HDH 103

HDH 103

Lunes, 18 de Octubre del 2021



Hombres del Harén 103

Lluvia y Burbujas y Ranamoon


"Pronto es el cumpleaños de Su Majestad"

"¿Eh? Pero no es realmente 'pronto', ¿verdad?"

"Los banquetes de cumpleaños deben hacerse espléndidamente, así que debemos empezar a prepararlos con antelación. Teniendo en cuenta el periodo de preparación, es bastante pronto"

"Ah, es así"


Fue cuando Latil estaba hablando con el chambelán sobre su banquete de cumpleaños. Otro sirviente entró en el despacho e informó a Latil de que Tasir había venido a verla.


"Su Majestad. El maestro Tasir desea veros ahora"


Habiéndose vuelto bastante favorable a Tasir después de que éste ayudara a Latil a regresar a palacio, el Chambelán se inclinó y se dio la vuelta, dejando que los dos hablaran cómodamente..

Una vez que el chambelán salió por la puerta, Tasir fue el siguiente en entrar en la sala. 
Latil apartó desordenadamente los documentos de su escritorio a los lados, haciendo espacio en el centro, y preguntó.


"¿A qué has venido?"

"He venido a decirle que he terminado el trabajo que me encargó".

"Pero hay varios trabajos que te di"

"Así que 𝘥𝘰 sabes que me das muchos trabajos"


Tasir se pavoneó triunfalmente al lado de Latil y sonrió mientras apoyaba disimuladamente su peso en ella.


"Y así es como poco a poco irás cayendo más y más en mis encantos. Apuesto a que las cosas serán incómodas para ti cuando me vaya"

"Entonces es una suerte que no te vayas nunca de mi lado"


Latil alargó la mano y empezó a hacer cosquillas en el costado de Tasir. Tasir se retorció, pero no pudo aguantar más y tuvo que pasar al otro lado del escritorio de Latil, que tomó una silla y se sentó.


"Debes tener muchas cosquillas"

"¡Tu conocimiento sobre mi cuerpo aumenta cada día que pasa!"

"..."


Mientras Latil lanzaba a Tasir una mirada con ojos de flojera, Tasir extendió la mano por el escritorio y le acarició el rabillo del ojo con un pulgar, antes de soltar una carcajada.


"¿Ahora has decidido ignorar las palabras que crees que no vale la pena responder?"

"No las he ignorado. Simplemente no sabía cómo responder"

"Bueno, está bien. Somos prácticamente un matrimonio. Su Majestad es el único en este mundo que puede estudiar Tasirología"

"Me pregunto si vale la pena estudiarla"

"Por supuesto que lo hay"


Mientras miraba a Tasir, una sonrisa inconsciente surgió en los labios de Latil. Pero cuando el reloj dio trece vueltas, Latil se dio cuenta de que no era el momento de hacer tonterías y se concentró.


"¿Qué querías decirme? Ahora deja de bromear y habla"

"Creo que he localizado dónde está la base del príncipe Tralla"

"Si lo has localizado, entonces lo has localizado. ¿Qué es eso de 'creo'?"

"Todavía no sé si ha vuelto a su base, o a otro escondite para mantener a la señorita Anakcha allí"

"Eso es cierto"


Latil asintió, mirando las costuras de la ropa de Tasir, que hoy estaban bien cosidas y sujetas en su sitio.


"Pero está bien. De cualquier manera, no importa si has encontrado su escondite o su base. Tanto si has atrapado a Tralla como si no... al menos tendremos más información que ahora"


Latil sonrió débilmente mientras apretaba los puños.


"En cuanto lo vea, a Tralla ese hijo de puta, lo mataré de nuevo. Esta vez no hace falta la ejecución, así que lo haré yo mismo"

"¿Vas a ir tú también?"

"Por supuesto. No hay mucha gente que sepa de Tralla ahora mismo"


Pero Latil dejó de hablar de repente y frunció las cejas, inclinando la cabeza hacia un lado.


"¿Qué pasa?"

"No, no es nada. Tasir. Ve tú. Con Kallain. Eso sería mejor"


Tasir asintió, sin tener ningún problema en hacerlo.


"Entonces lo haré. Me da un poco de miedo ir con el maestro Kallain, pero... si los enemigos también tendrán miedo entonces, bueno, no me importa"

"No ha pasado mucho tiempo desde el incidente del falso emperador. No debería volver a alejarme del palacio por un asunto privado tan pronto, por si acaso. Dudo que Reyan intente hacer lo mismo de forma consecutiva, a menos que esté loco, pero ¿quién sabe? Puede que esté loco después de todo"


Tasir estuvo de acuerdo mientras miraba alrededor de la habitación.


"Ese sirviente de antes no está aquí hoy. Supongo que no ha pasado la prueba"

"Todavía lo estoy vigilando. Todavía no ha abierto la boca ni ha decidido mantenerla cerrada. Espero que apruebe. De lo contrario, será una molestia reemplazar a todos"







* * *







Después de dar instrucciones a Kallain y Tasir para que cada uno llevara a los miembros del cuerpo de la Muerte Negra y a Schwarzwald para que trajeran a Anakcha de vuelta e investigaran el paradero de Tralla, Latil fue directamente a una reunión sobre los asuntos del estado.

El país vecino Wolrang fue mencionado en la reunión, ya que el país mostraba cierta actividad sospechosa.

'Qué estupidez. Los incidentes relacionados con los zombis estallaron en los dos Imperios, ¿y creen que estarán a salvo de todo esto?'

Una vez terminada la reunión, pronto llegó la hora de la cena.

Latil miró de un lado a otro en dirección a su habitación y en dirección al harén, antes de decidirse a cenar con el Gran Sacerdote y comenzó a caminar hacia el pasillo que conducía a la habitación del Gran Sacerdote.

Sólo han pasado unos días desde que el Gran Sacerdote sufrió los extraños rumores, así que planeó visitarle y demostrar a la gente que no creía en esos rumores.

Aunque le había enviado un regalo, sería más efectivo visitarlo en persona y demostrar que ambos seguían teniendo una buena relación.

Pero sólo había dado unos pasos cuando empezaron a caer unas gotas de lluvia. Pronto, la lluvia comenzó a caer repentinamente. En lugar de ser refrescante, el aguacero era casi como una cascada.


"¿Quiere volver, Su Majestad? ¿O debo traer un paraguas?"

"Ve a traer un paraguas"


Cuando un sirviente regresó rápidamente con un paraguas, Latil tomó el paraguas mientras ordenaba a los guardias que la seguían de cerca que retrocedieran.


"Iré sola desde aquí, así que podéis volver todos"


Mientras los guardias regresaban, Latil atravesó la arcada y entró en el harén. El repentino aguacero dobló las flores, dificultando el paso por el sendero, pero Latil siguió caminando de todos modos.

Al pasar junto al lago, vio a Ranamoon de pie en el pabellón sin paredes situado cerca de la orilla del lago con una mirada preocupada.

Tal vez debido a la espesa capa de lluvia que caía, Ranamoon no pudo ver inmediatamente a Latil mientras seguía mirando al cielo. Sólo cuando Latil se acercó a él, lo vio y levantó un saludo.


"Su Majestad"


Latil notó que el pelo y los hombros de Ranamoon estaban empapados. Parecía haberse precipitado al pabellón por el repentino aguacero.


"¿Dónde está su ayuda de cámara?"

"Ha ido a traer un paraguas"


Latil se acercó a Ranamoon en el pabellón y le tendió la mano.


"Vamos a compartir el mío. Vamos. Podrías resfriarte. Tu ropa ya está mojada"


Ranamoon frunció los labios como si contemplara la posibilidad de negarse, pero finalmente se acercó a la sombrilla de Latil y puso la mano en el mango.


"Yo lo sostendré"


Como Ranamoon era más alto de todos modos, Latil le entregó el paraguas a Ranamoon mientras empezaban a caminar hacia el harén.

Al cabo de un rato, Ranamoon extendió repentinamente la mano y rodeó el hombro de Latil con un brazo, acercándola a él.


"Pensé que podría lloverte si te alejabas demasiado..."


Latil, que inesperadamente se vio atraída hacia el pecho de Ranamoon, pudo oler un aroma tenue pero fresco procedente de él. Era el aroma que también había olido antes en la habitación de Ranamoon.

Latil estaba a punto de preguntar qué era ese perfume, ya que encajaba perfectamente con el gélido Ranamoon, pero cambió de opinión e hizo otra pregunta.


"¿Sabías que pronto es mi cumpleaños?"

"Sí"

"¿Sabías que cumplimos años el mismo día?"


Ella no pudo oírlo, pero Ranamoon debió reírse. Latil sintió una vibración en el pecho de Ranamoon, que estaba casi presionado contra su propia cara, y apartó la mirada torpemente.


"¿Cómo podría no hacerlo?"

"¿Hay algo que quieras para tu cumpleaños?"

"¿Su Majestad tiene algo que desee tener?"

"Bueno. Se lo haré saber después de pensarlo"

"Entonces haré lo mismo"


Sólo hablaron un rato, pero ya habían llegado a la entrada. Sintiéndose un poco decepcionada, Latil devolvió la mirada a Ranamoon mientras entraba en el toldo, inclinando vagamente el paraguas hacia su lado.

Ranamoon se quedó mirando a Latil durante un momento, como si se preguntara si debía devolverle el paraguas y despedirse de ella, o pedirle que se pasara por su habitación para expresarle su agradecimiento.

Como Latil seguía sin moverse del sitio mientras el otro no tomaba una decisión inmediata, Ranamoon acabó por hacer una pregunta.


"¿A quién has venido a ver?"

"Bueno..."


Al Gran Sacerdote. Pero en medio de todo esto, no estaría bien pedirle a Ranamoon que le devolviera el paraguas para poder ir a ver al Gran Sacerdote, así que Latil dio un paso más hacia Ranamoon y cambió sus palabras.


"En realidad, he venido a verte a ti"

"Ya veo"


Ella no había esperado que él se alegrara por ello, pero Ranamoon realmente se dio la vuelta sin un solo cambio en su expresión, como si no le importara, y dobló el paraguas limpiamente, sacudiéndolo un par de veces para que el agua no salpicara por todas partes.

Tal vez debería haber ido a Jaisin. Latil lamentó su decisión por un momento.

Pero cuando se dio cuenta de que Ranamoon caminaba mucho más despacio de lo que lo hacía habitualmente, toda la duda de Latil se desvaneció en un instante.

Además, al ver que sus pasos se habían vuelto aún más lentos al detenerse unas cuantas veces, estaba claro que Ranamoon se estaba asegurando de que Latil lo seguía correctamente.

'¿Me he equivocado? ¿Está contento?'

Es tan difícil entender a este tipo ya que no muestra sus sentimientos en absoluto. Pensando esto, Latil siguió a Ranamoon con las manos unidas a la espalda.

Ranamoon le entregó el paraguas al guardia que estaba frente a su habitación y le abrió la puerta a Latil.

Al entrar en la habitación de Ranamoon, Latil miró las paredes, el techo y demás sin razón alguna, como si fuera su primera vez aquí.


"Parece que tu valet ya fue a buscarte. Debéis de haberos perdido"

"Cuando no esté, volverá por aquí"

"Bien"


Mientras Latil se limitaba a permanecer incómodo, Ranamoon sacó una toalla suave de los cajones y se la tendió a Latil.


"Gracias"


Latil se secó el pelo y el cuello que se habían mojado cuando la lluvia sopló de lado con unos cuantos paños a medias.

Pero vaya. Justo después de entregarle la toalla a Latil, Ranamoon se había quitado la camiseta de golpe. Latil dejó de mover las manos con asombro.

Es más, Ranamoon dejó caer la camisa al suelo y se dirigió al baño mientras decía que deseaba darse un baño por estar empapado por la lluvia.

Una vez que la espalda erguida de Ranamoon desapareció de su vista junto con el silencioso sonido de la puerta al cerrarse, Latil apretó una mano sobre su corazón y abrió mucho los ojos.


"Ha sido una sorpresa"


'Realmente es muy guapo. Eso sí que me ha sorprendido'.

La húmeda parte superior del cuerpo de Ranamoon, a la que sólo había echado un breve vistazo, acudió a su mente, y Latil sacudió rápidamente la cabeza.

Pero su corazón y su cerebro se aferraron fuertemente a esa imagen y se negaron a dejarla ir sin importar lo que sucediera, por lo que su corazón siguió latiendo más rápido y su cerebro grabó a fuego el torso desnudo de Ranamoon en su memoria.

Latil se sentó rápidamente en una silla cercana y jugueteó con la toalla.

Pero cuando el sonido del agua que salpicaba empezó a llegar desde el baño, Latil se sintió más incómoda a pesar de estar sola, así que se aclaró la garganta y se acercó a la ventana. Seguía lloviendo con fuerza.


"Me pregunto si Sonnaught estará bien"

"Su Majestad"


Fue entonces, cuando una voz grave la llamó desde el baño.


"¡Sí! Estoy aquí!"


Aunque no había verdadera necesidad de apresurarse, Latil apretó involuntariamente la toalla en sus manos mientras corría hacia la puerta del baño.


"¿Qué pasa?"


Ante la pregunta de Latil, Ranamoon volvió a preguntar desde el baño.


"Accidentalmente dejé mi muda de ropa afuera. ¿Puedo pedirte que la traigas?"

"¿Ropa? ¿Servirá cualquier ropa?"

"Sí"


Latil se dirigió al armario de Ranamoon y abrió la puerta. Por suerte, había un par de prendas de aspecto cómodo colgadas en la parte delantera, como si hubieran sido preparadas de antemano.

Con ella, Latil se acercó de nuevo a la puerta del baño y preguntó torpemente.


"¿Lo dejo aquí fuera?"

"¿Podrías traerla dentro?"

"¿Yo, dentro?"


preguntó Latil con voz temblorosa sin darse cuenta ella misma, y luego se dio una ligera palmada en la boca, avergonzada.

Pero Ranamoon le había pedido que trajera la ropa adentro, así que Latil abrió la puerta del baño y entró.

Sólo había abierto una puerta, pero en el interior había un cuarto de baño completamente blanco, a diferencia del exterior. Entre todo, la bañera era la más blanca. Y dentro de esa bañera, estaba sentado Ranamoon rodeado de abundantes burbujas blancas.

Latil miró en dirección a Ranamoon sin pensarlo mucho, y luego casi acabó perdiendo el agarre de la ropa al encontrarse con el cuerpo desnudo de Ranamoon que podía verse a través y entre las burbujas.

Ranamoon estaba empapado y tenía un aspecto tan lascivo que Latil llegó a pensar que si Ranamoon pidiera que la palabra "cautivador" se usara sólo para él y sólo para él, probablemente podría darle los derechos exclusivos de la palabra.

Mientras Latil lo miraba fijamente, Ranamoon habló entonces con una voz fría que no era diferente de la habitual. 

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