Aflicción de Amor 44
Los tres días de exámenes finales terminaron rápidamente. Después del último examen de inglés, todos vitorearon y regresaron al aula como si fueran liberados. Cai Yucai ya estaba de pie en la tarima, con varias pilas de exámenes apilados frente a él.
Con las vacaciones de invierno acercándose, el aula era un caos.
Shi Niannian borró las instrucciones del examen del pizarrón y, al bajar, Cai Yucai la llamó.
—Shi Niannian, ¿puedes ayudarme a repartir esta tarea de vacaciones de invierno?
—Está bien.
Varias pilas ordenadas de tarea de cada materia estaban sobre la tarima. Shi Niannian sopesó una parte en su mano, eran bastante gruesas. Otras vacaciones de invierno ocupadas.
Tomó una parte en su brazo, era bastante pesada, y comenzó a repartirlas por grupos.
Al poco tiempo, Jiang Wang entró por la puerta y, naturalmente, tomó una gran parte de los exámenes de su mano para ayudarla a repartirlos juntos.
Los estudiantes que habían ido a otros salones a examinarse también regresaron al aula, y al ver la gruesa pila de exámenes exclamaron:
—¡Viejo Cai, ¿todavía quieres que tengamos Año Nuevo?!
—Mi tarea de física son solo 13 hojas. No tendrán que hacer nada durante los siete días de Año Nuevo, y luego una hoja por día será perfecto. El resto depende de sus otros profesores, pero no pueden culparme por no dejarlos celebrar el Año Nuevo.
Después de decir eso, Liu Guoqi llamó a la puerta delantera:
—¡¿Qué Año Nuevo ni qué Año Nuevo?! Después de este examen final, la mitad de su escuela secundaria habrá terminado. ¡¿No saben que el próximo semestre casi comenzará la revisión general para el Gaokao?! ¡¡Ninguno de ustedes tiene sentido del tiempo!!
Asure: 高考 (Gaokao) = Examen Nacional de Acceso a la Universidad en China continental
Alguien murmuró:
—Todavía falta más de un año.
Los jóvenes aún eran demasiado jóvenes y no se daban cuenta de lo rápido que pasaba el tiempo, como si los días con el ventilador zumbando en el techo nunca fueran a terminar.
Liu Guoqi escuchó su murmullo y replicó:
—¡¿Crees que un año es mucho tiempo?! ¡Ahora hay muchos estudiantes de último año de secundaria arrepentidos de no haber estudiado bien antes!
Cai Yucai, con buen carácter, trató de calmar la situación:
—Profesor Liu, Profesor Liu, los niños rara vez tienen vacaciones de Año Nuevo. No les dé tanta presión.
—¿Cómo no va a haber presión? ¡Sin presión no hay motivación, y sin motivación no habrá progreso! Le digo, profesor Cai, no crea que porque los estudiantes de honor de nuestra clase tres tengan buenas calificaciones, la situación actual sea buena.
Después de repartir la tarea de vacaciones, regresó a su asiento.
Jiang Wang fue llamado por Cai Yucai a mitad de camino. Al regresar al aula, vio que los exámenes sobre su mesa ya estaban apilados de forma ordenada.
Inclinó la cabeza:
—¿Tú los ordenaste?
Shi Niannian asintió:
—Mhm.
Él sonrió:
—¿Tu hermano no te dijo que no fueras tan buena con tu novio?
Shi Niannian lo miró extrañada, sin entender.
Jiang Wang tampoco explicó mucho:
—¿Te llevo a casa en un rato?
Ella negó con la cabeza:
—Mis papás... van a venir, mejor me voy sola.
Era la primera vez que Jiang Wang escuchaba mencionar a sus padres. En su mente, ella siempre había vivido con los padres de Xu Ningqing. Antes había oído a Xu Ningqing mencionar que sus padres vivían en otra ciudad.
—¿Van a recogerte a la escuela?
—No.
Shi Niannian puso sus exámenes en la mochila.
—Ellos también van a casa de mi tío, y temo... encontrarlos.
—¿No me vas a presentar a mis suegros?
Afuera de la escuela ya había muchos padres esperando. Las cosas para llevar a casa en vacaciones eran muchas, solo los libros de texto eran una pila gruesa y pesada.
Shi Niannian ordenó sus libros y probó levantarlos. Pronto sintió una marca en el codo, no podía con ellos.
—¿Vas a llevar todo esto a casa?
—Sí, tengo que... hacer la tarea.
Jiang Wang se reclinó perezosamente en su silla, sin ordenar su mochila. La miró un momento y dijo:
—Yo te los llevo a casa.
Shi Niannian se detuvo, sin entender:
—¿Qué?
Él levantó la barbilla:
—Yo te los llevo primero, luego te los doy en otra oportunidad o se los doy a Xu Ningqing para que te los lleve. Es muy pesado para que los cargues.
Al terminar de decir eso, Cai Yucai en la tarima finalmente dijo la última frase:
—Les deseo a todos un feliz Año Nuevo por adelantado.
las vacaciones de invierno comenzaron oficialmente.
Jiang Wang movió los libros de la mesa de ella, se colgó su mochila de un solo hombro, levantó fácilmente la pila de libros y tomó el cuello del abrigo de Shi Niannian:
—Vamos.
Shi Niannian lo siguió, caminando medio paso detrás de él.
El joven llevaba una pequeña mochila azul celeste en el hombro y abrazaba esa pila de libros de texto, luciendo extrañamente divertido.
En el pasillo, las miradas de los compañeros y los padres los seguían, pero a él parecía no importarle en absoluto.
Shi Niannian trotó un poco para alcanzarlo y preguntó:
—¿Cuándo es tu cirugía?
—Dentro de cinco días.
—Qué rápido.
—Mhm.
Shi Niannian miró incontrolablemente su oído, su corazón no pudo evitar temblar.
Jiang Wang puso los libros en el coche y, sin insistir en llevar a Shi Niannian a casa, se despidieron en la puerta de la escuela.
Cuando Shi Niannian regresó a casa, Xu Shu y Shi Houde ya estaban allí, sentados en el sofá con sus tíos. Al abrir la puerta, la conversación que había en la habitación cesó bruscamente.
Un silencio repentino muy evidente.
Shi Niannian se quedó paralizada un instante y luego, frunciendo los labios, se cambió las zapatillas.
Su tía se levantó:
—Niannian, ya volviste.
—Mhm.
—¿Tienes hambre? Hay un pastel de mil hojas que compré hoy en el refrigerador.
Ella negó con la cabeza:
—Casi es hora de cenar, yo... no comeré.
Xu Shu, sentada en el sofá, giró la cabeza y dijo:
—Niannian, tu hermano está en tu habitación. Ve a hacerle compañía. Papá y mamá tienen que hablar con tus tíos.
Al entrar en su habitación, vio a Shi Zhe sentado en la silla junto a su ventana, sosteniendo algo en la mano. Ella miró con atención y vio que era la pulsera que Jiang Wang le había regalado.
—Xiao Zhe.
se acercó rápidamente.
—esto no se puede, ¿podrías... devolvérselo a tu hermana?
Le quitó la pulsera de la mano a Shi Zhe. Afortunadamente, esta vez no gritó. Antes, cada vez que algo no le gustaba, gritaba repentinamente.
Así que Shi Niannian solía hacer lo que él quería, pero temía que él rompiera esta pulsera.
La mirada de Shi Zhe se quedó fija en la pulsera que ella sostenía, sin apartarse. Shi Niannian hizo una pausa, se puso la pulsera y la agitó frente a él, con una pequeña sonrisa en los labios.
—¿Es bonita?
Shi Zhe no reaccionó ni dijo nada.
A menudo estaba así, así que Shi Niannian no le dio importancia. Se sentó junto a la cama, girando suavemente la pulsera con una mano, con los ojos bajos. Una sonrisa se extendió desde sus ojos, una luz de alegría y satisfacción.
—Esto... me lo regaló un hermano.
—Ese hermano es, además de mi tío y su familia, la mejor persona... para mí.
Su voz era suave, dulce y obediente. Sabía que Shi Zhe no había escuchado nada de lo que había dicho, pero aun así siguió hablando para sí misma.
—A mi hermana de verdad... le gusta mucho.
La puerta del dormitorio no estaba bien cerrada, y las voces de sus padres y sus tíos llegaban amortiguadas a través de la madera. No se entendía con claridad, pero se podían distinguir algunas palabras pronunciadas con un tono repentinamente elevado.
Palabras como mudanza, investigación, soborno.
Shi Niannian se quedó paralizada un instante, volvió a guardar la pulsera en el cajón e inclinó la cabeza hacia la puerta.
En la mesa de la cena, volvieron a guardar un tácito silencio, como si todas esas palabras que había oído fueran producto de su imaginación. Shi Niannian terminó de comer y regresó a su habitación.
Sacó el examen de inglés de su mochila, eran 30 hojas.
Cogió su bolígrafo y leyó línea por línea, pero no podía concentrarse. Después de leer, olvidaba el contenido anterior. Rara vez se sentía tan dispersa.
Al rato, se levantó y fue a la habitación de sus padres, al lado.
Con la mente en sus pensamientos, olvidó tocar la puerta y entró. Vio a su madre frotándose los ojos, con las órbitas rojas, luciendo cansada y abatida.
Se quedó paralizada:
—¿Mamá?
Xu Shu se secó rápidamente los ojos:
—¿Por qué viniste?
Shi Niannian se quedó en la puerta, con la mano en el pomo, preguntó con calma y suavidad:
—¿Pasó... algo?
—¿Qué va a pasar? Solo un pequeño problema en el trabajo de tu padre, ya es muy tarde, ve a dormir, no te preocupes por los asuntos de los adultos.
—¿De verdad no pasa nada?
—¿Para qué te mentiría?
Xu Shu se mostró un poco impaciente.
Jiang Wang llevó la pila de libros de Shi Niannian a casa de Xu Ningqing, justo enfrente de la suya, a dos pasos de distancia.
—¿Vas a casa por Año Nuevo?
preguntó Xu Ningqing apoyado en una pared.
Jiang Wang lo miró:
—¿Para qué volver?
—A ti te va bien aquí, yo tengo que volver y escuchar las charlas de todas mis tías y primas terceras.
Xu Ningqing suspiró al pensar en ello, le resultaba molesto.
—¿Los padres de Shi Niannian vienen aquí para pasar el Año Nuevo?
Xu Ningqing se quedó paralizado:
—¿Vinieron sus padres?
—Mhm.—
—¿Por qué mi madre no me pidió que volviera a casa? Qué raro, aunque supongo que no vinieron por Año Nuevo, el año pasado tampoco los vi.
Al terminar de hablar, el celular de Jiang Wang vibró.
Shi Niannian le había enviado un mensaje.
-¿Ya estás durmiendo?
Cuando Jiang Wang la llamó, ella acababa de guardar sus exámenes. Fue a cerrar la puerta de su habitación antes de contestar:
—Aló.
—¿Qué haces?
llegó la voz sonriente del joven desde el otro lado.
Shi Niannian sintió que su corazón, antes revuelto, se calmaba repentinamente:
—Acabo de... terminar el examen.
—¿Haces tarea apenas empiezan tus vacaciones?
—Mhm.
—¿Me extrañaste?
Shi Niannian no respondió de inmediato, porque escuchó otra voz que surgió repentinamente al otro lado del teléfono:
—¡Jiang Wang, tu forma de enamorarte da demasiado miedo!
Ella se quedó paralizada y preguntó:
—¿Dónde estás?
—En casa de Xu Ningqing.
—Ah.
respondió, y luego, dándose cuenta tardíamente de la pregunta anterior de Jiang Wang sobre si lo extrañaba, sintió calor en las mejillas.
—Entonces, yo... me voy a dormir.
Sin esperar a que él dijera algo más, Shi Niannian colgó el teléfono con decisión.
Muy cruel.
Jiang Wang soltó una risita y levantó la vista para mirar a Xu Ningqing.
Xu Ningqing estaba realmente asombrado. Había visto demasiada indiferencia de Jiang Wang hacia las chicas. Demasiadas chicas en la escuela secundaria estaban enamoradas de él, pero nunca lo había visto ser amable con nadie, ni siquiera prestarles atención.
En ese entonces, Fan Mengming y los demás siempre decían que era un completo frígido, tal vez incluso un asexual legendario. Como resultado, lo vieron caer en las manos de Shi Niannian.
Y cayó por completo.
Así que dicen, no es que no llegue, es que tarda en llegar.
A la mañana siguiente, Shi Niannian acompañó a Jiang Ling a ir de compras.
—Niannian, ¿escuchaste?
Jiang Ling se acercó a su oído y dijo en voz muy baja, con aire misterioso.
—¿Qué?
—Los padres de Xu Fei se enteraron de que tiene novia. Dicen que vieron los mensajes que él y Chen Shushu se enviaban, ahora lo están obligando a terminar, están furiosos.
Shi Niannian se quedó paralizada y preguntó:
—¿Y Chen Shushu?
—Sus padres aún no lo saben, pero seguro que ya no podrán ser tan empalagosos como antes.
Jiang Ling tomó su brazo y dijo con seriedad:
—Así que Niannian, ustedes también tienen que tener cuidado, o los van a separar a la fuerza.
Shi Niannian pensó en sus propios padres y en los de Jiang Wang.
No podía imaginar cuál sería la reacción de sus propios padres si se enteraran. Probablemente no insistirían constantemente en que terminara. En cuanto a Jiang Wang, probablemente no habría ese problema.
Ella sonrió:
—Entiendo.
Ambas entraron a una joyería en la calle peatonal. Jiang Ling quería comprar un gorro de lana para el invierno. Se probó varios y finalmente eligió uno blanco, parecido al de Shi Niannian.
—Mira, ¿no parecemos gemelas así?
dijo Jiang Ling mirando a ambas en el espejo.
Shi Niannian dijo:
—Eres muy alta.
Jiang Ling se encogió de hombros:
—Entonces yo soy la hermana mayor.
Fue a la caja a pagar el gorro. Su mirada se posó en unas cajas con forma de corazón en un estante junto a la caja. Preguntó:
—¿Qué es esto?
La dependienta echó un vistazo y dijo:
—Huevos de amor.
—......
Jiang Ling pensó que el nombre era horrible, pero aun así lo tomó para verlo.
En la parte inferior de la caja había instrucciones de uso. Decía que se regaba con agua todos los días y al final eclosionaría un pequeño patito de juguete.
En realidad, no tenía nada que ver con el amor, era solo un producto lanzado para complacer a todos.
La cajera dijo a un lado:
—Pueden regalar esto a la persona que les gusta. El patito es muy lindo, esto se llama el cristal del amor.
—......
Jiang Ling volvió a mirarlo e inclinó la cabeza para preguntar:
—Niannian, ¿quieres uno?
—Ah, da igual.
Así que Jiang Ling también eligió uno para ella.
Salieron de la joyería. Jiang Ling todavía sostenía la caja con forma de corazón, jugando con ella mientras murmuraba:
—¿Dices que esto es real o falso? ¿Por qué hay que regar un huevo para que eclosione?
—Yo tampoco... sé.
Llegaron a la estación de metro, pasaron sus tarjetas de transporte y entraron. El metro acababa de cerrar sus puertas, así que tenían que esperar el siguiente. Como un grupo de personas acababa de subir, la estación no estaba muy concurrida en ese momento.
Shi Niannian preguntó:
—¿A quién se lo vas a dar?
—A Xu Zhilin.
dijo Jiang Ling sin dudarlo.
—Tú y él...
—¿Qué?
Jiang Ling siguió su frase y luego dijo casualmente:
—Es una conmovedora amistad entre maestro y alumno.
Hasta ahora no se atrevía a hablar con Xu Zhilin. Los rumores decían que Xu Zhilin se iría al extranjero después de las vacaciones de invierno, pero ella todavía no se atrevía.
Después de un momento de silencio, suspiró suavemente:
—Qué pareja desafortunada somos mi querido profesor Zhilin y yo.
Shi Niannian se rió e inclinó la cabeza. De repente, su visión periférica captó una figura. Su cuerpo reaccionó más rápido que su mente, apretó con fuerza la mano de Jiang Ling que estaba sosteniendo.
Ella gritó de dolor. Justo cuando iba a hablar, también siguió la mirada de Shi Niannian y vio al hombre alto y delgado detrás de ellas.
Xu Zhilin llevaba una mascarilla negra y sus ojos de melocotón la miraban con una sonrisa radiante.
—......
¿¡Qué había dicho!?
¿¡¿Una conmovedora amistad entre maestro y alumno?!?
¿¡¿Qué pareja desafortunada somos mi querido profesor Zhilin y yo?!?
Jiang Ling sintió que podía golpearse la cabeza y morir allí mismo.
Xu Zhilin se bajó la mascarilla con el dedo índice. Jiang Ling observó cómo la tela se tensaba y aplanaba en su barbilla, tragó saliva inconscientemente.
Qué guapo.
Una vez más, fue seducida por su belleza.
—¿Pareja desafortunada?
Xu Zhilin arqueó una ceja, repitiendo lentamente.
—......
Jiang Ling apretó la muñeca de Shi Niannian, respiró hondo y de repente hizo una reverencia:
—¡Buenos días, profesor Xu!
Shi Niannian, llevada por ella, también hizo una reverencia involuntariamente y dijo:
—Buenos días, profesor Xu.
Xu Zhilin sonrió y asintió:
—De hecho, es una conmovedora amistad entre maestro y alumno.
Jiang Ling se sonrojó.
El metro aún no llegaba. Jiang Ling miró su reflejo en la marquesina publicitaria de enfrente y preguntó en voz baja:
—Profesor, ¿tiene pensado irse al extranjero?
—Sí, me voy la semana que viene.
—¿Y volverá a enseñar algún día?
—Probablemente no.
sonrió Xu Zhilin.
—Fui a la Escuela Secundaria No. 1 como suplente porque tres de sus profesores de matemáticas estaban de baja.
Jiang Ling había oído hablar de eso. Dos profesoras estaban de baja por embarazo y otro profesor no sabía por qué.
—Entonces, si ya no hago matemáticas, no podré preguntarle.
dijo Jiang Ling con desánimo.
—Habrá nuevos profesores de matemáticas, Jiang Ling. Tienes que estudiar bien matemáticas. He visto tus notas, y esa falta de equilibrio es demasiado grave. También puedes preguntarle a Shi Niannian si no entiendes algo.
—Oh.
pensó un momento y, reuniendo coraje, le entregó la caja azul claro con forma de corazón que tenía en la mano.
—¿Qué es esto?
Xu Zhilin no lo tomó.
—Digamos que es un regalo para el Día del Maestro del próximo año.
pensó Jiang Ling y dijo.
Xu Zhilin lo tomó sonriendo. Su mirada pasó casualmente y vio las tres palabras en la parte superior de la parte inferior de la caja.
—Huevo de amor.
—......
Su sonrisa no cambió.
—Gracias.
El día antes de la cirugía de Jiang Wang, ingresó al hospital para someterse a una serie de exámenes.
Debido al médico, la cirugía se adelantó un día a lo previsto. Xu Ningqing estaba junto a él cuando llegó la llamada, así que fueron juntos al hospital ese día.
Jiang Wang salió de la sala de audiometría. Xu Ningqing estaba apoyado en la pared, y al verlo salir, guardó perezosamente su celular.
—¿No se lo vas a decir?
—Se lo diré después de la cirugía.
—La pequeña es difícil de consolar cuando se enoja.
Con un montón de informes de pruebas en la mano, Jiang Wang curvó los labios sin emoción y dijo:
—Se lo diré cuando salgan los resultados. Para qué hacerla esperar sufriendo.
Xu Ningqing le dio una palmada en el hombro, sin decir nada.
Por la tarde, Shi Niannian terminó su tarea y su celular se iluminó. Era un mensaje para todos los miembros enviado al grupo de la clase.
Los exámenes finales ya estaban corregidos. Cai Yucai había enviado al grupo las notas de cada materia y la clasificación general de cada uno.
Ella abrió la tabla, hizo zoom y los dos primeros nombres eran el suyo y el de Jiang Wang.
Ella sonrió suavemente, frunciendo los labios.
Siguió deslizando hacia la derecha.
Jiang Wang seguía teniendo las terribles notas casi perfectas en las tres materias de ciencias y en matemáticas. Lengua era un poco peor, después de todo, ni siquiera había terminado de memorizar los poemas antiguos.
Al llegar al final, sus pestañas se agitaron rápidamente.
Se concentró.
Shi Niannian, primer lugar, 706 puntos.
Jiang Wang, primer lugar, 706 puntos.
Empate en el primer lugar.
Ella miró durante un buen rato antes de finalmente sonreír.
Aunque a Jiang Wang no le importaba si era primero o segundo, esta nota probablemente no causaría ni una pequeña onda en su corazón, Shi Niannian aún sentía que era un buen presagio.
Él se iba a operar pronto, esta era una buena señal antes de la cirugía.
Quería contarle esta noticia a Jiang Wang de inmediato.
Shi Niannian tomó su celular y le envió un mensaje a Jiang Wang. Él no respondió de inmediato. Esperó otros diez minutos, volvió a dejar su bolígrafo y lo llamó.
Sonó cinco segundos y contestó.
—¿Mhm?
resonó la voz grave y magnética de Jiang Wang, con una sonrisa implícita.
—¿Me buscas?
Ella dijo 'mhm', frotando inconscientemente la esquina del examen con la punta de sus dedos:
—Salieron las notas del examen final.
—¿Te fue bien?
Shi Niannian no había tenido tiempo de responder cuando escuchó una voz al otro lado:
—¡Número 089, Jiang Wang! ¡Para el examen preoperatorio!
Ella se quedó paralizada y preguntó:
—¿Dónde estás ahora?
Jiang Wang suspiró:
—En el hospital.

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