HDH 133

Domingo, 16 de Enero del 2022

Hombres del Harén 133

Jugando con una sonrisa brillante

Sonnaught no estaba de servicio hoy, por lo que se dirigió fuera del palacio tan pronto como el trabajo de Latil terminó por el día. Pensaba visitar las librerías de la capital para conseguir el libro que Latil le había pedido.

Pero después de fracasar en su intento de conseguir el libro en dos tiendas y ahora en su tercer intento, Sonnaught se encontró con un hombre que le empujó insistentemente para entrar en la librería.

¿Le había visto antes en el palacio? Sonnaught miró al hombre que pasó junto a él, preguntándose. Pero no parecía nadie sospechoso, así que Sonnaught se dirigió al dueño de la tienda que estaba detrás del mostrador, y le preguntó.

"Vengo a comprar 'El comienzo del romance'. ¿Lo tiene?"

En ese momento. Antes de que el dueño de la tienda pudiera responder, el "hombre que creía haber visto antes en alguna parte" de repente echó a correr.

¿Qué está pasando? Cuando Sonnaught se giró para mirar al hombre, el dueño le gritó enfadado.

"¡Oye! ¡No corras!"

Pero Sonnaught estaba de pie frente a él, vistiendo el uniforme de los guardias imperiales, así que el dueño logró calmarse y se disculpó.

"Lo siento. Una vez alguien golpeó las estanterías mientras corría y las hizo caer. Sígueme"

Mientras seguía al dueño, Sonnaught pensó en el hombre que había visto. Sé que lo he visto en alguna parte. ¿Pero dónde...?

"Debería estar en esta estantería de aquí"

Mientras tanto, el dueño señaló la estantería donde estaba el libro y se dirigió hacia atrás. Era una estantería más grande de lo que Sonnaught esperaba.

"Gracias"

Sonnaught suspiró y comenzó a revisar la estantería desde un extremo. A partir de aquí, parecía que tenía que revisar todos los libros.

Pero alguien se movía ruidosamente a su lado, y cuando miró, era el hombre que pasó antes junto a él, también revisando los libros a una velocidad tremenda en la misma estantería.

Qué hombre tan extraño, pensó Sonnaught mientras fruncía ligeramente las cejas, pero no era que el hombre hubiera hecho nada malo, salvo ponerle un poco de los nervios, así que Sonnaught volvió a revisar los libros.

Por suerte, no tardó mucho en encontrar el libro "El comienzo del romance", que estaba un poco atascado en la estantería, y lo sacó rápidamente. Pero fue entonces.

"¡Ah!"

El hombre corrió hacia él y dejó escapar un grito de consternación, Mientras Sonnaught lo miraba, el hombre miró a un lado y a otro entre Sonnaught y el libro, y preguntó cuidadosamente.

"Er... Si no es un problema, ¿puede darme el libro en su lugar?"

Sonnaught no contestó con una cara distante ante la ridícula petición, pero el hombre fue persistente.

"Es un libro que he estado buscando desesperadamente. Es urgente..."

"Yo también lo he estado buscando con urgencia"

"Ah, claro que sí, pero... Yo..."

Sonnaught dejó de atender al hombre y se dio la vuelta. Quería entregarle esto a Latil tan pronto como pudiera y ver su sonrisa.

Pero inesperadamente, el hombre bloqueó el camino de Sonnaught.

¿Qué cree que está haciendo? Cuando el hombre siguió deteniéndolo, incluso después de ver el uniforme de los guardias, Sonnaught enarcó una ceja con desconcierto y miró al hombre.

"Lo siento mucho. Pero... es un libro que realmente necesito"

"Su Majestad desea leerlo, no puedo renunciar a esto. Estoy seguro de que volverá a salir si espera"

Sonnaught trató de rodear al hombre esta vez de nuevo, pero el hombre se puso aún más pálido cuando escuchó el nombre del Emperador y bloqueó desesperadamente a Sonnaught de nuevo, diciendo "¡Por favor!"

Sonnaught estaba a punto de empujar al hombre, pero bajó la mano cuando recordó que el dueño había dicho que la estantería se había caído una vez.

Mirando más de cerca, el hombre parecía muy pálido, casi enfermo.

"Si no soy capaz de devolver este libro... Hay alguien que podría morir"

El corazón de Sonnaught se debilitó cuando el hombre mencionó asuntos de vida y muerte, y se detuvo a reflexionar por un momento.

El hombre, el ayuda de cámara de Ranamoon, Cardan, miró desesperadamente a Sonnaught. No había mentido. Si Sonnaught tomaba este libro, Ranamoon podría morir realmente de vergüenza.

Sonnaught dudó, pero al final cedió el libro a Cardan. Podría ir a otra librería, pensó.

No habría cedido si Latil le hubiera dicho que cogiera el libro cuanto antes, pero no era el caso, así que supuso que Latil lo entendería.

"Gracias. Gracias"

Cardan se inclinó y corrió apresuradamente hacia el mostrador.

Sonnaught siguió con la mirada al ridículo hombre y luego se dio cuenta de quién era.

Era el criado que siempre seguía a Ranamoon.

Más tarde, Sonnaught pasó por todas las demás librerías de la capital, pero ya no había más ejemplares del libro.

Era porque Cardan había barrido todas las librerías de antemano, pero Sonnaught, que no tenía forma de saberlo, se quedó perplejo. ¿Es realmente popular el libro?

'Pero Su Majestad me había dicho que lo consiguiera después de escuchar su nombre, así que tal vez sea un libro que se ha hecho popular por los rumores'

Era una pena, pero pensando que el libro volvería la próxima vez que viniera, Sonnaught terminó de buscar por hoy y volvió a sus aposentos.

* * *

"Ya veo. Sir Sonnaught había salido a comprar ese libro"

"Ha dicho que Su Majestad deseaba leerlo"

"Te las arreglaste para no entregárselo"

"No me había obligado. Dijo que era un libro que Su Majestad deseaba leer, pero parecía que no había recibido ninguna orden de conseguir el libro a toda costa"

"Buen trabajo"

Dando una palmada en el hombro de Cardan, Ranamoon se levantó del sofá y se acercó a las ventanas para observar el hermoso paisaje del exterior.

Cardan no sabía por qué Ranamoon miraba de repente por la ventana, pero se esforzó por desplegar la bola de orgullo arrugada de Ranamoon con elogios.

"Como era de esperar, eres realmente inteligente, joven maestro. Adivinaste que Su Majestad intentaría leer ese libro de inmediato"

"¿Recorrer todas las librerías durante unas dos semanas más?"

"¿Dos semanas?"

"Puede que no se rindan de inmediato"

"Sí"

Una vez que Cardan salió de la habitación, Ranamoon sacó "El comienzo del romance" de la estantería y lo abrió en su escritorio.

Iba a meter todo el conocimiento del libro en su cabeza lo más rápido posible, y luego se desharía de este libro.

Definitivamente, no iba a dejar que Latil supiera que estaba estudiando esas cosas.

* * *

Al día siguiente. Cardan, tras volver de comprar el libro, informó de que "no había más ejemplares del libro"

Aun así, Ranamoon le dijo a Cardan que siguiera buscando durante las dos semanas siguientes, y al día siguiente Cardan volvió e informó de lo mismo.

Significaba que no había más ejemplares del libro circulando por la capital después de haberlos comprado todos hace dos días.

Como las cosas estaban así, Ranamoon se sintió ahora aliviado, pensando que las librerías ya no comprarían el libro.

Aun así, iba a seguir enviando a Cardan, pero no parecía probable que las librerías repusieran el libro cuando ni siquiera era popular.

De todos modos, cuando las cosas parecían haberse solucionado, Ranamoon se llevó a otro sirviente a un lugar pintoresco del jardín mientras Cardan estaba fuera, pues le apetecía tomarse un café tranquilamente mientras disfrutaba de la naturaleza.

Sin embargo, cuando llegó ya había visitantes ocupando su asiento.

Uno era Clein y sus subordinados, y el otro era Gesta y su ayuda de cámara.

Además, había tres bancos alineados uno al lado del otro, y ambos habían ocupado los de ambos lados, dejando sólo un banco en el centro.

Los ojos de los visitantes se clavaron en Ranamoon, y éste se disgustó pensando que no debería haber venido. Lo que quería era relajarse y tomar café a solas, no convertirse en un mono en un zoológico para que los demás lo vieran.

Pero su orgullo no le permitió dar la vuelta e irse, ya que parecería que estaba evitando a los dos.

"Joven maestro. ¿Vas a dar la vuelta?"

"¿Por qué debería hacerlo?"

Preguntó el sirviente en voz baja, al darse cuenta de ello, pero Ranamoon respondió con altanería antes de pasar a sentarse en el banco del centro.

La caja torácica del sirviente picó por la mirada de Gesta y Clein, pero siguió el ejemplo de Ranamoon y sirvió elegantemente el café en una taza, pasándosela a Ranamoon.

Ranamoon se llevó la taza a los labios con más gracia que de costumbre y bebió de ella.

Hubiera sido ideal que todos se ignoraran ahora que estaban juntos de esta manera. Pero Gesta, que estaba mirando a Ranamoon, lo elogió con voz tímida.

"Te ves increíble incluso cuando estás bebiendo una taza de café, maestro Ranamoon"

Ranamoon se giró para mirar a Gesta ante el repentino elogio, y Gesta sonrió torpemente.

Gesta parecía esforzarse por conversar con ellos, sintiéndose demasiado apenado como para ignorarlos cuando todos se conocían.

Ante esto, Ranamoon asintió con la cabeza y volvió a beber café.

Pero en cuanto consiguió dar un sorbo, escuchó el sonido de un chasquido de lengua desde la dirección opuesta.

"No tienes vergüenza, Rábano Seco. Incluso después de recibir tantos golpes de esa comadreja... Increíble"

"Rábano Seco... ¿Yo? ¿Estás hablando de mí?"

Ante esas palabras, Gesta preguntó con una mirada de asombro, y Ranamoon también bajó su copa para mirar a Clein en respuesta al desagradable matiz mezclado en ese comentario.

Cuando los ojos de ambos se fijaron en él, Clein sonrió y levantó una mano.

"Ah, no me malinterpretes, Ranamoon. No me refería a ti, sino a tu padre"

Pero su excusa era aún más burlona, lo que hizo que Ranamoon apretara su taza y preguntara.

"¿Acabas de llamar comadreja a mi padre?"

En lugar de responder, Clein imitó las palabras de Gesta de antes y volvió a burlarse de Ranamoon.

"Nuestra comadreja es la más guay cuando está bebiendo una taza de café. Sigue bebiendo tu café"

"La gente dice que el tipo de lenguaje que utiliza un hombre ilustra su clase. Parece que tú ni siquiera tienes clase para representarte a ti mismo"

"O tal vez, simplemente no tienes el oído para entenderlos"

Gesta contuvo la respiración y observó a Ranamoon y a Clein de un lado a otro.

Por suerte, Ranamoon parecía haber perdido el deseo de continuar con sus inútiles bromas y reanudó la bebida de su copa como para ignorar al otro.

Pero si las cosas terminaran aquí.

"Lo sabía, simplemente no tienes oído"

Clein dibujó, burlándose de Ranamoon una vez más, y Ranamoon dejó de beber café para tratar con Clein de nuevo.

"El emperador Hyacinth era conocido por sus modales amables y gentiles cuando estudiaba en Tarium. Parece que ningún hermano menor puede superar a su hermano mayor"

"Para ti, el hijo mayor, decir tal cosa, sólo es untarte pintura de oro en tu propia cara"

A Gesta le temblaron las piernas al ver a los dos, uno haciendo una comparación que la gente odiaría mucho escuchar, y el otro riéndose, diciendo que sólo estaba soplando su propio cuerno.

Los sirvientes también se inquietaron ante el tenso ambiente. Si esto continuaba, ¿quién sabe a quién se le echaría la culpa?

"Si no pueden creerme porque soy el hijo mayor, pueden preguntarle a Su Majestad. ¿Quién sería el mejor de los dos, el emperador Hyacinth o usted? Su Majestad era amiga íntima de tu hermano, así que ella podría comparar a los dos mejor que nadie"

Pero en el momento en que Clein se enfureció ante este comentario, dejando a Ranamoon como vencedor momentáneo de su disputa, se pudo ver a lo lejos a Cardan, el ayuda de cámara de Ranamoon, corriendo hacia ellos.

Mientras Ranamoon lo observaba mientras sorbía su café, Cardan terminó de acortar la distancia y jadeó, con las manos agarrando sus rodillas para apoyarse.

"Joven amo. Joven maestro"

Ranamoon enarcó las cejas mientras Cardan seguía llamándole sin cesar.

"No voy a ninguna parte, así que vete y cálmate"

"No es el momento de calmarse... Espera, por favor, dame, dame un momento..."

El ayuda de cámara parecía tener alguna noticia urgente, y Clein le observó con renovado interés.

Ranamoon pensó en cómo Clein había difundido los falsos rumores de que Kallain y una doncella habían huido juntos para fugarse.

Si se marchaba ahora mismo, ¿quién sabe qué tonterías diría entonces Clein sobre él? Ranamoon no tuvo más remedio que interrogar a Cardan en el acto.

"¿Qué pasa para que tengas tanta prisa?"

¿Se me permite decirlo aquí? Cardan miró de reojo a Clein y a Gesta, y luego bajó la voz hasta convertirla en un susurro para que sólo Ranamoon pudiera oírlo.

"Joven maestro. Después de que comprara todos los ejemplares de 'El Libro' hace dos días, todas las librerías compraron docenas más, pensando que era un libro muy vendido"

¿Qué debemos hacer? Cardan parecía estar al borde de las lágrimas, y Ranamoon se olvidó por completo de la disputa que había tenido con Clein hace un momento.

"Ahora que las cosas han llegado a esto, las librerías volverán a comprar los libros aunque los compremos todos. Ahora es un éxito de ventas"

Ranamoon pasó su café medio vacío al criado y se levantó con premura. Luego se marchó sin saludar a los demás, y Cardan le siguió rápidamente.

Clein observó a los dos con curiosidad mientras se inclinaba hacia Gesta para preguntar. 

"¿Por qué crees que esa comadreja huye con el rabo entre las piernas?"

"Yo, no estoy seguro..."

Gesta fue incapaz de seguir con la conversación, su cara se puso roja y nerviosa, por lo que Clein volvió a centrar su atención en la figura de Ranamoon que se retiraba con ojos extremadamente curiosos.

Parecía que una conjetura ridícula iba a salir de esa boca, por lo que Gesta se apresuró a preguntar a Clein en un intento de cambiar de tema.

"Pero, ¿es cierto?"

"Qué"

"Que el emperador Hyacinth y Su Majestad se llevaban bien..."

"Eso parece, sí"

"Ya veo"

Gesta continuó con una brillante sonrisa, incluso cuando Clein estaba respondiendo a medias, con los ojos centrados en Ranamoon.

"Entonces debe saber mucho más de Su Majestad que nosotros, Su Alteza. Me da envidia"

Clein se volvió por fin hacia Gesta al oír esas palabras con una sonrisa, pero esa sonrisa se borró pronto de su rostro.

Pensando en las cosas, era extraño.

¿Por qué Hyacinth no le dijo nada sobre el emperador Latrasil cuando su hermano menor iba a ir con su amiga como consorte, como había dicho Gesta?

Normalmente, si el hermano menor de uno, con el que estaba muy unido, iba como consorte de su amigo, ¿no le contaría al menos lo que le gustaba y lo que no le gustaba a su amigo?

Una vez que empezó a sospechar, las cosas en las que antes no había pensado mucho empezaron a molestarle sin cesar.

El hecho de que Sonnaught, que no se metía en los asuntos de los demás, le impidiera buscar al primer amor de Hyacinth.

El hecho de que Hyacinth no le diera ni un solo consejo a su hermano menor, que iba a ser consorte, incluso cuando era muy amigo del emperador Latrasil.

El hecho de que la emperadora Latrasil dijera que no sabía quién era el primer amor de Hyacinth, incluso cuando pasaban todo el tiempo juntos.

Y... Latil, que había estado llorando a mares en la boda de Hyacinth.

'Si alguien te viera entonces, pensaría que te han abandonado tus novios'

Como si le hubiera caído un rayo, los ojos de Clein se abrieron de par en par. 

"¿Podría ser Su Majestad .... el primer amor de mi hermano?

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