EGDLV 83

Viernes, 07 de Octubre del 2021

El Guía de la Villana 83

Di mi nombre (1)

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Después, Lara llevaba el receptor a todas partes y escuchaba el monólogo del demonio. A veces ella misma inducía un interrogatorio y otras veces ordenaba a los lobos que instigaran su ira.

Lara se dio cuenta. Por alguna razón, el demonio Valac no los dejaba en paz, sino que se rebajaba porque no podía usar su fuerza.

'Tengo que averiguar por qué'

Debe haber una razón. Aunque ya había vivido 10 años en el futuro, no sabía mucho sobre los demonios. El demonio que apareció en Hautean en ese entonces era completamente diferente a Valac. El demonio podía atacarlos o abandonarlos en cualquier momento, pero se limitaba a fingir que era el príncipe Sidhar.

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El grupo partió de nuevo hacia la capital de Estragón. Una vez que entraron en el territorio del Imperio, ya no se toparon con adoradores de demonios. A simple vista, parecían viajeros muy tranquilos. Durante el día, se movían a una velocidad adecuada y dormían cómodamente cada vez que encontraban una posada o una aldea.

No había escasez de provisiones porque tenían mucho dinero. Cada vez que Konny sacaba y mostraba una moneda de oro del bolsillo con cara de tranquilidad, los mercenarios se susurraban "de tal palo, tal astilla".

Ahora Lara podía incluso dormir la siesta en un carruaje en movimiento. Demian se bajó del caballo y ocupó el asiento del cochero del carruaje en el que iba Lara.

Pero al contrario de su aspecto relajado, todos estaban en vilo. Todos desconfiaban de Valac, el demonio capturado que imitaba a un prisionero. No sabían qué haría el demonio con la apariencia externa del Príncipe. También era una mera conjetura que no pudiera usar sus poderes, por lo que debían mantener los ojos abiertos hasta que se aclarara. Lara siguió escuchando el monólogo del demonio.

「Tengo hambre」

「Tengo mucha hambre...」

「Los humanos siguen comiendo fatal. No han hecho ninguna mejora en absoluto」

El demonio tenía mucha hambre. Masticó y tragó algo de comida traída por Valentine, pero como era un vampiro, no parecía llenar su estómago. Quería sangre, pero Lara y su grupo ni siquiera cazaron un conejo para él. Porque, aunque comer carne estaba bien, chupar sangre era demasiado terrible.

「Qué recuerdo tan interesante」

「Así que esa fue la primera mujer que lo rechazó. Qué bastardo tan inocente. Ni siquiera sabía lo complicado que es el corazón de una mujer」

A medida que lo iban dejando solo, se volvía más y más hablador. Al principio, cuando Lara escuchaba el monólogo del demonio, Konny temblaba de miedo. Pero después de unos diez días, le costaba contener la risa mientras se sentaba junto a Lara.

「La ciudad de los humanos. El imperio de los humanos. Seguro que ha cambiado mucho. Qué debería mirar primero? ¿Qué clase de humanos debo seducir? No es divertido vivir como un Rey, así que ¿debería vivir como un mendigo?」

「Pensé que este mocoso era de la realeza. ¿Por qué es tan débil? ¿Nunca ha sostenido una espada?」

「Tengo hambre」

Mientras avanzaba hacia la capital del Imperio, Lara pudo obtener información clara sobre el demonio.

"Es un charlatán"

Un día, cuando la capital estaba a la vuelta de la esquina, Lara se acercó a su grupo que estaba durmiendo en el bosque. Se dirigió a ellos con Konny sentado a su lado, asintiendo intensamente.

"¿Está durmiendo ahora?"

"Valentine lo puso a dormir"

"Entonces, uhh..."

"Vino aquí a jugar"

Los lobos mercenarios cerraron la boca de inmediato. Nerviosos, se quedaron sin palabras y dudaron con sus palabras. Finalmente, murmuraron sus indecibles palabras sólo en sus mentes.

"Haa..."

Los suspiros fluyeron.

Porque había vivido demasiado, porque era demasiado fuerte, porque era una existencia demasiado grande. Lo que el demonio hacía era jugar. No la conquista ni la venganza, sino el entretenimiento. Aunque muchos humanos murieran tras su corto tiempo de juego, la razón por la que venía aquí seguía siendo jugar.

"Vamos a matarlo"

Dijeron los lobos. Todos miraban a Demian. Como Demian era el único que había luchado contra el demonio, le pedían consejo.

Pero Lara se opuso.

"Le gusta el juego de los humanos, así que ahora está siendo obediente, pero sigue siendo un demonio. Si os precipitáis, alguno de vosotros podría morir, o peor, podríamos morir todos"

"¡Milady!"

"Voy a llevarlo al templo"

Ella tuvo que dejarlo en manos del Dios del Destino. Cuando le preguntó qué clase de demonio era Valac, su dios se rió alegremente como si fuera una pregunta ridícula. Le dijo que tenía que evitar que descendiera, pero también le dijo que podría resolver el problema si ella encontraba su nombre.

"Demian"

"Si"

"¿Cuánto tiempo nos queda?"

preguntó Lara. Demian, que estaba sentado frente a la hoguera y miraba el horizonte lejano, dijo lentamente.

"Verás la vista nocturna de Dandelion mañana por la noche"

Dandelion era la ciudad más grande del Imperio de Tarragon. La capital estaba a la vuelta de la esquina. De la boca de Lara podían verse visibles respiraciones blancas. El invierno estaba comenzando.

Llama mi nombre

"Su Alteza Imperial"

"¿Qué?"

"¿Estás durmiendo?"

"Sí"

Aunque esa era su respuesta, Acerus no dormía. Se sentó sin moverse mientras intentaba infructuosamente abrir bien los ojos y siguió leyendo el informe que le traía su ayudante.

"Su Alteza Imperial"

"¿Qué?"

"La santa no se convertirá mágicamente en otra persona"

El ayudante refunfuñó. Investigó a la hija de Isadora, Lara, a las órdenes de Acerus. Una mujer que antes tenía un nombre confuso -Laviore Ria Bailey-, pero que ahora había abandonado su nombre y apellido y se había convertido en "Lara". La vicegerente de Dios, la santa.

Al principio, su ayudante también esperaba que Lara fuera una mujer buena y tranquila como las santas de la historia. Como dijo Acerus, también pensó que era muy probable que fuera una persona devota y religiosa criada en un ambiente conservador. Y aunque no fuera así, esperaba que fuera al menos una mujer digna y elegante.

"¿Cómo puede ser esto?"

Acerus dejó escapar un fuerte gemido. El ayudante fue capaz de comprender plenamente los sentimientos del príncipe heredero esta vez. En cuanto recibió el informe, lo dudó varias veces, preguntándose si algo iba mal.

La hija de Isadora era una villana. Pero no una villana cualquiera, era una alborotadora muy conocida en la alta sociedad de Hautean. Era conocida por ser pródiga, extravagante e incluso por haber cometido actos inmorales. Los rumores de que entraba y salía de los hoteles con la esclava que había comprado no eran nada. Cuando se enteró de que había agarrado el pelo de una candidata a santa en medio de la sala de banquetes de la familia real y la había sacudido de arriba abajo, dudó de que Dios hubiera elegido por accidente a la santa equivocada.

También podría ocurrir lo mismo con Acerus. A los ojos del edecán, el príncipe heredero también era un alborotador. Pero él tenía la tendencia a despreciar a otros alborotadores.

Pero Acerus era extraño. Después de leer el informe una y otra vez, de repente se encogió de hombros y se rió como un loco.

"¡Jajajajaja!"

"Por el amor de Dios"

El ayudante mostró su disgusto y se alejó del Príncipe Heredero.

"¿Aún parezco un loco?"

"¿De verdad me lo preguntas porque no lo sabes?"

"No puedo evitar reírme, bastardo. Nuestra santa... ¡es la villana del siglo!"

"¿Qué pasa con eso?"

"¿No lo sabes?"

"¿Saber qué?"

"Estas acciones de ella son deliberadas. Es todo para ocultar el hecho de que es una santa. Me doy cuenta enseguida. Haa... Esto es increíble. Siento mariposas en el estómago. ¿He cogido una enfermedad?"

"¿Cómo has llegado a esa conclusión?"

"Si hubiera revelado claramente que es una santa, todos los Tom, Dick y Harry se aferrarían a ella y la tratarían con dureza. Los adoradores del demonio seguirían intentando matarla"

"Oh"

"¡Por eso se hizo pasar por una villana a propósito! Dios... ¿Qué tan doloroso debe haber sido para ella? Mi corazón está a punto de romperse"

"Ahah"

El ayudante también estuvo de acuerdo con Acerus y asintió. Acerus se puso en pie y se llevó las manos a la cintura.

"Puedo hacerlo mejor"

"¿Qué? No digas esas cosas. Me haces sentir incómodo"

"Debo hacer lo posible por asistir a la santa para que no se sienta incómoda"

"¿Perdón? ¿Asistir a qué? ¡No hagas cosas inútiles!"

"La fortuna nos ha sonreído. La santa tiene una madre rica, ¿verdad?"

"¿Y qué?"

"¡Una heredera inmadura de un país atrasado... que vino al Imperio a comprar el título de nobleza! ¿Cómo es eso? ¿No es interesante? ¿No es una villanía?"

El ayudante contempló.

Si golpeaba al Príncipe Heredero y huía, ¿contaría eso como traición o no?

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