Cómo domar a mi bestial esposo 113
Reunión con Ludwig (1)
Traducción coreano al español : Asure
"¿Ha terminado todo bien el trabajo?"
Preguntó con tono indiferente Rafael que esperaba frente al salón. Era el mismo de siempre, pero sus ojos barrían dulcemente el rostro de Annette como si estuviera cubierto de miel. Annette se rió tranquilamente al ver esto.
"Sí. Puede que lleve algún tiempo confesar sus pecados, pero no puedo evitarlo. No significa que tenga prisa"
"¿Cómo está tu cuerpo? ¿Está realmente bien? Dijo que ya habías bebido veneno varias veces"
"Está bien. Es una cantidad muy pequeña de veneno y he preparado un antídoto enseguida"
Ante esas palabras, Rafael pareció notablemente aliviado. Rafael se sorprendió al decir que Eucaly era realmente la que había plantado el rey y que había estado envenenando a Annette todo el tiempo. Ahora sentía lo mucho que Annette había luchado contra el peligro con ese pequeño y delicado cuerpo, y le temblaban las manos. Podría haber perdido a Annette sin siquiera saberlo.
Aunque Annette muriera tras ser envenenada, él no habría sabido nada. Más bien, el rey habría cerrado los ojos, confundido por seguir viendo a Annette con buenos ojos. Rafael había vivido a gusto sin saber nada hasta ahora y le temblaban las manos porque se odiaba a sí mismo.
Realmente he sido el peor marido
Rafael se culpaba sinceramente. Cada vez que veía a Annette, estaba encantado, estaba dolido por la culpa y la autodestrucción. Aunque no fuera su intención, su entorno perjudicaba constantemente a Annette. Sin embargo, Annette permanecía a su lado y le brindaba un afecto inquebrantable.
Este hecho parecía pinchar el pecho de Rafael como una daga. Sentía como si estuviera yendo y viniendo entre el cielo y el infierno al mismo tiempo. Rafael estaba sumamente apenado y agradecido con Annette. Mientras sus ojos masculinos se distorsionaban por la angustia mental, Annette se reía mientras le cogía la mano.
"No pongas esa cara. Estoy muy bien, Rafael. A partir de ahora, me protegerás. ¿De verdad?"
"Claro. Siempre te protegeré"
Las amables palabras de Annette fueron respondidas por Rafael, que recibió una pequeña salvación. De todos modos, no era un tipo genial, así que no tenía el talento de comprar el corazón de la gente con palabras. Nunca había conocido a otra mujer que no fuera Annette. Así que no tenía mucha confianza en susurrar el amor con habilidad.
Pero siempre fue sincero tanto como su corazón. Rafael quería protegerla. Para hacer esto, sólo había una cosa que él tenía que hacer ahora. Alcanzar un nivel tan absoluto que nadie pudiera quitarlo o utilizarlo fácilmente.
Como dijo Harold, era un buen hombre. Sin embargo, eso no era suficiente para proteger a Annette. Justo a tiempo, Annette dijo, mirando a Rafael en su traje de entrenamiento.
"Ahora ve, Rafael. Es tu momento de practicar. Ten cuidado con un resfriado porque el viento es frío"
"Me preocupo por ti. No me importa si sopla el viento"
La contundente respuesta de Rafael fue inclinar la cabeza y besar el pelo de Annette. Al agarrar la pequeña barbilla con las yemas de los dedos y relamerle los suaves labios con la lengua, Annette sintió una pequeña risa. Incluso el temblor de los labios al tocarse era tan encantador que quería tragárselo entero.
Los ojos de Rafael se volvieron aún más profundos. Quería secuestrarla sosteniéndola como una ruda en este lugar. Justo antes de que el impulso de Rafael cobrara vida, Annette sonrió y lo apartó.
"Vamos, Rafael. Antes de que sea demasiado tarde"
Rafael, que su rostro se desaliñó, se marchó de mala gana. Tanto si llueve como si nieva, entrenaba sin faltar ni un día, pero hoy tenía muchas ganas de saltárselo. Más aún cuando Annette pensó en las visitas con los que se encontraría pronto. Sin embargo, era imposible bromear delante de la chica que le gustaba.
Después de suspirar, Rafael refrescó su mente y se dirigió al centro de entrenamiento.
¿Cuándo tendré en mis manos el maldito estado de maestro de espada?
Si miras los comentarios de los maestros de espada existentes, se decía que era 'con el corazón más que con la espada', pero estaba loco porque no sabía cuál era ese comentario.
Annette, que vio la espalda de Rafael con una mirada amistosa, se dirigió al salón. Ahora era el momento de conocer a las visitas que esperaban allí. Annette atravesó la puerta y saludó con voz suave.
"Gracias por venir, Celestine. Me alegro de volver a verte"
"¡Anette! ¿Cómo has estado?"
Celestine, que estaba sentada en el salón de la familia Carnesis, se levantó con una amplia sonrisa. Su rostro, que abrazó a Annette y reveló su amabilidad, era muy natural. Ahora era completamente abierta. Fue así, porque las dos ahora estaban en condiciones de montar el mismo barco.
Celestine amaba de verdad a su familia y creía en sí misma. Era demasiado orgullosa para ser una bonita muñeca que se sienta al lado del príncipe. No sólo eso, sino que no podía perdonar al rey Selgratis, que se vio obligado a secuestrarla, le infligió un trauma mental y la utilizó arbitrariamente para eliminar su silencio. Ni siquiera le interesaba saber si estaba herida o no por esto.
Por mucho que Celestine viniera de una familia sin poder, era injusto que la trataran así. Celestine, que se enteró de toda la verdad gracias a Annette, se aprovechó de ello. Aunque ahora no pudiera romper el matrimonio, todavía seguía jugando en manos del rey.
He elegido el camino que creo que es correcto. Ahora depende de Annette lo que queda.
Celestine cerró los labios con fuerza y agarró la mano de Annette, envolviéndola. Las manos, que habían sido finamente cuidadas toda la vida, eran delgadas como una flor, pero eran extrañamente fuertes. Annette, que sonrió alegremente y abrazó al hombro de Celestine, susurró un poco.
"¿Fue tu prometido al lugar de encuentro?"
"Claro. Por favor, está esperando allí tranquilamente"
Hoy, a diferencia de lo habitual, era un día para estar a solas con el príncipe Ludwig. Al escuchar la respuesta confiada de Celestine, Annette suspiró de alivio. No sabía qué método utilizó, pero sacar a Ludwig del palacio fue algo muy bueno. También hizo un buen trabajo pidiendo ayuda a Celestine.
Annette iba a contarle hoy a Ludwig hasta qué punto estaba al corriente de la situación. En primer lugar, el rey hizo estas cosas por Ludwig, que se convertiría en el próximo gran rey. Para proteger la realeza de su débil hijo, presionando a Bavaria y eliminando a Rafael. Esa fue la negación del propio rey.
'Así que su majestad Ludwig debe estar al tanto de esta situación'
Annette se sintió un poco incómoda de estar a solas con Ludwig. Más aún porque el último encuentro no fue muy bueno. Pero ahora no era el momento de dejarse llevar por esos sentimientos privados. Porque este era un gran problema, más allá del amor y el odio, entre la familia y el poder.
Annette asintió, contestó a Celestine.
"Bien. Me iré en los próximos diez minutos"
Annette fingió coquetear con Celestine durante un rato mientras bebía té. Después, mientras iban de compras, Celestine, naturalmente, iba en el carruaje. Este carruaje sin rasgos estaba previsto que pronto se mezclara con otros carros y se dispersara. Annette no tardó en llegar al lugar de encuentro donde esperaba Ludwig.
"Este es el lugar"
Afortunadamente, Railin descubrió el lugar de encuentro con el príncipe heredero. Entre sus muchos negocios, había una casa de té secreta construida para este fin. Cuando Annette entró en la entrada exactamente a tiempo, Celestine le dio una palmadita en el hombro y la animó.
"Entonces iré con el carruaje por adelantado. Por favor, anda y ten una buena conversación con su Majestad"
"... Celestine ¿Está bien no ir juntas?"
Annette miró a Celestine con ojos ansiosos. Desde su punto de vista, era reacia a que Annette y Ludwig estuvieran solos. Ludwig fue una vez el futuro prometido de Annette y ella todavía tenía remordimientos. Sin embargo, Celestine, la actual prometida, parecía tomarlo como algo insignificante.
"No pasa nada. Cuanto más caiga, más rápido irá la historia. Ni siquiera estoy casada ni lo quiero ... de todas formas. ¿No es todo así?"
A Celestine, que tiene un fuerte orgullo, sabía que le gusta otra mujer y no quería colgárselo a su prometido. Annette asintió ante su fría respuesta.
Annette, que se quedó sola, entró en la habitación con un rostro tranquilo. Mientras mostraba el anillo del Gremio Secreto a un empleado que se acercaba, éste asintió para guiarla a algún lugar. Al entrar por la puerta secreta oculta tras la pared, el príncipe Ludwig estaba sentado allí.
"¡Anette!"
Al entrar, Ludwig, que la encontró, se levantó con una expresión compleja. Las yemas de los dedos que tomaron la mano de Annette y lo acompañaron seguían tristes, pero no había señales de aferrarse a ella como antes. Ciertamente, parecía que el rechazo que había sufrido de Annette en el pasado era bastante dolorosa. Annette, que mostraba una sonrisa cortés, lo saludó con un saludo formal.
"Gracias por venir aquí, Su Majestad. Debe haber sido un paso difícil en medio de la desesperación. Inevitablemente, me disculpo por guiarlo a un lugar así"
"No seas tan cortés, Annette. Aunque te hayas convertido en la esposa de otro hombre ... la infancia que pasamos juntos sigue siendo la misma. Si no puedes, déjame seguir siendo tu amigo. Aun así, para que pueda permanecer dentro de tus fronteras... Por favor, permíteme"
Las delicadas facciones de Ludwig miraron a Annette con una luz triste. Annette se sorprendió un poco porque a pesar que era medio hermano de Rafael, pareció verlo en su rostro. No sabía nada más, pero la vena parecía ser tramposa. Pero decidió no temblar ni siquiera frente a ese rostro patético.
"Su Majestad. Entonces, como amigo cercano que una vez compartí los mismos recuerdos, hay una cosa que señalar"
Por desgracia, Annette era una mujer que valoraba más la razón que la emoción. Ella todavía no había olvidado las atrocidades pasadas de Ludwig. Annette, que era educada y cortés, se volvió y preguntó, sonriendo.
Nota Asure: Nuevo capítulo, disfruten ....
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