yang acababa de entrar cuando Li Zhang Le se levantó con una sonrisa.
"San mei, echa un vistazo. Nuestro Da ge aún no ha regresado pero sus regalos para todos nosotros ya han llegado"
Li Wei Yang siguió la mirada de Zhang Le y se dio cuenta de que todos los sirvientes habían desplegado sobre la mesa un sinfín de brocados de seda y telas bordadas a mano de diferentes variedades. El salón irradiaba como el sol de la tarde, haciendo que los ojos de todos se volvieran borrosos.
La azafata Sun niangzi sonreía hasta el punto de que sus ojos habían desaparecido. Dijo:
"Todo lo que Da shaoye ha enviado es de gran calidad. Lao furen, mira, esto es seda Jin Qiao de Yunzhou. El color es excepcional. Esto es seda Yanzhi tejida en Chengzhou. El color es brillante y hermoso. Está bien teñida. Al parecer, se dice que la costurera bordó ropa para la Emperatriz Dowager. Esta es la seda de peonía bordada a mano de Linzhou. La costurera es conocida como la experta en este campo. También están la seda Bi jiangxia, la seda Ziluo de Mozhou; la seda Haiyun hong, la seda Luoxiu jin, la seda oriole dorada de Ningzhou. Todos los niangniangs y los nobles del palacio llevaban este tipo de material. Verdaderamente, hace que la visión de uno se maree"
Da shaoye estaba estudiando y viajando por el mundo exterior, era natural que hubiera visitado muchos lugares. Sin embargo, no enviaría estos regalos sin razón. Estos regalos eran obviamente de alguien más, usando el nombre de Da shaoye, para ganar favores con la hacienda del Primer Ministro.
No había necesidad de adivinar quién era esta persona. Li Wei Yang ya lo sabía.
Li Zhang Le bajó la mirada. Sus delgados dedos acariciaron la seda estampada.
"Aunque la seda de la capital es preciosa, puede ser demasiado exuberante. Sin embargo, esta seda es diferente, es mucho más elegante"
Los ojos de todo el mundo estaban puestos en Li Zhang Le. Su inigualable belleza hacía que los demás se quedaran atónitos, al igual que todos esos magníficos y magníficos brocados de seda, como si ella fuera la flor bordada en la seda. Era completamente delicada, ingeniosa y admirable, lo que hacía difícil que alguien mirara hacia otro lado. Pero ese tipo de belleza era una aguja que pinchaba los ojos de Wei Yang mientras miraba lentamente hacia otro lado. Había algunas personas en este mundo que habían nacido con el amor y el afecto de sus padres, con talentos y habilidades incomparables y con la fortuna de tener una belleza inigualable. Todo lo que tenía que hacer era mirar ligeramente y podría robar el esfuerzo de otra persona que se había ganado con tanto esfuerzo.
Lao furen dijo:
"Yo no llevo este color, así que deja que las jóvenes se lleven lo que quieran"
Er xiaojie, Li Chang Ru, se llenó inmediatamente de felicidad mientras se levantaba con gracia para dar las gracias antes de ir rápidamente a recoger su seda. Quizás fue accidental, o a propósito, pero sus manos se detuvieron en el brocado de seda que le gustaba a Li Zhang Le. Con una sonrisa falsa, dijo:
"Da jie, me gusta mucho este brocado de seda e incluso el color es bastante adecuado para mí"
Li Zhang Le sonrió.
"Entonces Er meimei debería seguir adelante y cogerlo"
Obviamente, Li Zhang Le no quería regalar ese brocado de seda en particular, pero quería parecer generosa y de buen corazón. Li Wei Yang se rió tranquilamente mientras bajaba la cabeza para beber su té, actuando como si no viera nada.
Las manos de Li Zhang Le se detuvieron en el brillante brocado de seda de Hayun hong, pero al mismo tiempo, las manos de Li Chang Ru también lo alcanzaron. Esto se repitió las tres veces siguientes. Aunque Li Zhang Le tenía autocontrol, su rostro sonriente había desaparecido hace tiempo.
Er furen soltó una risita y dijo: "Da xiaojie siempre ha sido muy cuidada, pero tu meimei es todavía una niña. Todo le parece nuevo y refrescante, así que deberías tolerarla un poco. A cambio, te regalaré un juego de joyas de gemas".
Zhang Le tenía muchas joyas hechas de gemas pero no tenía muchas de estas raras sedas. Su rostro se puso ligeramente rojo, pero no pudo replicar a los mayores.
Li Wei Yang bajó la mirada. Todos estos brocados de seda fueron traídos por Da shaoye. Aunque se suponía que eran para todos los miembros de la familia, en realidad, todo lo bueno se lo darían a Da furen y Li Zhang Le. Sin embargo, Er furen y Er xiaojie estaban siendo descaradas y de piel gruesa. Como resultado, Li Zhang Le se enfadó, pero tuvo que contenerse.
Da furen dijo despreocupadamente:
"Zhang Le, sólo son sedas. Si te gusta algo del montón, sólo tienes que decirle a tu Da ge que te traiga unas cuantas"
A pesar de hablar de forma casual, sus palabras pretendían presionar a Er furen.
La expresión de Er furen cambió y replicó inmediatamente.
Dafang y Er furen estaban actuando en los dos bandos enfrentados. Mientras tanto, San furen estaba sentada a un lado, sonriendo mientras sus ojos se detenían en Li Wei Yang. Los Li tenían a Da xiaojie, conocida por su belleza de diosa, a Er xiaojie, con sus deslumbrantes encantos, a Si xiaojie y a Wu xiaojie, que eran lindas y adorables, pero cuando se trataba de Li Wei Yang, ella poseía un encanto único e individual.
Justo en ese momento, Li Wei Yang levantó la vista y captó los ojos de San furen. Los dos intercambiaron una mirada sonriente. Había una comunicación especial y silenciosa entre los dos.
Después de que Li Wei Yang rescatara a San shaoye, ella y San furen habían desarrollado un acuerdo secreto e implícito para ser aliadas. Esto era algo que Da furen desconocía por completo. Todo lo que Da furen sabía era que sus dos mumus habían sido descuidados, lo que causó sus fracasos. No comprobaron que el cuerpo estaba muerto antes de deshacerse de él. Ella creía que San shaoye había tenido buena suerte y había podido escapar de la muerte, pero no se dio cuenta de que era Wei Yang quien le había salvado.
La habitación estaba llena de magníficas y espléndidas sedas. Era difícil no sentirse tentado. Incluso Si xiaojie, Li Chang Xiao, que por lo general era de mente sencilla, no pudo evitar hojear los numerosos brocados de seda. Sólo Li Wei Yang permaneció en su asiento, sin moverse un ápice.
Lao Furen habló de repente:
"Wei Yang, no te quedes ahí sentada. Deberías ir y elegir algunos que te gusten"
Li Wei Yang se levantó y dijo:
"Wei Yang, gracias Lao furen"
Acababa de coger un brocado de seda de oropéndola dorada para examinarlo cuando, de repente, sopló una fuerte brisa del exterior. Tras ella, se oyó el grito de un sirviente. Wei Yang sintió enseguida que había algo afilado y curvado en sus zapatos. La tomó por sorpresa e instintivamente dio un paso atrás.
Era un gato árabe blanco como la nieve. Uno de sus ojos era azul y el otro amarillo. La miraba con arrogancia.
Las delgadas manos de Li Zhang Le se agacharon para recoger al gato árabe.
"¿Te ha asustado, San mei? Este es el gato de la fortuna que me envió Da ge. Echa un vistazo, ¿no es bonito?"
Por supuesto, Li Wei Yang reconoció este gato en particular. En la vida anterior, había sido la mascota más adorada de Li Zhang Le. Había entrado en el palacio con ella. No sólo era arrogante y orgulloso, sino que una vez utilizó sus garras para arañar las pequeñas manos de Yu Li y le sacó sangre.
Wei Yang nunca pudo olvidar el momento en que Li Zhang Le abrazaba a su gato y le dijo:
"San mei, a mi gato de la fortuna le gusta tomar el sol en el jardín de flores, pero no le gustan los extraños. Es mejor que vigiles al príncipe heredero y no dejes que se acerque demasiado a Yuhua Yuan"
Bajo sus mangas, las manos de Li Wei Yang se cerraron en apretados puños. Su sonrisa se hizo más brillante.
"¡Da jie, es un gato tan adorable!"
Mientras hablaba, un plan ya estaba establecido en su cabeza.
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