HDH 256

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Viernes 27 de Octubre del 2023




Hombres del Harén 256

No duele verte ahora




¿Dijo Girgol que mataría al padre adoptivo de Domis? Pensé que lo hizo, cuando dijo eso. Es una pena.

'Girgol habla palabras vacías'

Después de todo, incluso Girgol no está tan loco, ¿verdad? Supongo. El padre adoptivo intimidaba mucho a Domis, pero no a Girgol. Él seguía volviendo, así que se podría decir que era parte del grupo.

Tal vez era más cercano a ellos que Domis. Parece poco probable, pero en ese momento.

'De todos modos, lo único que recuerdo haber visto fue al padre adoptivo siendo maldecido y golpeado. No creo que me escandalizara que Girgol realmente lo matara, aunque no debería pensar en ello en términos de mis propios estándares puesto que ya es pasado'

¿Pero qué pasa con Domis y Girgol? Siempre se pelea con Kallain, así que no entiendo por qué está enemistado con Girgol.

Cuando Anya dijo "¡No te vayas!" fue Girgol quien la ignoró y Kallain quien le hizo caso.

Latil se abrazó a la almohada, ensimismada, frunció el ceño cuando las nubes se apartaron y la luz del sol se coló por la ventana.

Por fin había llegado el sueño y con él, el resplandor de los sueños de la noche anterior, aunque ésa era una forma extraña de decirlo.

Latil miró el reloj. Ya eran las ocho de la mañana. Era hora de levantarse, pues partían hacia Carissen.

No es extraño que los monstruos teman a Domis -pensó para sí-, porque hasta el devorador Heum parecía temerme a mí. Pero, ¿cómo se le mejoró tanto la pierna?

Pero mientras se preparaban para seguir adelante, Latil no dejaba de pensar en su sueño.

Quizá sea porque Domis tenía una fuerza inhumana y lo sabía. Sólo espero que sea un poco menos mandón la próxima vez.

























* * *

















Lista y vestida cómodamente, Latil subió al carruaje y se sorprendió al ver al pasajero.


"¿Ranamoon?"


Ranamoon se sentó en la silla frente a ella.


"¿Vas a montar en éste?"


Efectivamente, había un carruaje aparte para Ranamoon.......

Latil le miró como diciendo: "¿Por qué se monta en este?", pero Ranamoon le dirigió una mirada gélida.


"¿No quieres que vaya contigo?"

"Chico, siempre estás sobreinterpretando, sólo preguntaba"


Latil escupió una risa hueca, Ranamoon se lo pensó un momento antes de contestar.


"Quería ir con Su Majestad"


Dijo que iba a Carissen porque tenía otras cosas en la cabeza, así que quería viajar con ella en el carruaje.

Latil movió las caderas en su silla y estudió la expresión de Ranamoon. No tenía ese aspecto, a menudo decía cosas que no tenían sentido........ Seguro que dice tonterías.

Pero Latil pronto llegó a la conclusión de que no importaba si Ranamoon decía tonterías.

'Yo también puedo ser idiota. No me cuesta nada, es sólo una cortesía'

"Ojalá pudiera ir contigo"

Entonces, mientras se reían juntos de su idiotez, Ranamoon miró a Latil y le dijo fríamente.


"Se te dan bien las palabras vacías"

"Perdona, tú lo has dicho primero, tú"

Latil se quedó boquiabierto y le señaló con el dedo, pero Ranamoon volvió a cortarle el paso.

"Veo que has cedido, así que tienes razón, por lo que veo".

Latil le sacó la lengua mientras veía cómo Ranamoon abría el libro y se lo colocaba en el regazo. Vamos, muchacho. Es más listo de lo que pensaba, con sus palabras y sus trampas.

Por extraño que parezca, es un buen blanco para los asesinatos de palacio, así que pensé que sería fría por fuera, pero está congelada por dentro....... Latil gorgoteó para sus adentros.

Debió de sentir la mirada, porque Ranamoon levantó la vista de su libro.

"¿Por qué me miras así?".

Latil mintió sin rodeos.

"Porque es guapo".

Ranamoon resopló, pero esta vez Latil no se dejó engañar como antes y le insistió.

"Esto es real, no me lo estoy inventando".

Por suerte, Ranamoon le creyó esta vez. De muy mala manera.

"Lo sé."

"¿Pero qué es ese sonido 'huh'?".

"Lo oigo muy a menudo. Debes de estar poco inspirado".

Latil frunció el ceño y observó la expresión divertida de Ranamoon, luego preguntó impulsivamente.

"Tengo una pregunta, Ranamoon".

"Sí. Pregunta".

"¿Cuáles son para ti tus propios defectos?".

"Creo que diré que ninguno, y si digo que ninguno, te pediré que cojas el otro vagón".

Cuando Ranamoon no contestó, Latil sonrió satisfecho, queriendo tener razón.

"No estarás diciendo que no hay ninguno, ¿verdad?".

"Claro que no, los hay".

"¿Como qué?"

Personalidad o algo así. Latil sonrió satisfecho y miró burlonamente a Ranamoon,

"Que eres una flor sin aroma".

Ella dejó de reír ante el comentario huesudo y desvió la mirada.

"Lo dice porque no estoy en la cama con él.

















* * *



















Durante varios días se repitió la rutina. A veces Ranamoon iba a su propio carruaje y a veces iba al de Latil. 

Latil no salía de un vagón porque era un incordio y una molestia, pero Ranamoon alternaba entre los dos vagones como si fuera el más perezoso de todos.

Aunque eso no significaba que no fuera a charlar.

Más tarde, Latil lo encontró extraño y le preguntó directamente.


"¿Por qué estás aquí y no hablas?"


Ranamoon respondió sin rodeos.


"Mi hermano me dio un consejo"

"¿Un consejo? ¿Qué consejo?"

"Que soy mejor cuando mantengo la boca cerrada"


Con eso, Ranamoon volvió a callarse, Latil se vio obligado a seguir adelante, observando su rostro como de costumbre.

Si el consejo de su hermano era cierto o sólo una excusa para no hablar, Latil no lo supo hasta el final.

Entonces, cuando finalmente cruzaron la frontera de Carissen. Latil le dio un codazo a Ranamoon cuando se acercó a su carro con una almohada.


"Por cierto, Ranamoon. ¿Puedo hacerte una pregunta?"

"Como siempre, por favor hazla"

"¿Por qué me sigues, en realidad? ¿Qué es lo que te molesta?"


Tengo mis propias razones, pero Ranamoon no parece el tipo de persona que disfruta viajando, por lo que he visto de él en los últimos días, no parece disfrutarlo.

No entendía por qué me acompañaba. No es que no pensara: "¿Será por mí?", pero tenía la corazonada de que no era necesariamente por esa razón.

Ranamoon miraba de vez en cuando por la ventana y ponía cara seria, era esa cara. Era la mirada de alguien que piensa en algo muy profundo y difícil.

Latil levantó lentamente la vista del libro que tenía sobre el regazo, revelando unos hermosos ojos que habían estado allí todo el tiempo.


"Estoy preocupado por Klein"


respondió Ranamoon.


'¿Estás preocupado por Klein? Estás mintiendo'


"¿Estás realmente preocupado? ¿Me seguiste hasta Carissen sólo por esa razón?"

"No finjo preocupación"

"¿Estás seguro de que no tienes otros asuntos que atender?"

"No"

"Entonces, cuando lleguemos a Carissen, ¿quieres que te ponga en una habitación con él? ¿Quieres quedarte con él? ¿Quieres que frene lo que digo?"

"En realidad, eso no me preocupa en absoluto"


Ranamoon cambió de tema y volvió a dejar caer la mirada sobre su libro, Latil lo observó, luego rió suavemente.

Ranamoon también mantuvo la mirada fija en el libro, sólo el leve movimiento de sus labios se elevó en señal de diversión.


















* * *



















"Ya casi llegamos a la capital, Majestad"


Un sonido procedente del exterior del carruaje hizo que Latil diera un golpecito a la puerta en señal de reconocimiento, bostezó antes de estirar las piernas hacia el otro asiento.

Ahora era la única en el carruaje, sin nadie más a su lado, estaba cómoda.

Se quedó dormida, cuando despertó, Ranamoon estaba sentado frente a ella.


"¿Cuándo has llegado?"


preguntó Latil con voz apagada mientras bajaba las piernas y miraba por la ventana. Afuera ya estaba oscuro.

Bostezó, pensando que debería haber caminado, miró a Ranamoon, que, por alguna razón, no levantaba la vista de su libro, sino que lo miraba fijamente.


"¿Por qué?"


preguntó Latil, sonriendo, entonces, en un movimiento poco común, Ranamoon se sinceró sobre sí mismo.


"Tiendo a ser un poco menos emocional que la mayoría"

"Ya lo veo"


Pensaba que era frío, pero no creía que fuera malhumorado en absoluto.

Ranamoon continuó sin rodeos.


"Pero cuando estoy con Su Majestad, soy más temperamental que de costumbre"


Latil enarcó una ceja, desconcertada, preguntándose por qué Ranamoon le decía esto. ¿Es un mal momento?

Pero Ranamoon parecía bastante serio mientras hablaba. De hecho, parecía estar algo divertido por su estado, lo que resultaba aún más curiosa para Latil.

No parecía haber ninguna diferencia entre el Ranamoon de siempre y éste ¿Por qué está tan emocionado, de todos modos?

¿No suele ser casi un muñeco a estas alturas con sus cambios de humor?

Latil bostezó cuando el carruaje se detuvo por completo, impidiéndole seguir pensando.


"Su Majestad. Hemos llegado"


El chófer se bajó al oír el anuncio, Sonnaught se quedó esperando a su lado, tendiéndole una mano a Latil.

Pensando que sería más rápido desmontar, le cogió la mano y se apeó, sólo para descubrir que Hyacinth había sacado a varios sirvientes para recibirle en persona.

Latil se sorprendió al darse cuenta de que ella se sentía mucho más cómoda con él que la última vez que había estado aquí.

La primera vez que había ido a su boda, se había sentido como si estuviera a punto de morir, la siguiente vez que había ido, se había sentido como si estuviera a punto de estallar en llamas cada vez que lo veía.

Pero tal vez sea el paso del tiempo o tal vez sea el hecho de que estoy acostumbrada a ver a un loco que no sabe cuándo ni dónde va a explotar. O tal vez sea porque estoy acostumbrado a ver vampiros, brujos y sirenas. No me enfadé cuando vi a Hyacinth.

Reconociendo su estado, Latil sonrió satisfecha y se acercó a él.


"Emperador Hyacinth ¿Cómo estás?"


Preguntó, alegremente, como se preguntaría a un viejo amigo, Hyacinth le devolvió la sonrisa a Latil con un brillo en los ojos.


"Ha pasado mucho tiempo"


Pero Hyacinth añadió algo después.


"Me pregunto qué hizo para convertir a mi hermano en un borracho ni bien llegó"


"Debe ser un efecto secundario, se tragó algo malo"

"¿Se ha tragado algo?"

"Ábrele la boca y compruébalo. Hay una llave de mi cobertizo ahí"

"!"

"Vas a tener que darle una lección. Yo no te di de comer, lo tomó y se fue con él, yo realmente...... sólo estoy tratando de ser paciente"


Una vez que Latil terminó de llorar, Hyacinth murmuró en voz baja a su lado:


"Otra vez ese alborotador"


En realidad estaba aquí por una razón diferente. Aparentemente era un alborotador habitual en casa.

Entonces... Mientras Hyacinth le conducía al interior del castillo, una luz brilló de repente en un oscuro pasillo situado diagonalmente a su derecha.

Cuando miré en esa dirección, Emperatriz Aini salía lentamente con su gente.

Era difícil verla, así que Latil puso rápidamente una sonrisa falsa y la esgrimió como escudo.

Pero antes de que Emperatriz Aini pudiera acercarse.


"¿Hmm?"


Ranamoon, que estaba junto a ella, hizo un ruido extraño.

Cuando Latil se asomó, vio que, efectivamente, Ranamoon estaba mirando a Aini por el puente de la nariz.

Latil miró a un lado y a otro entre Aini y Ranamoon, luego preguntó en voz baja.


"¿Qué ocurre?"

Asure: Se vienen los capítulos q esperaban, traigan su canchita :v

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