HDH 131

Domingo, 09 de Enero del 2022

Hombres del Harén 131

Buen intento, Ranamoon

Pero también sería extraño que no pudiera tragar. Dudando por un momento, Latil colocó una mano sobre los ojos de Ranamoon y tragó tan silenciosamente como pudo mientras sus ojos estaban cerrados.

Bueno, lo intentó. Pero, tanto si se lo estaba imaginando como si no, el sonido parecía ser demasiado fuerte. Latil miró a Ranamoon.

Por suerte, no hubo respuesta de Ranamoon. Parecía que no lo había oído. Qué alivio. Habría sido vergonzoso que lo hiciera.

Ese momento. Las comisuras de los labios de Ranamoon se levantaron marginalmente.

"!"

¡Lo oyó!

Latil se apresuró a pasar la mano por los ojos de Ranamoon de nuevo. Pero eso sólo provocó que la comisura de los labios de Ranamoon aumentara.

Latil estaba en conflicto, atascado entre hacer una cosa u otra. Soy humana, qué tiene de malo tragar, protestó firmemente su conciencia, pero los corazones no siempre seguían al cerebro.

"Ejem. Hm"

Cuando Latil comenzó a aclararse la garganta sin razón, Ranamoon acercó su mano y la colocó sobre la de Latil. Los ojos grises de Ranamoon se revelaron cuando su mano arrastró la de Latil lejos de su cara.

Seguía teniendo una mirada fría, pero sus ojos contenían una especie de brillo divertido. Latil volvió a cubrir los ojos de Ranamoon.

Esta vez, Ranamoon no bajó la mano de Latil.

"¿Por casualidad te diviertes con este tipo de cosas?"

Se limitó a murmurar tranquilamente al amparo de la mano de Latil. Hablaba como si Latil fuera alguien que disfrutaba acosando a los demás con los ojos vendados, así que Latil volvió a soltar la mano.

Ranamoon extendió entonces lentamente la mano y la pasó suavemente por el cuello de Latil. La piel de Latil se puso de gallina mientras él recorría la columna del cuello con sus dedos.

Sin darse cuenta, Latil cerró los ojos e inclinó la cabeza hacia atrás, y las caricias de Ranamoon se hicieron más firmes contra su cuello.

Latil aspiró una bocanada de aire y la expulsó lentamente mientras miraba al techo.

Pero cuando Ranamoon, arrastrando su mano desde el cuello de ella, llegó al cuello de la camisa fuertemente abotonado, Latil colocó su mano sobre la de él y sacudió la cabeza.

"Buen intento, Ranamoon"

* * *

"Nuestro príncipe Clein, puesto que ya eres un príncipe y Su Majestad te favorece, debes ser el más cercano al puesto de príncipe consorte en este momento, ¿no?"

Clein soltó una risa altiva al escuchar las directas palabras de Tasir.

"Tienes buen gusto para las palabras"

"Es un alivio que esté cerca de usted, Su Alteza. ¿Verdad?"

"¿Somos cercanos?"

 

"¿Creía que éramos los más amigos?"

Clein se lo pensó un momento pero asintió de todos modos mientras Tasir enlazaba su brazo con el de Clein

"Así es. Aunque para mí es una pérdida"

Como había dicho Tasir, el favor de Latil a Clein estaba en pleno apogeo últimamente, lo que hacía que Clein se sintiera bastante generoso y benévolo.

Además, Tasir había sido amable con él incluso antes de que Clein empezara a recibir el favor de Latil, por lo que se podía decir que Tasir era la persona más cercana a Clein en el harén.

Pero esto era sólo desde la perspectiva de Clein, y cualquiera que oyera las palabras "pérdida para mí" se sentiría ofendido.

Aun así, Tasir sonrió sin parecer ofendida en lo más mínimo. Al ver esto, el ayuda de cámara de Clein, Vanyll, pensó que "ese mercader debe estar intentando ponerse en la cola de Su Alteza", y sonrió favorablemente al ayuda de cámara de Tasir.

Todos parecían estar intercambiando sonrisas, así que Hierlan rápidamente le dedicó una sonrisa al otro valet.

Pero Hierlan estaba seguro de que Tasir no se iba a pegar al lado de Clein.

El Tasir que él conocía no era alguien que apuntara definitivamente al príncipe consorte. Tasir era alguien que estaría bien con establecer un príncipe consorte marioneta si llegaba a la conclusión de que seguir siendo consorte sería más beneficioso que convertirse él mismo en príncipe consorte.

Además, actualmente no había nadie más cercano a la posición de príncipe consorte en el harén. Incluso si Clein estaba en ascenso en este momento, tenía importantes restricciones que lo ataban, como el hecho de que era un extranjero y que no tenía suficiente poder en Tarium.

Así que en esta situación incierta en cuanto a quién se convertiría en príncipe consorte, no había manera de que Tasir se enemistara con todos los demás consortes por estar especialmente cerca de una sola persona.

"Mi querido Príncipe Clein, tú..."

Tasir, que había estado halagando a Clein con todo tipo de palabras encantadoras, de repente fijó su mirada hacia una determinada dirección y levantó una ceja.

Clein, sintiéndose muy bien por los halagos de Tasir, giró la cabeza para seguir la mirada de Tasir, e inmediatamente arrugó los ojos cuando vio a Sonnaught saliendo de la habitación de Kallain.

A Clein no le gustaba Sonnaught en primer lugar y se sentía incluso irritado cuando Sonnaught se atrevía a interferir en los asuntos de la familia imperial Karisen. Hasta el punto de que sentía desagrado al ver a Sonnaught incluso de lejos.

Por eso, aunque Tasir murmurara "Qué extraño", Clein se limitó a dar la espalda a Sonnaught.

"Ese tipo siempre es extraño. ¿Qué nos importa si actúa aún más extraño? Vayamos a otro lugar. No quiero ni ponerle los ojos encima"

Sin embargo, Tasir siguió hablando.

"Sir Sonnaught es alguien que no se preocupa por los asuntos de los demás en absoluto."

"Y qué"

"Entonces, ¿no es bastante extraño que sea cercano al Maestro Kallain? Los dos no parecen compartir nada en común tampoco. Diferentes estatus también..."

 

"Deben haberse enamorado en alguna parte o algo así"

"Qué suerte. A mí también me gustaría llevarme bien con Sir Sonnaught"

Clein, que se había sentido irritado, se disgustó aún más ante las palabras de Tasir y advirtió. 

"Si quieres seguir siendo mi amigo, no te atrevas a llevarte bien con Sonnaught ese bastardo"

"Vaya, eres tan posesivo..."

"¿Qué has dicho?"

¿Posesivo? Clein fulminó con la mirada a Tasir, pero éste enlazó sus brazos con los del príncipe y lo dirigió suavemente en dirección contraria a donde estaba Sonnaught.

"Vamos. Podemos ir por allí. ¿Será suficiente?"

Clein resopló y caminó en la dirección a la que Tasir lo conducía, pero continuó regañando a Tasir durante su caminata.

"No son palabras vacías, ¿me oyes? Si quieres seguir siendo mi amigo, no te lleves bien con la gente que no me gusta. ¿De acuerdo?"

De repente, esta vez fue Clein quien se detuvo con las cejas fruncidas.

"¿Qué pasa?"

Esta vez, al ver que Clein no le seguía ni siquiera cuando tiraba de él, Tasir soltó el brazo del otro y preguntó.

En lugar de responder, Clein se dio la vuelta y miró en la dirección en que se había ido Sonnaught.

"¿Su Alteza?"

"...Dijisteis que Sonnaught no se mete en los asuntos de los demás"

"Lo dije"

"Entonces, ¿qué significaría que un tipo como él interfiriera en los asuntos de otros?"

"No sería un asunto ajeno"

Pensando que era extraño, Clein enarcó aún más las cejas.

Lo que ocurriera con Hyacinth sería asunto de un completo desconocido para Sonnaught. No podía ser asunto de otro. Entonces, ¿por qué se metió de repente en lo que involucraba a mi hermano? Cuanto más pensaba, más extraño le parecía.

"¿No sería... asunto... de otra persona?"

Al observar la confusión de Clein con curiosidad, los ojos de Tasir pronto se curvaron en una sonrisa, como si hubiera comprendido las cosas.

"¿Debéis tener algo que os moleste con respecto a Sir Sonnaught, Alteza?"

"¿Molestarme? De ninguna manera"

Un pensamiento le rondó por la cabeza a Clein, pero se dio la vuelta y reanudó la marcha por donde iba cuando no podía entender las cosas.

Tasir se acercó al lado de Clein y le susurró al oído.

"¿Quieres que te aconseje?"

La sonrisa de Tasir se amplió cuando Clein miró a su lado.

"Debo decir que soy un buen pensador, amigo mío"

* * *

Dentro del gélido castillo subterráneo, Tralla apretaba y aflojaba repetidamente las manos, angustiado por no tener forma de saber si el monstruo que envió a Ranamoon había cumplido su misión.

La Máscara del Zorro también empezaba a irritarle los nervios, zumbando mientras organizaba las cosas desde su lado. Tralla consiguió mantener la calma y preguntó.

"¿Qué estás mirando?"

La Máscara del Zorro dejó de mover las manos y giró la cabeza.

En ese momento. Tralla sintió que una repentina oleada de terror le invadía, incapaz de leer la expresión del otro. Nunca se le había ocurrido pensar en ello, pero ahora Tralla se preguntaba cómo le miraba la Máscara del Zorro debajo de esa máscara.

"Es una partitura"

Sólo cuando los labios bajo la máscara se curvaron en una sonrisa, Tralla se sintió ligeramente aliviado al preguntar.

"¿Una partitura?"

"Tiene escrita tu música favorita"

"...¿La mía?"

"A todos los Señores anteriores les ha gustado esta música"

Para Tralla, que estaba ansioso por saber si era el Señor o no, las palabras de la Máscara del Zorro sonaron como una prueba.

"Entonces supongo que a mí también me gustará"

Tralla tragó una vez y respondió de mala gana. Una sonrisa más amplia surgió en los labios de Máscara de Zorro cuando se levantó y se ofreció.

"¿Lo pongo para ti?"

Tralla asintió a regañadientes, sin querer escucharla en absoluto. La Máscara del Zorro llevó las sábanas al piano colocado en una esquina y se sentó.

Dos manos suaves e impecables se revelaron cuando la Máscara del Zorro se arremangó.

Tralla observó la escena con ojos pesados, y la Máscara del Zorro presionó varias teclas con un sonido aún más pesado. Tralla cerró los ojos, oyendo la nota grave que resonaba en la habitación, y luego volvió a abrirlos.

Se sintió avergonzado por haberse dejado intimidar por su propio subordinado. Se prometió a sí mismo no dejarse arrastrar, pero extrañamente, una vez que empezó a sentirse intimidado por el otro, se encontró constantemente arrastrado por su propio ritmo.

'Soy el Señor, no debería sentirme intimidado por simples subordinados que han sido dispuestos para mí'

"Basta"

Al final, Tralla se disgustó por sí mismo y le dio instrucciones a la Máscara del Zorro. La Máscara del Zorro ladeó la cabeza con desconcierto.

"Pero si ni siquiera he empezado"

"Me gusta la tranquilidad"

Sin embargo, cuando Tralla dijo firmemente lo contrario, la Máscara del Zorro pareció pensar un momento, luego asintió y quitó las manos de las teclas del piano.

"Ya veo. No debo hacer nada que no le guste, mi Señor"

Ante esa actitud complaciente, Tralla pensó con alivio. Sí, sólo tengo que seguir así. Me va a seguir cuanto más actúe y hable como el Señor.

"Además, he descubierto que el número 128 que enviaste a Ranamoond ha muerto"

Pero tan pronto como se sintió aliviado, la voz despreocupada de Máscara de Zorro le atravesó como un cuchillo y le removió las entrañas.

Los ojos de Tralla se abrieron de par en par.

La Máscara del Zorro cerró la tapa del piano con una sonrisa y se dio la vuelta.

"Estamos escasos de criaturas oscuras, ya que no somos muchos los magos oscuros. Por favor, no vayas por ahí usándolas imprudentemente"

Su sonrisa, vista desde el lado en el que se encontraba Tralla, parecía algo así como una mueca de satisfacción y enfadó a Tralla. Más aún porque la forma en que le hablaba la Máscara del Zorro no era en absoluto la de un subordinado.

Tralla miró con fiereza a Máscara de Zorro. La Máscara del Zorro se levantó del piano para recoger las partituras y se disculpó rápidamente al sentir la intensa mirada.

"Lo siento si he parecido grosero. Pero usted tiene más recuerdos de ser humano que otra cosa, mi Señor"

Pero incluso esa disculpa sonó a burla, así que Tralla evitó encontrarse con los ojos del otro mientras murmuraba.

"...Está bien. Es comprensible"

"¿Lo es?"

Humillado, Tralla apretó los puños.

Viendo cómo actuaba la Máscara del Zorro de esa manera, era seguro que pensaba que era un error traer a Tralla como el Señor. Mientras la Máscara del Zorro se daba la vuelta para terminar de organizar el resto de las hojas de música, Tralla volvió a mirar al personaje como si fuera a matarlo.

Una súbita rabia le atravesó. Tanto si Ranamoon ese capullo era el Señor como si no, tampoco había despertado todavía.

¿No era por eso que la Máscara del Zorro se limitaba a dejar a Ranamoon en paz, cuando podía tomar a Ranamoon y probarlo de inmediato?

Sí. Aunque sea un falso Señor, no hay razón para que tenga miedo de ese bastardo'

Sintiéndose seguro de sí mismo, Tralla se levantó de su trono y avanzó hacia la Máscara del Zorro, sin poder contener su furia.

Tenía que recuperar de algún modo su ritmo haciendo que esa Máscara del Zorro se sintiera incómoda.

La Máscara del Zorro ya se había dado la vuelta, habiendo terminado de recoger las hojas de música.

"He sentido curiosidad"

"Habla"

"¿Por qué te cubres la cara?"

"¿No te lo he dicho antes? Es la norma"

"Sí. Los vampiros a veces os encontráis con vuestros nombres y rostros cambiados a lo largo de vuestra larga vida, y los de alto rango utilizan nombres de animales y máscaras para referirse a los demás. Si no, no podéis distinguiros"

"Debo elogiar tu memoria"

Tralla dio una orden a la sonriente Máscara de Zorro.

"Quítatela... Esa máscara"

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