Mi deseo son dos camas separadas 103
La razón del matrimonio (2)
Traducción Coreano-Español: Asure
La vida era difícil, la gente, demasiado sensible y ocupada para prestar atención a su entorno, comenzó a recuperar la razón poco a poco.
Los agricultores, que cuidaban de los cultivos que volvían a crecer, hablaron con cautela:
—Disculpe, jefe de la aldea. ¿Realmente necesitamos seguir cultivando Sheril? Es cierto que es valiosa, pero mantenerla cuesta mucho más dinero y las pérdidas son enormes.
—Tiene razón. Durante la sequía, Sheril era nuestra única fuente de ingresos, pero ahora... Además, cultivar Sheril consume mucha más agua de lo que pensábamos. ¡Incluso más de la que beben nuestros hijos!
El jefe de la aldea, que había caído en la codicia de ganancias rápidas y el caos de la sequía, frunció el ceño.
—...Tienes razón. Seguir cultivando Sheril no nos traerá ningún beneficio.
—Exacto. Además, el país ha prohibido estrictamente el cultivo de Sheril. Con el cambio de señor feudal, pronto llegará una inspección administrativa desde la capital. Será mejor que nos deshagamos de todo antes de que lleguen.
La gente comenzó a murmurar y a asentir de a poco.
—Ah, ahora que lo pienso, ¿no fue Su Alteza quien vio esto antes que nosotros? Él comenzó a regular el cultivo de Sheril antes de que nos diéramos cuenta. ¡Seguro que los dioses están complacidos con su sabiduría!
—Dios mío. Y nosotros lo criticamos sin entender sus intenciones.
—¡Vaya! ¿Quién habrá sido el insolente que difundió esos rumores?
La lluvia traída por las oraciones del rey y la vida que regresaba a la tierra fueron milagros que nadie pudo negar.
Finalmente, en Berite, el cultivo de Sheril fue detenido por unanimidad.
—Señor feudal, hemos decidido detener el cultivo de Sheril...
—Jefe de la aldea, algo no cuadra...
Y otras aldeas en situaciones similares siguieron el mismo proceso.
A medida que la tierra agrietada recuperaba su brillo y absorbía la humedad, las raíces de Sheril, que habían echado profundas raíces, fueron arrancadas.
Los complicados mecanismos que generaban ganancias (o pérdidas) incomprensibles también dejaron de funcionar.
Justo después de deshacerse de Sheril, los inspectores llegaron, por poco escaparon del castigo. La gente suspiró de alivio.
—¡Qué suerte! Parece que estábamos todos embrujados por algo.
La gente, sudando profusamente, volvió a sus labores. Y en cada oportunidad, no dejaban de hablar.
—¿No es todo gracias a Su Majestad el Rey? Gracias a sus oraciones, llegó la lluvia, ya no necesitamos depender de Sheril. ¡Incluso descubrimos que Sheril nos estaba chupando la sangre!
—Es cierto. Ahora que lo pienso, tanto el rey como la reina deben ser amados por los dioses.
—Nunca más debemos dejarnos llevar por rumores infundados. Tanto los subsidios como las oraciones fueron preparados por el rey para el bien del pueblo. ¿Cómo podría un gobernante tan sabio no ser amado por los dioses?
Así, mientras se regocijaban y reflexionaban, no olvidaron mantenerse alerta. En Berite, los agricultores, después de terminar sus labores, estaban particularmente entusiasmados.
—Esos comerciantes son sospechosos. Ahora que la sequía ha terminado, ¡huyen con el rabo entre las piernas! Si se atreven a volver, ¡les daremos su merecido!
—Seguro tenían malas intenciones. ¡Usaron a los pobres para enriquecerse con Sheril! Si los vemos de nuevo, ¡les daremos una lección!
—........
Dos figuras encapuchadas, que habían estado escuchando a escondidas, se retiraron. Hacía poco tiempo que la tierra estaba seca, pero ahora, al pisar el suelo húmedo, sus rostros se torcieron de frustración.
Habían colocado un hechizo en la tierra mientras Sheril echaba raíces. ¡Era una maldición que ni siquiera varias lluvias podrían romper! ¿Cómo era posible?
—Debe haber sido el rey Semere quien usó algún truco. La Torre de Magia está dormida según lo planeado, pero parece que él recibió ayuda antes de caer.
—Sí, la reina es una maga de nivel medio. ¡Ella sola no podría haber hecho llover y revivir la tierra en todo Semele!
Los dos lobos negros, bajo un hechizo de invisibilidad, rechinaron los dientes.
Su plan de arruinar la reputación del rey y elevar a la reina para sumir a Semele en el caos y la división se había desmoronado.
—¿Deberíamos hipnotizarlos para que sigan cultivando Sheril?
—Retírense. Fue su decisión voluntaria para reducir nuestro poder. Si los obligamos, nos exponemos demasiado. Además, ya descubrieron la debilidad de Sheril, lo que aumenta el riesgo de que nos descubran.
Las dos figuras salieron rápidamente de Berite y revisaron otras aldeas. Pero la situación era la misma. Se apresuraron a contactar a su base.
—Parece que necesitamos revisar el plan. Todo iba según lo planeado, pero el rey debe haber olido algo.
Solo deberían haber notado que Sheril era sospechosa, pero ¿cómo resolvieron la situación tan rápido?
Según lo previsto, el rey debería haber sido criticado por castigar a la gente que sufría la sequía por cultivar Sheril ilegalmente.
—Si hemos fallado, el plan no necesita revisión, sino ser desechado.
Una voz fría salió de una esfera de cristal negra.
Era el segundo al mando, pero también el estratega y el mago que decidía todos los planes de la base. Con una mente brillante y poder mágico, era el verdadero líder, más influyente que el primero.
—Lo siento. Encontraré una manera de derrocar al rey lo antes posible......
—No, regresen. Yo mismo me encargaré.
—¡Sí!
—¡Entendido!
Con una orden abrumadora, la esfera de cristal se apagó. Los lobos negros, con miradas furiosas, observaron el entorno reverdecido y, rompiendo un pergamino, desaparecieron.
¡Paf!
—¡Oh, dios Dunamis, gracias!
—¡Larga vida al rey! ¡Larga vida a la reina!
La sequía, que había durado tanto, comenzó a aliviarse poco a poco. Y junto con el renacimiento del continente, las voces que alababan al rey de Semele también crecían.
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Santuario de la Capital.
—Su Majestad la Reina, es un gran placer tenerla aquí después de tanto tiempo.
—Dunamis seguramente también estará complacido. ¡Por favor, visítenos con más frecuencia en el futuro!
Julia caminaba junto a los sumos sacerdotes que se le acercaban con entusiasmo, sonriendo con elegancia.
—Últimamente he estado muy ocupada, así que no he podido visitar con frecuencia. Intentaré ajustar mi agenda para tener más oportunidades.
—¡Es un honor!
—¡Gracias, Su Majestad!
Los sacerdotes sonrieron ampliamente ante su amable respuesta. Julia, sin que nadie lo notara, soltó un pequeño suspiro de alivio y volvió a sonreír con gracia.
'Uf, finalmente lo superé'
El santuario, especialmente el santuario de la capital de Semele, estaba lleno de los más destacados siervos de los dioses. Solo aquellos con un poder sagrado excepcional y una devoción inquebrantable podían pertenecer a este santuario especial.
Por eso, su fe en el dios principal, Dunamis, era extraordinaria, Julia era tratada como una verdadera dignataria. Como la favorita de los dioses, ella no solo era la reina, sino también un símbolo del amor de los dioses hacia Semele.
Incluso rayaba en la adoración. El sumo sacerdote, que normalmente mantenía distancia del mundo secular y dedicaba su vida a la oración, salía personalmente a recibirla cada vez que Julia visitaba.
—Lamentablemente, el sumo sacerdote ha entrado en un período especial de oración hoy, por lo que no pudo salir a recibirla. Esperamos que Su Majestad sea comprensiva.
—Oh, por supuesto que no hay problema. Yo también tengo poco tiempo, así que en lugar de una conversación con los sacerdotes, solo asistiré a la sesión de oración.
Julia había asistido personalmente a la sesión de oración donde se leyó la oración del rey.
Dado que los rumores ya se habían extendido ampliamente por las regiones, la participación en esta sesión de oración fue alta. Además, con la inesperada presencia de la reina, la gente llegó en masa como una nube, la sesión terminó siendo un éxito sin precedentes.
—Es un gran placer poder acompañarla. Dunamis seguramente estará complacido al saber que su hija ha visitado su hogar.
—Es demasiado halagador. Solo espero poder brindar alegría a los dioses.
—¡Ah, qué devota es! No es de extrañar que los dioses la aprecien tanto.
Julia, un poco avergonzada por los elogios interminables, entró a un espacio más amplio.
'Por eso no venía con frecuencia. Pero bueno... al menos esta vez también recibí elogios de Mion'
Los sacerdotes, emocionados por el milagro provocado por la oración, derramaron elogios exagerados. Incluso le dieron un nuevo título incómodo: 'la pareja más amada por los dioses en la historia'
'Eso fue algo divertido, en cierto modo'
Julia sonrió levemente y se cubrió la boca con la mano.
'La próxima vez, cuando no esté tan ocupado, traeré a Mion'
Tenía curiosidad por ver cómo reaccionaría al escuchar esos elogios empalagosos directamente. Imaginar su rostro, normalmente serio y distante, volviéndose incómodo y tenso, le parecía bastante adorable.
—¡Aquí está, Su Majestad!
De repente, el grupo se detuvo. Julia también se detuvo con gracia y elegancia.
—Este es el altar donde descendió la voz de los dioses. Hace 12 años, las llamas ardieron y Dunamis declaró su favor hacia usted.
—Así que este es el 'vestigio'.
Julia se acercó con una mezcla de curiosidad y extrañeza. El altar, que alguna vez fue dorado, ahora estaba ennegrecido por el hollín.
—Es un poco decepcionante que los dioses solo hayan declarado su favor hacia mí en Semele.
Hubiera sido mejor si me lo hubieran dicho directamente.
Julia bromeó. Normalmente, los sacerdotes habrían estallado de indignación ante tal blasfemia, pero dado que era ella, solo se rieron con indulgencia.
—Tiene razón. Sin embargo, ¿no le otorgaron el trono de reina de Semele? Seguramente los dioses querían darle un buen compañero a su hija.
—Ah, eso sí que es cierto.
Julia respondió con habilidad y una sonrisa suave. Los sacerdotes, emocionados, continuaron explicando con entusiasmo.
—En ese momento, la gran duquesa y el sumo sacerdote estaban ofreciendo sacrificios juntos. De repente, en medio de las llamas recién aparecidas, se escuchó un oráculo. ¡Los dioses aman y aprecian tanto a la princesa de Ametrine!
—¿Mi madre?
Julia parpadeó sorprendida al escuchar esta historia por primera vez. Los sacerdotes asintieron con entusiasmo.
—Sí. Aunque los registros dicen que el sumo sacerdote estaba solo, esta información solo se permite a los sacerdotes de alto rango... pero usted es una excepción, por supuesto.
—Claro. Después de todo, ha venido personalmente a ver el "vestigio". Usted, que ha recibido la bendición de Dunamis, tiene todo el derecho de conocer la gloria de ese día.
Los sacerdotes parecían conmovidos, como si hubieran cumplido una misión sagrada.
Hace 14 años, cuando comenzó la primera gran hambruna, apareció un título que se convirtió en sinónimo de su nombre hasta justo antes de que terminara hace 12 años: la favorita de los dioses.
'No sabía que mi madre lo había escuchado directamente......'
Julia estaba sorprendida.
Sabía que la voz de los dioses había descendido en el santuario de la capital de Semele, lo que había dado más peso a los rumores. Pero no sabía que Miladi había experimentado ese milagro personalmente.
—En ese momento, había un conflicto bastante intenso entre los sirvientes del santuario y los de la corte. Para evitar que la chispa del conflicto se avivara, el sumo sacerdote y la Gran Duquesa acordaron guardar silencio.
Dijeron que temían que el oráculo fuera utilizado como excusa para otra lucha de poder. Los registros de ese día quedaron en posesión exclusiva del santuario, el sumo sacerdote los dejó escritos en los archivos del santuario.
—Verla crecer y hoy presenciar otro milagro de los dioses... ¡Seguramente el sumo sacerdote, que está en oración, llorará de alegría cuando despierte!
—Ahora puedo morir en paz.
Julia guió a los sacerdotes, que la adoraban casi ciegamente, alrededor del glorioso altar. Algunos de ellos, llenos de determinación, no dejaban de insistir.
—Su Majestad, ¿realmente no se puede construir un santuario dentro del palacio real?
Oh, otra vez.
—Ejem, eso sería un poco difícil. Su Majestad el Rey es bastante inflexible......
Julia, ya acorralada por tercera vez, rápidamente usó a Endymion como excusa. En un instante, el objetivo cambió. Los sacerdotes se llenaron de determinación para ir a buscar a Endymion y obtener su permiso a toda costa.
'Lo siento, Mion'
Julia contuvo una risa y desvió la mirada. El altar dorado, que supuestamente había sido tocado por el poderoso poder de los dioses, captó su atención.
No estaba quemado por el fuego, sino curiosamente ennegrecido solo por el calor.
Encima, la madera de alta calidad y fragante que se usaba para los sacrificios todavía estaba intacta. La leña de hace 12 años no se había convertido en carbón, solo había cambiado de color a negro.
Julia se sumió en sus pensamientos.
'Es curioso. ¿Por qué nunca he escuchado la voz de los dioses hasta ahora?'
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