Lunes, 28 de Junio del 2021

Odio la obsesión del archiduque 66

Elvin (2)

Elvin, el ayudante de Kyle, regresaba hoy al Gran Ducado. 

Y ahora que se había reunido con Riddel, caminaba por el pasillo, pensando mucho en su próxima agenda, a la vez que pensaba en lo que le había dicho antes a Riddel Spencer. 

Era cierto que Riddel estaba, hasta cierto punto, bien en su papel de archiduquesa.

En cuanto a Elvin, que se encargaba de recopilar información, ya estaba al tanto de los rumores en el Templo Arcano respecto a su Alteza que podrían convertirse en un problema en el mundo social.

"Bueno, no necesariamente"

Elvin se había encontrado con Riddel varias veces en el pasado. Era algo extraño para él. 

'Cuando la conocí, ni siquiera podía mirarme a los ojos'

Sí, Elvin se había encontrado con la Riddel original. 

Sin decirle a Kyle, fue a la villa de Riddel. Todo estaba pensado para que Riddel y Kyle se casaran sin problemas. Y también fue el primer secreto que le ocultó a Kyle. 

'No pretendía ocultarlo realmente'

Sin embargo, cuando volvieron a encontrarse, ella no mostró ninguna señal. Elvin se preguntó cuál era su impresión sobre la situación en ese momento.

Se desvaneció como una pequeña brasa que pronto se apagaría en un brumoso aturdimiento'.

Elvin recordó lo que habían hablado antes en la villa.

"Bueno, yo... nunca me casaré con el Archiduque"

"Haré la vista gorda para que veas a Doman aunque te cases. Por supuesto, también entregaré su carta. ¿Todavía vas a declinar?"

"...pero no voy a hacerlo. Soy la prometida de Doman"

Sinceramente, a Elvin no le gustaba Riddel. 

Sus calificaciones como Archiduquesa también eran pobres; sus ojos no eran capaces de ver la verdadera naturaleza de las personas. Ahora era lo mismo. 

No, precisamente, ahora intentaba mantener a raya a Riddel, porque la mujer que antes era arrogante se convirtió en otra de la noche a la mañana, además, Riddel estaba extrañamente fascinada con su trabajo.

'¿Qué demonios está tramando?'

Mientras caminaba afanosamente y pensaba en toda la situación de Riddel, hubo algo que Elvin notó. 

Elvin no tardó en agarrar a una doncella que pasaba por allí y le preguntó 

"Betty, ¿quién te hizo reforzar este pilar? ¿Fue Jean?"

"¿Qué? Oh, no. Esto fue ordenado por la dueña de la casa, su Alteza"

"¿Su Alteza?"

"Sí, el pilar se agrietó mucho, así que había que repararlo. También me dijeron qué materiales serían buenos"

"... ¿Qué?"

Elvin obviamente parecía desconcertado.

Sin embargo, esto era sólo el principio. 

Después de un rato, Elvin se enfrentó a una vergüenza aún mayor. Esta era la siguiente tarea programada de la que Elvin hablaba antes; patrullar el Gran Ducado. Casualmente, tras dos semanas de ausencia, era el momento de revisar el estado del lugar. Era más importante que nada, pero... 

"¿Qué?"

Respondió con la misma curiosidad de hace un momento, pero esta vez Elvin estaba visitando el establo, y el cochero Matthias respondió. 

"Sí, me preocupaba que los caballos hubieran perdido su energía, pero cuando les cambié el pienso que mencionó su Alteza, ¡han mejorado notablemente!"

Elvin se quedó sin palabras por un momento. Luego, sacudió ligeramente la cabeza. 

"Bueno, es una coincidencia. Cualquiera puede ordenar que se cambie el pienso de los caballos"

Continuando con la inspección del Gran Ducado, la segunda unidad hecha por Sejan estaba entrenando duro, y Elvin se quedó atónito al oír hablar a Noxis.

"Desde la llegada de su Alteza, ¡el capitán no descuida ni un día de entrenamiento de la Unidad 2!"

"¿El silencioso Sejan te entrena sin hacer novillos?"

Era un poco vago decir que era gracias a Riddel Spencer. Tal vez era un nuevo viento que soplaba en el aire.

Cuando Elvin se dirigió a la cocina, el personal sonreía esta vez.

"Cuando me cambié a la tienda de comestibles que mencionó Su Alteza, los ingredientes eran más frescos. Gracias a ella, el placer de cocinar ha mejorado"

Mientras escuchaba las emocionantes historias del personal de cocina, Elvin se dio la vuelta y se dirigió a la biblioteca como si estuviera hipnotizado. Se encontró con otra sorpresa, los libros estaban listados con más facilidad que nunca. 

"¡Su Alteza rellenó personalmente el papeleo, diciendo que sólo tenemos que listarlos tal cual!"

Gracias a esto, la nueva bibliotecaria dijo felizmente que era más fácil irse a la cama por la noche, sin sentirse preocupada, y Elvin permaneció en silencio. 

Así, después de mirar hacia atrás durante mucho tiempo, Elvin pudo llegar a una conclusión. La conclusión era que no había lugar en el Gran Ducado que no hubiera sido influenciado por Riddel Spencer. 

Como si todo el Gran Ducado estuviera maldito por "su Alteza". 

*** Elvin***

'... Su Alteza'

Tras un largo rato pensando, Elvin se dirigió a la sala de conferencias con una mirada de asco. La sala de conferencias era un espacio público para Jean y Elvin, que sólo se utilizaba para procesar documentos. 

Cuando Elvin llegó a la sala de conferencias, se vio a Jean descansando en el sofá.

Sin embargo, Jean miró a Elvin y le preguntó con una sonrisa. 

"Bienvenido, Elvin. ¿Pero qué haces hoy aquí? Hoy no habrá ningún documento que tratar"

"¿Qué?"

¿De qué estaba hablando Jean? Elvin parpadeó y preguntó de nuevo. 

"¿Eh? ¿Qué? ¿No has oído hablar de su Alteza? No hay ningún retraso"

Elvin volvió a sentirse avergonzado por las acciones de Jean. 

Había al menos docenas de documentos que llegaban al Gran Ducado al día, y como mucho cientos. Había más de un millar de casos cuando se trataba de asuntos graves.

"... ¿Terminaste el papeleo?"

Jean negó con la cabeza.

"No solo, su Alteza estaba conmigo"

De nuevo, salió, todos seguían llamándola "su Alteza". 

"¿Pero qué, ella se encargó del papeleo?"

Esta vez Elvin tenía una mirada increíble. ¡Algo no estaba bien!

Elvin finalmente recogió los documentos colocados ordenadamente sobre el escritorio para llegar al fondo del asunto. Luego lo revisó rápidamente. 

Y lo revisó de nuevo. 

"... ¿quién se encargó de esto?"

preguntó Elvin con un tono de profunda admiración. 

Jean respondió con una mirada de "¿De qué te sorprendes?" 

"¿Quién es, quién es? Pues fue su Alteza"

Incluso después de escuchar la respuesta, Elvin permaneció en silencio. Le resultaba difícil enfrentarse al hecho incluso mirando la pila. Anotaciones colocadas en cada documento de forma adecuada, ni demasiado largas ni demasiado cortas. Una letra pulcra, reconocible y recta. La habilidad de estampar un sello sin manchar la tinta. La forma en que Riddel manejaba los documentos era tan perfecta. 

'No puede ser. ¿Es esto realmente la mano de obra de Riddel Spencer?'

Con este nivel de sofisticación, era difícil para cualquiera que tuviera acceso a un montón de papeles. 

En este momento, un pensamiento pasó por la mente de Elvin. 

"¿Hay alguien más adecuado para el Archiduque que esta mujer? No, no puede haber..."

Jean añadió rápidamente como si pudiera leer la mente de Elvin. 

"¿No es formidable su Alteza? La que puede hacer todo y tiene el poder de calmar al Archiduque"

"..."

"De todos modos, Elvin, quieres decir que esa boca..."

¿Qué trataba de decirle Jean a Elvin? Éste, que estaba bajando los ojos, volvió a mirar a Jean como si hubiera escuchado mal. 

Entonces Jean puso una mirada agobiante. 

"No, bueno, no es nada. Al menos debería hacer ejercicio ahora que estoy despierto"

Al final, Jean se retractó y actuó de forma diferente. 

Sin embargo, Elvin salió de la sala de conferencias sin más preguntas. Era porque su cabeza estaba llena de su Alteza, "Riddel Spencer". Sí, lo había negado hasta ahora, pero Elvin tuvo que admitirlo. 

Esta mujer es una persona necesaria para el Gran Ducado y aún más para el Archiduque. Haga lo que haga, debe permanecer a su lado'.

En ese momento, Elvin también recordó el rostro de Doman Woodhill, y luego se mordió los labios con rabia. 

Era tan buena en todo, pero ¿por qué se le daba tan mal juzgar a la gente? 

'Si hubiera sabido que esto iba a ocurrir, te habría dicho que la encadenaras cuando firmaste el contrato'

Si traicionas a su Alteza y te vas con otro hombre, su corazón estallará. 

Como era de esperar, Elvin, que se dirigía al siguiente lugar con un pensamiento bastante inquietante, se sintió de repente en desacuerdo. No, había sido todo este tiempo. 

Hoy, la gente del Gran Ducado sentía algo extraño, ¿por qué? 

'Todos me miran así, ¿verdad?'

Sinceramente, la mirada le resultaba más familiar que la respiración. Una apariencia inteligente y hermosa que parece haber aprendido todas las verdades del mundo. Un traje limpio y pulcro, sin arrugas ni una mota de polvo. El segundo hijo, llamado el orgullo de los marqueses May, la tercera familia más grande del Imperio. 

No era exagerado decir que era raro no mirar a un hombre al que no se le escapaba nada, pero por alguna razón, Elvin sintió que sus ojos eran un poco diferentes hoy. No eran, ni mucho menos, miradas de admiración hacia él. 

¿Por qué?

'¿Por qué todos me miran como si fuera una bestia rara?'

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