DYD SS1-7

Jueves, 23 de Septiembre del 2021

La duquesa y el diablo 113

SS1-7

Por alguna razón, no podía hablar con tanta seguridad como de costumbre. De hecho, estaba bastante avergonzada. No sabía que sería tan difícil rechazar el corazón de alguien. ¿Tal vez su corazón se hundiría aún más?

Además, el hecho que Ted sea el hermano menor de una preciada amiga íntima, y el hecho de que sea un chico que recién era mayor de edad, la hacían difícil una y otra vez. Y es que sabía muy bien que la pasión a esa edad no se podía vencer fácilmente. Estaba tan nerviosa que no podía abandonarla, dijera lo que dijera.

Por un lado, Judith se preguntaba por qué Ted pensaba que no había amor entre Derek y ella.

'¿Parezco que no quiero a mi marido?'

Hoy vio a Derek actuando como un amante, así que se preguntó si al menos era responsable de ello. O bien, dudaba que su actitud, que se manifestaba de forma implícita, hubiera provocado tal malentendido.

Ted parpadeó lentamente y respondió escuetamente.

"No lo es, pero los dos no tienen hijos"

"¿Hijos?"

Poniendo los ojos en blanco, meditó la respuesta que le había dado. La comprensión llegó en un instante

La unión en la sociedad aristocrática era, por supuesto, el factor más importante. Ya sea para mantener el linaje familiar o para transmitir la riqueza de la familia. Esto era así incluso entre las parejas que se casaban para añadir peso al poder, por no hablar de las parejas que se formaban por amor.

En ese contexto, pensó que la situación del Duque Mexillion, que no tuvo noticias de una gestación ni siquiera después de un año de matrimonio, podía verse de forma tan negativa. Muchos aristócratas de la capital lo pensarían porque sabían de su primer matrimonio y de su herencia, pero si Ted nunca había oído nada al respecto, no era descabellado malinterpretarlo.

'Hijo'

Judith contempló el repentino tema durante un buen rato. Muchos momentos fugaces de memoria pasaron por su mente.

El segundo funeral que no llovió, la terrible agonía que experimentó en aquel momento y la realidad a la que se enfrenta ahora después que a pasado mucho tiempo. La suave voz de Derek que decía que si se pareciera a ella, sería bonito.

Mientras contemplaba, se dio cuenta que la respuesta era demasiado tarde y se apresuró a abrir la boca.

"Creo que lo has entendido mal. Realmente amo a mi marido y estoy muy satisfecha con este matrimonio"

"........"

"Así que no puedo darte ningún espacio"

Judith se mostró decidida, como si su único propósito fuera disuadirle con firmeza.

"Todo lo que quiero decir es esto. Olvidaré todas tus acciones, así que espero que no vuelvas a hacerlo desde el momento en que abandones este lugar. Devolveré todos los regalos que me has enviado"

Hablar con Ted le hizo extrañar mucho a Derek por alguna razón. Echa de menos la cara que siempre sonríe con fuerza cuando la ve.

Así que Judith se levantó primero, dejando a Ted incrédulo. También quería darle tiempo para que estuviera solo y se decidiera de una vez.

Al volver al salón, Judith abrió ligeramente la puerta y se detuvo al ver a Derek a través de una abertura.

Sentado en el sofá, estaba jugando con Jeremy.

Tal vez por el niño, Derek sostenía un cigarro sin encender. Entonces miró a Jeremy, que no paraba de chillar. Tal vez los comentarios imprudentes del niño eran divertidos, y se lo comía de vez en cuando y ponía una leve sonrisa en los labios.

Derek y niño

Era una combinación inesperada. Al menos en su mente, eran objetos que nunca habían estado juntos. Pero en el momento en que lo vio, el corazón se aceleró extrañamente. No tenía nada de especial, pero era una escena de la que no podía apartar los ojos.

'Si fuera mi hijo, no Jeremy'

De repente, se preguntó. ¿Cómo me tratará Derek a mí y al hijo que nazca? ¿Los miraría como si fueran tan lindos? ¿Escucharía atentamente las palabras de cada niño con una actitud tan relajada? Así, no... ¿Me querrá más que eso?

Una vez que surgieron las dudas, rápidamente crecieron en tamaño y llenaron su pecho al máximo. Se convirtieron en una sola codicia mientras se unían como si estuvieran golpeándose mutuamente. Judith se dio cuenta de lo que era esa codicia sin dificultad.

Derek desplazó su mirada lánguidamente, como si se sintiera popular. Parpadeó como si estuviera allí de pie sin entrar. Judith entró en el salón con una nueva sonrisa en el rostro.

Los pasos hacia él fueron más emocionantes que de costumbre.

👿👿👿👿

La invitación, temiendo que se produjera algún alboroto, afortunadamente terminó pacíficamente

Cuando Ted volvió de la sala de espera, sus ojos estaban rojizos, tal vez por las lágrimas. Todo el mundo fingió no conocerlo. El amor no correspondido de un chico es un aspecto en el que su orgullo es más fuerte que cualquier otro de su edad.

Tras despedirse, Judith fue al baño con Derek.

Derek se metió primero en la bañera, secándose el pelo negro como las castañas y echando los ojos a un lado. Al final de su mirada estaba Judith, llevando sólo un slip

Tal vez era el resultado de una dieta constante, su cuerpo, que había estado quemando sus ganas de comer dulces, ahora había ganado algo de peso. No quería recordar los días en que estaba tan delgada que los huesos de los hombros y la espalda eran claramente visibles.

Pronto Judith también se desnudó y metió los pies en la bañera.

En el pasado, era demasiado tímida y se avergonzaba de comprometerse con él en una situación que no fuera una aventura sin llevar una prenda. Pero después de casarse, se bañaban juntos casi todas las noches, así que ahora estaban lo suficientemente 'aburridos' como para ser casuales.

Derek, que la sentó sobre su pierna, abrazó con fuerza su esbelta cintura.

"¿Ha ido todo bien con él?"

Derek también miró los ojos hinchados de Ted, pero logró transmitir el mensaje de Judith de no ser infantil, sin señalarlo.

"Sí, muy bien"

Recordando su conversación con Ted, Judith respondió y puso su mano en el pecho de él.

Le gustaba poner la mano en su amplio pecho. Especialmente en la exquisita posición en la que late el corazón. Al cubrir la parte superior palpitante, el calor de Derek se extendía con sus palmas. Era la temperatura perfecta para ella.

Cada vez que movía los dedos con suavidad, el agua que había subido al fondo de su pecho producía un sonido de traqueteo. Una pequeña ola voló sobre la superficie del agua.

"Derek"

La voz de Judith resonó en el baño lleno de vaho. Por eso sonó un poco temblorosa. Derek le revolvió el pelo como si fuera a hablar

"¿Tenemos un bebé?"

Se frotaba en broma las puntas de su pelo y entonces se detuvo.

Derek la miró a los ojos con sorpresa, como si tratara de averiguar qué pasaba en su interior. Anteriormente, habría evitado su mirada con cierta vacilación, pero esta vez se enfrentó a él con calma.

Sus ojos cambiaron de lugar y estaba mirando el vientre de Judith, que se reflejaba en el agua transparente. Derek recorrió con la mano el vientre plano.

"Un bebé"

"......"

"¿Tú y mi bebé?"

Su mirada, que había estado observando tenazmente el estómago, se elevó de repente hacia arriba.

En ese momento, Judith leyó claramente la excitación y la anticipación que brotaban de sus ojos. Los hermosos ojos rojos brillaban con un fulgor propio como las joyas artesanales. Sus ojos estaban más llenos de vida que cualquier otra cosa que ella hubiera visto. Al verlo, Judith se echó a reír.

"¿Por qué de repente? ¿Acaso ese niño te dijo porqué no tenemos hijos?"

Judith negó con la cabeza.

"No. Sólo quiero hacerlo"

Judith dio un largo suspiro, apretando el dorso de su mano sobre su estómago. Como si tratara de calmar la mente perturbada por el dolor del pasado.

"Quiero tener un bebé contigo"

Derek, cuyos ojos ya hervían, no pudo contenerlo y le besó los labios. El agua que los rodeaba a los dos se desbordó debido al violento movimiento y se derramó fuera de la bañera. Es como si el amor de dos personas se desbordara.

Durante un rato, el sonido de los suspiros del otro resonó en el amplio cuarto de baño. Los labios cayeron y Judith le acarició la mejilla con una expresión nebulosa en el rostro.

"Sigue siendo bueno"

"........"

"Cuando tengamos un bebé, seremos una familia perfecta"

Una valla tan fuerte que nadie puede romperla. Y lo único que llena es la comodidad. La paz. Fue un festín de palabras que le hizo sentir bien sólo de pensarlo.

La sonrisa de Derek se hizo más fuerte. En el momento en que vio esa cara de felicidad, una brisa sopló en el corazón de Judith. Como si hubiera llegado una brillante primavera.

Habrá un nuevo latido en su estómago, para reemplazar al niño que tuvo aquel día.

El corazón de Judith comenzó a latir un poco fuerte. Sabía mejor que nadie que esto era una expectativa.

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