HDH 540

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Hombres del Harén 540

El amor es ciego



Gesta yacía desplomado sin poder hacer nada, pero cuando Latil se acercó, consiguió levantar la parte superior de su cuerpo con gran esfuerzo.


«Si es demasiado difícil, tómate un momento»


Latil agarró el brazo de Gesta y lo detuvo. Gesta gimió y aguantó, pero acabó desplomándose por el cansancio y se disculpó.


«Lo siento...»

«¿Por qué tienes que disculparte? Todo acabó así porque intentabas salvarme»

«Estoy reteniendo a Su Majestad...»

«Me alegro bastante de que estés a salvo. No digas esas cosas»


Latil recordó el momento en que ejerció toda su fuerza para levantar la roca. La visión de Gesta tendido sin vida la había asombrado. Si Gesta no hubiera abierto los ojos en ese momento crucial, Latil quizá no habría tratado al brujo con tanta indulgencia.


«Aun así, es una gran suerte. No puedo creer que hayas salido ileso después de estar bajo una roca tan enorme»


Además, la roca había caído desde arriba.

Latil miró al techo con un agujero, temblando. El mero hecho de que la roca caída no hubiera aplastado a Gesta era una suerte increíble. Además, a primera vista, Gesta parecía completamente ileso.


«¿Te defendiste con magia negra?»

«Con la cueva del zorro...»

«¿La cueva del zorro?»

«Sí. Gracias a la cueva del zorro, estoy ileso... Pero tardaré unos dos días en reparar el pasadizo, Majestad»

«¿El túnel también puede romperse? ¿Qué pasa si lo hace?»

«Se crea un desvío... No se puede llegar al destino deseado»


¡Dos días! Los ojos de Latil se abrieron de par en par.

Dos días. Aunque era muy poco tiempo para visitar Carissen, el problema era que Latil había venido aquí sin decir nada de irse.

¿Qué le pasaría al país si el Emperador desapareciera sin decir palabra? Con Gesta desapareciendo con ella, la facción del Lord probablemente podía adivinar la situación, pero saberlo no hacía que las secuelas fueran más fáciles.

Latil suspiró:


«Las cosas se han complicado bastante»

«Con tanta gente reunida, te ayudarán a resolverlo...»

«Eso espero»


Alternando la mirada entre Gesta, que respiraba agitadamente con expresión preocupada, el viejo brujo inconsciente, Latil se sentó en los fragmentos de roca junto a Gesta.

Aunque tarde, podía entender por qué se rehuía a los brujos. Su magia era demasiado agresiva y amenazadora y, además, estaba descontrolada.

Aunque los brujos normales podían ser peligrosos si atacaban con malas intenciones, se llevaba un registro de quién podía usar qué magia y sus acciones se controlaban con regularidad. En cambio, los brujos, al carecer de tales controles, eran percibidos como aún más amenazadores.

Por ello, es necesario sacar a la luz la magia negra.

Una vez traída a la luz, debe ser restringida y prohibida según sea necesario, aquellos que tratan con poderes peligrosos deben ser examinados con más cuidado.


«Gesta»

«Sí, Su Majestad...»

«¿Cómo les va a los brujos que dejamos en el subsuelo de Danasan?»

«Los estoy educando bien...»

«¿Educándolos? ¿Enseñándoles magia negra?»

«No. Se trata de educación del carácter...»

«Ya que estás a cargo, debería ser útil»


habló Latil aliviado, aunque Gesta seguía encorvado, sonrió torpemente.


«Me aseguraré de... ayudar a fondo a Su Majestad. No se preocupe...»


Tras terminar sus palabras, Gesta tocó de repente el suelo, se tambaleó y se puso en pie.


«¿Qué ocurre? No te esfuerces demasiado»


Aunque Latil le apoyó rápidamente, Gesta negó con la cabeza y se levantó bien con las dos piernas.


«Estoy bien... Sólo estaba quieto porque no tenía fuerzas debido a la conmoción que me produjo la rotura de la cueva del zorro. No estoy herido»

«¿Si la cueva del zorro se rompe, no podrás usar magia negra?»

«No es así...»


Gesta sonrió débilmente y cogió brevemente la mano de Latil. Latil le cogió la mano a cambio, pero entonces se oyó un crujido detrás de ellos.

¿Se ha despertado el brujo?

Sorprendida, Latil se volvió y vio que algunas partes del muñeco de piedra que había pisado se escabullían. Chasqueó la lengua.


«¿Se mueve a pesar de que lo he roto?»

«Ya es una criatura creada por magia negra...»


Mientras a Latil le parecía fascinante, Gesta, que parecía entender bien el principio, se acercó al muñeco de piedra, doblando ligeramente la cintura, e hizo algo.

Debido a la espalda de Gesta, Latil no pudo ver exactamente lo que hizo. Sin embargo, cuando Gesta enderezó la espalda, el muñeco de piedra, que se había arrastrado, se hizo añicos por completo, sin dejar rastro. Gesta pateó el montón de rocas transformadas en grava, luego dirigió su atención al inconsciente brujo.


«¿Conoces a este brujo? Parecía ser del bando de Anya Domis»

«No... No tengo ningún brujo cercano...»


Latil fue al lado de Gesta y murmuró:


«¿Qué debemos hacer? Si la cueva del zorro está intacta, podríamos llevarlo a nuestro país e interrogarlo. Ahora bien, no podemos hacerlo inmediatamente, tampoco podemos encarcelarlo dentro del palacio en su estado actual. He averiguado algunas cosas, pero está demasiado fragmentado»

«¿Qué has averiguado...?»

«La gente del palacio huyó a un templo cercano. Parece que les ofrecieron un trato según el cual los monstruos se retirarían si les entregaban a Emperatriz Aini»


Latil pensó en Hyacinth.


«Vayamos al templo también»


Debía estar herido ya que había sangre en la carta. Latil de repente se puso ansioso.

Sin embargo, Gesta, contrariamente a lo que esperaba Latil, sacudió la cabeza y preguntó:


«Majestad... Antes de eso, ¿puedo examinar primero a este brujo?»

«¿Examinarlo?»

«Sería bueno traerlo de vuelta después de tenerlo aquí dos días, pero existe la posibilidad de que Anya Domis aparezca y se lo lleve de nuevo...»

«¿Crees que aparecerá?»

«No tenemos ni idea de los movimientos que podría hacer ahora mismo... Además, Anya Domis es lista. Si ve que no regresamos inmediatamente, sospechará que algo va mal en la cueva del zorro... Así que quiero comprobarlo de antemano»


Tras escuchar el razonamiento de Gesta, Latil levantó al brujo caído y dijo:


«Hagámoslo»


Sin embargo, Gesta negó con la cabeza, sujetó suavemente el brazo de Latil con ambas manos y dijo:


«No... el tiempo apremia. Mientras investigo, ¿podría Su Majestad explorar un poco el palacio? Podría haber supervivientes...»

«¿Qué? ¿Y dejarte solo? ¿No es peligroso?»

«Bueno, sí... Pero ambos somos brujos. Si el oponente fuera un vampiro, podría ser diferente, pero nunca pierdo contra compañeros brujos ...»

'Además de nunca perder, incluso fuiste aplastado por una roca tan pronto como llegaste aquí, ¿verdad?'

Latil casi soltó las palabras en la punta de la lengua. Sin embargo, debido al tono seguro de Gesta y al hecho de que había tratado personalmente con el brujo responsable de las rocas, acabó asintiendo.


«De acuerdo»


Después de todo, había salido ileso, incluso después de yacer bajo una roca.


«Pero ten cuidado»

«Usted también, Su Majestad...»

«No hay más brujos por aquí, ¿verdad?»

«No debería haber... Usar magia negra tan poderosa aquí significa que esta área está designada como territorio de éste... Otros brujos no querrían entrar en el territorio de otro...»

«¿Territorio? Ah, ya hablamos de eso antes. Pero si este es el territorio de este brujo, ¿Qué hay de ti? ¿Estás bien?»

«Bueno... Ya ha caído, ¿no?»


Latil se sintió desconcertada al ver que Gesta esbozaba una sonrisa lastimera. ¿Acaso Gesta no se veía afectado en absoluto cuando trataba con los otros brujos de Danasan?

'¿Es Gesta relativamente fuerte incluso entre los brujos?'

Gesta puso su mano en la espalda de Latil y le dio un ligero empujón.


«Date prisa en volver... Si se corta la comunicación con este brujo, los enemigos podrían venir a comprobarlo...»

«Oh, claro»


'Eso no sería bueno, especialmente ahora que la cueva del zorro no está disponible'

Asintiendo, Latil se ajustó con firmeza la túnica y la capucha, y luego corrió más allá de las escaleras.



















***



















Gesta observó en silencio la figura en retirada de Latil antes de acercarse lentamente al brujo caído cuando Latil desapareció por completo al final del pasillo.

El brujo yacía tendido, inconsciente de su situación.

Gesta lo agarró del brazo y lo arrastró lentamente hasta una habitación cercana. Tras cerrar la puerta y colocar al brujo en medio de la habitación, utilizó la magia para cerrarla con llave e impedir que el emperador abriera la puerta sin avisar.

Una vez terminados los minuciosos preparativos, Gesta sacó su máscara de zorro, se la puso y, a continuación, sacó una daga de la manga y apuñaló el dorso de la mano del brujo.


«!»


El brujo gritó, intentando levantarse, pero Máscara de Zorro le apretó la frente y soltó una risita.


«Hola. ¿Podemos charlar un poco?»


En cuanto el brujo vio a Máscara de Zorro, sus ojos se abrieron de par en par al reconocerlo.


«¡Conde Lancaster...!»


Parecía que el brujo había recibido alguna directiva sobre Máscara de Zorro de Anya Domis. Las comisuras de los labios de Máscara de Zorro se levantaron.


«Sería más rápido charlar si sabes quién soy»


El brujo intentó levantarse de nuevo, pero Máscara de Zorro le presionó la frente una vez más.

Sintiendo el dolor de la daga clavada en su mano, el brujo gimió y miró a Máscara de Zorro con ojos llenos de incomprensión.


«Tú también eres un brujo. ¿Por qué atacas a los de tu propia especie?»

«¿Eh? ¿Somos una especie?»


Cuando Máscara de Zorro ladeó la cabeza, los ojos del brujo se abrieron de par en par. Con la otra mano, sacó el cuchillo que llevaba incrustado en la mano y lo colocó en el suelo.


«Si tú también eres un brujo, deberías saber cómo se trata a nuestros seniors y juniors sólo por ser brujos. ¿Por qué unir fuerzas con nuestros adversarios y obstruirnos?»


A pesar de que la sangre goteaba de su mano, el brujo ni siquiera miró en esa dirección, centrándose únicamente en los ojos de Máscara de Zorro.

A diferencia de Cro, que parecía saber la mayor parte de lo que estaba pasando, este brujo parecía no tener ni idea de que la Emperador era el Lord. Verlo tan serio hizo que Máscara de Zorro estallara de admiración:


«Vaya. Asombroso»


El brujo se estremeció ante el inesperado cumplido.

Aunque era un cumplido, el tono del que hablaba era excesivamente brillante. No sonaba burlón, pero tampoco parecía del todo sincero. ¿Era una provocación?

Sin embargo, el brujo no sucumbía fácilmente a las provocaciones. Mientras recordaba las proezas de Máscara de Zorro que le había contado 'Lord', activó sutilmente la matriz mágica oculta que había preparado de antemano. Sacar la daga de su mano no era simplemente para mostrar su determinación. Usando la sangre, pretendía activar la matriz mágica que había preparado como precaución.

Si la matriz mágica se activaba, otra ronda de rocas caería aquí. Era imposible hacer ajustes finos, si la suerte no estaba de su lado, también podría ser golpeado por esas rocas. Sin embargo, 'Lord' eligió a Girgol y Máscara de Zorro como los oponentes más desafiantes entre los adversarios. Si podía matar a uno de los dos de los que 'Lord' desconfiaba, especialmente al traidor de su propia especie que estaba del lado de los adversarios, su sacrificio por sus hermanos tendría sentido.


«¿Pero qué puedes hacer? En realidad no me importan los demás brujos. No tengo sentido del parentesco»


Mientras Máscara de Zorro se acomodaba frente a él con una sonrisa socarrona, el brujo activó la matriz mágica.


«¡Entonces muere!»


En un instante, la luz penetró en toda la habitación donde se encontraban los dos.

Sin embargo, eso fue todo. Los efectos previstos preparados por el brujo no se produjeron.


«¿Por qué ......?»


Perplejo, el brujo miró sin saber dónde había colocado la matriz mágica. Entonces, se sobresaltó. La matriz mágica oculta estaba completamente agrietada.


«Esto es ....... increíble .......»


Murmurando para sí mismo, el brujo pensó en una sola persona capaz de tal hazaña y miró fijamente a Máscara de Zorro.


«¿Eres tal v-?»


Antes de que pudiera terminar la frase, su conciencia se desvaneció. Y sosteniendo el alma del brujo en su mano, Máscara de Zorro sonrió.


«Ahora, ¿tenemos una pequeña conversación?»




















***




















'Gesta... parecía asustado. Me pregunto si puede investigar bien. Tal vez debería haber ido con él después de todo'

Latil miró preocupada hacia atrás varias veces.

Sin embargo, confiando en las habilidades de Gesta, que ya había visto unas cuantas veces, impulsó sus reticentes pasos hacia delante.

'Gesta no quiere que otros lo vean usando magia negra. Probablemente por eso pidió que lo dejaran solo. Confiemos en Gesta y dejémoslo en sus manos'

Latil caminó durante un rato mientras rompía rocas por el camino.

Entonces, se detuvo cuando sintió la presencia de alguien.

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