Más allá del Tiempo 32
La vida a la izquierda, la muerte a la derecha
"¿También... también es v-veneno?"
tartamudeó Gu Dao, con los ojos muy abiertos por la desesperación. Parecía que quería decir algo más, pero antes de que pudiera, se desmayó.
Fue entonces cuando la Niebla de Confusión se extendió sobre ellos, cubriendo la zona y tragándose tanto a Xu Qing como a Gu Dao.
Cuatro horas después, en un cruce de caminos al borde de la jungla, Gu Dao abrió los ojos. Le dolía todo el cuerpo, pero lo primero que hizo al abrir los ojos fue ponerse en pie de un salto, nervioso.
No había peligros a su alrededor y no vio a Xu Qing. Suspiró aliviado. Luego se miró la cara y vio que ya no estaba hinchada. Parecía que ya no estaba envenenado.
"¿No estoy muerto?"
murmuró, con el corazón latiéndole con fuerza al darse cuenta de que, de algún modo, había salido con vida de una situación aparentemente imposible. Entonces se fijó en un papel de bambú que había a un lado con un texto.
"Seguro caducado"
Una mezcla de emociones llenó el corazón de Gu Dao al leer las palabras, incluida la vergüenza por el truco que había intentado hacer antes. Finalmente suspiró, juntó las manos y se inclinó profundamente en dirección a la jungla.
"Gracias"
Al darse la vuelta, vio que había dos caminos frente a él. El de la derecha llevaba directamente al campamento base. A la izquierda había un camino que eventualmente iría a la ciudad Pinos Sonrientes.
Dado que no había nadie alrededor, se quedó allí, pensando.
El dueño del campamento es de la Secta Vajra, ellos controlan todas las ciudades de los alrededores. Incluso si voy a Pinos Sonrientes, dudo que escape a la ira del dueño del campamento, sobre todo teniendo en cuenta que el equipo que envió tras de mí está muerto.
Gu Dao se esforzó por tomar una decisión. La forma más fácil de seguir con vida sería volver al campamento y culpar a Chico. Podría explicar que Chico fue quien mató a los subordinados del dueño del campamento y que él no tuvo nada que ver. Esa idea le remordía la conciencia, ya que Chico le había salvado. Pero después de pensarlo un poco, tomó su decisión.
En este mundo caótico, lo más importante es seguir viviendo. No hay que preocuparse por los demás. Llegado a este punto de sus pensamientos, aplacó su sentimiento de culpa y echó a correr de vuelta al campamento.
Sin embargo, en cuanto empezó a moverse, un frío rayo de luz salió disparado hacia él a una velocidad de vértigo y, en una fracción de segundo, le atravesó la cabeza. Con un golpe seco, Gu Dao cayó al suelo, con los ojos desorbitados y la sangre agolpándose a su alrededor. Se retorció un par de veces, entonces su visión del mundo se volvió oscura. Y así permanecería para siempre.
Estaba completamente muerto.
Xu Qing estaba encima del cadáver, cogiendo su pincho de hierro.
No le interesaba involucrarse con el dueño del campamento. Y comprendía la naturaleza humana, así que no se había ido del lugar. En su lugar, esperó a ver qué decidía hacer Gu Dao.
El camino de la izquierda llevaba a la vida.
El camino de la derecha llevaba a la muerte.
Gu Dao había elegido el camino de la derecha.
Con el rostro completamente inexpresivo, Xu Qing roció Polvo Destructor de Cadáveres sobre el cadáver de Gu Dao, luego se dio la vuelta y se marchó a toda velocidad.
La Niebla de Confusión seguía presente en la jungla, pero eso no supuso un obstáculo para Xu Qing. Finalmente llegó al cañón con su laboratorio. Al entrar en el cañón, oyó el débil grito de un lobo, pero lo ignoró.
Primero, comprobó que las trampas que había colocado antes de salir la última vez no habían saltado. Luego empujó la puerta del laboratorio y entró.
No era muy grande. No había cama para dormir, y las paredes estaban cubiertas por un entramado de pequeños armarios, dentro de los cuales había diversas plantas medicinales y glándulas venenosas. Algunas de ellas ya habían sido preparadas para su uso en mezclas. Otras estaban completamente intactas. En total, había cientos de especímenes.
Xu Qing miró a su alrededor y se sintió muy satisfecho.
Ésta era la colección que había reunido después de empezar a estudiar con Gran Maestro Bai, la mayoría eran cosas que había recogido personalmente en la región prohibida.
Las plantas venenosas constituían la mayor parte de la colección, y sólo una pequeña parte eran plantas medicinales.
Xu Qing lo inspeccionó todo y luego se sentó a pensar.
Gran Maestro Bai le había dado la fórmula de la píldora del bolo blanco, pero estaba oculta en el contenido de sus conferencias. Xu Qing había tomado muchas notas y tenía muy buena memoria, por lo que ya había organizado la información de esas clases. Sin embargo... no tenía todas las plantas medicinales que necesitaba para elaborar la píldora.
No tengo forma de fabricar la píldora, pero quizá pueda sustituirla por otras plantas con cualidades similares a las que me faltan.
No tenía ni idea de si funcionaría, pero aunque no fuera así, aprendería del proceso. Llegado a este punto de sus pensamientos, agitó la mano, haciendo que siete u ocho plantas medicinales salieran volando de varios armarios y aterrizaran frente a él.
Después de inspeccionarlos detenidamente, se quedó pensativo y se dirigió al pequeño patio que había detrás del laboratorio. En el patio crecían flores de colores por todas partes, y también un pequeño trozo de tierra donde crecían unas cuantas plantas medicinales. Esas plantas eran de las que debían utilizarse en un plazo determinado después de ser cosechadas. Después de convertir este patio trasero en un jardín medicinal, las había trasplantado aquí.
Al entrar en el jardín medicinal, oyó de nuevo el aullido del lobo, aún más claro que antes.
La expresión de Xu Qing era la misma de siempre, mientras recogía tres plantas del jardín y volvía a entrar.
Allí, sacó una palangana de piedra, dentro de la cual empezó a machacar los diversos ingredientes hasta conseguir una mezcla.
Ya fuera arrancando hojas, extrayendo el líquido o separando los pétalos de las flores, trabajó con gran precisión, asegurándose de no añadir ni demasiado ni demasiado poco de nada. Poco a poco, el líquido medicinal de la pila se volvió negro como el carbón.
Me faltan cinco tipos de plantas medicinales....
Echó un vistazo a los armarios y consideró detenidamente el asunto antes de reunir los ingredientes de repuesto.
Utilizando el principio de la polaridad yin-yang, intentó crear algo que produjera el resultado adecuado, pero resultó más difícil de lo que esperaba. Pasó la noche y llegó la mañana antes de que por fin pudiera producir la mezcla que quería.
Miró el líquido negro y viscoso en el recipiente de piedra y frunció el ceño. No se parecía en nada a lo que él esperaba de una mezcla de bolo blanco. Pero dado el trabajo que había hecho hasta entonces, no iba a rendirse ahora. Apretando los dientes, sacó un poco de trébol de siete hojas y lo añadió a la mezcla.
Pronto, el líquido medicinal del recipiente empezó a burbujear y parecía que el color iba a cambiar. Pero al cabo de tres respiraciones, se quedó quieto.
Mirando de cerca, Xu Qing vio que el líquido ya no era negro, sino de color marrón.
Xu Qing dudó. Frotándose el pecho, donde descansaba el cristal violeta, pensó en su resistencia a los venenos y finalmente decidió que no corría peligro. Metió la mano con cuidado en la jofaina, cogió un pequeño puñado de la mezcla y lo enrolló en forma de píldora. Luego se la acercó a la nariz e inhaló.
Olía tan repugnante y acre que no se atrevió a comerla.
¿Será comestible? Tras dudarlo un poco más, sacó la píldora al jardín medicinal.
De nuevo llegó el aullido del lobo. Esta vez, Xu Qing atravesó el jardín medicinal y se dirigió directamente hacia la fuente del aullido. Más allá del jardín, en una zona de maleza, había una gran jaula hecha de hierro, madera y lianas. Dentro de la jaula había un escuálido lobo de escamas negras.
Al ver a Xu Qing, se puso en pie y enseñó los dientes. Sin embargo, sus ojos brillaban de terror; estaba claro que tenía miedo de Xu Qing.
Hace algún tiempo, cuando Xu Qing estaba en la selva cosechando plantas, este lobo le atacó de la nada. En lugar de matarlo, lo había traído aquí para que sirviera de animal de prueba.
Al ver la píldora marrón que llevaba Xu Qing, el lobo empezó a temblar y se alejó de él.
No sirvió de nada. Xu Qing metió la mano en la jaula, agarró al lobo por el cuello y tiró de él hacia sí.
Xu Qing no mostraba ninguna expresión mientras miraba fríamente al tembloroso lobo. Con la otra mano, cogió la píldora que acababa de preparar y se la puso en los labios.
El lobo de escamas negras tembló incontrolablemente. Al darse cuenta de que la muerte se cernía sobre él, el lobo tomó mansamente la píldora y se la tragó.
Un momento después, empezó a salir humo negro del lobo, que vomitó. Al mismo tiempo, se le formó una enorme ampolla en la cabeza, que fue creciendo hasta reventar estrepitosamente. Entonces, el lobo se desplomó en el suelo, jadeando.
Xu Qing frunció el ceño, arrojó unos trozos de carne a la jaula y volvió al laboratorio a pensar.
¿Por qué no funcionaba como se esperaba...? Algo extraño ocurrió cuando la medicina hizo efecto. En lugar de neutralizar el mutágeno, lo hizo converger y luego explotar.
Después de considerar el asunto, Xu Qing decidió que probablemente se debía a que no había incluido un agente de aumento medicinal. Si añadía uno, probablemente el medicamento sería más eficaz.
Un agente de aumento. ¿Y si utilizaba veneno de serpiente en la mezcla?
Agitó la mano y tres glándulas de veneno diferentes aparecieron ante él. Después de extraer cuidadosamente el veneno, lo añadió a la mezcla de la pila de piedra, haciendo que el líquido silbara y estallara, mientras salían vapores verdes.
Al ver los vapores venenosos, Xu Qing agitó la mano para expulsarlos fuera. Luego dejó la pila a un lado para que fermentara.
Mientras esperaba, Xu Qing se sentó con las piernas cruzadas para hacer ejercicios de respiración y cultivar el encantamiento del Mar y la Montaña.
Más tarde, al caer la tarde, Xu Qing revisó el líquido medicinal. Sacó otro puñado para crear una píldora y volvió a acercarse al lobo de escamas negras.
Se oyó una serie de chasquidos y Xu Qing regresó al laboratorio con aire abatido. Tras sentarse a pensar un rato, sacó un bolo blanco terminado, lo fundió y estudió los resultados.
De este modo, pasaron seis días en un santiamén.
Durante ese tiempo, Xu Qing no prestó atención a nada más que a su investigación sobre los bolos blancos. Ya había utilizado casi la mitad de su colección de plantas medicinales, y su jardín estaba completamente vacío. Además, había hecho más de diez intentos de crear diferentes versiones del bolo blanco líquido.
En cuanto al lobo de escamas negras....
Al consumir la última píldora, el mutágeno que contenía experimentó un rápido influjo. Eso, a su vez, hizo que el poder espiritual de la zona se vertiera en el lobo, trayendo consigo aún más mutágeno. Finalmente, el lobo explotó en una nube de sangre.
Por suerte, la sombra de Xu Qing podía absorber el mutágeno, de lo contrario la convergencia resultante le habría inundado.
Viendo ese resultado final, Xu Qing se sintió aún más desanimado. Dicho esto, sabía que los bolos blancos no eran fáciles de hacer, y eso era especialmente cierto teniendo en cuenta que no tenía todos los ingredientes adecuados.
Aun así, estaba aprendiendo mucho sobre la mezcla de ingredientes medicinales. Cada vez que intentaba hacer una nueva versión de la mezcla, aprendía más. Además, la versión final de su píldora realmente hizo algo.
Por desgracia, lo que hacía era lo contrario de lo que hacía un bolo blanco.
Los bolos blancos disipaban el mutágeno, pero la píldora de Xu Qing lo atraía.
Mirando hacia abajo, vio una fina membrana verde creada añadiendo tréboles de siete hojas a la mezcla. Debajo había un líquido medicinal negro como el carbón. La razón de la membrana era que, sin ella, el líquido atraería inmediatamente al mutágeno y crearía una fuerte convergencia.
Eso era lo que había matado al lobo de escamas negras.
Xu Qing suspiró y se frotó el puente de la nariz. Centrándose en las fluctuaciones de su base de cultivo, intentó deshacerse de cualquier sentimiento de fracaso.
No había tenido éxito con la píldora medicinal, pero había experimentado cierto crecimiento en su base de cultivo. Ahora mismo, estaba en la cima del quinto nivel de la Encantación del Mar y la Montaña.
Esta noche debería ser capaz de alcanzar el sexto nivel.
Respirando hondo, dejó de pensar en píldoras medicinales y se dedicó de lleno a lograr un gran avance en su cultivo. En el mundo caótico en el que vivía, cada nivel adicional de fuerza aumentaba las posibilidades de supervivencia.
Esa noche, cuando la luna colgaba en lo alto del cielo, unos sonidos retumbantes resonaron en el interior de Xu Qing.
Estos sonidos eran mucho más fuertes que cualquier cosa de antes. Y a pesar del hecho de que había asumido que no había más suciedad dentro de él para extruir, tan pronto como alcanzó el punto de ruptura, cantidades masivas de impurezas emergieron de su interior.
Una sensación de claridad sin precedentes le invadió, y entonces un rugido resonó detrás de él.
En el pasado, sus puñetazos hacían aparecer la imagen espectral de un Kui. Esta vez, una imagen similar apareció detrás de él, pero más grande y feroz. Y en vez de tener una sola pata, tenía dos.
Además, esta vez... ¡¡el Kui Ying incluso tenía un cuerno!!
Estrictamente hablando, no era un goblin, sino un Kui Ying.
El aullido del Kui Ying resonó en la noche, haciendo que cesaran los rugidos de las bestias mutantes.
Los ojos de Xu Qing se abrieron de golpe y una luz violeta se extendió por el laboratorio, como si acabara de caer un rayo violeta. Mientras la luz violeta se extendía y el Kui Ying rugía, Xu Qing se sentó con un aspecto profundamente intimidatorio.
Un momento después, la luz se desvaneció y el Kui Ying desapareció.
Encantamiento del Mar y la Montaña. Sexto nivel.
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