Domingo 06 de Agosto del 2023

Hombres del Harén 210

Dedos que sangran

"¿Otra cosa?"

preguntó confundido Duque Atraxil, Ranamoon volvió a hablar.

"Las cartas que me llegaron ¿Las recuerdas?"

"¿Te refieres a esas cartas con tantas tonterías?"

"Sí"

Duque Atraxil asintió. Cómo no iba a recordarlas si llegaban con tanta regularidad.

"Me dijiste no hace mucho que enviaste a Cardan para que me dijera si había un recadero trayendo una carta, ¿te refieres a eso?"

Pero eso no era lo que Ranamoon quería decir.

"No. Las cosas han cambiado desde entonces"

Las cejas del Duque Atraxil se alzaron.

"¿Cambiado?"

"El hombre que envió la carta vino a verme en persona"

Sorprendido, Duque Atraxil se quedó inmóvil, luego volvió a sentarse y preguntó.

"¿Es cierto?"

"En sus propias palabras, dice que soy el Adversario"

"No...... el fin del mundo"

El duque sonó sincero por un momento, luego cedió al ver la mirada de su hijo.

"Es un honor"

Pero en su interior, sospechaba que algo andaba mal.

Ranamoon, a pesar de ser su hijo, era francamente demasiado perezoso e indolente.

Incluso esa pereza complementaba el exterior lánguido de Ranamoon, pero no quería confiarle su vida.

Duque Atraxil jugueteó con sus rodillas un par de veces antes de sonreír y preguntar.

"No lo harás, ¿verdad?"

Era una pregunta, pero con un tono de 'espero que no'

Ranamoon captó el estado de ánimo y respondió con frialdad.

"Decepcionaría a mi padre, pero me interesa"

"No...... ¿por qué?"

Duque Atraxil puso cara de disgusto y Ranamoon frunció el ceño.

"A mí también me molesta"

"Bueno, si te molesta, no lo hagas. Te propones salvar el mundo y luego lo dejas porque te molesta"

Ranamoon estaba un poco irritado, pero no quería discutir, así que fue al grano.

"Si me convierto en Adversaria, tendrás más posibilidades de ser Canciller"

"Eso...... ser cierto"

Duque Atraxil asintió, pero puso los ojos en blanco.

"O puede que no. Puede que la gente quiera que dejes la corte"

"Por supuesto que no lo haría si eso me convirtiera en un enemigo"

"¿Cómo que no lo harías sin más?"

"Diría públicamente que lo hago por la Emperatriz. Lo hago porque amo a la Emperatriz"

"¿No querrás decirme que vas a librar una guerra pública......?"

"¿Luchando como Adversario para salvar a la Emperatriz, mientras ella acoge a otro hombre a su servicio? No es una bonita imagen"

Duque Atraxil estuvo tentado de golpear a su hijo en la cabeza, pensando: 'No, ¿qué le pasa en la cabeza?'

Pero eso habría provocado una escena, así que, en lugar de eso, se cruzó de brazos e hizo un sonido de 'Hmmm'

"¿Qué piensa mi padre?"

"Es algo arriesgado, pero vale la pena si no le importa. La opinión pública, sólo tenemos que convencer a los nobles de nuestro lado. La gente, se pondrá de tu lado si hablas con ellos. El problema es......."

"Adelante"

"Nada de esto importa si estás en peligro, ese es el mayor problema"

Ranamoon sonrió débilmente ante la preocupación del Duque Atraxil.

"Por eso sigo pensando en ello. Es problemático"

"Ah. Así que todavía te molesta"

"Sí. Sólo digo que existe ese último recurso, así que no te preocupes demasiado"

Asintiendo, Duque Atraxil se volvió hacia Cardan, sus ojos haciendo un gesto a Ranamoon.

"Parece que de verdad quiere ser burócrata"

Ranamoon no respondió, pero Cardan sonrió torpemente y dijo: 'Ya veo' y respondió.

Pero por dentro, Cardan se preguntaba: '¿Eso es todo ......?'

* * *

Cuando la visita del Lord Canciller fue en vano, Latil se ocupó de los asuntos urgentes y dejó el resto para mañana, luego viajó a la laberíntica mansión de Girgol.

Hoy no era el día que había prometido, pero iría de todos modos. Había tenido la intención de preguntarle a Girgol sobre los grifos antes, pero nunca llegó a hacerlo, así que pensó en preguntarle ahora.

Pero para su sorpresa, Girgol no estaba allí, un extraño salió de la casa.

"¿Quién es usted?"

El hombre llevaba una maceta de tierra, pero parecía vivir en la casa, lo que hizo sospechar a Latil: '¿Tal vez ésta no sea la casa de Girgol?', preguntó.

"¿Quién es usted?"

preguntó Latil con rigidez, mirando al hombre de arriba abajo.

"¿No es ésta la casa de Girgol?"

"Sí, es la de Girgol ............."

respondió el hombre, luego suspiró:

"Ahhhh. Tú debes de ser Sadi, la aprendiz de Girgol"

Parecía conocer a Latil.

"¿Quién es usted?"

volvió a preguntar Latil, el hombre sonrió mientras dejaba la maceta a un lado y le tendía la mano.

"Me llamo Zaior, sirviente de Lord Girgol"

"Ah. Sí"

Latil se paralizó, estrechó la mano y luego sacudió la cabeza.

Ese hombre. Creo que lo reconozco de alguna parte.

Pero no recordaba bien dónde.

¿Había venido a verla, o lo había vislumbrado en el banquete, como un transeúnte?

Mientras me devanaba los sesos, el hombre volvió a coger la maceta y preguntó, con voz un poco más amable que antes.

"¿Estás buscando a Girgol?"

"Sí"

"Girgol está......."

En ese momento.

"Aprendiz"

Una voz vino de detrás de ella.

Latil giró, Girgol estaba caminando hacia ella desde la puerta principal.

"¿Qué estás haciendo? Pensé que estabas ocupado"

Girgol estaba obviamente ocupado, ya que tenía las dos manos llenas de bolsas de papel.

Latil estaba a punto de contestar cuando sintió una extraña sensación y se le quedó mirando.

La visión de Girgol, por un momento, se superpuso a la de Domis, fue a la vez agradable e inquietante.

Era él quien le había dado fuerzas y luego la había traicionado.

"¿Por qué me miras con esa mirada de cuento, jovencita?"

"¿Estás libre ahora?"

"¿Una cita?"

"Vamos a clase"

"¿Por qué de repente eres una estudiante tan ansiosa?"

"Necesito preguntarte algo"

"Eres mi estudiante favorita"

"Algo más"

Mientras intercambiaban miradas, Girgol le hizo un gesto a Latil para que entrara y le dio a Zaior una instrucción aparte.

"Café para mí. Para mi aprendiz, té de flores"

Sonriendo, Girgol pasó un brazo alrededor de los hombros de Latil.

"Porque mi aprendiz no puede comer flores"

* * *

Entramos en lo que parecía un salón y nos sentamos, no tardó en aparecer Zaior con una bandeja.

Aparentemente, era el sirviente de Girgol y podía navegar por esta laberíntica mansión bastante bien por su cuenta.

"Aquí, Maestro Girgol, café. Esto es té de flores. Está hecho con rosas, así que debe oler bien"

Zaior sonrió sensatamente y se fue, Girgol murmuró algo acerca de que el niño tenía buen ojo y le ofreció el té.

"Gracias"

Latil levantó su taza de té a modo de saludo, comprobó una vez que no se oía nada al otro lado de la puerta y luego habló.

"Ya sabes, en el palacio imperial"

"¿El palacio imperial?"

"No sé si te has enterado, pero se rumorea que ha aparecido un grifo"

Antes de que Latil pudiera decir algo más, Girgol tomó la palabra.

"¿Un grifo? ¿Has visto alguno?"

Girgol asintió en señal de comprensión.

Menos mal que le preguntó, pensó y mintió.

"No. Sólo he oído rumores"

"Por supuesto. Eres una enviada de la Emperatriz, así que debes estar bien informada"

"Eh"

Latil jugueteó un momento con su taza de té y luego abrió la boca para preguntar por el grifo.

Pero la reacción de Girgol fue extraña. Se estaba riendo histéricamente de algo.

"¿Qué? ¿Por qué te ríes de repente?"

preguntó Latil, extrañada por su sonrisa fuera de lugar, él respondió con una voz inesperadamente cariñosa.

"Los grifos son lindos"

¿Los grifos son lindos?

Claro que son lindos. Eran pequeños y adorables, su voz era grave.

Pero esa no era la razón.

¿No era el grifo un pájaro que el Lord solía montar? No es que fuera realmente posible montar un grifo tan pequeño, pero él estaba del lado del Lord de todos modos, así que de eso se trataban los rumores.

Se sorprendió al oír decir eso a Girgol, el maestro del Adversario.

Ante la mirada perdida de Latil, Girgol interpretó la expresión y le guiñó un ojo y susurró.

"Ah. Dices que no lo has visto, pero lo sabrás cuando lo veas. Es muy guapo"

"No digo que no lo haya visto ¿Qué hace un grifo?"

"¿Hmm?"

"Sólo para que lo sepas. He oído que es un pájaro que monta el Lord. Puede que tenga que matar a uno si alguna vez me encuentro con uno"

Girgol dio un largo sorbo a su café y respondió con indiferencia.

"No hace falta. Es un pájaro normal, un buen bailarín"

"Bailarín ¿Bailarín?"

"Sí. Bailarín"

Girgol sorbió su café de nuevo.

El grifo le parecía lindo, pero de una manera muy insignificante.

El grifo era una criatura insignificante, pensó Latil con un suspiro.

"Eso está mejor, porque yo también tenía algo que decirte"

"¿Qué quieres decir?"

"Señorita, ¿no puede tomarse una semana de vacaciones?"

"¿Unas vacaciones? ¿Por qué?"

"Porque hay un agujero gigante en Chaude Folly. Pensé que sería un buen lugar para entrenar. Iré contigo"

Asure: 쇼드 폴리에 : syodeu pollie = Chaude Folly o Escuela Superior del Calzado (Literal)

¿Un agujero en Chaude Folly? Latil recordó la agenda que le habían enviado hacía unos días.

¿Estaba hablando de eso?

¿Qué clase de agujero era?, se preguntó, tras horas de discusión en la sala de conferencias y ninguna conclusión, al no haber estado allí ella misma ¿Era un hueco que tenía algo que ver con monstruos?

'Pero una semana'

"No"

En un momento como éste, la Emperatriz no debería ausentarse una semana.

Ya había estado fuera un par de veces recientemente, viajando a otras provincias. Otra semana sería demasiado.

"De ninguna manera"

Girgol enarcó una ceja ante la reiterada negativa de Latil.

"¿Ni siquiera una semana?"

"Soy una enviada de la Emperatriz"

"¿La Emperatriz es inflexible?"

"Lo sé, pero soy una enviada, así que no"

"Una Emperatriz que no puede dar a sus enviados una semana de vacaciones es inflexible"

"!"

"Estás luchando, aprendiz"

Latil, que de alguna manera sentía que Girgol la estaba criticando, engrosó su rostro y estaba a punto de darse una palmada en el pecho.

Girgol dejó bruscamente su taza de café, cruzó sus largas piernas y gritó.

"Aprendiz. Si no te importa, ¿podrías contarme una historia sobre la Emperatriz?"

Latil estaba a punto de darse una palmadita en el pecho, pero entonces se sintió un poco inquieta y preguntó.

"¿La Emperatriz?"

"Porque me lo contó el hermano de la Emperatriz"

La mención del hermano de la Emperatriz hizo que Latil se sintiera aún más inquieta.

Tanto si Girgol se refería a Lean como a Tla, ninguno de los dos diría nada bueno de ella.

'¿Cuándo se conocieron esos dos con Girgol?'

"¿Qué?"

preguntó Latil, aun intentando sonar despreocupada, luego cogió el té de flores y bebió un sorbo.

El té aún olía a rosas, pero el agua se había enfriado vagamente y el sabor era insípido.

"La Emperatriz podría ser el Lord"

Pero en cuanto oyó la respuesta de Girgol.

Los dedos de Latil cedieron y dejó caer la taza de té.

Se rompió con un estruendo, enviando fragmentos de cristal volando por todas partes, Latil se agachó rápidamente para recoger los pedazos, tratando de ocultar su sorpresa.

"Yo lo limpiaré"

Pero en su prisa, se cortó el dedo con el fragmento, rezumó sangre del interior.

"Ughh"

Latil hizo una mueca y sacó un pañuelo.

Levantó la vista y, en un abrir y cerrar de ojos, Girgol estaba frente a ella.

Intentó decirle que estaba bien, pero Girgol no parecía interesado en su bienestar.

Estaba concentrado en su dedo sangrante.