HDH 302

Sábado 18 de Noviembre del 2023

Hombres del Harén 302

No me interesan los conejos

Asure: 토끼엔 관심이 없다 : tokkien gwansim-i eobsda = No me interesan los conejos, modismo coreano, de manera coloquial significa: No me interesa los payasos.

"De ninguna manera. No morirás si te caes de aquí"

"¿Cómo sabes si voy a morir o no?"

"¿Morir?"

preguntó Latil con cautela, Kallain se rió.

"No lo sé, nunca lo he intentado"

Latil palideció y miró hacia el tejado. Era tan alto que apenas podía ver la parte inferior.

Kaliain volvió a preguntar.

"¿Cuál es la historia del Consorte?"

"¿Cómo has oído ese rumor?"

"Tengo mejor oído, Ama, más que la mayoría de los humanos"

Latil suspiró. ¿De dónde demonios había salido esa noticia? Por supuesto, no ordené que fuera confidencial, así que es posible que los rumores se filtren ........

"He estado evitando a Klein y a Ranamoon, aquí estoy"

Cuando Kallain saltó la barandilla y se colocó al lado de Latil, éste dejó de pasearse y le miró.

Sorprendentemente, Kallain no se ofendió. De hecho, pareció divertirle que Latil se revolviera como un ratón acorralado.

Al menos eso es un alivio, pensó, mientras era interrumpido por Sonnaught.

"Kaliain. Es Girgol. El que ingresará"

En cuanto las palabras salieron de su boca, la sonrisa sorprendentemente cálida desapareció de los ojos de Kallain.

Latil miró sorprendida a Sonnaught. ¿Por qué decírselo ahora?

Sonnaught desvió la mirada. Latil se dio cuenta de que también era un enemigo en este asunto. ¡Debería haber sabido que no debía compadecerse de los Consortes!

Latil volvió a mirar a Kallain, que seguía tan pétreo como siempre, entonces preguntó como una piedra.

"¿Girgol?"

"...... Así es"

Kallain guardó silencio. Latil lo observó atentamente, pero Kallain no abrió la boca con facilidad.

Latil siguió mirándolo fijamente, entonces se dio cuenta de que aquello no iba a funcionar, así que intentó inventar una excusa.

"Sé que no te llevas bien con él, Kallain, pero esto es ........"

Kallain le cortó en seco.

"No es que no me lleve bien con él, es que lo odio"

"!"

Se dio la vuelta y saltó la barandilla de un salto.

Latil asomó la cabeza, sorprendida, se agarró a la barandilla con ambas manos, pero ni siquiera pudo ver el dobladillo de su capa en la oscuridad.

Temiendo que se cayera, Sonnaught la agarró suavemente por detrás.

Con un suspiro, Latil retiró la cabeza hacia el camino. Le dolía la cabeza. ¿Qué demonios iba a hacer? Ni siquiera era lo bastante bueno para enfrentarse a Girgol ahora mismo.

Dicen que soy rival para él cuando despierte, pero no quiero matar miserablemente a alguien que me importa y comer su sangre sólo para enfrentarme a Girgol.......'

* * *

Bajando del tejado con dificultad, Latil regresó a su habitación sin pensárselo, sólo para encontrar a Ranamoon y Klein aún enfrentados.

Estaban discutiendo, pero giraron la cabeza casi simultáneamente a la llegada de Latil, ambos se callaron, un poco sorprendidos por la expresión sombría de su rostro.

No había querido parecer así, pero funcionó, por lo que sonó aún más cansado.

"Ahora mismo lo estoy pasando mal, luego hablamos"

Sin preguntar qué le pasaba, Latil entró en la habitación y cerró la puerta de un portazo.

Luego apoyó la oreja en la puerta y escuchó, parecía que Ranamoon y Klein también se habían ido, esperando la próxima vez.

Con un suspiro de alivio, Latil se tambaleó hasta la cama y se tumbó.

* * *

Latil había superado la prueba por ahora, pero en el camino de vuelta a casa, Klein y Ranamoon estaban teniendo una segunda ronda, sólo que esta vez en un lugar diferente.

Más precisamente, Klein se impacientaba y arremetía contra Ranamoon, Ranamoon le devolvía el golpe.

Con destinos similares, las discusiones nunca terminaban.

"Es por tu culpa. Estás bloqueando el frente de la sala, Su Majestad está cansada de ti, por lo que acaba de salir"

"Dijiste que eras el primero en llegar, pero luego cambiaste de opinión"

"Eres inexpresivo y aburrido, aburres a la gente hasta la muerte cuando hablas con ellos, así que es tu culpa"

"......."

"Su Majestad siempre sonríe cuando está conmigo"

Entonces, en un momento. De repente, el rostro inexpresivo de Ranamoon reveló un atisbo de disgusto.

Cuando Klein lo vio, se dio cuenta de que había dado en el punto débil de Ranamoon, sonrió aún más y se jactó.

"Una belleza fría es buena cuando mantiene las distancias. No puedes durar mucho con un compañero frío, no hay unión. Se supone que una pareja debe dar y recibir afecto, no sentarse sobre sus manos y rodillas como tú"

"Si sabes eso, ¿te escapaste con las llaves del cobertizo?"

Pero dos palabras más tarde, los ojos de Klein se abrieron de par en par al ser apuñalado con el recuerdo más humillante de los últimos tiempos.

Ranamoon le pasó rozando, contorsionando el cuerpo como si no quisiera ni tocarle el cuello.

"¡Tú, pequeño bastardo!"

"Calma, calma, príncipe"

"¿Calmarme? ¡Calmarme una mierda! ¡Ese loro debe callarse!"

Los gritos de Klein resonaron en la silenciosa noche, pero Ranamoon siguió caminando sin responder.

Cardan, que lo había seguido en silencio, miró hacia atrás cuando estuvieron lo suficientemente lejos como para no poder oír la conversación y se mofó.

"Me pregunto si alguna vez hubo un Príncipe tan ignorante, tan estúpido y siempre lloriqueando. Es un desperdicio de sangre imperial"

No sabes cuánto me disgustó ver al príncipe, que había huido con las llaves, siendo cuidado por la Emperatriz porque tenía un pequeño problema en su propio país.

Pero era divertido verle graznar como un pato.

"¿No es cierto, Maestro?"

preguntó, luego miró a Ranamoon e hipó de sorpresa, pensando que el príncipe no era rival para su maestro.

"¿Maestro?"

La hermosa frente de Ranamoon tenía el ceño fruncido.

Otros no habrían podido notarlo, pero Cardan era bueno leyendo las expresiones faciales de Ranamoon.

Cardan se dio cuenta de que Ranamoon estaba un poco molesto y preguntó sorprendido.

"Maestro, ¿estás molesto por ese príncipe tonto?"

"Es difícil durar mucho con un compañero frío"

"¿Qué? Ah...... Maestro, no le hagas caso a ese Príncipe, no hace más que cotorrear todo lo que le sale"

Pero las largas pestañas de Ranamoon se agitaron hacia abajo.

Ranamoon tampoco quería prestar atención. No con las palabras de ese potro de príncipe.

Entró en la corte con confianza, pero la Emperatriz se mostró inesperadamente poco impresionada con él, eso le preocupó un poco.

Quería llamar su atención revelando que era el Adversario, pero resultó que había tres Adversarios. Se puso aún más nervioso cuando la Emperatriz sorprendentemente no le prestó mucha atención.

Mientras tanto, otros nobles que no estaban interesados en él fueron a visitarlo.

Pero entonces llegó un nuevo Consorte. Aceptar un nuevo Consorte después de menos de un año significa que los existentes no están contentos.

No ayuda que Klein diga cosas como: 'Eres pan comido'

"Cardan"

"Sí, Maestro"

"Tráeme a Tasir"

* * *

A diferencia de Klein, Ranamoon y Kaliain, Tasir no reaccionó mucho ante los rumores de un nuevo Consorte.

Se limitó a sentarse en su escritorio y repasar su ronda habitual de papeles de alto nivel e informes de inteligencia.

En todo caso, Hierlan estaba más disgustado.

"Un nuevo Consorte ......."

"Vamos, Hierlan. Es la tercera vez que llega un nuevo Consorte ¿Por qué no te acostumbras?"

"¿Acostumbrarme? Es la tercera vez, así que es más bien un shock. ¿Por qué estás tan despreocupado, Sir Sodan? He oído que Klein y Ranamoon ya han ido a preguntar a Su Majestad"

Tasir sonrió, Hierlan se agitó aún más.

"¿Crees que esto es divertido?"

"Cálmate, Hierlan. Cálmate y finge que estás en el lugar de Su Majestad"

"Algo así, así puedo imaginar y pensar en ello. ¿En qué te pones cuando estás tan lejos como el cielo y la tierra?"

"Imagina que has decidido salir con el novio 8, tus novias 4 y 5 vienen y protestan"

"¡Debería morir! Tengo a los novios 4 y 5, si salgo con el 8 ¡Debería morir!"

"Se lo comunicaré a la Emperatriz. Adiós, Hierlan. Has sido un buen sirviente y un leal......."

Tasir, que había estado hablando despreocupadamente, de repente sonó triste, Hierlan agitó la mano, sorprendido.

"No, no me refiero a su Majestad, me refiero a la gente común como yo, así que no puedo imaginarlo. La gente común no tiene Consortes, así que no puedo ponerme en su lugar"

"Entonces déjame pensar por ti. No importa lo que Klein y Ranamoon le digan a la Emperatriz, no servirá de nada. Sólo perderás su favor, porque eres una molestia y un fastidio, ¿de acuerdo?"

Ante la escueta respuesta, Hierlan frunció el ceño.

"Pero...... entonces ¿Qué puedes hacer, Sir Sodan? Nunca has tenido la oportunidad de besar a la Emperatriz, sigue llegando gente nueva de abajo......."

Cuando la voz de Hierlan se apagó, una sonrisa se dibujó en los labios de Tasir.

"Por supuesto, no me quedaré de brazos cruzados. Casi lo he analizado todos"

"¿Analizado qué?"

"Emperador Hyacinth ......."

Tasir iba a decir algo más en morisco, pero unos golpes en la puerta interrumpieron la conversación.

Tasir le guiñó un ojo, Hierlan se apresuró hacia la puerta, preguntando:

"¿Quién es?"

La escolta respondió en su lugar.

"El sirviente de Sir Ranamoon, Cardan, está aquí"

¿Cardan? Hierlan pensó en un sirviente tan malo como su Maestro, luego miró a Tasir.

Tasir ya había recogido el escritorio y se había levantado.

"Parece que el niño Ranamoon está ardiendo. Vámonos. Me pide ayuda"

* * *

Lo que Cardan había dicho era que Ranamoon quería ver a Tasir.

Tasir fue a los aposentos de Ranamoon, Ranamoon dijo justo lo que Tasir había esperado.

"La Emperatriz está intentando imponer un nuevo Consorte. Encuentra la forma de impedírselo"

Hierlan miró en dirección a Tasir, mitad con sorpresa, mitad con admiración, pero Tasir se limitó a sonreír como de costumbre.

De repente, Hierlan se dio cuenta de que Ranamoon debía estar en el mismo barco que Tasir, pero era extraño que le ladrara órdenes de ese modo cuando ambos eran Consortes.

Sin perder la compostura, oyó la voz indiferente de Tasir.

"Claro que lo buscaré, pero......."

La voz de Tasir se entrecortó y esbozó una extraña sonrisa, Ranamoon preguntó.

"¿Qué ocurre?"

"En realidad, Ranamoon, hace unos días, Príncipe Klein me lo pidió. Quiere que le ayude a ser Esposo Oficial"

"¿El príncipe?"

"Sí. Como sabes, este Tasir es un plebeyo, así que es difícil que ascienda al cargo. Por eso me pidió que le ayudara......."

Tasir asintió, luego comenzó a murmurar palabras de autoayuda.

"¿Aceptas?"

preguntó Ranamoon con el ceño fruncido.

Pero antes de que Tasir pudiera responder. Una comisura de la boca de Ranamoon se levantó, su respuesta salió antes de que Tasir pudiera hacerlo.

"No me importa que lo hagas. Si lo deseas"

"¿Es así?"

"Pero no navegarás conmigo, recuerda que viniste a mí primero, mercader"

Ranamoon llamó deliberadamente mercader a Tasir, Hierlan se estremeció y se mordió el labio.

Tasir, mientras tanto, permaneció indiferente.

"Sí, pero me pone en una situación incómoda. Como sabes, como plebeyo, no estoy en posición de desobedecer las órdenes del Príncipe Heredero.......".

Ante eso, Ranamoon dejó escapar un breve suspiro fingido.

"¿Así que eres un mercader y quieres sopesar la balanza entre el príncipe y yo?"

La sonrisa de Ranamoon causó una fuerte impresión, ya que la corta risa fue suficiente para romper el frío en el aire.

La mejor arma de Ranamoon Atraxil es sin duda su rostro. Incluso en medio de su ofensa, Hierlan no pudo evitar pensar en eso, miró a Sir Sodan.

"......."

El criado de Gesta estaba comprando productos de belleza para su Maestro, Hierlan decidió que quizá debería probar suerte.

Le pondré una compresa de barro en la cara cuando esté dormida.

Si pudiera deshacerse de esas ojeras, podría competir con él. Sentía que sus ojeras la estaban frenando.

"Hablando de cazar dos pájaros de un tiro. Piensa en eso, mercader"

* * *

Ya era tarde, pero Latil seguía pensando en cómo presentar a Duque Daga a Gesta.

Resultó que conseguir que Hyacinth viera al Sumo Sacerdote se arreglaría por sí solo una vez que Duque Daga estuviera en manos de Gesta.

Pero no se le ocurría cómo hacer que Duque Daga y Gesta se conocieran.

Mientras caminaba, oyó una voz airada que le llamaba.

Latil se detuvo, escuchó y se dirigió a la fuente.

Tasir estaba sentado en un banco del jardín con una sonrisa en la cara, a su lado, Hierlan echaba humo.

"Sir Ranamoon es demasiado. Llamarlo Mercader. Le está faltando al respeto a Sir Sodan porque viene de una familia de mercaderes"

¿Qué le dijo Ranamoon a Tasir? Latil se inclinó un poco más cerca.

"Afrontémoslo, ¿qué hay de malo en ser Mercader? Ranamoon, da la casualidad de que viene de una buena familia, y lo mismo ocurre con el Maestro Sodan......, y aunque él viene de una familia adinerada, sigue trabajando muy duro, Ranamoon es un vago confeso, engreído........"

La interminable perorata de Tasir terminó cuando el criado vio a Latil y se dio la vuelta, sorprendido.

"Te lo mereces, Ranamoon"

El criado se inclinó rápidamente, como si le hubieran pillado en el acto de insultar al Consorte de la Emperatriz.

Tasir se levantó del banco, con el rostro igual al anterior.

Latil se acercó a él.

Había oído y visto el enfado de Hierlan. La sonrisa de Tasir parecía un poco triste.

"Lo que acaba de decir tu sirviente. ¿Es cierto, Tasir?"

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