WANGUSHENDI 2439

WANGUSHENDI 2439




Dios Emperador 2439

Ganar o Perder




"550000 piedras divinas"

"560000 piedras divinas"


La primera, una apuesta realizada por el cultivador de velo negro.

Este último, el que apostaba era Viejo 'Siete Manos', Dios del Juego, siempre superaba a su oponente en diez mil piedras divinas.

La Rueda Divina Mingyang de Zhang Ruochen pudo alcanzar un precio altísimo de 300000 piedras divinas porque, bueno, podía convertirse en un Arma Santa Suprema. Sin embargo, otras Armas Sagradas Reales de alto nivel no podían alcanzar un precio tan alto.

Podría decirse que esta apuesta entre el Viejo 'Siete Manos' y el cultivador de velo negro era ya un duelo cumbre en el mundo mundano por debajo del Reino Divino, destinado a hacer temblar los cielos y el infierno y a convertirse en una leyenda.

Cang Jie estaba ya tan asustado que estaba a punto de jadear, su corazón estaba a punto de dejar de latir cuando fue solo un Taotie en el pasillo.

La mirada de Yan Huang Tu había observado al cultivador envuelto en un velo negro, con ojos curiosos.

No era de extrañar que el Viejo 'Siete Manos' fuera capaz de reunir 560.000 piedras divinas, después de todo, este anciano, que había vivido durante decenas de miles de años, había ganado no menos de diez mil juegos de azar, grandes y pequeños.

¿Pero quién era ese cultivador con velo negro?

¿En qué se basa para conseguir 550.000 piedras divinas?

Zhang Ruochen dijo.


"¡Está a punto de decidirse!"

"¿Cómo puedes saberlo?"


Preguntó Yan Huang Tu con una sonrisa.

Zhang Ruochen dijo.


"El Árbol Coral Qicai es, sin duda, un árbol muerto, incluso si hubiera sido refinado en un Arma Santa Suprema, no podría llamarse ahora Arma Santa Suprema porque no tiene espíritu de recipiente. Un Arma Santa Suprema sin espíritu de recipiente sólo vale alrededor de medio millón de piedras divinas"


Yan Zhexian reveló una mirada contenciosa, prefiriendo continuar con Zhang Ruochen.


"¿Y si el espíritu del recipiente sólo está dormido? O, ¿Qué pasa si el Árbol Coral Qicai no está muerto por completo?"


Zhang Ruochen negó con la cabeza y no le respondió.

Yan Huang Tu suspiró ligeramente, esta sobrina suya era originalmente inteligente como la nieve y tenía talento que era difíciles de igualar por miles de millones de cultivadores, pero desafortunadamente, estaba demasiada protegida, era demasiado inocente y demasiado joven.


"¿Por qué has dejado de hablar?"


Dijo Yan Zhexian sin reparos.

Yan Huang Tu finalmente no pudo evitar hablar.


"Esas dos posibilidades tuyas son demasiado escasas, la riqueza que costaría sería demasiado incluso para el Viejo 'Siete Manos'. Hace un momento, el Viejo 'Siete Manos' ya había dicho que dejaba pasar la oportunidad de apostar por ese 1% o 2%. Más de medio millón de piedras divinas, apostar por un 1% o 2% de posibilidades de ganar ya es asumir un riesgo enorme. Si uno fuera por la apuesta, están los dos escenarios que mencionaste: Gastar un millón o incluso varios millones de piedras divinas, para apostar por una posibilidad entre diez mil de ganar. El coste es tan grande que ni siquiera un dios haría algo así. ¿No se han echado atrás los dioses del Salón Cheng y el Palacio de las 12 doncellas Divinas?"


Era la primera vez que Yan Zhexian participaba en los juegos de azar, cuando escuchó la explicación de Yan Huang Tu, se iluminó de repente y lanzó una mirada a Zhang Ruochen. Un sonrojo avergonzado recorrió su bonito rostro envuelto en patrones rúnicos.

El cultivador de velo negro dudó durante mucho tiempo, puso la tarjeta negra ahuecada en su mano, la volvió a bajar y dijo.


"¡No subiré la apuesta!"


El Viejo 'Siete Manos' se levantó y soltó una larga carcajada.


"Ya que la apuesta ha terminado, abramos la última capa del sello y veamos cuál es realmente el color del Árbol Coral Qicai..."


Zhang Ruochen había estado observando los ojos del Viejo 'Siete Manos'.

No parecía que apostaba por un 1% o 2% de posibilidades de ganar, estaba claramente confiado.


"¿Será que estoy mirando para otro lado?"


Zhang Ruochen utilizó su Corazón de la Verdad para percibir de nuevo, pero un sutil sentido le dijo que no valía la pena apostar por el Árbol Coral Qicai.

El ambiente en toda la Plataforma de Juego llegó a su punto álgido.

La respuesta a la apuesta de millones de piedras divinas estaba a punto de revelarse, ¿quién sería el ganador final?


"¡Dios del juego! ¡Dios del juego! Dios del juego ......"

En la Ciudad Juego de Azar, muchos cultivadores gritaban estas dos palabras.

El nombre invicto del Viejo 'Siete Manos' llevaba mucho tiempo inculcado en los corazones de todos los jugadores.

El público de la Plataforma de Juego, que gozaba de un gran estatus y se comportaba con dignidad, contenía la respiración y se tensaba.

Ye Xiao se consideraba un veterano del casino, sin embargo, en el proceso de desprecintar el sello, también estaba temblando y su corazón latía como un trueno.







¡Boom!







La última capa del sello se levantó.

El Árbol Coral Qicai explotó con una luz abrasadora de siete colores, acompañada de una tormenta de energía en el espacio y el tiempo que impactó en todas las direcciones. A pesar de que la multitud en la Pataforma de Juego había sido preparada, todavía había más de diez personas que fueron arrastradas por la turbulencia espacial, sus cuerpos lanzados a decenas de metros de distancia.

Los puntos de luz estampados en el tiempo, aunque densos, no formaban un ataque dañino.


"Con una tormenta de energía tan poderosa, ¿Quién se atreve todavía a decir que el Árbol Coral Qicai ha sido corroído?"


Los ojos de Cang Bai Zi estaban agitados mientras miraba con desprecio a Zhang Ruochen.

Yan Huang Tu frunció el ceño y suspiró.


"¡Parece que el Viejo 'Siete Manos', ha ganado otra apuesta!"

"¡Es demasiado hermoso, demasiado exquisito!"

"Qué poderosas fluctuaciones temporales, ¿podría ser que el Árbol Coral Qicai no esté muerto, sino que sea un árbol vivo?"

"¡No puede ser! Un Árbol Coral Qicai vivo ...... Esto, esto tiene que haber alertado a los dioses de todo el Mundo Infierno ......"

"Para perder con un objeto tan divino, de haberlo sabido, habría apostado contra todo pronóstico"


Hubo cultivadores que suspiraron aliviados.

Yan Zhexian se arrepintió en su corazón y sintió que debería haber seguido con su idea de que un tesoro como el Árbol Coral Qicai saliera a la luz, que valía la pena apostar por ofrecer aún más piedras divinas.

Sin embargo, Dios del Juego tenía buen ojo.

Este Emperador de la Matanza del Cielo y la Tierra había mirado hacia otro lado después de todo.

Mientras todo el mundo estaba inmerso en el hermoso resplandor que emanaba del Árbol Coral Qicai, sólo tres personas permanecieron en silencio. Estos tres eran Zhang Ruochen, el Viejo 'Siete Manos' y el cultivador de velo negro.

El Viejo 'Siete Manos' sólo se rió a carcajadas al principio.

Al levantar el sello, la sonrisa de su rostro, en cambio, se estrechó y sus ojos se volvieron cada vez más graves, finalmente, su rostro se volvió pálido, claramente algo inesperado había sucedido.


"¿Cómo ha podido pasar esto?"


Alguien, no sa sabe quién, gritó horrorizado.






¡Sasha!





En la plataforma de juego, el Árbol Coral Qicai que crecía en un Caldero de piedra se disipaba rápidamente en la luz.

El árbol se convirtió gradualmente en arena y se deslizó hacia abajo.

La multitud de cultivadores que acababan de estar entusiasmados, emocionados y asombrados se quedaron boquiabiertos, incapaces de creer la imagen que estaban viendo frente a ellos.

Yan Huang Tu se congeló por un momento, luego dejó escapar una carcajada.


"Así que la fluctuación de energía de hace un momento era la última esencia del Árbol Coral Qicai, el sello se desprecintó y se expuso al aire, se dispersó instantáneamente, es gracioso cómo incluso Dios del Juego puede equivocarse"


Pensando en esto, Yan Huang Tu no pudo evitar mirar a Zhang Ruochen y dijo en su corazón.

'Incluso más astuto que la vista del Dios del Juego, esta persona no debe ser una criatura marina en la piscina'


"Imposible, imposible, vi claramente fluctuaciones de vida, ¿Cómo podría ser un árbol muerto? Imposible, nunca"


Una poderosa tormenta de energía espiritual surgió del Viejo 'Siete Manos', sacudiendo a varias personas que estaban más cerca, todas ellas salieron volando, embozadas, hacia el Caldero de piedra, tanteando con ambas manos y abrazando el Árbol Coral Qicai.

En cuanto las manos se tocaron, la arena de siete colores se deslizó aún más rápido.

Los seis cultivadores que habían apostado mil piedras divinas tenían un brillo de excitación en sus ojos.

La diferencia era que tres de ellos estaban tan contentos que sus risas parecían capaces de destrozar todo el castillo.

Los otros tres, aunque también se reían, Zhang Ruochen era muy consciente de que sus miradas, si es que las había, se dirigían al cultivador de velo negro.

Esta mirada fue rápida y sutil, con la atención de la multitud atraída por el Árbol Coral Qicai, ningún cultivador lo notó excepto Zhang Ruochen.

Había caído en la cuenta de Zhang Ruochen, una sonrisa no pudo evitar aparecer en su rostro mientras suspiraba en secreto: 

'¡Impresionante!'

No estaba claro a quién se elogiaba por ser impresionante.







¡Snap!





El rostro del Viejo 'Siete Manos' era feroz mientras asomaba una mano en forma de garra de águila y atravesaba el Árbol Coral Qicai.

Con un estallido, el árbol, de tres metros de altura, estalló completamente en pedazos.

La garra fuertemente apretada del Viejo 'Siete Manos' se abrió lentamente, sólo para ver que una débil nube de luz de siete colores parpadeaba en su palma. Dentro del resplandor había un gusano del tamaño de una lombriz, que nació con un anillo de siete colores.


"Así que esa débil aura de vida fue emitida por ti, así que fuiste tú ......"


Los ojos del Viejo 'Siete Manos', que estaban a punto de salirse de sus órbitas, temblaron por completo.

Obviamente, el Viejo 'Siete Manos' había percibido la fluctuación de la vida del Árbol Coral Qicai y pensó que no era un árbol muerto antes de apostar contra todo pronóstico.

¿Quién iba a esperar que un gusano naciera en el colorido árbol de coral?

Sin embargo, Zhang Ruochen tenía una nueva duda en su mente; con su Corazón de la Verdad, ni siquiera había percibido las fluctuaciones de vida en el Árbol Coral Qicai. ¿Cómo lo percibió el Viejo 'Siete Manos'?

Parecía que para ser capaz de convertirse en Dios del Juego, el Viejo 'Siete Manos' tenía un lado extraordinario, temía que tuviera un gran secreto escondido en su cuerpo.

Un participante Vampiro Inmortal, vestido con una túnica de sangre y con diez alas en la espalda, miró a Ye Xiao y sonrió con suficiencia.


"Señor Ye Xiao, ¿no es hora de anunciar el resultado de la apuesta?"


Ye Xiao miró al Viejo 'Siete Manos', que seguía de pie sobre el Caldero de piedra, inclinó la mano en señal de reverencia.


"Anciano Dios del Juego, ¿Está bien?"

"No hay daño ...... no hay daño ...... dispuesto a apostar y aceptar la derrota"


El Viejo 'Siete Manos' cerró los ojos y su corazón no pudo estar en paz durante mucho tiempo.

¡Después de tantos años en el negocio, era la primera vez que perdía, lo hizo de forma estrepitosa.


"Dios del Juego ha plantado este talón con bastante ligereza, aunque tenga una fortuna asombrosa, esta vez salió muy herido"


Cang Bai Zi dijo en voz baja, con una sonrisa en su rostro.

Yan Zhexian estaba un poco asustada, si no fuera porque Zhang Chen y Yan Huang Tu se detuvieron, ella también podría haber apostado por más de medio millón de piedras divinas, realmente no podía creer las consecuencias que tendría.

La pérdida de 150.000 piedras divinas ya era el mejor resultado posible.

Mientras miraba fijamente al hombre alto y delgado que era conocido como el 'Emperador de la Matanza del Cielo y la Tierra', su corazón sintió una sensación de gratitud y también un toque de curiosidad.

Después de calmarse, comenzó a anunciar.


"Como pueden ver, el Árbol Coral Qicai hace tiempo que perdió su esencia y se convirtió en arena y polvo. Aunque esas arenas de siete colores también tienen cierto valor, están lejos de venderse por mil piedras divinas. Por lo tanto, el ganador de este juego contra la apuesta es ......"

"Espera"


Una voz interrumpió el resultado que Ye Xiao iba a anunciar.

Los corazones de los seis vencedores, que ya estaban a punto de ser degollados, fueron interrumpidos repentinamente, por lo que, naturalmente, se sintieron extremadamente deprimidos, un escalofrío salió de sus ojos mientras miraban a la persona que acababa de hablar.

El que gritó "espera" fue naturalmente Zhang Ruochen.

Zhang Ruochen se acercó a Yan Zhexian y sonrió


"Señorita, ¿Estaría dispuesta a dejarme comprar el gusano de la mano del Dios del Juego por mil piedras divinas?"


Yan Zhexian se quedó atónita, sin poder reaccionar.

Este tipo, Emperador de la Matanza del Cielo y la Tierra, ¿estaba loco para gastar mil piedras divinas para comprar un gusano ......?

¡No es cierto!

La cuestión es, ¿Por qué querría comprárselo?

El gusano, no era como si fuera suyo.

En la Pataforma de Juego, algunos cultivadores reaccionaron rápidamente y comprendieron las intenciones de Zhang Ruochen.

Cang Bai Zi dejó escapar una sonora carcajada.


"Emperador de la Matanza del Cielo y la Tierra, ¿crees que todo el mundo es idiota? Usando mil piedras divinas y comprando ese gusano, ¿Ese gusano vale mil piedras divinas? ¿Así que ella gana? Jaja"


El precio de un gusano, valía mil piedras divinas.

Añade a eso esas arenas de siete colores.

El valor de esta apuesta valdría más que mil piedras divinas.

Cuando el precio superó las mil piedras divinas, los seis jugadores que habían apostado sólo mil piedras divinas fueron los primeros en salir.

Los únicos participantes con más de mil piedras divinas eran Yan Zhexian, el Viejo 'Siete Manos' y el cultivador de velo negro.

De acuerdo con las reglas, el postor más bajo gana.

Al final, el ganador fue naturalmente Yan Zhexian.

Ye Xiao regañó a Zhang Ruochen.


"Su Excelencia, es mejor no romper las reglas del Palacio de la Doncella Divina, no depende sólo de usted establecer el valor de una cosa"


Al ver que Zhang Ruochen se había atrevido a jugar una baza descarada, los seis "Ganadores" estaban muy furiosos.

El Santo Supremo Vampiro Inmortal con diez alas en su espalda dijo con una voz profunda.


"Tonto inteligente"

"Échalo y que se le prohíba entrar en el Palacio de la Doncella Divina en el futuro"

"¡Querer ganar, querer estar loco!"



    ......



Cang Jie se sintió muy avergonzado y pensó que el Senior debía haber llegado a la Ciudad del Juego por primera vez y no entendía las reglas que había, por eso había hecho esa broma. Quería ayudar a explicar, pero, en cambio, se vio presionado a abrir la boca por el Poder Supremo que emanaba de todos lados.

Frente a los muchos poderes de los Santos Supremos, él, un Rey Santo de Noveno Paso, no tenía ninguna cualificación para hablar.

Zhang Ruochen se mantuvo tranquilo y sereno mientras decía.


"¿No se les ha ocurrido a todos que un gusano que puede crecer en un Árbol Coral Qicai no es un producto ordinario? Mientras esta chica, esté dispuesta a prometerme que me lo venderá por mil piedras divinas. Tendré mi propia manera de demostrar que vale más que mil piedras divinas, definitivamente los convenceré a todos"


Cang Bai Zi se rió a carcajadas, como si hubiera escuchado lo más gracioso del mundo, 


"Aunque realmente sea una especie rara y exótica, el precio nunca superará las cien piedras divinas"

"¿Quiénes de los presentes no son muy leídos y poderosos, han oído hablar de los gusanos verdaderamente de primera categoría, aunque no los hayan visto con sus propios ojos? Sin embargo, este gusano no está entre ellos"


Los seis "ganadores" estaban ya un poco preocupados, temiendo que algo pudiera salir mal, se comunicaban entre sí mediante una transmisión de voz.

Inmediatamente después, cada uno de ellos adoptó una postura firme.


"Expúlsalo"

"Si el Palacio de la Doncella Divina no hace algo, lo haré yo mismo".

"Atreviéndote a crear problemas frente a este Santo, realmente no sabes escribir la palabra muerte, si no estuvieras en el Palacio de la Doncella Divina, ya habrías sido destruida en tu forma divina"



    ......



Los que se atrevieron a participar en la apuesta eran todos poderosos en el cultivo y tenían profundos antecedentes.

Ya no querían teorizar sobre nada, cada uno de ellos estalló con una poderosa fuerza sagrada, surgiendo hacia Zhang Ruochen.

La cara de Zhang Ruochen no cambió y las comisuras de sus labios sonrieron.


"A ver quién se atreve hoy"


Yan Huang Tu habló con una voz plana y estruendosa.

Inmediatamente después, a los cuatro hombres fuertes que estaban detrás de él se les abrieron las ropas talismán, revelando sus verdaderos cuerpos y explotando con un poder santo dao más poderoso que el de los seis "Ganadores".

Uno de ellos estaba en la etapa media del Reino Mil Koan, dos estaban en la cima del Reino Mil Koan.

El otro estaba en el Reino Banshi Isshou.

Alguien reconoció las identidades de los cuatro expertos y dijo conmocionado.


"El Clan Mo Zu: Xuan Wuji, Xuan Wu Tian y Xuan Wu Ying. Y ...... también está el Anciano Mo Zu, Emperador Kun Yun"


Aunque el Clan Mo Zu era un clan pequeño, seguía siendo una fuerza dominante en los márgenes del Mundo Infierno.

¿Quién podría tener como asistentes a los cuatro grandes expertos del Clan Mo Zu?

Había que saber que entre los cuatro grandes expertos se encontraba el Anciano Mo Zu en el Reino Banshi Isshou.

Cada uno miró a Yan Huang Tu con ojos que se volvieron tensos y sorprendidos, especulando en sus corazones sobre su identidad. ¿Quién era?

Los seis "ganadores" estaban sometidos.

Yan Huang Tu buscó una silla y se sentó tranquilamente, diciendo.

"Quiero decir, que Emperador de la Matanza del Cielo y la Tierra termine su discurso. Todo el mundo no tiene problemas con eso, ¿verdad?"

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