HDH 684




Hombres del Harén 684

Un subordinado silencioso es tan malo como un enemigo





Las máscaras de animales empezaron a ver a Latil no como un Lord, sino como algo que pretendía ser un Lord.

Por eso Kallain temblaba cuando le habló de las máscaras animales.

Cuando Latil preguntó medio en broma si las máscaras de animales querían apoderarse del mundo, la reacción de Kallain cobró sentido.


«Creía que habíamos acordado no decir gilipolleces»


Kallain empujó a Máscara de Ciervo por la espalda. La tensión en la sala se rompió ligeramente.


«Ah, vale. Vale»


Máscara de Ciervo levantó las manos en respuesta. Pero a diferencia del confeti, las comisuras de sus labios estaban hacia abajo. Estaba claro que no estaba contento.


«Lord ¿esto es comida?»


En ese momento, Máscara de Tigre señaló a Tasir e hizo una pregunta grosera.


«¿Comida?»


Latil lo fulminó con la mirada, Máscara de Tigre retiró rápidamente el dedo que señalaba a Tasir y lo cerró en un puño.


«No, no. Sólo preguntaba a .......»

«Este cuerpo es comida exclusiva del Lord. No se le debe aplicar saliva, recuérdalo»


Tasir se rió, pero Latil se sintió un poco incómoda.


«Nos sentaremos primero, Ama»


susurró Kallain, Latil asintió, acercándose a la cabecera de la mesa y sentándose.

Fue un gesto deliberadamente arrogante, pero las máscaras de animales le prestaron poca atención.

Máscara de Zorro seguía bebiendo sólo té.

'¿Por qué sigues fingiendo que bebes cuando ya has terminado?'


«¿Tenéis que llevar máscaras?»


preguntó Latil deliberadamente, molesto de ver a Máscara de Zorro sola en este lío.

Las máscaras de animales le pasaron las tazas de té a Latil y volvieron a detenerse.

Máscara de Rata se tapó la cara con las dos manos, como si nunca pudieran desenmascararla.


«.......»


Cuando nadie más se quitó las Máscaras, Latil no pudo contenerse.


«No tienes que quitártela. No te estoy obligando a quitártela»


No tenía sentido crear más problemas, ya que parecían discrepar en los objetivos más básicos.

Tras charlar un poco más, el ambiente se calmó un poco y Latil se puso manos a la obra.

Latil dio una explicación básica, diciendo que Milo proviene de una Princesa vampiro, que junto con un brujo cuya identidad desconoce, están creando una gran cantidad de Retchers Oscuros, que probablemente estén apuntando hacia este lugar.

Sacó el mapa que Tasir le había hecho, lo desplegó y señaló tres círculos.


«Así que aquí es donde vamos a luchar»

«¡Lucha! ¡Genial!»


exclamó emocionado Máscara de Rata. No sólo Máscara de Rata, sino las máscaras de animales en general parecían felices ante la mención de una pelea.

Aliviada, Latil explicó mejor su plan.


«Vamos a encargarnos de esto adentro para que el peligro no escape afuera, porque si alguno de los Retchers Oscuros escapa, va a ser peligroso para todos a su alrededor, y vamos a hacerlo rápido»


Latil miró a Tasir mientras hablaba.

Tasir estaba apartando su taza de él, frunciendo el ceño ante lo que fuera que había estado bebiendo.


«¿Crees que pueden hacerlo? Kallain dice que son muy fuertes»


Máscara de Perro sacudió la cabeza complacida por los elogios de Latil.


«No sé cuál de los tres lugares tendrá enemigos, así que intentaremos atacarlos todos al mismo tiempo, si crees que es posible, tendremos mercenarios de la Muerte Negra con nosotros además de los miembros de aquí»


Latil estaba a punto de explayarse más cuando Máscara de Cocodrilo levantó la mano.


«Adelante»


Con el permiso de Latil, Máscara de Cocodrilo inclinó extrañamente la cabeza hacia un lado en un ángulo de 90° y preguntó.


«¿Por qué tenemos que hacerlo?»

«¿Por qué tenemos que hacerlo? ¿No te parece mal dividirlo en tres direcciones?»

«No, lo que digo es, Lord. ¿Por qué no podemos dejar a los Retchers Oscuros salir? No importa si los soltamos allí, ¿verdad?»

«.......»


Latil se quedó mirando boquiabierta a Máscara de Cocodrilo.


«Así es, Lord, es más fácil de esa manera, menos humanos ayudarán con lo que estás tratando de hacer»


Máscara de Ciervo se puso inmediatamente del lado de Máscara de Cocodrilo.


«Dijiste que era una Emperador. Si es así, me aseguraré de que los Retchers Oscuros no vayan a Tarium»


sugirió Máscara de Rata con voz alegre.

Latil miró boquiabierta a las máscaras de animales. La desagradable sensación que había sentido antes, cuando habían pedido que alimentaran a Tasir, se intensificó.

Si había que sacrificar a Tasir o a Milo, Latil esperaba que fuera a Milo.

Egoísta, lo sabía, pero si tenía que sacrificar a un enemigo para proteger a los suyos, lo haría para proteger a los que tenía que proteger.

Pero ellos no eran de ese calibre.

Ni siquiera eran como los brujos. A los brujos feroces les movía una necesidad de reconocimiento y una venganza por todas las veces que habían sido ignorados.

Pero las máscaras de animales no parecían tener nada de eso. Si escuchabas atentamente, te dabas cuenta de que veían a la gente por debajo de ellos.

'Ahora que lo pienso, el panda rojo también me dijo eso antes. Que su especie nunca se sometería al Lord'

Pero el panda rojo formaba parte del grupo. Tal vez las máscaras de animales aquí reunidas estaban todas del mismo lado que el Lord, pero no con la misma lealtad absoluta que Kallain.


«Las órdenes vienen de la Ama»


Kallain habló con voz tajante, las máscaras de animales giraron hacia él al unísono.

Latil miró a Máscara de Zorro, que estaba sentado más lejos de Latil, sorbiendo su té todo el tiempo. No parecía querer ayudar a Latil.


«Es mejor hacer menos daño y simplemente terminar el trabajo. ¿No lo creen todos? ¿Por qué molestarse en complicar las cosas?»


Latil no pensaba lo mismo, así que intentó persuadirlos desde el punto de vista de las Máscaras de Animales.

Dejó a un lado el sentido común de que hay que minimizar las posibilidades de que la gente salga herida y abogó por la eficacia.

Las máscaras de animales inclinaron la cabeza al unísono.


«Esta Lord es rara»


Murmuró Máscara de Rata.


«Cierto. También estamos dejando vivos a los Adversarios. Uno lo mantenemos cerca porque es bonito, pero ¿no podríamos matar al otro?»


Preguntó Máscara de León.


«Porque los creadores de esos Retchers Oscuros asaltaron el preciado palacio de nuestra Emperador»


Tasir, que había estado luchando con su bebida todo el rato, interrumpió.

Las máscaras de animales giraron para mirarle al mismo tiempo que el humano que no se había mezclado con la manada abría la boca.

Tasir empujó su bebida hacia Máscara de Oso que tenía al lado y se echó a reír.


«¿No son ellos los que se atrevieron a ponerle una mano encima al amante de Su Majestad? Siendo así, todos esos juguetes que han creado deben ser destruidos antes de que puedan ser utilizados. Solo así se asegurará que todo su esfuerzo haya sido en vano. Qué puros son ustedes, queridos animales»


Las bocas de las máscaras de animales se entreabrieron cuando la única persona que no era un brujo o un semidespierto llamó puros a los longevos monstruos.

Tasir los miró con la expresión de un traficante arrepentido y añadió.


«Este Tasir conoce mejor que nadie la mente de Su Majestad, tendrás que hacerlo lo mejor que puedas»

«¡Quién!»


Máscara de Tigre se puso en pie de un salto, excitado por la provocación.


«El crimen de molestar al Lord no es pequeño. Muy bien, me aseguraré de que no puedan usar los juguetes en los que tanto trabajaron»


Máscara de Rata replicó con un gruñido.

Tasir escupió unas palabras y volvió a luchar con su bebida.

Latil suspiró y miró a Máscara de Zorro.

Máscara de Zorro tenía la mandíbula desencajada y lo miraba fijamente.

Levantó una comisura de los labios mientras Latil fruncía el ceño.

'Lo hizo a propósito'

























⋅•⋅⋅•⋅⊰⋅•⋅⋅•⋅⋅•⋅⋅•⋅∙∘☽༓☾∘∙•⋅⋅⋅•⋅⋅⊰⋅•⋅⋅•⋅⋅•⋅⋅•⋅

























«Ama ¿Te has peleado con Gesta?»


preguntó Kallain a Latil mientras caminaban de regreso al palacio tras una reunión de una hora.


«Un poco»


Latil dudó, luego repitió.


«¿Te diste cuenta? ¿He sido demasiado irrespetuosa con Gesta?»

«Más que faltar al respeto a Gesta, la Ama .......»


Kallain miró detrás de ella.


«De todas las máscaras de animales, la del zorro es la que más llama la atención»

«¿Por qué?»

«Por una razón u otra»

«Quizá sea la personalidad»

«Bueno, hoy Máscara de Zorro estaba callado, por eso todo el mundo parecía más agitado de lo normal, porque a veces cuando Máscara de Zorro está callado porque está pensando en algo, todo el mundo está más agitado de lo normal»


Sonnaught se había quitado por fin la máscara que aún llevaba puesta y la había vuelto a meter en la bolsa de papel.


«De todos modos, si la Ama y Gesta están fuera, va a ser un poco más complicado colarnos en el Milo, porque no nos llevarán a la guarida del zorro»

«Pero igual podemos entrar, ¿no?»

«Por supuesto»


Latil se rascó la cabeza, recordando lo que Girgol le había dicho a Sonnaught sobre la necesidad de Gesta.

























⋅•⋅⋅•⋅⊰⋅•⋅⋅•⋅⋅•⋅⋅•⋅∙∘☽༓☾∘∙•⋅⋅⋅•⋅⋅⊰⋅•⋅⋅•⋅⋅•⋅⋅•⋅

























Por fin ha llegado el día del asalto final a Milo.

Latil había ordenado a las Máscaras de Animales y a los vampiros que se dividieran en tres equipos para atacar los tres posibles lugares, ya que no estaba seguro de dónde estarían los Retchers Oscuros.

Kallain estaría en uno de los tres equipos, Grifo debía seguirlos y vigilar la situación desde arriba, informando a Latil de lo que encontraran.

Latil consultó su reloj mientras trabajaba.

Le dolía un poco el estómago por el nerviosismo y le picaban las palmas de las manos.

Esta batalla no parecía una contienda a vida o muerte como la librada contra Anyadomis, pero a diferencia de aquella, en la que todos se habían unido, en esta faltaban dos jugadores clave.

Era una estrategia a la que se oponía Tasir, quien desempeñaba el papel de estratega, y Gesta, quien se encargaba de toda la utilidad del grupo del Lord, se desentendió completamente de este asunto

Latil tenía que hacer que esto funcionara. Demostraría que podía arreglárselas sin el cerebro de Tasir y la mano de Gesta.

'Está bien, el plan es perfecto, las Máscaras de Animales se han ido, Kallain se ha ido, los mercenarios vampiros se han ido, a menos que ese brujo haya hecho un millar de Retchers Oscuros, podemos manejarlo, pero Gesta dijo que no serían tantos'

Latil golpeó el escritorio con el puño y se rascó la frente. Ahora que lo pensaba, incluso sin Tasir y Gesta, sus manos ya habían estado en toda esta batalla. Tasir había hecho los mapas, Gesta había analizado los ingredientes.


«¿Estás bien?»


preguntó Sonnaught a Latil, inclinándose hacia él. Era la primera vez que se preocupaba tanto por ella desde que había perdido a su amor.


«Por supuesto, tengo un plan»


Latil respondió alegremente, sonrió con suficiencia y se levantó. Un grifo pasó volando junto a la ventana.

Abrió la ventana y el grifo descendió en picado suavemente y se posó sobre el escritorio. Latil preguntó con urgencia.


«¿Qué ha pasado?»

[¡Lord, Lord! ¡Ha ocurrido un gran problema!]

«¿Un gran problema? ¿Qué quieres decir?»

[¡Esos tontos no atacaron los tres lugares al mismo tiempo y se concentraron en uno solo!]

«¿Qué quieres decir?»

[Los otros dos equipos simplemente siguieron a donde iba Kallain. Dijeron que, como no toma mucho tiempo verificar si hay Retchers Oscuros o no, sería mejor comprobar juntos y si no hay, moverse juntos]


El grifo golpeó con la pata un tintero, derramándolo con un ruido sordo.


[Había un ejército de Retchers Oscuros en el lugar al que fue Kallain. Así que hubo una pelea. Mientras observábamos eso, por si acaso subimos a revisar, resulta que en los otros dos lugares los Retchers Oscuros estaban saliendo a montones. ¡Se dieron cuenta del ataque y liberaron inmediatamente a los Retchers Oscuros!]


La tinta negra goteaba en el suelo. Latil desplegó el mapa sobre él y giró hacia Grifo.


«¿Adónde ha ido Kallain?»


Grifo golpeó un punto con la pata y apareció una marca negra en él.

Latil señaló el círculo más alejado de ella y gritó.


«Llévame aquí»

[¿Y el centro?]

«Todos irán hacia allí si se dan cuenta de que hay problemas. Así que iremos en esa dirección»


El grifo salió volando por la ventana y rápidamente creció en tamaño.

El grifo gritó cuando Latil se subió encima de él.


[¡Estás pesada!]


Al mirar atrás, Sonnaught montó junto con ella. Antes de que Latil pudiera pedirle que baje, el grifo ya había comenzado a elevarse en el aire.


«¿Por qué me has seguido?»


protestó Latil, a lo que Sonnaught respondió con aire de superioridad.


«Mi trabajo es protegerte».


Latil abrió la boca para protestar, pero la cerró y agarró las plumas del grifo.

El grifo se alejó volando, el doble de rápido que de costumbre. Las nubes seguían apareciendo delante de ellos, difuminándose y aclarándose.

Sonnaught recibió repetidas bofetadas en la cara del pelo de Latil, que se balanceaba como la cola de un caballo.

Cuando el grifo empezó a perder altura, Latil se echó hacia atrás y miró hacia abajo.

A través de las cimas de las montañas, pudo ver las grotescas formas de un grupo de jinetes que se movían a paso ligero.


«¡Bájenme!»

[¿Qué?]

«¡Rápido!»


gritó Latil, el grifo descendió aún más.

Cuando estuvieron cerca de la copa del árbol más alto, Latil desenvainó su espada y bajó de un salto.

En un abrir y cerrar de ojos, vio correr al monstruo gigante, desenvainó su espada y la lanzó contra los Retchers Oscuros que pasaban.

Latil empezó a correr y a lanzar tajos a velocidades inhumanas, atravesando a los Retchers.

Sonnaught observaba con incredulidad.


[¿No vas a caer?]

«!»

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