HDH 554

Hombres del Harén 554

Un año como éste

Todos miraron a Sonnaught en silencio. Sus actitudes transmitían la expectativa de que Sonnaught compartiera algo más, pero él no tenía nada más que decir. Había pronunciado un pensamiento pasajero, inseguro de la causa exacta. Pero como había llamado la atención, Sonnaught intentó un enfoque diferente, aunque inseguro.

«Kallain, tu recuperación será más rápida si usas sangre. ¿Podría ser que Su Majestad también haya cambiado en ese sentido?»

El grupo intercambió miradas durante unos minutos.

«¡Ha!»

El frustrado Klein se cortó la palma de la mano con un cuchillo. La sangre brotó al instante, haciendo que Meradim y Kallain se dieran la vuelta.

Klein apretó el puño y puso la mano sobre los labios y las heridas de Latil, dejando que su sangre fluyera, filtrándose por el hueco.

Sin embargo, al continuar, sus labios empezaron a palidecer, lo que hizo que el Sumo Sacerdote le cogiera la mano y le curara rápidamente la herida con poder divino.

«Deja que te cure. Perder demasiada sangre es peligroso»

Mientras se limpiaba la sangre restante con un pañuelo, Klein preguntó:

«¿Cómo está Su Majestad? ¿Tiene algún efecto?»

Sonnaught observó atentamente las heridas de Latil. Su mirada se ensombreció.

«Siguen igual»

Meradim se tocó la frente.

«¿Qué debemos hacer?»

El grifo se posó junto a la cama y dio un codazo en el hombro de Latil con su patita.

[Lord. Lord. Despierta, Lord]

En la perplejidad de una situación en la que ni el poder divino ni la sangre parecían eficaces, haciendo que el ambiente descendiera aún más, Tasir exclamó de repente:

«¿Eh? Mira esto»

Aunque no había especificado dónde estaba 'esto', todos siguieron su mirada. Tasir levantó la ropa sobre las heridas de Latil y gritó:

«¿No te parece que tienen mejor aspecto que antes?»

El Sumo Sacerdote se inclinó para examinar las heridas, no tardó en exclamar:

«¡En efecto!»

Meradim preguntó con los ojos muy abiertos:

«¿Fue eficaz el poder divino del Sumo Sacerdote?»

«Inténtalo una vez más. Deprisa»

A instancias de Kallain, el Sumo Sacerdote colocó sus manos cerca de las heridas, ejerciendo toda su fuerza para canalizar el poder divino. Finalmente, se tambaleó, fatigado.

«Cuidado, tienes que tener cuidado»

Meradim apoyó rápidamente al Sumo Sacerdote. Tanto el Sumo Sacerdote como Meradim tenían los ojos fijos en las heridas de la Emperador.

Sin embargo, las heridas de Latil no mostraban ningún cambio respecto a antes.

A pesar de la intensa mirada de todos, no había signos de recuperación.

Klein murmuró:

«Entonces, ¿se curó gracias a mi sangre?»

Su mirada se desvió hacia Tasir, considerando que era su turno ya que antes había perdido una cantidad significativa de sangre.

Pensando que todo iba bien, Klein incluso extendió una daga, pero inesperadamente, Gesta se adelantó y murmuró:

«No. Las heridas no se curaron ni siquiera cuando el príncipe sangró»

La atención de las consortes se desvió simultáneamente hacia Gesta, no sólo por lo que dijo, sino también por su tono.

Sin embargo, dadas las inusuales circunstancias del colapso de la Emperador tras una grave herida, pasaron por alto cuestionar su inusual tono y se centraron en el contenido.

En ese momento, el grifo desplegó sus alas y exclamó.

[¡Miren todos esto! ¡Las heridas del Lord han sanado tanto como mi estiércol!]

Cuando los aliados del Lord se reunieron y lo comprobaron, efectivamente, las heridas de la Emperador parecían haber mejorado ligeramente. Esta vez, sin ninguna intervención, las heridas se habían curado.

Los aliados del Lord intercambiaron miradas, reflexionando sobre el motivo.

Mientras contemplaban, Kallain frunció el ceño y dijo:

«¿No significa esto que la Ama es inmune al poder divino?»

Incapaz de comprender, Klein preguntó.

«¿Qué quieres decir?»

Tasir intervino:

«Igual que el poder divino no es efectivo porque está parcialmente despierta, no morirá por medios convencionales por la misma razón»

«¡Oh!»

Klein se quedó boquiabierto al comprender.

«¿Así que sin la Gran Espada del Adversario, Su Majestad no moriría? ¿Eso significa que sólo tenemos que esperar a que el cuerpo de Su Majestad se cure por sí solo?»

Mientras observaba la lenta curación, sin saber si las heridas se recuperarían del todo, Kallain suspiró.

«La anterior Lord sanó más rápido que esto. La Lord actual está en mal estado, así que la velocidad de curación parece más lenta»

Tasir tiró de la manta sobre Latil. Como Latil podía curarse lentamente, era mejor cubrir su cuerpo.

Sonnaught sugirió cautelosamente a Kallain:

«A este paso, sería mejor llevar a Su Majestad de vuelta a Tarium para que reciba los cuidados adecuados»

Las pupilas del Sumo Sacerdote temblaron:

«Eh... ¿Estará bien? Sabemos que Su Majestad se recuperará pronto, pero para otros, parece una herida mortal. ¿Y si el antiguo príncipe heredero...?»

Cuando el Sumo Sacerdote titubeó, preguntándose si estaba bien discutir tales asuntos, Tasir le palmeó la espalda.

«Esta conversación es sólo entre nosotros. Te preocupa que Príncipe Lean pueda aprovecharse de esto, ¿verdad?»

El Sumo Sacerdote asintió. Él, siendo un ser elegido, desconocía los entresijos de las luchas de poder, pero sabía que Príncipe Lean había buscado el poder recientemente, incluso alineándose con la antigua emperatriz.

Ciertamente, las acciones del príncipe estaban impulsadas por su sentido de la justicia más que por una mera búsqueda de poder. Sin embargo, desde la perspectiva del Sumo Sacerdote, consorte de la Emperador, seguía siendo una usurpación, independientemente de los motivos. Su inquietud provenía de la preocupación de que la Emperador tuviera que abdicar por sufrir heridas importantes.

Ranamoon, que había estado observando la situación en silencio, habló por primera vez.

«No es necesario que los oponentes políticos conozcan el alcance de las heridas de Su Majestad. Que conozcan la lesión grave, pero se puede ocultar el aspecto mortal. Además, estoy de acuerdo con Tasir. La gente que sabe ya entiende que Su Majestad fue a salvar a Carissen y fue a luchar contra el 'Lord'. En esta situación, sería difícil que Príncipe Lean diera un paso al frente inmediatamente»

Tasir dudó, debatiendo si señalar que había sido Sonnaught quien había mencionado este asunto, pero cuando Sonnaught dijo: «Yo también estoy de acuerdo», permaneció en silencio.

Sin embargo, no dispuesto a dejar que el argumento erróneo se convirtiera en su postura, Tasir añadió rápidamente:

«Por otro lado, Príncipe Klein debería ir a Carissen. Cuando llegues, infórmales de que tanto Su Majestad como el 'Lord' sufrieron heridas importantes durante su lucha»

Aunque Klein también quería ir a Tarium y presenciar la recuperación de la Emperador, asintió a regañadientes. Además, el hecho de que aún no hubieran descubierto dónde estaba Emperador Hyacinth le dejó una expresión sombría.

«Mi hermano Emperador...»

Tasir palmeó el brazo de Príncipe Klein.

«Estará a salvo. Gesta mencionó antes que Anya Domis también sufrió graves heridas, incluso fue alcanzada por la espada del Adversario. Quizá las secuelas allí puedan ser peores que las de Su Majestad»

«¿Eso crees?»

«Sí»

Cuando Tasir respondió sin vacilar, Klein finalmente asintió con alivio. Quería creer las palabras de Tasir.

Entonces, Meradim, que había estado observando en silencio, ladeó la cabeza y preguntó:

«Por cierto, tengo curiosidad. ¿Dónde está ahora la Espada de ese Adversario?»

La expresión de Sonnaught, Gesta, Ranamoon y Kallain se endureció simultáneamente.

Mientras Latil, recién despertado de su sueño, miraba sin comprender la habitación desconocida, se oyeron unos golpes en la puerta y entraron tres mujeres desconocidas. Vestidas como criadas, las mujeres se acercaron a Latil, prepararon una palangana para lavarse y se dedicaron a sus tareas como si se tratara de una rutina: buscar agua y seleccionar ropa del armario.

Recordando la advertencia de Conde Lancaster de no revelar que no era Domis, Latil mantuvo la boca cerrada. Podía imitar la forma de hablar de Domis antes de despertar después de verla varias veces en sueños, sin embargo, Domis después de despertar seguía siendo imprecisa. Aunque lo había soñado, no había quedado grabado en su memoria.

Afortunadamente, las criadas la ayudaron tranquilamente a vestirse sin entablar conversación y luego se retiraron.

Una vez sola, Latil miró su reflejo en el espejo y dejó escapar un suspiro, bajando las comisuras de los labios.

'Me parezco a Anya Domis'

Aunque Latil había conocido a Domis antes de conocer a Anya Domis, rara vez vislumbraba el rostro de Domis, ya que con frecuencia habitaba en Domis. Ahora, se sentía incómoda al ver el rostro de Anya Domis en el cuerpo que ocupaba actualmente.

'Ahora que lo pienso, ¿qué le pasó a Anya Domis?'

Considerando el último ataque, no debe haber muerto. ¿O podría ser un ataque antes de morir? La Gran Espada del Adversario se clavó en su esternón. ¿Cómo seguía viva? ¿Sobrevivió porque tenía el alma del Adversario dentro de ella, lo que hacía imposible que la espada la matara por completo?

Perdida en estos pensamientos, Latil empezó a reflexionar sobre las implicaciones en el mundo real y más tarde pensó en cómo podría utilizar la situación actual en su propio beneficio.

Sin embargo, sin una forma inmediata de volver a la realidad, naturalmente no había ninguna solución a mano.

'¿Y si me encuentro con Kallain o Girgol? No importa, no quiero eso. Probablemente estén familiarizados con Domis. No sé cómo tratar con ellos'

Si se volvían hostiles después de reconocer que había alguien más dentro de Domis o la trataban con el mismo afecto con el que tratarían a Domis, sería incómodo de cualquier manera. Especialmente, recibir el afecto de Kallain en este cuerpo podría llevar a constantes comparaciones desfavorables con el Kallain del mundo real.

'...¿Mientras se hospedan en el mismo castillo? O tal vez, ¿debería vagar sola hasta que regrese a mi cuerpo original, diciendo que quiero estar sola? ¿Durante ... un año?'

Latil, que había estado sentada en la alfombra dejando que sus pensamientos fluyeran sin cesar, saltó de repente ante la idea de 'un año'.

'Un año. Ahora que lo pienso, ¡Kallain y Girgol mencionaron que Domis les había dejado cerca de un año para vagar sola! Durante ese año, Domis conoció a Cremoso incluso creó la mazmorra...'

Latil se tapó la cara. ¿Podría haber sido este año?

Si es así, para evitar que el futuro se desvíe, ¿debería salir ahora, conocer a Cremoso y crear una mazmorra?

'No, pero ¿para qué molestarse? Aunque vague durante un año, probablemente sea para evitar a esos dos. ¿Por qué Domis creó una mazmorra y encontró a Cremoso durante ese año? No, lo que es más importante, ¿de verdad tengo que quedarme aquí un año?'

Mientras Latil se retorcía en agonía, un golpe resonó de nuevo.

«Sí»

Esta vez, el visitante era Conde Lancaster, que, por alguna razón, tenía una extraña sonrisa dibujada en la cara. Latil, incapaz aún de recuperarse del shock de 'un año', se limitó a mirar fijamente.

Conde Lancaster, sin embargo, se acercó y dijo algo inesperadamente alegre:

«Novia, se me ha ocurrido una idea que podría ayudarte»

«¿Una idea?»

«Una forma de que ganes en el futuro sin cambiar el presente. Pero para llevarla a cabo, necesitamos una mazmorra con una gárgola»

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