HDH 199

HDH 199

Jueves 13 de Julio del 2023




Hombres del Harén 199

Que comience la reunión





Después de pasar por la administración para hacerles saber que estaba a salvo y darles un falso relato de sus viajes, Za'ior regresó a los aposentos de Girgol y se quedó atónito.


"¿Quién hizo esto?"


Efectivamente, la puerta, que había estado intacta la última vez que la había visto, había sido destrozada por la mitad. Muy bien por la mitad. Alguien debía de haberla derribado con gran fuerza en el centro de la puerta.


"¿Un enemigo?"

"No tengo enemigos"

"Entonces...... ¿lo hiciste tú mismo?"

"Mi aprendiz lo hizo"

"El aprendiz. Ah. ¡El candidato a Adversario!"


Za'ior estaba aún más desconcertado. Si lo llamaba 'aprendiz', debía de haberlo aceptado como tal. ¿Por qué el aprendiz derribó la puerta?


"La chica es sabia"


Pero en lugar de dar una larga explicación, Girgol sonrió satisfecho y se puso de cuclillas.


"Ya es lo suficientemente fuerte que me da miedo pensar lo que pasará cuando se haga más fuerte"

"¿No es eso algo bueno? Podrás vencer a Lord"

"Necesito ser lo suficientemente fuerte para vencer a Lord, no lo suficientemente fuerte para controlarlo"

"Ah......."

"Y está diciendo que pedirlo es pedir que esté de su lado"


La tez de Girgol se iluminó de preocupación, Za'ior enarcó una ceja, haciendo que su frente se arrugara en un círculo completo.


"Estás preocupado, ¿verdad? Pareces estar de buen humor"

"Estoy preocupado, pero habla tan bonito"


No sabía qué quiso decir con bonito. Quería decir que es un buen adulador. No creía que un buen tipo vaya a derribar una puerta.

Aun así, un signo de interrogación rondaba la cabeza de Za'ior.

Como la mayoría de la gente, no se había interesado antes por los vampiros.

Como era de esperar, más de la mitad de lo que decía Girgol era ininteligible. Sin información previa.


"Quiere tener el mismo gusto que yo. También come flores. Nunca había visto a nadie como ella"

"Puedo comerlas si quiero, Sr. Girgol. ¿Se lo enseño?"

"¿Qué me importa si comes flores?"


Girgol preguntó inocentemente, Za'ior se volvió hosco y levantó la puerta caída.


















 


* * *



















Girgol miró la puerta que Sadi había destrozado, sin saber si debía divertirse o preocuparse.

De vuelta en palacio, Latil se quitó la máscara y se cambió de ropa, luego se dirigió apresuradamente a la sala pública y empuñó su pluma como si nada hubiera pasado.

Pero incluso antes de sentarse, su corazón latía tan fuerte que podía sentirlo palpitar en sus dedos. La pluma negra parecía una vela negra.

Debo de ser más fuerte de lo que pensaba.

Latil se golpeó el puño inútilmente bajo la clavícula.

Mientras tanto, el chambelán había ordenado los nuevos papeles que habían llegado durante la ausencia de Latil y los había dejado sobre el escritorio.


"Puede verlos desde aquí arriba, Majestad. Los que he marcado son los que debe ver hoy, los que están debajo puede verlos con tranquilidad"

"Gracias"


Latil se mordió el labio mientras dejaba la parte superior de los papeles sobre su escritorio y untaba tinta en su pluma. O más bien, pensó que se le escaparía una sonrisa.


"Si aprendo bien de Girgol, puede que me haga más fuerte aquí"


Confía más en su propia mente que en la de Girgol.

Girgol ha prometido estar al lado de Sadi, pero puede romper esa promesa si quiere.

Le maldecirá por ello, pero no puede hacerle pagar por ello.

Pero el poder que ha cultivado no será ignorado.

Tanto si soy una Adversario como una Lord, no hay nada malo en ser increíblemente fuerte. Mucho mejor para mi seguridad.


"Oh, en efecto. Su Majestad"


Como en el momento justo, el chambelán que estaba junto a Latil, apilando papeles por orden de importancia, habló.


"¿De qué se trata?"


preguntó Latil al chambelán, volviendo a centrar su atención en la puerta que había roto y en la laberíntica mansión. Ahora mismo, su trabajo como Emperatriz era lo primero.


"El mago especializado en explosiones que desapareció"

"Ah. Cierto. ¿Has oído algo más?"

"Sí. Se ha informado de un mago llamado Za'ior, aunque aún no hemos sabido nada de él"

"Eso es bueno, porque los magos especializados en explosiones son una fuerza peligrosa. Es bueno saber que al menos uno está contabilizado"

"Sí, señor. Vino él mismo al departamento, diciendo que había estado viajando durante un tiempo para entrenar, pero que estaba herido y no podía ponerse en contacto con nosotros"

"Entonces creo que deberíamos dejar la investigación sobre Za'ior y centrarnos en el otro"

"Sí"


El chambelán volvió a archivar los papeles, Latil meneó la pluma, examinando cuidadosamente cada carta.

Estaba tan absorto en su trabajo que una carta se deslizó entre ellos, sin abrir.

'¿Qué es?'

Latil cogió el sobre, curiosa.

Era un sobre ornamentado, azul claro, con finas piedras preciosas incrustadas en el borde, atado con una cinta y firmado con tinta dorada.


"¿De Willang?"


Además, en el reverso del sobre estaba el sello del rey, junto con una señal que lo dirigía al Emperador de Tarium.


"No hay marca expresa, Majestad, así que no lo he clasificado"

"¿Hay alguna razón para que envíes así una carta a Arhat?"


Latil ladeó la cabeza.

Cartas así no ocurren a menudo, ni siquiera con naciones amigas.

Era un poco irónico, pero sólo con Hyacinth, Latil había escrito alguna vez de Emperador a Emperatriz.


"Me pregunto qué será"


murmuró Latil, luego utilizó su cuchillo para romper el sello de lacre. Sacó la carta, doblada por la mitad, a desdobló para revelar una letra fluida y delicada sobre el papel rígido.


"......."


Al abrir la carta, Latil no parecía contenta, por lo que el chambelán se acercó y preguntó con preocupación.


"¿Qué ocurre, mi Señora?"

"Willang...... me ha hecho una oferta peculiar. ¿Lo envió antes ese extraño emisario?"

"¿Una oferta peculiar?"





















 


* * *

















A Gesta le encantaban las bibliotecas: el olor de los libros, el susurro de los papeles al pasar las páginas, el sonido de los libros al ser cogidos con cuidado en el silencio.


"Hola, señor Gesta"


El bibliotecario sonrió y saludó rápidamente a Gesta al entrar en la Biblioteca Imperial, como hacían a menudo.

Gesta asintió, sacó su último libro y se sentó en su sitio habitual.

Abrió el libro y leyó unas líneas. Oyó que alguien entraba en la sala, pero no se molestó en comprobar quién era.

Mucha gente entraba y salía de la biblioteca, no podía comprobarlo cada vez que oigo llamaba a la puerta.

Pero a medida que los pasos se acercaban más y más, deteniéndose en sus inmediaciones, Gesta tuvo que desconcentrarse de su libro.


"Hola, Mumalang"
Asure: 야, 무말랭 : ya, mumallaeng = Hola, Mumalang, no lo encuentro posible traducción a esto ... lo dejo como tal, si fuera literal, sería: Hola, hojas de rábano seco


Sobre todo, si sonaba así.

Ante la insinuación de sarcasmo en la voz, Gesta pasó los dedos por las esquinas de su libro, hojeando las páginas y levantando lentamente la mirada.

En la cabecera de la mesa, Príncipe Klein, vestido con su habitual atuendo inusual y colorido, permanecía rígido con los brazos cruzados.

Detrás de él, el bibliotecario miraba ansioso. Era como si ya conociera la historia del Príncipe Klein acosando a Gesta como si fuera a comérselo.

Gesta frunció un poco el ceño, pero luego sonrió torpemente y preguntó.


"¿Me has llamado?"

"Reunión de emergencia. Ven rápido"


Pero la respuesta que recibió fue muy extraña. Una reunión urgente.

Gesta pensó qué asunto urgente tenían que discutir él y Príncipe Klein.

No había ninguno. Aunque quizá el cadáver de Klein tendría algo que discutir con él.


"¿No vienes?"


Como si estuviera preparado, Klein se adelantó hacia la salida de la biblioteca, luego dio media vuelta y gritó irritado cuando Gesta no lo siguió.

Estaba claro que el gruñido no era una broma. El propio Klein parecía morirse de ganas de reunirse con Gesta.


"......."


Gesta le miró la nuca, pensativo, luego cerró su libro y se levantó.

Tras saludar con la cabeza al bibliotecario, que abrió nerviosamente la boca para preguntar: "¿Te parece bien?", le entregó el libro que estaba leyendo y preguntó.


"¿Me lo sujetas?"


Klein hizo una pausa para asegurarse de que Gesta le seguía. Su dirección era el harén.


"¿Qué está pasando?"


preguntó Gesta con impaciencia, siguiéndole sin decir palabra hasta que pasaron por un pasillo desierto.

No entendía por qué Klein, que odiaba que lo ignoraran o le hablaran con desprecio, necesitaba celebrar una reunión "de emergencia".

Cuando no había nadie cerca, Klein dijo:


"Gesta debe de haber desenterrado el amuleto del Sumo Sacerdote. Había un grifo pegado a tu ventana"


Por un momento sintió que un escalofrío le recorría la espina dorsal, pero Gesta se limitó a controlar el impulso y amortiguó sus pasos.


"Todavía no. Más tarde"


El inconsciente Klein respondió sin rodeos.


"Todos los Consortes están aquí. Excepto tú"

"¿Por qué?"

"Hay una carta de Willang"

"¿Una carta?"


¿Por qué los Consortes tendrían una reunión de emergencia si había una carta de Willang?


"Es una carta pidiendo que acepte a uno de los príncipes de su país como Consorte"

"Es que...... ¿por qué de repente?"

"Al parecer, ha habido una lucha de sucesión, algunos hermanos han estado tomando partido. Y entonces uno de ellos rebotó hacia aquí"

"¿Es eso cierto?"

"No. Estoy bastante seguro de que es una historia sobre rivalidad entre hermanos, pero el resto son suposiciones mías"


Klein apretó los dientes, como si el mero hecho de escupir las palabras le enfadara.


"Ya es bastante estrecho, ¿qué más me llamas?"

"No es estrecho...... queda mucho espacio"

"Entonces, como hay sitio, vamos a meter a más cabrones, ¿y tú quieres hacer eso?"

"Eso no está bien......."

"No es eso, hay seis Consortes y apenas puedo vislumbrar la cara de Su Majestad, si metemos a otro aquí, me voy a ...... Joder, ¿cuál es?"


A pesar de las duras palabras dirigidas al príncipe, Klein se mantuvo digno.

De hecho, estaba pensando que, si alguno de los príncipes se acercaba al palacio, le diría a Kallain o a Tasir que miraran hacia otro lado y luego los amenazaría adecuadamente para deshacerse de ellos.


"Por aquí"


Caminando sin detenerse, pronto llegaron a una sala de conferencias dentro del harén.

La puerta se abrió para revelar a un grupo de Consortes sentados alrededor de una gran mesa ovalada.

La mesa principal estaba vacía, todos los demás se sentaban a dos asientos de distancia.

Ninguno parecía contento, excepto Tasir, que sonreía.


"Lo tengo"


Klein les dijo sin rodeos, se sentó junto a Tasir, a dos asientos de distancia de él.

Gesta lo miró con curiosidad, luego se sentó a dos espacios de él.

Kallain miró a Gesta, pero él no pareció darse cuenta y volvió la vista al frente.

Cuando todos parecían haberse reunido, Ranamoon, que había mantenido la boca cerrada y los ojos arrogantemente cerrados, levantó lentamente los párpados y habló.


"Veo que están todos, daré comienzo a la reunión"

Asure: van 2 lectoras que me indican de Kallain, que su nombre es distinto al manhwa, explico: el nombre en la novela y manhwa coreano es: 칼라인 : kallain (Kallain), es decir, si usas GT o Baidu, te va botar: Carline, Kalain, Kaline ..... ya es decisión de uno variar el nombre y hacerlo confuso a los lectores, pero desde el inicio siempre pongo observaciones cuando hay cosas que no se puede traducir porque con sentido literal se vería extraño, así como cuando hay nombres nuevos, ahora, cuando los nombres usan hanguls mixtos, uno se guía en base a fonética, respetando las características, ejemplo: 라나문 : lanamun (Ranamoon) ..... pueden usar GT para escuchar como lo habla el traductor y se darán cuenta lo que escribo, no me exijan cambiar nombres por favor

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